
Ya reivindiqué en su momento la venganza, que creo sinceramente, que tiene muy mala prensa cuando es algo que produce satisfacciones y reconforta. Además, evita que te sigan puteando si se hace bien.
Ser un buen vengador requiere tiempo, pericia y planificación.
Una venganza precipitada es una chapuza, no da satisfacciones y lo que es peor, puede tener consecuencias negativas para uno mismo.
Ejemplo práctico: tu compañero de curro te roba la grapadora y eso te jode. Antes de ponerte frenético y graparle la mano a la mesa, hay que valorar las consecuencias. Si le grapas la mano se va a ir de baja, te va a tocar hacer su curro y encima te llamarán de rrhh para una evaluación psicológica por conducta violenta. Mal.
La venganza perfecta debe ser sutil. El afectado debe sospechar que algo pasa pero sin saberlo. Sentir que eso no es normal , pero no saber identificar que ocurre. Si cree que son imaginaciones suyas, mejor que mejor.
La venganza perfecta debe ser continuada en el tiempo. No se trata de dar un golpe y ya. Eso se pasa. Es mucho mejor algo continuado y constante..no todos los dias, ni a todas horas..tampoco tiene que acostumbrarse que pierde efecto. Pero algo que cuando crea que se ha pasado.vuelva…
Por ejemplo…aunque signifique un gasto..compras 4 grapadoras de distintos colores..y se la cambias todos los días, incluso le cambias cada día la etiqueta donde el muy memo ha puesto “pertenece a Fulano”. Y se la dejas encima de la mesa. El pavo llegará, cogerá la grapadora y dirá..
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esta no es mi grapadora
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¿pero no pone tu nombre?-
ya, pero la mia era verde…-
qué coño va a ser verde..siempre ha sido azul…
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no-
me estás diciendo, que alguien viene y te cambia la grapadora y le pone tu nombre???....
La venganza perfecta tiene que ser retorcida. Si es demasiado simple no satisface. Si tu compañero de curro te roba la grapadora y vas tu y se la robas a él…eso ni es venganza ni es nada..es una chapuza de cojones y además lleva a una espiral de robos de material de oficina absurdo. Mucho mejor, vaciarla de grapas cada vez que veas que la recarga. En cuanto le ponga grapas y se de la vuelta..¡zapa!..fuera las grapas. Eso le creará ansiedad y falta de seguridad…porque estará seguro de haber hecho eso…y no dará crédito a lo que le pasa.
El colmo del retorcimiento sería mandarle un set de material de oficina con 3 o 4 grapadoras de distintos tamaños y una tarjeta anónima.
Cuando miré desconfiado alrededor..le miras con tu mejor sonrisa y tu más falsa cara de compañerismo y le dices:
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que suerte tenemos del buen ambiente laboral que hay aquí, nada de malos rollos.
Planear una venganza exige tanta concentración que ayer me limpié la cara con enguaje bucal en vez de con tónico.Son gajes del oficio…hoy huelo a pino.