
Al ingeniero le gusta invitar a muchísima gente a casa. A mí también.
Al ingeniero le gusta invitar a muchísima gente a casa y que se sienten todos alrededor de una mesa enorme. A mí me da igual.
Al ingeniero le hacía muchísima ilusión comprar una mesa gigante para sentar a toda esa gente. A mí no. Yo quería un sofá nuevo.
Así que tras meses de ahorro y negociaciones en la cumbre, nos encaminamos un día cualquiera al maravilloso mundo del mueble sueco. Sé que hay otros sitios para comprar muebles pero a mí los muebles suecos me gustan y además son baratos, así que cuando decida que ya no me gustan los puedo dar sin remordimiento de conciencia. Exactamente lo que he hecho con el sofá que hemos quitado.
No he tenido ni un remordimiento de conciencia, lo que sí he tenido ha sido una conversación absurda con molimadre. Por mi culpa, claro...porque no aprendo.
Le ofrecí la mesa de comedor que quitábamos a pobrehermano pequeño que ¡¡tachán!!!! : Se ha ido de casa. También le ofrecí el sofá pero no lo quería.
NO le dije nada a molimadre porque la conozco, a ella y a su síndrome de Diógenes. Es más, creo que deberían cambiarle el nombre a ese trastorno y ponerle “Síndrome de molimadre”.
En cualquier caso y con su superpoder de enterarse de todo y más de lo que yo trato de ocultarle, se enteró, aunque fue astuta y no me atacó directamente, esperó a que yo diera un primer paso en falso.
Siempre lo doy.
La llamé por teléfono, para otra cosa, pero la llamé.
La llamé por teléfono, para otra cosa, pero la llamé.
Mamá...llamaba para contarte que lo del envenenamiento ayer en el hospital fue bien.
Hija que bruta eres...envenenamiento…
Bueno, pues eso que fue bien...asi que nada...ya hablamos.
Moli..
¿Qué?
Que el sofá que le has ofrecido a pobrehermano pequeño...que he pensado que lo quiero yo.
Ya, por eso no te lo he ofrecido, porque sabía que tú y tu espectacular síndrome de Diógenes lo querríais y paso.
Pues lo quiero.
¿Para dónde?
Lo voy a guardar en el trastero de pobrehermano mayor que cabe de sobra.
Y... ¿para qué quieres guardar un sofá en un trastero?
Porque luego puede que me lo lleve a la “ caza de laz montañaz”.
…mm...tú sabrás pero ¿has pensado que el porte hasta allí te va a costar más que un sofá nuevo?
No, porque seguro que encuentro a alguien que me preste una furgoneta y me lo lleve gratis (su síndrome de Diógenes está hábilmente combinado con una fe irracional en la concatenación de hechos muy improbables)
Vale, vale…a mi me da igual. ¿Cuándo vienes a por el sofá?
Ah no, yo no puedo.
Y... ¿cómo va ir el sofá desde mi casa hasta el trastero de pobrehermano mayor? Por curiosidad lo pregunto más que nada.
Pues tú encárgate de buscar un transporte…llama a tu amiga, la que tiene la furgoneta y lo cargas y quedas con pobrehermano y…
Eh eh eh… ¿tu no eras la que quiere el sofá? ¿Por qué tengo que buscar yo el transporte?
No seas egoísta moli. Tú también vas a la casa de las montañas.
Si, voy yo y mis pobreshermanos y sus amigos y mis primos los pesadillas y tus amigos de miradondepisas y todo el mundo…así que ¿por qué tengo que encargarme yo de esto? Además, a mi el sofá que hay allí me parece perfecto. Es más, ¿has medido que quepa el de mi casa?
A ver Moli que te pones insufrible. Por supuesto que cabe el sofá, lo tengo medido. (Molimadre tiene el superpoder de saber antes que yo que me iba a desembarazar del sofá y además siempre lleva una cinta métrica en el bolso)
Vale, bueno...pues muy bien...pero sigo sin ver claro que como va a llegar el sofá de mi salón al trastero de pobrehermano mayor.
Te he dicho que lo organices, dile a los suecos que te traen el nuevo que lleven el viejo a casa de poberhermano o llama a algún amigo y luego quedas con pobrehermano en su casa.
Mamá...unas cositas... primero... ¿porqué voy a pagar para que se lleven un sofá cuando si cuelgo la foto en twitter tendré 7 tios que se lo llevarán gratis? Segundo, sé que me estoy poniendo muy fuerte...pero... ¿cómo voy a bajar el sofá 6 pisos andando yo sola? Tercero… ¿qué te hace pensar que tengo tiempo para cometer semejante heroicidad?
Mira hija, yo no puedo mañana porque tengo blablablabalbla y pobrehermano mayor trabaja.
Entro en combustión.
¿QUÉ POBREHERMANO TRABAJA? ¿QUÉ TRABAJA? Y yo… ¿QUÉ COÑO HAGO? ¿Me vengo a pasar el día al polígono industrial porque no tengo otra cosa mejor que hacer? Pobrehermano sale a las 5 y se dedica a sus cosas, esto es...leer, dormir, correr, montar en bici, ver la tele…cosas de soltero con muuuuuucho tiempo libre. Yo tengo que currar, una función infantil, la compra, recibir a los suecos, las cenas… ¿y se supone que yo tengo tiempo??
Moli...no se puede hablar contigo...te pones insufrible, enseguida te ofuscas. ( Claramente la medición de mi paciencia no es igual para molimadre que para mi...a mi me había parecido que estaba siendo muy paciente desde el minuto en que dijo la palabra sofá que era cuando debería haber colgado, pero ya es tarde)
Pero, pero, pero..¿No ves que es un plan absurdo? ¿Pretendes que movilice a mi amiga, en un día de curro…para bajarme un sofá andando 6 pisos y guardarlo en un trastero por si en los próximos 10 años encuentras a alguien que te haga un porte de 500 km gratis? Mamá por favor…intenta no desechar un argumento sólo porque sea mío….
Si empiezas con el melodrama de “mi madre no me entiende” directamente te cuelgo….
..Pero….
..y avisa a tu hermano para que sepa cuando le llevas el sofá….
Al colgar me rechinaban los dientes de indignación y creo que hasta me dejé marca de las uñas de apretar los puños….si es que parezco nueva.
Menos mal que para compensar tannnnta frustración estoy completamente enamorada de mi nuevo sofá. Tenía mis dudas… ¿Será demasiado grande? ¿Será demasiado negro? ¿Nos entenderemos?(1) …pero estamos hechos el uno para el otro…no sé cómo he podido vivir tanto tiempo sin MI sofá.
Me gusta tanto que incluso me estoy planteando dejar de salir….
(1) Si, sí..asumiré los chistecitos sobre esto.