
1.- Seamos sencillos y aceptemos que la Naturaleza puede con cualquier efecto que hayas visto en un anuncio de televisión.
Si tienes el pelo como una tabla, no te empecines en ser la tía con más rizos del planeta. Da igual que te pongas el champú con extracto de joroba de camello, te lo seques con el Powerchorro 3000 y luego te des la mascarilla especial rizos con baba de kiwi. Te vas a dejar una pasta y malgastar tiempo para terminar con un pelo polla asqueroso.
Lo mismo si tienes rizos y quieres terminar con el pelo planchado. Los pelos esos como tablas y brillantes no existen. El photoshop se aplica igual al pelo. Además, si tienes el pelo rizado y consigues planchártelo del todo después de malgastar mes o mes y medio de tu vida, aléjate de cualquier líquido o parecerás un furby en cuestión de minutos.
Así que chicas, asumid el pelo que os han dado y dejad de perder el tiempo.
2.- Nadie le presta a tu pelo la atención que le prestas tú. Es más, si la gente te mira mucho el pelo, ten por seguro que no es porque lo lleves ideal. La gente es malvada. Es mucho más probable que te haya cagado una paloma o que se te hayan volado las extensiones. Cualquier otra cosa menos espectacular pasa desapercibida.
Vayamos a qué me dice tu pelo:
Melena excesivamente larga al viento rollo pantoja: una vez un tío me dijo que le ponía el pelo largo y ese comentario totalmente superfluo y probablemente provocado por una pregunta con la respuesta implícita del tipo: ¿ a que te encanta mi pelo largo? se quedó grabada a fuego en tu cerebro.
Tus puntas escucharon ese comentario, se crecieron, les cogiste cariño y decidiste no cortártelo y por eso tienes aspecto de mocho deshilachado. Mala idea.
El pelo largo no siempre es sexy, a no ser que vayas a ir a caballo en bolas con el pelo tapándote los pechos. En ese caso sí, sobre todo si tienes las peras caídas.
Pelo de colorines: soy un as disimulando. Creo que los demás son tontos y aunque lleve el pelo amarillo pollo y las cejas renegridas no se darán cuenta de que voy teñida.
Volvemos al tema de no conformarnos con la naturaleza. Todo el mundo sabe que no es tu color y más si lo llevas azul. ¿ Porqué te pones el pelo azul? ¿ o fucsia? No ves que parece un reclamo del tipo: soy tan anodina que me pongo un neón.
Si estás increíblemente buena no necesitas ponerte el pelo azul.
Si eres fea está bien pensando la gente se quedará meditando: ¿porqué verde loro? En vez de decir…madre mía..es una hermanastra de cenicienta.
Creaciones escultóricas capilares: Si, estoy incómoda de cojones, me estoy clavando un millón de horquillas, tengo que llevar la cabeza en un ángulo de 37 º porque sino se me cae el flequillo sobre el ojo y llevo el pelo tan tirante que dentro de poco se me saldrán los ojos por los agujeros de la nariz…pero..¿ estoy o no estoy ideal?
Eres una absurda.
Creaciones escultóricas capilares en equilibrio inestable gracias a toneladas de laca: soy una absurda que apesto pero ¿ a qué voy ideal?. Eso sí, no me toques el pelo que raspa.
Cada vez que me ves llevo el pelo más corto: me dice lo mismo que el tío con la barba larga, un día empecé a cortarme y ya no sé parar.
Pelo con raya al medio perfecto: soy tannnn languidaaaaaaa. Dadme una guitarra que canto en bolas.
Pelo rapado: soy tannn guapa que me puedo permitir la cabeza boliche. Bueno, en realidad tuve piojos pero eso no es guay.
A tener en cuenta:
- No pisé una peluquería hasta una semana antes de cumplir 25 años.
- Llevo el pelo corto.
- Me mojo el pelo todos los días, algunos incluso 2 veces
- Considero que levantarte 10 minutos antes porque te toca lavarte el pelo, es una completa pérdida de tiempo. El resultado es el mismo que si te lo lavas en 30 segundos.
- Peinarme me lleva exactamente 10 segundos y sólo uso un peine.
- No tengo secador
Con todo esto quiero decir, que alguien puede considerar que no soy una voz autorizada para criticar el tema capilar, y puede decidir meterse con mi pelo lo que queráis, porque sencillamente me la sopla.