En Holanda han quitado a una reina que parecia la abuela de los bizcochos de mi infancia, “Tia Mildred” y han puesto a un rey con cara de veranear en un camping en Alicante, llevar chancletas con calcetines y ser feliz con una barbacoa.
Para celebrarlo, han organizado una Parada de Princesas que como su propio nombre indica es una reunión de cursis estiradas compitiendo por ver quien es más cursi y más estirada y se porta mejor. Para ser princesa además hay que ser más falsa que Judas, allí están todas con cara de “Oh Máxima molas máximamente Muac, muac” y lo que de verdad están diciendo es “Maldita argentina regordeta y que come y encima va a ser la primera en ser reina”.
Sí, una parada de princesas es como una pelea de verduleras pero hacia dentro. En vez de gritar, se muerden los carrillos por dentro y les clavan las garras a los príncipes, que son unos pringados pero más del rollo campechano y pasando de todo...al fin y al cabo no tienen que llevar tiara.
Como son príncipes y princesas y no tienen nada que hacer, hacen dos saraos, uno por la noche en plan “uhhhh..una juerga” y otro por la mañana en plan “somos tios serios”. Eso les parece a ellos porque a los demás, las dos cosas nos parecen tan entretenidas como vernos crecer las uñas o menos.
La cena empieza cuando Tia Mildred y el de la barbacoa salen a decir “Hola, qué tal” . Máxima, sale vestida de limpiaflautas, con el pelo lamido por una vaca holandesa en un bonito homenaje al producto nacional y después de haber desvalijado la caja de joyas de Tia Mildred. Máxima lleva: tiara, pendientacos colgantes, pedazo de collar, dos sortijas y dos pulseras. Si fuera negra y llevara una sudadera con capucha sería un macarra de polígono y cerraríamos los seguros del coche. Hay que fijarse en la cara: “seré regordeta y con cartucheras...pero soy reina y vosotras no...panda de pánfilas”.
A la cena nosotros mandamos, o fueron ellos porque no tienen otra cosa que hacer o lo que sea, a MariLeti y el tio de la barba. Nuestra princesa sigue sin comer y sin respirar y sin hacer nada medianamente divertido con su vida. La parte buena es que ha decidido dejar de disimular: “estoy enfurruñada y tengo hambre y os voy a amargar la fiesta, me voy a disfrazar de viuda negra”. Lleva un vestido que no es que sea feo, es que es...como ella, cae mal. El encaje y ya lo he dicho cienes de veces sólo queda bien si eres prostituta de lujo o estás increíblemente buena. Y no seré yo la que diga que Letizia encaja en alguna de estas dos categorías...El encaje además pica que te cagas lo que explicaría (aún más) esa cara de “me caéis todos mal”. El tiene cara de “ no sé si me molaría más llevarla al hombro como los loros de los piratas”...lo mismo por eso se está dejando barba.
Alberto ha ido solo. Charlene ha debido quedarse en casa con la típica excusa: Alberto, vete tú que son tus amigos y te lo pasarás mejor. Y si, Alberto tiene pinta de irla a liar parda...
Los príncipes de Bélgica. Ella es la menos bruja del aquelarre pero claro es que tiene a Felipe, y yo soy muty fan de Felipe. Tiene pinta de ser un tio que mola, de hacerte caso cuando toca y de dejarte a tu bola cuando toca. Tiene también pinta de perder mucho las gafas...pero yo a eso le encuentro cierto encanto.
Mette Marit se droga (con mandanga de la buena y no con tranquimazines que es lo que toman Leti y Charlene) y se acuesta con Haakon y por eso todo le da igual y tiene esa cara de feliz. Le da todo tan igual que se le ha echado el tiempo encima para la coronación del primo de la barbacoa y se ha puesto un trapo floreado que tenía por palacio, se ha hecho un cinturón con un pedrusco para sujetarse el pecho y se ha lanzado a la alfombra. El vestido le queda más allá del concepto “holgado”, no sé si es un homenaje a las túnicas de Dennis Russos o esconde ahí un alijo. Haakon se está echando a perder, antes me parecía que estaba tremendo pero le veo deslizándose por la pendiente de la blandura....
Los ingleses tienen mucha clase y cantidades industriales de ginebra. Carlos y Camila que podrían ser los padres de toda la otra panda de príncipes y que podrían estar muy cabreados porque nunca consiguen llegar a ser reina en lugar de la reina, tienen cara de “¿otra juerga? ¿hay pintas? ¿hay ginebra?” Camila además es una señora inglesa envejeciendo hacia señora inglesa...un ejemplo a seguir para Elton John y Paul McCartney.
Los cuñaos de la fiesta. Mucho tema. La de azul es un claro ejemplo de enmochamiento femenino que se trata de disimular con el típico corte de pelo de “ mejor el pelo cortito que afina los rasgos”...y el resultado de “parece que tienes más cuello que cabeza”. La otra supongo que al volver a su habitación habrá mirado en la cama por si tenía una cabeza de caballo por copiarle el modelo a Máxima. El príncipe..en fin..tiene pinta de querer bailar un coreografía hortera.
Los de Dinamarca. Sé que hay mucho fan de Mary por ahi suelto pero es que no se puede ser más sosaaaaaaaaa. Por favor, la sonrisa perfecta, la pose perfecta, la cara perfecta...me aburro de verla muchísimo. Soy sin embargo muy fan de Federico que parece un compañero de juergas estupendo y tiene pinta de saber poner cadenas y encender una chimenea. Es bajito y sin barba...pero le veo un punto de norueguismo que creo que Mary no aprecia. Ella es más de “Fedgico por favor..dejame tranquila”. Lleva un vestido color carne, que supongo que alguien habrá dicho que es elegante, pero es color faja de abuela y aburrido.
Victoria de Suecia, su marido el asesino a sueldo y Naruhito con cara de ser el señor Miyagui y poder defender a Victoria en caso de que el marido saque la recortada. Victoria tampoco está en el aquelarre porque como ella va a ser reina de verdad...pues las otras le parecen unas advenizas y unas memas y además come, lo que siempre pone de mejor humor.
Hasta aqui “la juerga de la cena”....vamos para cortarse las venas.
Hoy era el sarao serio, otro despropósito.
Que te hagan rey es una cosa tan absurda que obviamente no se sabe muy bien que cara poner y eso les pasa a Guillermo ( que echa de menos su barbacoa) y a Máxima que no sé si tiene emoción o simplemente mantiene el equilibrio para que no se le caiga el abrigo/túnica/capa/trapo azul que le cuelga. Por otro lazo, el azulón es un acierto casi siempre...pero si te pasas y vas a juego con tu suegra y tus tres hijas...caes en el shock cromático familiar que es un cursilismo intolerable.
Alberto disimuló durante la cena..pero obviamente en la coronación se vino arriba y dejó de disimular que echaba de menos a Charlene. ¿Charlene? ¿Qué Charlene? En el pie de foto pone que también estaba la esposa del emir de Qtar...pero yo sinceramente creo que es el emir de Qtar, pero está monísima, monísima a lo Grace Jones.
A Leticia, Felipe que además de la barba ya se ha puesto el disfraz de pirata, la ha convencido para que se disfrace de loro. Ella ha dicho que si y se ha puesto algo indefinido en la cabeza con plumas rarunas e insiste en el encaje sobre transparencias. Un despropósito absoluto, feo, insulso y sin sentido..muy de su estilo. Mi consejo es que se ponga un pico y se suba al hombre de Felipe y darían el golpe total.
Victoria ha pasado mala noche. Yo también la habría pasado mala si tuviera ese marido que obviamente no ha dormido mientras la miraba fijamente. Cada vez me da más miedo. El vestido es de señora mayor en misa grande de los Jerónimos. El sombrero tocado...demasiado sombrero y demasiado tocado.
Federico con cara de “madremiaqueresacadejaelvinohlandes” y Mary pues como siempre, con cara de “ hola querida, estas estupenda” mientras jura en lengua aborigen australiana “mierda de coronación”. Mete y Haakon que obviamente han aprovechado la noche sin niños, están contentos. Ella va disfrazada de cortina de mi cuarto de invitados y definitvamente esconde algo ahí debajo. Federico de Bélgica me sigue molando y Matilde pues eso de “soy cursi y que se me note”. Aún asi, y para que se entienda el concepto...pinchad otra vez la foto de Mary de Dinamarca que es la esencia del cursilismo y luego mirad a Matilde...Mary es tan cursi que Matilde parece un marimacho a su lado aunque vaya de rosa.
En resumen, un rollo patatero. El único que parece habérselo pasado en grande es Alberto...parece estar tan descojonado que creo que es posible que en Qtar y Marruecos estén organizando ahora mismo algún tipo de operación para terminar con él. De hecho el jeque de Qtar ( perdón, la jequesa) sostiene con fuerza el librito, pero lo que de verdad quiere hacer es estrangular a Alberto con el collar de pinchos que lleva.
Eso sí que habría sido divertido....