viernes, 18 de noviembre de 2011

QUERIDO DIARIO

Hoy estoy muy triste y me siento muy desgraciada. Me doy muchísima pena a mí misma. El universo está contra mí, todo me sale mal y tengo muy mala suerte. Nadie me quiere.

Toda la semana ha sido un infierno. He disfrutado de un fabuloso SPM en el que me he visto todos los días como un pez globo, el pelo como Karmele y toda mi ropa apesta. Eso para empezar.

El lunes me equivoqué al la comida del congelador. Creí que había sacado carne picada para hacer empanada de carne sin gluten por la noche y cuando llegué por la tarde me di cuenta de que eran filetes. Todo mi plan maestro de cocinillas al garete y tuve que hacer ternera strogonoff que por supuesto yo no he probado. El martes Movistar me tuvo 100 minutos de espera al teléfono para conseguir la portabilidad de mi móvil, estoy pensando que a lo mejor la operadora que finalmente me cogió el teléfono y a la que le dije de todo menos bonita, era bruja en Malawi (hablaba como si lo fuera) y me ha echado mal de ojo y está ahora mismo haciéndome vudú en su choza de paja mientras remueve el arroz con los cascos puestos y manteniendo a otros como yo en espera.

El miércoles el destino me hizo creer que mi semana del horror había mejorado algo y que había empezado a remontar: salí, bebí y acabé en una alfombra roja con Bibi Andersen y su perrita. Cené jamón del bueno y GT del mejor y me fui a la cama creyendo firmemente que el día siguiente sería bonito y chulo y feliz.

Ja.

El universo es un hijo de puta.

Ayer salí pitando de Mordor para llegar a tiempo al dentista, me tocaba endodoncia. Ayer una y otra el martes que viene. Me dolía una muela así que iba contenta para ver si así conseguía dejar de machacarme el estómago a base de ibuprofenos. Me pasé dos horas con la boca abierta mientras me hacían la endodoncia en la que no me dolía y escuchaba la cháchara del dentista que en un momento dado dijo: solo los héroes hacemos endodoncias.

Me rio hasta que se me saltan las lágrimas. Mi imaginación volaba a su rollo, el dentista gordito con capa y yo soy Lois Lane.

Dos horas después, salgo de allí con la cara como Peggy la cerdita y las instrucciones del ´heroe del dentista con las instrucciones del héroe:

Corazón tienes una infección de caballo. Tienes que tomar antibiótico cada 8 horas empezando esta noche con dos pastillas, después del antibiótico, este analgésico. Toma también un protector estomacal y como te va a doler...nolotil”.

Me acojono pero pienso que lo mismo las drogas me sientan bien…y veo elefantes rosas y cosas bonitas a mi alrededor. Me acerco a la farmacia con esa idea en la cabeza. De ahí cojo el coche y me meto en mi papel de madre para recoger a laz princezaz de su clase de inglés. Llego, aparco, voy a coger mi libro para leer un rato y ¡¡mierda!! ¿Dónde está mi libro? Lo tenía seguro. Rewind rápidamente. Cojonudo...me lo he dejado en la farmacia. Mi rato de lectura al garete...tengo que volver a por él. Arranco el coche, piso el embrague…y eh... ¿dónde está el pedal del embrague? Estaba ahí hace 30 segundos. Se ha quedado pegado al fondo, me agacho, tiro y salta una pieza blanca que me golpea en la cara…como la tengo anestesiada no me entero.

Se me ha jodido el coche, tengo la cara como Peggy y he perdido mi libro.

Llamo al ingeniero. Es ingeniero...sabe cosas y da soluciones. “Llama al taller y luego al seguro”.

Vaya...eso ya lo sabía yo.

Llamo al seguro mientras voy andando de camino a la farmacia a por mi libro. La amable señorita me dice que no me llevan el coche al taller que yo quiero porque está a más de 25 km de mi casa. Me da una lista de talleres y teléfonos que apunto sentada en un banco de la calle, me siento una huerfanita de Dickens. Encuentro un taller donde una bruja me dice que si llego antes de las 8 me cogen el coche.

En la farmacia está mi libro, es lo que tiene que la lectura sea algo minoritario. Si hubiera sido un móvil ni de coña hubiera estado ahí. Me acuerdo de que ni soy huerfanita, ni soltera…y que tengo dos hijas que recoger. Corro calle arriba para llegar a tiempo.

Llego a tiempo. M me comunica que ha perdido el aparato de ortodoncia, pero que lo ha encontrado, pero que está roto y ya no le vale. Essstupendo, le ha durado mes y medio y era el segundo. Me noto combustionar, me cabreo y les echo la bronca del siglo a M por irresponsable y a C porque si, porque está ahí y con alguien tengo que pagarlo. La vida es injusta que lo vayan aprendiendo.

Nos sentamos a esperar a la grúa. Estamos en un banco como huerfanitas. Me estoy quedando sin batería en el móvil ¿Qué más puede pasarme?

Llega la grúa. Por fin alguien bueno en este cuento, el gruero es encantador y me asegura que lo de mi coche es una chorrada pero que no puede llevarnos a las 3 en la grúa, que tendré que coger un taxi para ir al taller.

Me llama el ingeniero para saber cómo estoy gestionando la crisis y darme unas pautas…Le cuelgo cuando me dice que pida ticket en el taxi.

Llego al taller. El gruista sigue allí esperándome, quiero adoptarle, es un encanto de tío. De la nave del taller sale una luz muy agradable…quiero quedarme allí a vivir. El del taller también es majo:

¿405.000 km???? Pero ¿¿dónde vas tú conduciendo?????

Casi lloro. Debo estar monísima...la cara como un botijo y a punto de llorar…Le doy pena.

No te preocupes chica...que tiene pinta de ser una chorrada.

A este también quiero adoptarle….Vivir con un mecánico y un gruista, la vida sería preciosa y sin sobresaltos.

Salimos del taller. Volvemos al taller, necesito las dos sillas de laz princezaz. Ahora sí que lloro, voy por la calle con las dos, es de noche, hace frio y cargo con dos sillas de coches mientras empiezo a notar que se me está pasando la anestesia.

Llego a casa.
No tengo protector estomacal.
Me tomo 2 antibióticos.
Me tomo el analgésico.
Me tomo el nolotil.

Leo los efectos secundarios del analgésico rezando porque ponga “verá usted elefantes rosas y tendrá viajes astrales”…pero no.

Pone: es muy habitual tener diarrea, indigestiones, mareos y nauseas. Y no se le ocurra beber nada de alcohol.

Me entra la risa floja. Ahora sí que si, sé que nada puede ir peor, es imposible que mañana sea peor día.

Ja. Me he levantado y me ha bajado la regla.

Menos mal que sé positivamente que la semana que viene será muchísimo mejor.

jueves, 17 de noviembre de 2011

¿PARA QUE SIRVE TWITTER?


Para nada.
Esto es obvio. Twitter no sirve para nada. Es de hecho su uso más extendido. No es una herramienta vital para la humanidad. De hecho la mayor parte de la población no sabe que existe, otra parte de la población que tiene acceso a internet ni se plantea utilizarlo y otra gran cantidad de gente se abre una cuenta y jamás lo utiliza. Es su uso más común y extendido: twitter no sirve para nada.

Para informarse.
Cierto. Puedes suscribirte a periódicos (si es que esto es información), a revistas, a páginas web, a editoriales, librerías, restaurantes, asociaciones...etc, etc y que te lleguen los avisos de cada novedad, cada titular, cada artículo...etc. Está bien, es un uso útil. Lo malo es si combinas la tentación de sentirte guay en plan “hala...que cantidad de cosas que me interesan”…con el botón de “seguir” de twitter y de repente estas siguiendo tal cantidad de cosas que te bombardean con miles de tuits...que es inevitable que acabes por pasar de todo o por perderte lo más importante y lo que de verdad te interesa.

Para decir gilipolleces y encontrar audiencia.
Este es un uso muy común y viene a dar cobertura tecnológica una costumbre muy española: decir gilipolleces. Twitter va a terminar con “tengo un amigo que dice”…ahora retwiteas su estupidez y desgraciadamente esa gracieta se perpetuara por la red hasta el infinito.

Por supuesto hay gilipolleces que merece perpetuarse y otras con las que dan ganas de ir en persona (eso tan retro hoy en día) y esculpírsela con un escoplo al interfecto.

Para darte cuenta de que no tienes el don de la síntesis.
Quieres contar algo, incluso algo importante y vital o sumamente gracioso y te das cuenta de que eres incapaz de sintetizarlo en 140 caracteres.

Para compensar esa falta, te das cuenta de que contar si sabes y dejas una ristra de mensajes numerados (1/3, 2/3, 3/3)

Para intentar ligar.
Esto es obvio. La gente intenta ligar en el curro, en el hospital, en el metro, en el bus, en la playa, en el parque, a la salida del colegio, en una fiesta, en un bar, en un bingo...pues en twitter igual.

Como “Mi querido diario”.
Este uso es acojonante. Gente a la que seguro que si le preguntas: ¿escribirías un diario? Te contestaría: NI de coña, utiliza twitter como diario:

Buenos días. Me levanto. Tengo sueño”.
“Mi café de desayuno me da la vida”.
“Hace calor. Que me pongo”
“He quedado con unas amigas”.
“Sofá y mantita”.
Copas y siesta”…

Comprendo que la vida de uno mismo es increíblemente llena y emocionante, pero hay que pensar que si te sentaras a escribir en un cuaderno sobre tu día... ¿de verdad escribirías eso aunque solo lo fueras a leer tu? Y si para ti eso sería un coñazo, no te interesaría y te haría pensar que eres gilipollas ¿Qué te hace pensar que para todos los demás tiene el más mínimo interés?

Cómo púlpito.
En el mundo en 2D, si te crees en posesión de la verdad absoluta y crees que sabes mogollón de algo y que los demás merecen saber tu opinión porque vale trillones...tu radio de influencia es limitado: tus colegas, tu familia, tus compañeros de curro…y como mucho los demás mataos que van al mismo bar que tu.

Twitter es un púlpito en el que todos los gurús pueden subirse y esparcir su semillita por el mundo. Para cualquier idea, ya sea genial o una completa soplapollez, encontrarán audiencia. Audiencia que comulgue o que no comulgue con sus ideas…pero audiencia dispuesta a escucharles y con la opción de propagar esas ideas hasta el infinito gracias al botón de retuit.

En el mundo 2.0 una idea genial contada en una comida de familia tiene una vida muy corta, como mucho se comentará dos o tres días después: “mi cuñado el otro día dijo que……”, “mi colega fulano comentó el otro día….”. En twitter tiene vida infinita…desde el púlpito cae y se propaga como miles de hormiguitas (pajaritos azules que sería lo suyo no me molan en esta imagen) fueran a colonizar el planeta.

Para discutir.
Es el sitio ideal: no escuchas al otro, no oyes el tono, puedes malinterpretarle, los insultos “se valen”, puedes tener a tus fans insultando al oponente, puedes hacerte el digno y decir “pues ya no te ajunto” y encima tienes público. Todo son ventajas.

Solo un ring con barro y tías en bikini se me ocurre como sitio mejor para discutir.

Para ser revolucionario de garrafón.
Sin salir de tu casa, de tu sofá, con tu coca cola en la mano, la nevera llena y un ipad, un portátil o un smart phone con conexión a internet mostrarte indignado con las injusticias del mundo.

Obviamente encuentras a mil comodones como tú que encuentran tu actitud digna de ejemplo y retuitean todos tus pensamientos revolucionarios.

Para darte cuenta de que no tienes tiempo para seguir todo lo que te gusta porque tienes que seguir cosas que no te interesan.
Uso de twitter por el curro.

High School Twitter
Es una herramienta que hace que gente de 40 palos se comporte como si estuviera en un instituto americano, como Grease para que os hagáis una idea.

Tenemos a la tía popular. La rubia de bote con curvas por la que todos los tíos babean. Se dedica a petar twitter con sus ocurrencias que normalmente son bobadas pero como encuentra público que le aplaude con sus orejas se va creciendo y cada vez dice más chorradas. Llega a tener el ego tan crecido que se cree que su opinión sobre cualquier tema es dogma de fe. Acaba siendo graciosa porque lo mismo opina de política, que de ciencia, que de religión. Aunque llegue a tener 2000 seguidores…se cabreará si pierde uno, pondrá morritos y dirá: eres tonto. Es la simpleza elevada al cubo.

Tenemos al empollón. Tuits sesudos a diestro y siniestro que no encuentran público pero no por eso desiste de seguir breando a la humanidad con sus conocimientos. De vez en cuando se agrupan en pandillas, son como un grupo de matones pero con gafas. Se intercambian tuits de listos y cuando cogen confianza se ríen de los que no saben como ellos. En la vida real probablemente no tienen amigos.

Tenemos al tío popular. En el instituto y con 16 años el tío popular es guapo y cachas. En twitter como todos tenemos 40, el tío popular es el “interesante”. Suele ser interesante de inicio, pero el problema es que se lo acaba creyendo. Se retroalimenta y acaba encontrándose tan interesante a si mismo que no para de mirarse el ombligo.

El baboso. Retuitea todo lo que la tía popular dice con la esperanza de acabar consiguiendo algo con ella que todo el resto de twitter sabe que jamás conseguirá. Al final un reply le parece el colmo de la felicidad y lo guarda en favoritos para contemplarlo de vez en cuando mientras juega a las manualidades.

El cabreado. Jamás dice nada asertivo. Solo se dedica a contestar a todo a la contra. Es agotador, muy cansino y debe dar úlcera. Suele ser una persona con una piel muy muy fina capaz de encontrar ofensa en cualquier cosa. Y por supuesto todo es personal.

La tímida. Lo miro todo, lo lee todo. Nunca dice nada.

Para escribir esta gilipollez de post.

martes, 15 de noviembre de 2011

ENSAYO SOBRE LA TORTILLA

Tortilla francesa.

Pena infinita. Un plato de loza blanca o de duralex transparente con una tortilla de un color amarillo desvaído. Tristeza absoluta. Ganas de llorar. Comida de hospital, comida de estar solo en una habitación con una camita de 80 con barrotes blancos y una ventana pequeña que de a un patio donde estén las máquinas del aire acondicionado. Una tortilla francesa es comida de supervivencia. Es una madre que está hasta los cojones de los niños y de pensar en qué darles de comer y recurre a lo más socorrido: de cenar tortilla francesa. Es un plato de segunda categoría, nadie piensa en tomar tortilla francesa a la hora de comer, ¿por qué? Porque es triste. Solo comes tortilla francesa si estas malo de la tripa, para probar si tu estómago tolera algo. Es una buena táctica, si tu estómago tolera esa cosa tan triste y tan insípida entonces es que te estás curando. Si comes tortilla te espera una tarde de soledad de la mala y de pena, de darle al mando de la tele y no encontrar nada, de leer un libro que no te gusta, de estudiar una asignatura que te hace bostezar y a la que te has presentado 4 veces, de una visita de compromiso. Una tarde deprimente que no arreglaras hasta que tomes un alimento alegre, el que sea: nocilla, chorizo, bizcocho, tostada, chocolate…cosas que hacen sonreír.

Una tortilla francesa jamás hace sonreír. Nadie hace una cena o un evento gastronómico en torno a la tortilla francesa, "vente a cenar a casa que tengo tortilla francesa”. Eso no es una invitación, es darle a alguien una excusa para salir corriendo. No se puede hacer una excursión gastronómica a probar tortilla francesa, nadie hace comilonas en torno a ella. Comes tortilla francesa y nunca dices “Estoy llenísimo", es tan triste que ni siquiera alimenta.

Una tortilla francesa es un plato de batalla, de triste. Visualizas una tortilla francesa y el que se la está comiendo es un triste. No provoca una sonrisa, no hace reír, ni siquiera estimula a tus jugos gástricos. Es comida de solterón con esquijama beige. Es comida de señora mayor con gatos. Si eres un soltero divertido y molón y tienes huevos en casa, te haces un huevo frito pero jamás una tortilla. El huevo frito mueve a la risa, al gamberreo, a mojar pan, por Dios, una tortilla francesa desaprovecha lo mejor del huevo: la yema. Hace que el bonito amarillo anaranjado de la yema se convierta en un amarillo desvaído, muy poco atractivo, que no pega con nada. La tortilla francesa es un plato de ruptura, de autocompasión, nadie organiza una cena de amor en torno a una tortilla francesa. Es mucho más romántico sentarse  en pareja a hartarse de comer queso. La tortilla francesa es para cuando estas sintiéndote tan piltrafilla humana que hasta le estás cogiendo el gusto y dices, "y encima ceno tortilla", te parece que si te haces un huevo frito serás menos desgraciado, soltarás alguna sonrisa y traicionarás la autocompasión tan molona en la que estás nadando.

La tortilla francesa sabe que es triste. Mi teoría es que en un principio se llamaba solo tortilla, pero vio que así pasaba desapercibida y como es una snob dijo “me voy a poner algo molón, algo chic, ya lo tengo: tortilla francesa”. Mal. Lo francés suele caer mal.  Si no eres un queso o un champagne el adjetivo francés no mueve a la simpatía o el interés, asi que asociarlo a tortilla casi empeoró la sensación.

La tortilla francesa sabe de su carencia de atractivo. Bueno, más que pensar que es poco atractiva que sería un pensamiento humilde y ella no tiene de eso, piensa que es el público el que no sabe apreciarla. Tiene envidia de la tortilla de patata que es popular, dicharachera, molona y que hace feliz, pero es demasiado perezosa para convertirse en una de esas…así que se disfraza, se camufla. “No soy una tortilla francesa...tengo atún, tengo queso…tengo jamón”. Ja. Sigues siendo un fraude y tampoco apeteces,  aunque es verdad que acompañada de algo ya no mueves tanto a la pena absoluta.

Una tortilla francesa da frió. Sugiere una cocina blanca, pequeña, con poco espacio y desangelada. La tortilla francesa pega con el medio limón, el yogur caducado y la tónica a medias de una nevera vacía. La tortilla de patata sin embargo da calor, sugiere espacio para cocinar, tiempo en la cocina, calorcito. Es acogedora, sabes que después de comerla te sentirás mejor, serás mejor persona. La tortilla francesa sin embargo es distante y nada reconfortante, sabes que después de comerla seguirás teniendo hambre y lo que es peor habrás desaprovechado un huevo.

A veces como tortilla francesa. Siempre en domingo. Sólo si he comprado un buen pan, con el pan tostado, empapado de tomate y con jamón del bueno. Sólo entonces y después de haber tenido el bocadillo envuelto en papel de aluminio un ratito, tolero la tortilla francesa. Con este método, la tortilla ha sudado, se le han bajado los humos, se ha vuelto comida de batalla, no la veo mientras me la como y  por lo menos provoca una sonrisa y llena. " ¡Qué buen bocata me he comido! "

Proximamente:  ensayo sobre la manzana. 

viernes, 11 de noviembre de 2011

LOS LIBROS DE COLORES

Mi entretenida, fabulosa y casi siempre surrealista vida laboral transcurre en una empresa que compra, hace y coloca en el mercado libros de colores. Por aquí hay mogollón de curris que hacen sus cositas, todas ellas vitales para la humanidad. Hay gente que compra libros verdes, otros rojos, otros los colocan, otros ven si la colocación ha sido chula, otros los iluminan para que queden bonitos, otros encargan libros amarillos a medida, otros por supuesto arreglan ordenadores para que los otros curris puedan hacer su trabajo o brujulear buscando porno y casas rurales…

Tras una doble pirueta con mortal atrás y un complejo arabesco lateral, actualmente me dedico ahora mismo a los libros verdes y los rojos. ¿Qué hago con ellos? Pues recibo toneladas de ellos que tengo que valorar. Algunos ya están hechos del todo, con sus tapas verdes brillantes, o verdes oscuras y todo su contenido listo para valorar. Otros son solo proyectos con espiral y tapas transparentes, sacados en powerpoint y con un plan para terminar siendo un fabuloso libro rojo brillante, rojo pasión.

A diario me siento, leo y valoro.

¿Cómo se valora si un libro o un proyecto de libro de colores conviene?

Primero hay que ver si lo que te cuentan interesa a alguien, más allá del autor y su madre. Esto puede parecer una obviedad pero hay gente con un ego tan increíblemente crecido que cree que una historia autobiográfica sobre sí mismo con un tema tan interesante como verse crecer las uñas mientras mira al horizonte y toca una guitarrita o escribe en un cuaderno pequeño (las guitarras y los cuadernos son de intensos) puede interesarle a alguien. Desde aquí os digo, o tocas la guitarra y escribes en bolas y estás increíblemente bueno…o no le interesa a nadie.

Si el tema es susceptible de interesar a alguien, pasamos a cómo está contado. Y aquí se abre un abanico infinito de posibilidades desde el horror más absoluto que hace que me pegue cabezazos contra la pantalla del ordenador hasta el éxtasis más fabuloso que me hace sonreír como una imbécil durante horas. Ni que decir tiene que los cabezazos están a la orden del día y las sonrisas son un bien muy escaso, escasísimo…casi inexistente.

La mayoría de las veces, tras la lectura fluctúo entre el atractivo del suicidio o las ganas de dar con el autor, perpetrador de ese horror en el que he malgastado mis últimas horas y asesinarle mediante la ingesta de las páginas de su obra. ¿Por qué me mandáis proyectos mal escritos, con faltas de ortografía o con errores de trama tan clamorosos que a veces hasta pienso que son trampa? ¿Por qué creéis que los personajes que hablan como si hubieran tenido un ictus son creíbles? ¿Por qué me engañáis diciendo que es un libro verde de ficción histórica y luego me encuentro con adolescentes depilados que hacen calvos? ¿Por qué me aburrís hasta el infinito?

La única parte buena de los horrores que sufro cada día es que me permiten utilizar mi hostilidad para cosas creativas y molonas como mis notas:

Auténtica bazofia sentimentaloide que solo provoca vergüenza ajena y la inquietud sobre cuanto habrá tardado la familia del autor en renegar de él y cambiarse el apellido”

O

Me provoca asombro que la Señorita Puri haya conseguido financiación para realizar este proyecto y solo puedo pensar en que la señorita puri tiene algún tipo de encanto oculto que por supuesto no se manifiesta por escrito ni está relacionado con el cerebro para sus oscuros propósitos

O

Sin duda lo peor que he leído en mi vida. Esta cumbre de horror que he escalado hoy difícilmente será igualada en próximas fechas. El record del mundo de intensismo horripilante ha sido alcanzado con esta primera obra
A veces, sin embargo y normalmente cuando estoy a punto de ponerme a llorar de impotencia...aparece un libro molón. Uno que me interesa, y que está maravillosamente hecho…y se me caen las lágrimas de la emoción primero y de la pena después.

Algunos de esos libros maravillosos, con sus tapas verdes oscuras, preciosos y llenos de un contenido increíble, interesante, ameno, currado, bien contado y que haría un bien a la humanidad…no me valen. A mi me fascinan, quiero comprarlos, quiero llevármelos a mi casa, ponérselos a las princezaz, adoptarlos, ponerlos en el blog...casi quiero hacerme de fb solo por poder comentarlos….pero tengo que decir que no, y rechazarlos.

Son maravillosos pero no sirven para los clientes de mi empresa de libros de colores. A ellos no les gustan.

Si, ya sé lo que estáis pensando. ¡¡ Cómpralos y así aprenden a valorar algo bueno!!

Ya. Seguro.

Esto es como cuando vas a comprar juguetes para tus niños y ves uno que a ti te fascina, es precioso, educativo, molón y barato ( los juguetes de madera son un clásico de esta categoria). Quieres comprárselo a tus hijos, quieres que les guste tanto como a ti, quieres que aprendan, que les mole…que jueguen con él, que sea su juguete favorito. Quieres que sea un éxito.

Y se lo compras. Lo abren…y les hace más gracia la caja. Y lo dejas en una estantería y de vez en cuando lo sacas a pasear por si les mola y con tu mejor cara de entusiasmo dices: Mirad, mirad… ¿a que es chulo??? Y lo miran de reojo y siguen con lo suyo.

Al final el juguete se hace viejo...pasa de moda…y lo tiras.

Puedes hacer eso con un juguete...pero no dedicarte a comprar juguetes que no les molan por si suena la flauta. Con gran dolor de tu corazón, a veces, tienes que comprar juguetes que te horrorizan...pero a ellos les molan y son felices con ellos.

Pues lo mismo con mis libros de colores verdes. De vez en cuando consigo colar uno que me mola a mí, pero la mayor parte del tiempo tengo que desechar los que a mí me encantan porque no me encajan y lanzarme a comprar libros verdes loro que me espantan pero que a mis clientes les molan.

A esto me dedico. Ha quedado clarísimo, ¿no? 

jueves, 10 de noviembre de 2011

MATERNITY( LXXXVII): RATÓN PÉREZ RETURNS


¿Qué hicieron ayer laz princezaz mientras su madre colocaba libros de colores verdes al lado de azules y rojos para ver si pegaban?
Las muy cabronas escribieron dos cartas para el Ratón Pérez, dos cartas con acuse de recibo y esperando una respuesta pormenorizada.

¿Qué tiene que hacer su madre?
Contestar en nombre del Ratón Pérez. Soy una madre desnaturalizada pero tengo sentimientos y encontrarme ayer dos sobres debajo de sus almohadas con las cartitas al roedor, removió mis escasos sentimientos maternales y no puedo desilusionarlas.

Abrí los sobres dispuesta a sentarme a escribir con letra de cuadernillo Rubio…y ¡¡la madre que las parió!!!...M tiene 14 preguntas para el Ratón Pérez…y C tiene 3 y un dibujo. No puedo contestar a esto a las 12 de la noche en estado catatónico… ¿qué hago? Les dejaré un acuse de recibo prometiendo pronta respuesta:

M muchas gracias por tu carta...me la llevo a casa y te contestaré mañana. Pórtate bien.”

C muchas gracias por el dibujo, me has sacado muy guapo. Se buena”.

Si, reconozco que recurrir a que se porten bien es ruin pero no podía dejar de aprovechar la ocasión de que el Ratón Pérez les recordara lo importante de ser buenas para que su madre no se vuelva loca. Los que no tenéis niños...ya lo entenderéis.

Ahora mismo tengo que enfrentarme a la ardua tarea de ponerme en la piel de un roedor, contestar cosas chulas, no contradecirme con lo que ya dije hace meses y hacerlo de tal manera que cortemos esta moda de cartearse con seres imaginarios.

Empecemos por M.

Querido ratoncito Perez te quiero hacer unas preguntas:

¿Tienes novia?

Ja. Esta pregunta ya se la hizo al ratón y él contestó que tenía una novia muy guapa que se llamaba Lola. ¿Qué hago? Le digo que han roto no vaya a ser que entre en un bucle de razonamientos del tipo... ¿os vais a casar? ¿Tendréis hijos? ¿Cómo se hacen los ratoncitos?...puf, puf, puf…Si, va a ser buena idea. Pero claro, es M, si el ratón le dice que se ha quedado sin novia lo mismo con la empatía que le caracteriza se hunde en un pozo de pena suprema. Optemos por algo más neutro…

Si, ya te conté que tengo una novia muy guapa que se llama Lola...pero ahora se ha ido de viaje a dar la vuelta al mundo”

Perfecto.

¿Tienes hijos?

Con la novia dando la vuelta al mundo no se pueden tener hijos.

No, no tengo hijos y ya te lo dije

¿Tienes mis dientes?

Esta es fácil también. SI le digo que no le provocaré una crisis existencial brutal…y no queremos eso de ninguna de las maneras.

Por supuesto que tengo todos tus dientes…son unos dientes preciosos.

Lo sé, el piropo sobra...pero es mi princeza…

¿Cuántos se me han caído?

¿QUÉEEEE? Que cabrona...esta es una pregunta trampa claramente…mierda, mierda, mierda…no tengo ni idea... ¿5? ¿7? ¿8?...joder, joder, joder.

M ¿no te acuerdas de cuantos dientes se te han caído?

Ohh...qué golpe maestro...devolviendo la pelota.

¿Tienes mascota? ¿Cómo se llama?

Otra pregunta trampa, ésta ya me la hizo...que astuta...está a ver si me pilla. Ja, no sabe que tengo un blog donde lo tengo todo apuntado.

Ya te dije que tengo una lagartija que se llama Mariví…es muy buena y come de todo. Ya me he enterado que tú tienes un pez.

Esto la va a dejar muerta de la emoción. Soy un as.

¿Tienes miedo a los gatos?

Ay…M es tan mona, preocupada por los temores de un ratón. ¿Qué hago? ¿Hago del Ratón Perez una especie de superratón sin miedo a los mininos, un Tom que siempre da para el pelo a Jerry, un Pixie, un Dixie….o lo hago real y le digo que si tiene miedo a los gatos? A M le van los superhéroes…

NO, no me dan miedo los gatos. A los gatos les doy miedo yo. Y como dice tu madre los gatos son asquerosos y recuerda que te dan alergia.

Me hago la ola a mi misma con esta respuesta....

¿Tienes los dientes de mis amigos?

A ver, esta es chunga. Porque claro aquí entra el factor “ Soy especial o soy como todos”…mmm...vale, está claro...M es especial y más para su madre haciéndose pasar de ratón Pérez...a sus amigos que les den o que sus madres se curren cartitas.

tengo los dientes de todos tus amigos, pero te diré un secreto...los tuyos están en un sitio especial”.

Soy un crack.

¿Existes?

¿PERDÓN????? ¿Dudas existenciales?? ¿Ahora? Joder, joder, joder. Esto requiere medidas drásticas. Como caiga en la tentación de contestar algo como ¿tú qué crees?..No quiero ni pensar en la espiral de cartas que puedo sumirme.

Por supuesto que existo.

¿Cuales son tus apellidos?

Jajajajajajaja…me parto con la lógica de M. Si existes es que tienes apellidos como todos. Me mola esta pregunta…me permite ser imaginativa…” Ratón Pérez…. ¿Pérez?”…” Ratón Pérez ¿López?”…o algo más exótico... ¿Ratón Perez…¿ Von Batton? O...hago un homenaje al cine... ¿Ratón Pérez Keyser Soze? O algo más obvio... ¿Ratón Pérez Springsteen? Mierda...tengo posibilidades ilimitadas…Lo tengo…
Me llamo Ratón Pérez Martín…

Debajo un botón…del Sr. Martín tin tin….Esto le va a encantar.

¿Dónde vives?

…mmm…esta es complicada. Voy a optar por la huida hacia delante.

Vivo en un agujerito en la pared que hay en casa del Sr. Martín (soy un crack) que comunica con una cueva muy grande donde guardo todos los dientes”.

¿Te gusta la música?

M está descubriendo la música y anda entre decantarse por la música de mi mp3, la que suena en el mp3 del ingeniero y la radio fórmula que escucha en la radio. Ja...voy a optar por el juego sucio.

Me encanta la música…y ¿sabes qué? Me gusta mucho la que escucha tu mamá.

Soy tan ruin que me parto.

¿A ti te traen regalos los reyes magos?

Esta es facilísima.

Los reyes magos me traen regalos pero solo si me he portado bien.

“te voy a hacer un dibujo”

Que mona.

“Contesta detrás



A ver…joder…lo ha firmado y ha dejado un hueco para que firme el Ratón Pérez…jajajajajaja. Me descojono.

Ahora vamos con C. Estupendo...C para empezar ha dejad una indicación en el sobre, “Abre”...veo que no se fia de la capacidad del Ratón Perez para entender el complejo mecanismo de un sobre. Gracias a Dios las carta solo trae 3 preguntas y ya se las he contestado a M, solo hay que copiar y pegar. Ohhhh...el dibujo me flipa….


Algún día leerán esto y me odiarán y se descojonarán a partes iguales.

miércoles, 9 de noviembre de 2011

ACOMPAÑAR

La primera vez que murió el padre de un amigo me encontré sin saber que hacer. Yo tenía 16 años y recuerdo que mi padre me dijo: haz el favor de llamar a tu amiga.

Yo no quería. No quería pensar en que un padre podía morirse. No quería hablar con mi amigo. No sabía que decirle. Tenía miedo. Le dije a mi padre que había llamado pero que comunicaba…era mentira, había colgado antes de que les diera a tiempo a descolgar.

Compartir la alegría o los buenos momentos con otra persona mola mucho. Ya expliqué hace mucho tiempo que aunque seas una cumbre de la empatía es imposible sentir lo mismo que otro alguien…pero la alegría, el entusiasmo y la felicidad se expanden hacia fuera y aunque tú no estés igual de alegre, entusiasmado y feliz…algo de esas sensaciones caen sobre ti y te hacen sentir bien. Molan esos momentos.

Compartir los momentos chungos no mola nada. La naturaleza es sabia y aunque creas que si, es imposible compartir el dolor, la pena, la angustia o la tristeza suprema de otro alguien. Puedes llegar a atisbar ese dolor..pero no lo sufres. Y eso no es malo, sencillamente sería imposible vivir si la pena de los demás fuera realmente compartida. Nos pasaríamos la vida agonizando.

Aún así, aún sabiendo que esa pena o ese dolor es incompartible ( creo que esta palabra no existe) nos resistimos a acercarnos a ese momento de dolor o de pena. Nos sentimos inútiles, impotentes, creemos que no podemos hacer nada para aliviar al otro en ese momento de debilidad. Tenemos miedo. Miedo de no saber que hacer, de no saber que decir, de que todo lo que digamos o hagamos no sirva de nada y mucho miedo de atisbar aunque sea ligeramente la tristeza infinita, la pena suprema y el dolor inconsolable.

Todos,  como yo con 16 años, buscamos excusas. No he podido hablar con él, no he tenido tiempo para ir, tengo trabajo y no puedo escaparme, si fuera yo me gustaría que me dejaran en paz…etc, etc. Sabes que estás siendo cobarde, que tienes miedo y que todas esas excusas no son para el otro, si no para ti mismo..para no enfrentarte al miedo que tienes. Al final acabas yendo pero un poco por que es lo que hay que hacer, porque es una costumbre, un tema social. Vas sin saber muy bien para qué. 

Y un buen  día te encuentras en el otro lado. Eres tú el de la pena suprema, la tristeza infinita, y el vacío en el estómago. Tú eres de corcho. Al contrario de lo que siempre pensaste, no tienes miedo. Duele pero no te da miedo.

Empieza a llegar gente. Amigos, familiares, compañeros de trabajo. Descubres al contrario de lo que habías pensando antes, agradeces infinitamente su presencia. Sabes que la gente te quiere, a ti y a tu familia, pero verlos llegar a abrazarte, sin saber que decirte, a acompañarte hace que te sientas mejor, que te sientas querida. Sabes que no lo sienten como tú..pero eso no importa. Verlos allí, acompañándote te reconforta. Te gustaría decírselo a todos..gracias por venir…gracias a ti, a cada uno de vosotros por venir, por acercaros..por pasar por encima de vuestro miedo, de vuestras excusas internas, de vuestras complicaciones logísticas y acercaros a decirme que estáis conmigo. Pero no puedes hacerlo…porque no es el momento, porque no tienes tiempo, pero aprendes una cosa muy importante que jamás se te olvidará.

Cada vez que una de esas personas pase por lo que tú estás pasando, sabrás lo que duele.  Sabrás la pena inmensa que les anega. Sabrás que verte llegar allí a las 8 de la tarde, darles un abrazo fuerte que les transmita tu cariño y decirles “ lo siento en el alma” sintiéndolo en el alma de verdad, les reconfortará, les hará sentirse mejor y les ayudará un poco en ese momento tan duro. Sabrás como se agradece  hablar de otra cosa, de cualquier chorrada. Sabrás como el humor negro es un recurso buenísimo para liberar tensión  y sabrás como reírse en esos momentos sienta fenomenal. Sabrás como se agradece el contacto, la mano que les coge mientras hablan, la mano en el hombro mientras se ríen del chiste sobre ataudes y sabrás como se siente el abrazo final cuando te marchas...

Sabrás que  en esos momentos, acompañar ayuda muchísimo.

El tiempo de rumiar en silencio la pena suprema, el tiempo de preferir la soledad, viene después y también hay que estar pero de otra manera.

Para mi amiga O. a la que acompañé ayer.

lunes, 7 de noviembre de 2011

MATERNITY (LXXXVI): El ocio infantil

Mamá, ¿Qué vamos a hacer hoy?
Nada…quedarnos en casa.
¡¡Bien!!!

Los niños tienen tiempo libre y como son niños no saben muy bien qué hacer con él. Igual que les enseñaste a dormir, a comer, a recoger sus cosas, a hablar y a hacer las tareas hay que enseñarles que se puede hacer con el tiempo libre, con las horas sin obligaciones que tienen.

Enseñar a los hijos a usar su tiempo libre puede parecer fácil, a mí, me parece fácil pero compruebo cada fin de semana como la gente ha perdido el norte completamente con este tema. Por otra parte, no sé de qué me sorprendo, igual que hay gente que hace cosas completamente ilógicas para enseñar a sus hijos a dormir o a comer...hay gente que hace absurdeces con el tiempo libre de sus churumbeles.

Padres con un hobby o afición.
Pasan por alto completamente qué cosas les gustan o les pueden gustar a sus hijos. Ellos son unos fanáticos de la escalada, el trekking, las compras, el tiro con arco o la petanca y deciden que a su descendencia le tiene que molar esa misma actividad, así que dedican horas del fin de semana a arrastrar a sus hijos a realizar esas actividades. Los resultados por supuesto son frustrantes para todos. Los padres descubren que compartir la bici de montaña con sus hijos mientras estos berrean y dicen que no se quieren poner el casco y que se quieren ir a casa…dificulta mucho el disfrute de ese momento. Los niños por su parte lloran y se cabrean y asociarán de por vida la bici con hacer algo que no les gusta. La culpa por supuesto es de los padres, que a ti te guste hacer algo no quiere decir que a tus hijos les mole. Por mucho que sean “tus hijos”, son personas distintas a ti, con sus gustos personales. Es buena idea enseñarles lo que te gusta a ti...pero hay que pensar que lo mismo lo odian. Hay que dejar que descubran que les gusta y estar preparado para que sea algo que a ti no te mole nada.

Padres fanes.
Dejan de lado cualquier actividad que a ellos les apetezca a favor de convertirse en fans de lo que les gusta a sus hijos. Lo mismo que antes pero al revés. Si a tu hijo le fascina el ballet, el hockey sobre patines o los cantos regionales…está muy bien que le acompañes a los campeonatos, los concursos o los partidos…pero manteniendo un control sobre ello. NO puedes dejar que esa actividad colonice todo tu tiempo libre, no te puedes pasar el fin de semana yendo de un lado para otro para encajar entrenamientos, partidos, exhibiciones y demás…es absurdo y te ocurrirá como a tus hijos en el ejemplo anterior. Odiarás esa actividad que hacen tus hijos, irás cabreado y mosqueado permanentemente y les arruinarás a tus hijos el disfrute de eso que les mola, porque no son tontos y notan que vas a disgusto.

Padres agenda de eventos.
¿Qué haces el fin de semana?
El viernes recojo a los niños del colegio, los voy a llevar a merendar y a la bolera. El sábado por la mañana vamos a patinar al Retiro y por la tarde al cine. El domingo comemos con sus amiguitos del colegio y por la tarde vamos a ir al espectáculo de magia superchupi que saqué entradas hace 3 meses.

Me agoto solo de pensarlo. A esos padres no se les ocurre que apabullar a sus descendientes con todas esas actividades hace que no valoren lo que mola cada actividad por separado. Si tú acabas agotado de ir, venir...entrar y salir... ¿que te hace pensar que tus hijos estarán tan en éxtasis con esa agenda de eventos que no pensaran el suicidio?

Absurdo.

El tiempo libre se llama libre precisamente porque no hay obligaciones. Es tiempo en el que no tienes nada que hacer. Puedes emplearlo en lo que quieras, en hacer lo que te guste o en no hacer nada.

No tener nada que hacer que venga impuesto por una fuerza externa como los padres, sirve para que los niños aprendan a disfrutar de ese tiempo. No digo que no haya que jugar con ellos, claro que sí. Juegas con ellos o cocinas, o vas al parque o al teatro o a nadar o a montar en bici…y lo disfrutas tú y lo disfrutan ellos...pero luego vuelves a casa y hay que enseñarles a hacer cosas sin ti, a que pueden hacer cosas superchulas sin ti. Dejarles tiempo para que se “aburran” les hace buscarse la vida, jugar de otra manera, dedicarse a imaginar cosas que si están contigo corriendo de un lado a otro o jugando a lo que sea no surgirían porque tú no tienes ya 6 años y la época en que a ti se te ocurría construir una nave espacial con cocodrilos verdes que se comían a los clicks ha pasado. La edad en que te sentabas y escribías una obra de teatro sobre una princeza que lloraba en una torre...ya ha pasado. Y tiene que ser así…tienes que dejarles que piensen “me aburro”...para de ahí…inventar algo que hacer, descubrir qué hacer con ese tiempo que les guste y les mole.

Hay miles de cosas chulas para hacer con ellos, pero no tienen que ser todas a la vez y no todas tienen que ser costumbre, porque todos lo sabemos...no hay nada como acostumbrarse a algo para que pierda la magia.

Si tú como padre les organizas su tiempo libre y estás siempre encima de ellos impedirás que sepan hacer uso de él por si solos. Es igual que si les acostumbras a dormir contigo o a que mientras comen tu bailas la jota o cantas la banda sonora de Bob Esponja….jamás aprenderán a dormir solos o a comer sin tenerte a ti haciendo el gilipollas. Enfrentarles a ratos sin nada que hacer y sin ti…les hace aprender a usar ese tiempo libre, puede costarles al principio pero aprenderán a hacerlo. Los niños son listos si sus padres no los joden.

Otra cuestión es que todos necesitamos tiempo libre para nuestro disfrute personal. Seguro que hay mucha gente que dice eso tan políticamente correcto de “a mí lo que más me gusta es estar con mis hijos en mi tiempo libre”…pero yo no me lo creo. Estar un rato o mucho rato con ellos es estupendo…pasar TODO tu tiempo libre con ellos sin tener ni un ratito para ti solo…no mola nada y además empobrece tu relación con ellos, contigo mismo y con el mundo. Que tus hijos vean que estás un rato leyendo mientras ellos juegan a las tiendas, padres y madres o construyen un barrio de lodo en el jardín no les hace pensar “mi mamá no me quiere”…eso es una estupidez y tampoco te hace ser un mal padre.

Otra cosa es que tú no sepas que hacer con tu tiempo libre, pero la culpa de que seas un aburrido, no es de tus hijos, déjales disfrutar del suyo y no se lo revientes.

viernes, 4 de noviembre de 2011

SIN TAPUJOS

Nunca se está demasiado cansado. Siempre es excusa. Y todos lo sabemos porque todos la hemos utilizado alguna vez. Si de verdad hay ganas, te darás cuenta de lo cansado que estás al terminar y te dormirás más feliz que una perdiz y agotado.

Ya me desvisto yo. Cada uno conoce su ropa mejor que nadie y además hay prendas especialmente complejas para ellos. No porque sean torpes sino porque ellos solo usan pantalones, camisas que se desabrochan (o no) y cosas que se sacan por la cabeza. Con toda la sangre concentrándose en un solo punto no pueden ponerse a buscar cremalleras, corchetes y botones y adivinar si el vestido sale por la cabeza, por los pies y si es necesario que saques los brazos antes o no. Minimicemos los daños y cada uno se quita su ropa…aunque te ayuden un poco.

Los preliminares están sobrevalorados. Al grano. Aquí y ahora. Luego habrá tiempo para jugar a lo que sea. Y si no hay tiempo luego, ¿para qué perderlo en preliminares?

Los calcetines siempre hay que quitárselos antes que los pantalones. Los calcetines son una prenda que mola muchísimo cuando asoma por debajo de los pantalones, son monos, pueden ser divertidos y dicen cosas como: soy un tío serio, soy una tía divertida o puedo parecer sosa con mis vaqueros y mis botas...pero mira lo que hay debajo...calcetines rojos con hojas de marihuana verdes imagina como seré en la cama. En resumen, los calcetines molan mucho...perooooo...pierden toda su gracia si te quitas los pantalones y te los dejas puestos. Pierden completamente su significado y solo dicen dos cosas: soy ridículo/a ó me muero de las ganas y no he encontrado el momento de quitármelos sin interrumpir la acción. Y hay que aceptar que nunca hay manera de quitarse los calcetines de una manera más o menos estilosa...asi que hay que hacerlo rápidamente para minimizar el momento. Si te los dejas puestos con las prisas, te arriesgas a un corte de rollo total o a grandes risas…Pero... ¿No te has quitado los calcetines??

La lencería es para una misma. Será admirada cuando te la vuelvas a poner, nunca cuando te la quites si es uno de los buenos. Si es de los buenos buenos acojonantes...ni siquiera será percibida...

Nunca hace demasiado frio. Siempre es excusa. Todos sabemos cuál es la mejor manera de entrar en calor y sudar como nunca. El empitona miento no es por la baja temperatura pero o empezamos ya o desgarro la camisa.

Nunca hay demasiada gente. Siempre es excusa.

Nunca vas a ser lo suficientemente rápido como para estar seguro de que no generarás descendencia. Y lo peor de todo es que para cuando te des cuenta será demasiado tarde, así que mejor pasa de competir por ser el más rápido, mucho mejor subcampeón.

Nunca es demasiado profundo.

La velocidad ha de ser progresiva. La aceleración sin control resulta ridícula. La fricción a altas velocidades no tiene sentido a no ser que seas un conejo.

Nadie mira el cronómetro. 3 minutos es poco...pero eso no quiere decir que haya que prolongarlo hasta el infinito. Prolongar la duración más allá de la capacidad pulmonar de ella, no hace mejor el polvo pero si mucho más cansado e impide una pronta recuperación para poder seguir jugando. Mejor no perder el aliento y las fuerzas en el primer asalto...

Si no me estoy poniendo azul es que no pesas demasiado. Por supuesto, yo tampoco...aunque te pongas azul.

Si tu lesión de rodilla no te deja jugar al baloncesto no te operes. Si tu lesión de rodilla interrumpe las embestidas con: para para para…..es el momento de operarse. (Gracias Maromoespectacular por esta aportación)

Si hay que preguntar si ha estado bien, es que probablemente no lo ha estado y en cualquier caso no nos metamos en una conversación que no queremos tener.

Los que terminan en fuegos artificiales sincronizados...dejan agujetas en sitios increíbles…como las manos.

jueves, 3 de noviembre de 2011

MUDANZA LABORAL.

Los libros de colores están cambiando mucho. He sufrido estos días mi sexta mudanza laboral en 11 años. No sé que me dan más ganas de llorar lo de la sexta mudanza o lo de los 11 años aqui.

Nos han hecho desalojar nuestra acogedora pecerita en la que estábamos hacinados y entre pilas de libros de verdes y nos han trasladado a una praderita con vistas donde compartimos espacio con otros departamentos, en concreto los que cuentan los libros y los que compran libros rojos. Nos miramos con recelo...veremos que pasa. 

Primero nos pasaron un planito con los nuevos puestos. A escala y todo. A mí me daba igual, paso de sufrir por esas cosas. Comprobé  que me había tocado el peor sitio, entré en internet, cargué la lotobolsa y me senté a esperar que me toquen los millones. Pensé que todo el mundo sería tan zen como yo...pero no.

Sonrisas y Cedric contemplaron el plano por delante, por detrás, del derecho, del revés, se fueron a ver la praderita en cuestión y vinieron con una nueva propuesta de sitios basada en lo que se ajustaba más a lo que hacemos cada uno en el curro.

Chupi. Me tocaba un sitio aún peor.

Toda mi actitud chupi a tomar por culo. Ese sitio NI DE COÑA.

Empecé con una estrategia que pensé que no funcionaría ni en un millón de años, pero decidí intentarlo por eso de no ser mal pensada y ponerme siempre en lo peor que dice molimadre. Apliqué mi  mejor voz de niña buena, esgirmí convincentes argumentos laborales totalmente falsos y argumenté profesionalmente. A todo eso, le añadí unas gotitas de sacrificio inutil por mi parte y por supuesto también falso. Es decir, intenté engañarles.  
“Creo que ese no es buen sitio para mí. Yo necesito concentrarme y ahí estoy en todo el medio y así no hay manera. Morena necesita evitar la ventana y Cedric necesita estar más cerca del pasillo y las estanterías porque se levanta muchas veces, asi que la mejor colocación para todos incluso aunque yo salgo perdiendo es ésta"

Por supuesto no funcionó. No se dejaron engañar.
Pasamos entonces a jugar a las sillas musicales. Imprimimos varias copias del planito y jugamos a poner nuestros nombres en los distintos puestos. Todos teníamos veto, así que no avanzamos nada. Nos pasábamos el dia, pasándonos planos y haciendo n combinaciones de 4 elementos sin repetición...yo tenia todas las de perder, la estadística no es lo mío. Ese juego no me convenía o acabaría sentada encima de la impresora.

Decidimos dejar de pelearnos y aunar nuestras fuerzas para enfrentarnos a los departamentos de informática y a los responsables de ponernos las mesas, para intentar cambiar la distribución de puestos y encontrar algo que nos molara a nosotros.

Por supuesto los informáticos y los de las mesas dijeron que TURURÚ. En venganza,  cuando ya nos habían colocado todos los equipos decidimos que queríamos las cpus debajo de las mesas y tuvieron que volver a venir a cambiar todos los cablecitos. No hay nada que joda más a un informático que tener que tirarse debajo de una mesa  a conectar cables que habia conectado el día anterior.  Sospecho que van a bloquear las impresoras en una escalada de venganzas que no sé donde nos llevará.

Cuando vi que la solución a mis problemas de ubicación no iba a llegar de fuera, decidí que solo me quedaba recurrir al juego sucio y además tendría que practicarlo con el eslabón más débil: Cedric.

Empecé apostando fuerte.

- Haced lo que queráis pero ya os digo que yo paso de sentarme ahí …ese sitio no me gusta, es espantoso y no me siento ahí.  
- Yo quiero este.- dijo Sonrisas…no le dejamos decir nada más porque seguro que ha elaborado un informe de 10 páginas para justificar su elección. Es otro que juega bien sus cartas.
- Pues yo por mis cojones no me siento en el sitio que queda.- envidó Cedric. Y lo dijo muy serio y dando mucho miedo, con esa voz y esos dos metros de pie, al lado de mi silla…y yo tan canijilla.
- Vale Cedric, pues lo echamos a suertes. – envide más. A lo mejor sonaba la flauta y tengía suerte y me tocabA el sitio que quería. La opción de decidirlo con un combate a fuerza bruta ni se contempló,  sería la brigada brutal contra campanilla..sin alas.
- Tampoco
- ¿por qué no quieres echarlo a suertes?- a lo mejor Cedric era gafe y por eso no quería echarlo a suertes…debía insistir entonces en esa estrategia.
- Porque no quiero que el azar domine mi vida.
- ¿Qué no quieres que el azar domine tu vida? Vale. Pues entonces deja que te domine yo. Te sientas ahí. .- ví claro el camino a seguir, la estrategia a contemplar...las cosas iban justo por donde yo quería.
- Eres una mandona.
- Cedric… ¿qué es lo que te enseño tu madre?
- ¿De qué hablas?
- “A las mujeres se las respeta”. Mira...apunté tus máximas de vida en un post it y lo tengo pegado en la pantalla.
- Eso no vale...estas haciendo un uso fraudulento de las frases de mi madre…eres muy perra.
- Ah…no es fraudulento. Te recuerdo lo que te enseñó tu madre, sus sabias enseñanzas. Recuerda:“A las mujeres se las respeta”
- Eso no vale. Además...tampoco hago todo lo que me dice mi madre...
- ¿Me estás queriendo decir que tampoco te cambias los calzoncillos todos los días?
- Mierda Moli…no sé cómo, pero me estas tangando y no se me ocurre nada para contestarte. 

Puedo ser muy perra pero he conseguido el sitio que quería.

martes, 1 de noviembre de 2011

MI PADRE (III)

Mi padre es un tío alto. Mi padre es un tío calvo. Mi padre es un bigote. Mi padre es atusarse el bigote frente a la pantalla del ordenador mientras se concentra. Mi padre es unas manos grandes. Es dedos amarillos de fumar. Es Winston, Malboro y Ducados. Mi padre es la uña de un dedo partida a la mitad. Mi padre es una cicatriz en una ceja recuerdo de una herida hecha al caerse de una escalera en el curro. Mi padre es electricidad. Mi padre es bocadillo de queso manchego..Mi padre es un jersey gris con unas hombreras de cuero. Es una camisa de cuadros. Es un traje azul. Es unos zapatos de cordones.Es pantalones de pana. Mi padre es una sesión de cine continua viendo a Luis de Funes. Mi padre es la primera vez que vi Pulp Fiction. Mi padre es Los Simpsons. Mi padre es “ señores, en el culo tengo flores”. Mi padre es responder “escasa” a la pregunta “ ¿qué tal la  comida?”. Mi padre es la siesta. Mi padre es una moto Enduro. Mi padre es olor a madera, a chimenea. Mi padre es sentarse con el brazo estirado en el respaldo del sofá. Mi padre es macarrones, filetes rusos, cocido. Es nesquick para desayunar. Mi padre es Los Beatles. Es “Ticket to ride”.  Es Simon & Garfunkel. Mi padre es la cabecera de la mesa en casa de Madrid y el sitio debajo de la ventana en la cocina de Los Molinos. Mi padre es pasos por el pasillo.Es el servilletero marrón Mi padre es esquí.. Es Baqueira. Es Valdesqui. Es Pas de la Casa. Es pasear en otoño. Mi padre es Siete Picos.Es el Bar La Perla. Es el jardin de Los Molinos.

Mi padre es ingeniería. Es números. Mi padre es turrón de guirlache. Es nunca pasar frio. Mi padre es “¿Has visto a ese señor tan guapo? Si, es mi padre”. Mi padre es unos ojos azules.Mi padre es los ojos azules de M. Es el sentido del humor de C. Es ser hermano pequeño.

Mi padre es conducir. Es sacar el codo por la ventanilla mientras se conduce. Es la M30. Es Atocha. Es un Seat 131. Es un talbot Tagora. Es la plaza de Alonso Martínez. Es la Plaza de Castilla. Es aprender a conducir.  Es un disfraz de Drácula. Es una foto con una papelera en la cabeza. Es Barcelona. Es la escuela de ingenieros industriales. Es la Fórmula 1. Es un porsche 911. Es emborracharse. Es olor a tabaco. Es risa. Es una carcajada. Es Suiza. Es un bed & breakfast en Windsor. Mi padre es Harrison Ford en " A propósito de Henry". Es salir bien en las fotos.Mi padre soy yo con 24 años.

Mi padre es  el 25 de diciembre.

Mi padre es  el último día, el 1 de noviembre.

Todas y cada una de esas cosas provocan un chispazo de recuerdo, de reconocimiento. Por un momento lo traen de nuevo a mi vida mientras me voy alejando de él. 

viernes, 28 de octubre de 2011

EL CORTE

Me he cortado el pelo corto. Muy corto pero sin llegar a ser ni Sinnead O´Connor ni la teniente O´Neill. Según me han dicho por ahí...llevo el pelo “a lo garçon”…que suena a algo con glamour y sexy...asi que lo compro.

Mi corte " a lo garçon" me gusta. Es cómodo, es distinto y no me levanto por la mañana como un gremlin cabreado y los pelos de punta. En mi entorno ha habido reacciones de todo tipo:
Ah...pues era verdad que te lo has cortado muy corto”.- el ingeniero como Santo Tomás, siempre dudando de las evidencias.

Mamá yo te quiero mucho menos cuando te enfadas...asi que no te enfades, pero los pelos de antes de punta eran más chulos”.- M sopesando herir mi sensiblidad.

Las guapas llevan el pelo largo, con el pelo largo se pueden hacer más cosas. Haz lo que quieras pero yo así no me lo corto. Qué desastre”. C sobrellevando el hecho de que su madre será siempre una decepción estilística  para ella.

“¿Cómo de corto? Ay madre…mándame una foto”…Molihermana dudando mucho de mi criterio capilar. Le mandé la foto hace una semana y no se ha pronunciado aún, deduzco que ha visto confirmadas sus dudas.

Moli...estás bien, pero a mí personalmente me gustas más con el pelo más largo…y con este corte creo que me voy a replantear nuestro plan de irnos a vivir juntos a una casa en Nueva Zelanda”.- J, mi nuevo compañero de coche ha visto hacerse añicos su plan imaginario de libertad.

Muy bien, estás mejor, antes llevabas un corte antiguo”.- opinión a destiempo de otra compañera.

Te has cortado el pelo. Te di envidia con mi corte que me quitó 10 años de encima y has hecho lo mismo”. Cedric dándole un sentido existencial a mi corte.

Halaaaa…vaya corte”.- casi cualquiera que me he cruzado por el pasillo en los libros de colores.

Moli…estás muy guapa y pareces una niña”.- Fede empático total.

A eso no lo llamo yo cortar sino atusar”.- un escéptico al recibir mi foto.

Hala…si que está corto...pero estás guapísima, más guapa que nunca”.- el mismo escéptico al verme al natural.

Moli…algo tienes que contarnos. Cortarse el pelo radicalmente significa que quieres cortar con tu pasado”.- mi amiga R en plan psicoanalista.

Moli, tú tienes pelazo y podrías llevar el pelo largo..pero te sienta mejor corto…pero tampoco abuses que parecerás de la kale borroka”.- Guada.

"Mola. Te queda muy bien. Moli cada vez más atractiva".- otro ingeniero empático total.

- Hola mamá.
- Hola…mmmm…que corte.
- Ya lo sabías te lo dije el otro día por teléfono…
- Si...y me lo dijo tu hermana…
- ¿Qué te parece?...
- Pareces un chicuco….
- Pero ¿te gusta o no te gusta?...
- …no lo sé…me estoy haciendo a la idea.

Reencontrándome con molimadre en su más pura esencia.

¿ Y si me dejo el pelo blanco a ver que pasa?

LIBROS ENCADENADOS.- Septiembre y octubre





¿ Libros? ¿ Vas a romper el climax del blog?
¿Climax? ¿ De qué hablas?
Con lo bien que ibas: la regla, los tios, Eric borracho, la pizca justa de maternity, la aparición de dos grandes secundarios muy prometedores...¿ y ahora te vas a calzar uno de libros?
¿Qué pasa? Ahora toca y me apetece....No todo puede ser jijiji..jajaja...Soy una tia seria.










Una vida sin ti de Jean Rhys, regalo de NáN y comprado en Tipos Infames en el mes de mayo. Es una recopilación de cuatro novelas cortas: Viaje a la oscuridad, Cuarteto, Después de dejar al Señor Mackenzie y Buenos días, medianoche.

Las cuatro historias son muy parecidas, cuatro mujeres abandonadas por hombres o solas después de haber terminado una relación siempre autodestructiva y desigual. Nunca son relaciones sanas, siempre son de dependencia emocional o económica o de poder. Cada historia tiene un argumento pero son la misma:  mujeres solitarias deambulando por Londres o París intentando superar su situación pero sin intentarlo realmente, más bien regodeándose en autocompasión y esperando a que llegue otro tío que las saque de ese lodo. Es triste, es patético, es amargo...estaba deseando terminarlo no porque me diera pena..si no porque me entraban ganas de poder meter las manos entra las líneas, coger a las tías por los hombros y decir: ¿ quieres dejar de hacer el imbécil y espabilar de una vez?...me estaba hostilizando, en una palabra. Gracias NáN.

" En el momento en que una cosa sucede, deja de ser fantástica y pasa a ser inevitable. Lo inevitable es lo que haces o lo que has hecho. Lo fantástico es sencillamente lo que no has hecho. Esto vale para todo el mundo".

El cero y el infinito de Arthur Koestler. En el mes de junio, en este post, enlace una entrevista a Judt que seguro que no ha visto nadie...pero yo si. Nada más empezar, Judt hablaba de este libro y de como hace 20 años era una obra de referencia y ahora mismo era una novela desconocida. Recordé entonces que cuando leí " Sobre el olvidado siglo XX", Judt dedicaba un capítulo a Koestler y decidí  que dos llamadas de atención de Judt sobre ese libro...hacían necesario que lo leyera.

No tenía ni idea de qué iba. Es una novela escrita en 1941 y se nota mucho. No se podría escribir ahora ni por la situación política actual,  y porque ahora, 70 años después, ha desaparecido el fervor infantil y hasta cierto punto ingenuo con el que se creía en el  valor de las ideas y del trabajo por el bien común en los años 40.  La novela al mismo tiempo que ensalza el trabajo del individuo por la mejora de toda la humanidad reivindica la lucha del individuo contra el sistema.

Koestler no pretende escribir una novela, yo lo veo más como un ensayo novelado. Una reflexión en voz alta sobre su propia desilusión respecto al comunismo. Con pocas pinceladas consigue transmitir la frialdad, la soledad y la angustia de una cárcel soviética. La tortura psicológica del aislamiento solo rota por la comunicación a base de golpes con el vecino desconocido de celda. El horror de ver pasar a los que van a morir  por delante de su celda y finalmente la tortura psicológica de no dormir.

A pesar de no ser una lectura "agradable" me ha gustado, sobre todo cómo ejemplo de otra época más idealista. Ahora mismo hay una ausencia total de fe en las ideas y en el grupo. El individualismo prima sobre cualquier tipo de bien general. El "yo" y "mis derechos" están siempre por encima del bien del grupo y los deberes como parte integrante de un grupo sólo se perciben cuando no chocan con la propia individualidad.

" Un matemático ha dicho una vez que el álgebra es la ciencia de los perezosos: nunca se busca lo que representa x, pero se opera con lo desconocido como si se supiera su valor. En nuestro caso x representa las masas anónimas, el pueblo. Hacer política es operar con x sin preocuparse de su naturaleza real. Hacer historia es conocer el justo valor de x en la ecuación.

Oceáno Mar de Alessandro Baricco.  Con este tenía prevención, si no hubiera sido porque una entusiasta recomendación, no lo hubiera leído. De Baricco solo había leído "Seda" que me pareció una historia tan cursi como para venir en un cuento de esos troquelados de princesas.

Baricco para mi gusto está encantado de conocerse y de leerse...así que su estilo me resulta preciosista con demasiada frecuencia, pero en esta novela consigue encajar su afición a " mira que bonito escribo" con la trama de la historia y no chirría demasiado.  Consigue crear una especie de ambiente mágico pero no completamente irreal. El entorno es extraño y poco "material" pero los personajes, sus pensamientos y sus sensaciones si son reales. Al terminar de leerlo, me dejó una sensación de tranquilidad, de sosiego..como cuando te quedas embobado mirando al mar...y me moló.

300 de Frank Miller. Después de mi famosa epifanía no podía dejar de leer este comic que además también me habían recomendado varios expertos en la materia. Obviamente no es como la película...la historia es la misma, es lo que tiene recrear hechos históricos pero Leónidas no mola ni la mitad que en la película aunque si, es un mil hombres y todo es heroico y de muchas luchitas y los dibujos molan mucho.  Ahora ya podré decir: sí, he visto la peli ( n veces) y leí el comic.

Píldoras azules de Frederik Peeters. Este comic lo cogí de la biblioteca por recomendación de Ca_in, lector silencioso de este blog y comentador dicharachero en el blog de Efe..probablemente sufra algún tipo de trastorno de la personalidad...pero recomendando comics es bueno. Con el desconocimiento que me proporciona mi breve experiencia como lectora de tebeos este año, me atrevo a decir que el género "ombliguero" tiene muchos adeptos entre los dibujantes de comics. Todos encuentran sus vidas tan sumamente interesantes como para contarlas y dibujarlas...algunas lo son por supuesto y otras no. El caso de Peeters es el segundo..no es que tenga mucho interés su relación con su chica seropositiva, pero como la carne es débil y el cotilleo tira mogollón te lees el comic tan ricamente...con curiosidad por saber qué le pasa a Frederick y a su chica. Se parece un poco a una tv movie y se lee del tirón en un ratillo.

Aventuras y desventuras del chico centella de Bill Bryson, regalo de uno de los descerebrados más antiguos, más majete, más guapo y más listo que nadie. Javi. Bryson es acierto seguro. En esta ocasión repasa la década de los años 50 en su Iowa natal, contando como era la vida por entonces, como era la gente en aquellos años, en qué creían, qué pensaban  y según Bryson lo felices que eran. Además de retratar magistralmente esa época y conseguir transmitir sus sensaciones como chaval que creció en esos años, Bryson va contando su infancia llena de anéctodas que siempre me hacen gracia y durante su lectura en el parque fui objeto de miradas raras por parte de otros padres como se me caían las lágrimas de aguantarme las carcajadas.

" Lo verdaderamente interesante de las decepciones que proporcionaba el ocio durante los años 50 es que nunca llegabas a intuir la decepción,  y eso se debía a que la publicidad era genial. Nunca ha habido publicistas tan astutos. Eran capaces de conseguir que la porquería más insignificante pareciese fabulosa. Jamás se ha visto en este mundo, ni antes ni después consejos publicitarios tan zalameros, tan capaces de insinuar la felicidad orgásmica a partir de materiales tan simples".

Muy recomendable para pasar un buen rato y además con Bryson siempre se aprende algo...parece que no, pero suelta los datos y te vas quedando con ellos. Mil gracias javi.

Coraline de Neil Gaiman. Este lo lei por curiosidad....sabía que había una película que todo el mundo me había dicho " No es para laz princezaz" y dije pues voy a ver que es. Es de miedo, pasé miedo leyéndolo...no me pasaba eso desde que leí " La música del azar" de Auster. Creo que si conseguí terminarlo y no acojonarme hasta el infinito fue porque aunque la historia es de mucho miedo, los dibujos no le pegan...no conseguía abstraerme de la sensacion de estar viendo dibujos de los tebeos de Esther de mi más repugnante adolescencia. Creo que esta historia hubiera dado muchísimo más miedo en blanco y negro..o en grises...el mundo del colorín rosa y pastel le quita capacidad de acojonarme...aunque por otro lado casi mejor..porque hasta tuve pesadillas.
 
Gorazde. Zona Protegida. La guerra en Bosnia oriental 1992-1995 de Joe Sacco. Este tebeo fue también recomendado por Ca_in y también es una historia autobiográfica. Joe Sacco es periodista y viaja a Gorazde cuando la ruta azul se abre tras conseguir la OTAN parar el asedio serbio sobre la ciudad. Allí conoce de primera mano lo que ha sucedido a partir del testimonio de distintos personajes. Es un comic superdenso tanto por el dibujo como por la cantidad de información que acumula. Entre su densidad formal y que es una historia durísima, he tardado casi 3 semanas en terminarlo porque no es una lectura para abordar con un estado de ánimo regulero. Otra vez recupero el tema de la fragilidad de nuestra vida diaria, de como la seguridad en la basamos nuestra rutina diaria puede desaparecer en cualquier momento devolviéndote a un estado de mera supervivencia. Lo más duro en este caso es que es una guerra cercana en el tiempo, no vale decir como con la IIGM...eran otros tiempos...y que además son amigos y vecinos los que de un día para otro pasan de compartir sus vidas a dedicarse a matarse con todo el ensañamiento posible. Muy duro y para leer con calma..pero lo recomiendo.

2 meses, 8 libros, 4 comics, 3 regalos y un post ladrillo.

No está mal.