miércoles, 25 de noviembre de 2009

MATERNITY (LXI): Educando que es gerundio.

Mientras no tienes hijos, puedes opinar de todo sin tener ni puta idea, y fingir que sabes de algo cuando charlas. Al fin y al cabo la persona con la que hablas, la mayoría de las veces no te escucha, tiene una opinión tan idiota como la tuya de la que no piensa apearse, y además lo que tú le dices le entra por un oído y le sale por el otro.

Cuando tienes hijos preadolescentes la cosa cambia:

- Tú sabes de todo.
- Es imposible que no sepas de algo.
- Lo que les dices se queda grabado en su cerebro a fuego.

Ejemplo práctico. Cuando yo era pequeña y me dolían las piernas, se lo decía a mi madre, que por supuesto también tenía el superpoder médico, y ella contestaba: eso es que estás creciendo. Es una respuesta completamente imbécil pero qué cumple su sentido, te deja tranquilo y creyendo que creces. Jamás lo olvidé. El otro día se lo dije a M. porque se quejó y el ingeniero todavía va por la casa descojonándose.

Entre las cosas que enseñas hay varios grupos:

Las que molan. No sirven para nada, pero mola enseñarlas y ellos están deseosos de aprenderlas. Cosas como qué es un árbol de hoja caduca, cual es perenne, qué es una almena, las señales de tráfico, porqué el tío J. es de color chocolate, cómo funciona un motor (obsérvese que yo no enseño casi nada), cosas de esas. Este tipo de enseñanzas además, las aprenden a la primera. No hay que repetirlas y te sientes colmado de amor maternal cuando vas por la calle y dicen: es un pino de hoja perenne y piensas: ¡ qué lista es mi hija! O ¡ Papá, un mini Cooper! Estas cosas además, las aprenderían en el colegio y podrías declinar tamaña responsabilidad en los profesores: eso, pregúntaselo a Fulanita. Pero no, cómo molan..los padres queremos enseñarlas.

Las que no molan. Sirven para toda la vida. Ellos no entienden su importancia y tú la verdad es que tampoco, pero deben inoculártelas en el polvo concebidor, porque pones mucho empeño en que las aprendan.
No las enseñan en el cole, pero nos molaría que lo hicieran, pero te jodes porque es deber de los padres.

Hay que repetirlas n número de veces, siendo n un número que tiende mucho más allá de infinito.

Acaban con tu paciencia y además te hacen sentirte mala persona. Un asco, vamos.

Veamos unos sencillos ejemplos:

- Saludar. Los niños opinan que saludar a la gente es una pérdida de tiempo y que si no te caen bien porqué hay que decir nada. Tú compartes tan sabia opinión, pero como estás corrompido por la sociedad ( y por algo qué te paso en el polvo concebidor), tienes que meterles en la cabeza que hay que decir hola y adiós al portero por las mañanas, al vecino en el ascensor, al panadero cuando entras en la tienda..etc. Puede parecer fácil pero no lo es y te encontrarás repitiendo hasta la saciedad: ¿ queréis hacer el favor de decir hola que os lo he dicho mil veces?
- Dar las gracias y pedir por favor. ¿ Qué se diceeeeeeeeee?
- Sentarse bien en la mesa. Ellos creen que con tener una parte muy pequeña del culo apoyada en la mesa mientras cogen la cuchara con uno de los agujeros de la nariz es más que suficiente. Pasada la etapa en que aprenden a comer te pasas el día: siéntate bien, coge el tenedor, C. no sorbas la sopa, C. no tires la sopa, C. quieres hacer el favor de no comer con el camisón por la cabeza, C. no es gracioso que te peines con el tenedor. Agotador porque al día siguiente vuelves a empezar de cero.
- Baja la tapa.
- Tira de la cadena.
- ¿ te has lavado las manos?

Es muyyy frustrante.

Cada vez que se lo dices, te miran con cara de: te juro que no sé de qué me hablas.

Cuando gritas como un energúmeno algo tan lamentable y que creíste que nunca dirías como: ¿ cuantas veces tengo que decir qué…..? Se giran y te miran con cara de, “ es la primera noticia que tengo….”

Quieres asesinarlos.

Y si en ese momento viene algún incauto, y no miro a nadie, y dice: “niñas, mamá está perdiendo la paciencia”, te planteas en qué momento de tu vida decidiste qué esto era lo que querías.

En un tercer grupo están las cosas que no quieres enseñarles pero se te escapan. Como salir de copas y pasar a ser un vegetal, como puedes pasar en 2 nanosegundos de madre educada a camionera verdulera mientras conduces, y cosas así de educativas.

Ala, reproducíos y divertíos.

23 comentarios:

Anónimo dijo...

leyendo maternity da mucho miedo procrear... creo que seguiré perfeccionando la técnica un tiempo...
Tilsa

Maripuchi dijo...

Ay...
"T haz esto, anda, ya tú solito, que ya eres mayor"
"Mayor noooo, que soy medianooooo"

Anónimo dijo...

- Baja la tapa.
- Tira de la cadena.
- ¿ te has lavado las manos?

Esto se lo dices a las niñas o al ingeniero?

Anónimo dijo...

Xd, como te entiendo!!!!

Eres genial, no me pierdo ni uno sólo de tus post. Me encanta. Y casi siempre me descojono contigo.

Eres auténtica, Moli!!!

molinos dijo...

Vincent..te noto pelín ácido...¿ estás hostil porque no ser un hombre objeto? :P

Hola Anónimo..que ilusión que salgais a la luz.

Tilsa no es tan malo..da para un blog.

La de la ventana dijo...

Desmontas con humor y franqueza muchos mitos cursis y edulcorados en torno a la maternidad. Con verdades como puños.

Tus niñas tienen suerte de tener una madre así de resalá.

hitlodeo dijo...

Lo de las rodillas se lo he dicho yo a mis hijos. Lo reconozco. Y la verdad es que si fuera cierto yo seguiría creciendo, pero mi mujer opina que lo que me pasas es que estoy gordo.
Otro clásico es "no te limpies con la manga, ¿para que crees que te pongo la servilleta?". En su mirada lees: pues la verdad no sé para que la pones, con lo cómoda que es la manga.
No sé si incluirla en el primer grupo o en el tercero, creo que en el primero. A mi hijo L. hace un par de años, cuando estudiaron la reproducción, le pregunté la lección, y la charla fue algo así:
- ¿Cómo se realiza la reproducción humana? - pregunté con algo de maldad, y para saber hasta donde conocía el tema. (tendría 9 o 10 años).
- El espermatozoide fecunda el óvulo y se forma el zigoto.- respondió.
- ¿Dónde están los espermatozoides? -pregunté
- En el hombre
- ¿Y los óvulos? - volví a interrogar
- En las mujeres.
- Entonces ¿Cómo se juntan? - Pregunté, dudando de hasta donde llegaban sus conocimientos.
Esperó unos segundos, se le iluminó la cara, salió una media sonrisa de pícaro, y dijo: Foll....
Es decir, se sabía la lección. Y yo me tuve que morder los labios para no escojonarme y que pareciera académico mi comportamiento.
Me estoy ganando el asilo a pasos agigantados, pero es muy divertido.
Definitivamente esta enseñanza es de las que molan.
Un abrazo

Anónimo dijo...

Yo no entendia porque tenia que cambiarme la ropa interior a diario "por si tenia un accidente".
Si yo no conducia!!!
Eso si, se me quedo gravado a fuego despues un accidete de moto en el que me rompi la pierna. Los calcetines venian rotos de casa. Que razon teneis las madres!! La vergüenza que pase fue mayor que una el dolor de una tibia rota!!

Isabel

javi dijo...

El XI mandamiento de la ley de Molinos: reproducios y divertios, al menos durante el polvo concebidor.

(¿Alguna que este dipuesta?)

Achab dijo...

¿Cómo he podido vivir yo sin leer esta página? Esto es oro puro.

Arkaitz dijo...

A mi también me decían que el dolor de piernas era porque iba a crecer. Hoy en día mi madre también me lo suelta de vez en cuando.

www.quienpintoadoriangray.wordpress.com

Juliet dijo...

Pues vaya con las madres. Yo tengo 25 y me sigue diciendo eso de "cuantas veces tendré que repetir eso" o "mientras vivas en mi casa... se hará lo que yo diga" o "esto no es un hostal"!

Yo seguro seguro seguro que jamás lo diré a mis hijos... o si... jejeje

Lola dijo...

A veces es muy difícil ¿no?..

Pero eso de que te miren como si no lo hubieran oído en la vida,y con el tenedor en la nariz, es que tiene que ser lo peor, o te pones a llorar como una magdalena o te partes de risa, puede ser cualquier cosa.

ánimo.

Anónimo dijo...

Me has pillao :.)

Anónimo dijo...

Mujeres que pensáis tener hijos, mentalizaros: todas las madres somos iguales. Nos leemos el "Crecer Feliz", el método Estivil, el "Ser Padres", pero a la hora de la verdad sacamos la madre antigua que llevamos dentro y nos transformamos en un clon de nuestras propias madres.

Se os ha olvidado la frase "como me tenga que levantar te vas a enterar".

Y lo divertido es que pese a sus muchos peros y sus ratos horrorosos (actualmente soy madre de 4 adolescentes en diverso grado, así que mi objetividad está seriamente dañada) la maternidad mola.
Clara

molinos dijo...

Clara...NUNCA hay que leer nada sobre tener niños.

Achab..eso digo yo..¿cómo vivías sin leerme?

Y a los que no teneís hijos...es superdivertido pero nada que ver con lo que os imaginéis.

Javi..¿ te ha salido alguna candidata?

c.e.t.i.n.a. dijo...

Acabas de describir perfectamente muchas de las razones por las que no aspiro a reproducirme

Marta dijo...

¡Me apunto como candidata!Fantásticos los post de maternity.

Chirly dijo...

¡Clavao!

Pétalo dijo...

Me encantan los maternity, me rio tanto con ellos. Y me parto cuando imitas a C, aunque en este no salga,pero es que tiene que ser muy graciosa.

peibol dijo...

Mmm, casi mejor dejo pendiente lo de reproducirse. Leerte es el mejor anticonceptivo.

JuanRa Diablo dijo...

Jejeje. Los maternitys son siempre un espejo en el que me veo reflejado. Los mios no dicen "hola" ni "gracias" así los maten. Y un día en que insistí por algo que regalaban a mi hija con el "Qué se dice? Qué se dice?"
respondió "Perdón, de nada" XD

Raquel dijo...

...yo como no me pienso reproducir en la vida...