jueves, 26 de marzo de 2009

EL ARTE DE NO HACER NADA


Cuando eres pequeño “no hacer nada” significa aburrimiento supremo, significa penar por la casa diciendo “ me aburro”, “ mami..me aburroooooo”, significa dar la brasa a tu madre diciendo “ ¿qué hago? esto es un aburrimiento”. Es decir, significa poner a tu madre de los nervios. Pero esto lo aprendes muchísimo después. De pequeño te resulta incomprensible porque tu madre no se preocupa de ese problema tan grande que tienes y es que estás a punto de “ morirte de aburrimiento”. No sospechas ni por un momento que estás mucho más cerca de morir asesinado por tu madre que al final se limita a murmurar “ quien me mandaría…”.

A lo que iba. Con 30 “no hacer nada” es el placer supremo. Descubres el placer de estar sin hacer nada…y sabes que has alcanzado la sabiduría suprema. Has pasado de ser el brasas de Luke Sky Walker y su impaciencia a la sabiduria de Yoda…vale eres verde pero da igual.

A mi me gusta no hacer nada. Me gusta despertarme y tener tiempo de estar en la cama, sin dormirme , sin leer, simplemente estar ahí tapada viendo pasar el tiempo en el reloj. Me gusta abrir las cortinas de mi salón, sentarme en mi butaca roja y ver pasar la gente y los coches por mi calle. Me gusta ir en el coche de copiloto mirando por la ventana. Me gusta incluso cuando me siento y sé que podría “hacer” algo y sin embargo digo: “no, voy a estar un rato sin hacer nada”. Esto puede parecer fácil, pero hay mucha gente que es un culo inquieto y no puede estar quieto. Siempre está…"¿qué hacemos?” ¿¿hacemos algo?”…unos brasas.

Pues yo iba a hablar de todo eso, pero he descubierto que el mundo de la farándula está contra mi. No contentos con que tenga que tragarme a la rosenvinge con viggo…que ya ha sido duro..esta mañana me desayuno con mi ultraodiada Paz Vega y mi adorado/admirado/idolatrado Simon Baker.

Paz Vega. ¿Se puede ser más tonta? ¿Más cansina? ¿Peor actriz?. No puedo con ella. Cuando hacía de tonta en Siete Vidas te la podías tragar porque lo hacía fenomenal. Lógico..no estaba interpretando, era ella misma. Luego le ofrecieron salir desnuda y claro tuvo muchísimo éxito, pero eso tampoco es interpretación, es exhibicionismo y es fácil triunfar sobre todo entre los xy llenos de hormonas deseosos de ver tias en pelotas. Nuestra querida Paz se creyó actriz, se subió a la parra, pensó que era una sex symbol y se ha ido deslizando a velocidades crecientes por la pendiente del más completo ridículo.

Simon Baker. En fin, yo decía que no me gustaban los rubios hasta que llegó él. No se puede ser más guapo.

¿Paz Vega con Simon Baker??..¿Paz Vega hablando en inglés de Openning y luego en español de Tijuana?. Sería hilarante si no fuera porque me corroe la envidia.


Me gusta no hacer nada más que contemplar a Simon.

Me gusta no hacer nada más que imaginar posibles torturas para Paz Vega.

miércoles, 25 de marzo de 2009

MALETEANDO Y VARIOS.

Como no quiero generalizar y que manadas de hombres organizados y prácticos se sientan ofendidos e inunden este blog de comentarios indignados, me limitaré a los 3 hombres que más conozco y con los que más trato: el ingeniero y mis 2 hermanos. Los tres venían de fábrica con los mismos extras de serie:

1.- Incapacidad para recordar el cumpleaños de sus madres/parejas/hijos compensada por una capacidad totalmente increíble para recordar como fue el gol de Butragueño en el Mundial 86 frente a Dinamarca. Esta capacidad también sirve para que olviden que has quedado a cenar pero sepan que el domingo a las 6:17 son los entrenamientos de coches de Fórmula 1, la carrera de 3.000 obstáculos de los Mundiales Indoor o cualquier otra actividad que requiera sudar y que los premios los entreguen tías con grandes tetas embutidas en pequeños trajes.

2.- Incapacidad absoluta para encontrar nada. De esto ya hablé en otro post. Uno puede creer que es sólo para cosas pequeñas pero no…son muy astutos y consiguen mejorar ese don hasta límites insospechados:

- ¿dónde está mi camisa verde?
- Está para planchar
- ¿dónde?
- Pues en el armario de la plancha.
- ¿TENEMOS UN ARMARIO DE LA PLANCHA?? ¿Y DONDE ESTÁ?

Y entonces te planteas amordazarlo con la camisa verde, darle con la plancha en la cabeza y meterlo en el armario de la plancha a ver si así sabe donde está.

3.- Incapacidad para aceptar que la maleta que llevas es la que necesitas. Yo he comprobado que aunque lleve mis cosas para 15 días metidas en la funda de unas gafas la reacción de mis hermanos y mi ingeniero es siempre: alaaaaaa…dónde vas con eso???. Siempre es demasiado grande, llevo cosas que no necesito, no sé hacer maletas..etc, etc. Para contrarrestar esa presión psicológica a la hora de hacer maletas las tías hemos desarrollado diferentes tácticas:

- llevar una maleta pequeña que convenientemente dejamos a la vista para que crean que esa es tu maleta de verdad. Al mismo tiempo llenas bolsas de supermercado de más cosas que necesitas y que vas bajando al coche en plan.”Esto es para devolver a la tienda”,esto son las cadenas”, “ esto es una cosa para el curro”. Mi experiencia dice que suele colar porque no miran esas bolsas.

- Meter las cosas en las bolsas de los hijos. Así como tu maleta siempre les parece enorme, las de sus hijos les parece siempre adecuada porque además son muy de: ¿que no les has traído calcetines?????... Y yo, "pues en fin, no pensé que para pescar cangrejos en agosto se necesitarán calcetines pero no lo olvidaré para la próxima vez". Aparte del hecho de que me encanta que te preocupes ahora que hemos llegado a destino de lo que he metido o dejado de meter en la bolsa de las princesas. Es decir que los niños pueden llevar bolsa enorme porque hay muchos “por si acaso”.


- Meter cosas en su bolsa. G. lleva siempre su bolsa medio vacía..asi que aprovecho y meto cosas. Esta táctica requiere estar rápido cuando se llega a destino porque si no se hostiliza: ¿pero no tienes suficiente espacio en tu maleta?? O ¿ de quién son estas bragas??...y yo digo…que pregunta más tonta..¿ de quién van a ser??.

Y luego lo cargan todo en el coche, meten y sacan bolsas, colocan y descolocan la bandeja, utilizan tus bolsas de supermercado para tapar los huecos que quedan, dan dos pasos para atrás, ponen los brazos en jarrás…miran el maletero…te miran y te dicen:

- Menos mal que sé colocar las cosas y cabe todo.

Me enternecen cuando estas pequeñas cosas les hacen tanta ilusión, pero es solo un momento porque mi lado maligno gana enseguida y digo:

- Si, muy bien..pero ¿ te importa sacar el botiquín de M. de debajo del ordenador, la cuna de viaje, las aletas de bucear y el casco de bici…..? Es que le toca la medicina……

jijijiji.

martes, 24 de marzo de 2009

COMPLEJOS Y AUTOESTIMA

Los complejos son una cosa horrible. Te levantas un día y descubres algo absurdo como que tienes los dedos meñiques de los pies feísimos y entonces te pasas años sin llevar sandalias en verano porque además de complejo de extremidades espantiformes crees que la gente te mira y piensa “ donde va a esa tía con esos pies”. Absurdo.

También se pueden tener complejos más complicados del tipo: “ no entro en esa tienda porque el dependiente me va a mirar con cara de ¿qué haces en esta tienda con ropa superelegante si vas echa una zarrapastrosa?".

Los complejos te hacen la vida más difícil y complicada y además son una completa majadería. Mi experiencia vital en este tema es que un buen día en la adolescencia te levantas y de repente tienes complejos. Pasas de preocuparte por tu bici y en qué piscina vas a bañarte a preocuparte porque tu amigos ya no te miran a la cara..solo a tu camiseta que de repente está sospechosamente abultada. Y entonces zasss…te das cuenta de que solo te quieren por tus tetas..o tu culo o lo que sea. Y en vez de pensar que tienes algo que ellos quieren…te acomplejas..te compras ropa ancha y andas con chepa. Te pasas años acomplejado por tener tetas, por no tenerlas, por tener mostacho, por no tenerlo ( si eres tio), por haber cambiado la voz, por no haberla cambiado, porque tu amigo tiene un jersey privata y tu no….chorradas increíbles. Además en el colmo del retorcimiento puedes incluso combinar distintos complejos: "no me puedo poner camisetas de tirante fino porque tengo que llevar sujetador de tira ancha, pero claro si me pongo camiseta con cuello cerrado me tengo que poner chaqueta, pero las chaquetas me hacen chepuda y no me tapan el culo…” y así hasta el infinito.

También pasa con los gustos…pasas una época en la que te cortarías la lengua antes que decir que Jim Morrison es un brasas, un perdedor y que te duermes con su música, porque crees que eso supondría que te echaran de la pandilla y pensaran que no tienes ni idea. Y lo mismo con las pelis, los libros o lo que sea.

Pero de repente llega un día en que te miras y dices…”qué coño…que piensen/miren lo que quieran, me da igual”. Pones la música que te gusta a todo trapo y dices…”odio a los Doors y La Naranja Mecánica es un puto coñazo”. Y descubres que no pasa nada. El mundo tiene cero interés en mirarte el canalillo y no te echan de tu grupo de amigos por blasfemia.

El problema es la gente que o bien no ha tenido nunca complejos ( cosa que dudo) o cuando se produce ese momento click…se pasa de vueltas..y se transforma en un ser impermeable a la realidad…le sobra autoestima por todos lados.

Es esa gente tirando a fea que te dice, “ de verdad que hija, no sé que pasa últimamente pero tengo 6 tios que son amigos míos pero todos quieren ser algo más..no sé que les doy” Y tu piensas.."pues como no sea miedo..no me lo explico”.

O cosas como “ me han echado de 7 trabajos, pero está claro que soy indispensable en cualquier sitio”. O esos que siempre posan en las fotos con cara sexy y tú piensas no se si envidiarles ese derroche de autoestima o compadecerles por no tener amigos.

Está bien tener autoestima, no dejarse hundir por la opinión de los demás y creer en las virtudes de cada uno, pero hay que tener mucho cuidado para no excederse en la autoestima y creerse el top de la gama porque resulta patético y poco realista.

Es decir, que yo soy estupenda pero con criterio.

lunes, 23 de marzo de 2009

NO ES JUSTO

Todos tenemos fotos que son de muchísima vergüenza. No me refiero a esas que te haces con ventipocos y en un momento de exaltación etílica de la amistad y te agarras a las tres personas que tienes más cerca y dices…” una foto”…y sales con una sonrisa espantosa y los ojos brillantes, los pelos disparados y cara de borrachillo….esas fotos pueden tener su gracia y por lo menos te ríes acordándote del momento en que te las hiciste.

Me refiero a esas fotos que te han hecho de pequeño sin que tu quisieras y que tu madre no duda en sacar del cajón a la menor oportunidad. “ De verdad que no sé porque te quejas del disfraz de Carmen Miranda…mira que mona estabas”. Y salgo yo, con los ojos como dos tomates de llorar del disgusto de no saber de quien iba disfrazada y porque las horquillas con las que me habían clavado las frutas me llegaban a las meninges, la barriga asomando por debajo de la camiseta de flores y los brazos en jarras. Un cuadro. Una foto de la que me avergüenzo.

De mi comunión tengo un album entero de fotos para quemar. Tengo cara de pepino y otra vez los ojos hinchados y rojos porque me cabreé por algo..no recuerdo porqué y salgo en todas las fotos medio llorando. Patético.

Sin embargo las peores fotos que tengo..y que gracias a Dios no están en manos de mi madre si no a buen recaudo en un album en mi estantería me las perpetré yo misma.

Son de una sesión de fotos que me hice en el jardín de Los Molinos. Me debí creer guapa…y salgo en distintas poses…con mi coleta ochentera, mis hombreras imposibles, mis pantalones pesqueros enseñando calcetín, mi cara de adolescente puber y mi proverbial y mundialmente conocida nula fotogenia. Las tengo de lejos, de tres cuartos e incluso primeros planos en los que me parece tener entrecejo y todo.

Cuando estoy con el guapo subido…voy a mi cuarto, cierro la puerta, cuelgo el cartel de “no molesten” y miro esas fotos para no olvidar nunca que una cámara de fotos combinada con un subidón de autoestima puede acabar con mi carrera.

¿ A que viene esta serie de golpes a mi autoestima?. A dos noticias impactantes que he leído este fin de semana:

- vuelve Spandau Ballet. A mi me horrorizaban en su momento de gloria en los 80 e incluso en esa época me parecían horteras, con esos tupes y esos pelillos de macarra de medio pelo. ¿ Cómo se sentirán hoy al verse vestidos de dorados y blancos con hombreras en todos los periódicos del mundo?. Pensarán algo del tipo “ Madre mía que espanto, que poco criterio teníamos” o algo más “ si me pagan lo suficiente me vuelvo a poner la misma pinta y plataformas si hace falta”.
- Chistina Rosenvinge sale con Viggo Mortensen. Necesito que un alma caritativa le enseñe a Viggo las fotos del pasado chacho de esa rubia con la que se pasea. Seguro que el bueno de Viggo se ha creído el presente alternativo e Indie que ella le ha contado. Alguien tiene que contarle que esa chica tan mona y tan etérea debe su mayor fama a cantar con voz de pito, vestida con medias con agujeros una canción de letra tan sesuda y conceptual como “Hago chas y aparezco a tu lado” .

Y digo yo…si unos son millonarios a pesar de horteras, y la otra sale con Viggo a pesar de chacha…DONDE ESTÁ MI RECOMPENSA POR MI SESIÓN DE FOTOS HORTERA?.

No es justo.