
Los que me conocen saben que leo mucho. Menos de lo que a mi me gustaría pero mucho más de lo que la gente considera “normal”. Leo tanto que con los años he desarrollado una serie de manías y normas.
Cuando me compro o me regalan un libro, siempre pongo en la primera página mi nombre, la fecha y donde lo he comprado o quien me lo ha regalado. Siempre con pluma.
Al acabarlo apunto en un cuaderno la fecha y si me ha gustado a lo mejor comento algo. Si no me ha gustado le dedico los insultos más ordinarios que se me ocurren y descargo todo mi cabreo por haber perdido el tiempo con ese libro. ¿Qué porqué lo termino si no me gusta?. Pues porque hay veces que no doy crédito a que un libro sea tan horrible y quiero llegar al final para que nadie pueda decirme “ a partir de la página 400 viene la gracia”. Veasé por ejemplo..mis post sobre “ El vestido rojo”:
Tengo una lista de libros que quiero leer. Los saco de referencias que leo en culturales, ( Si, si..confieso que me leo El Babelia), de blogs o recomendaciones de gente que considero que tiene criterio. A veces, recorto las críticas y las guardo hasta que leo el libro en cuestión y entonces guardo el artículo en el libro. G. tiene esa lista actualizada para cuando quiere hacerme un regalito.
Si un libro de un autor me gusta..suelo buscar más del mismo, normalmente hasta que doy con uno que no me gusta y entonces le cojo manía. Si el primer libro que leo de un autor no me gusta no le doy una segunda oportunidad. Solo he roto esta regla una vez en mi vida, y fue con Rosa Regás y por ello sufrí el castigo divino más horrible. No leáis nunca a Rosa Regás.
Leo más literatura extranjera que española. Los contemporáneos españoles me dan pereza, no es que no los lea, pero si me dan a elegir casi siempre me decantaré por uno extranjero y últimamente casi seguro que será americano.
Cuando regalo libros lo hago pensando exactamente en la persona a la que voy a regalar. Cada libro es para una persona.
En el colmo de mi frikismo…señalo las erratas en el libro doblando la esquina de la página y a veces incluso..si me he encontrado muchas..me molesto en mandar un mail a la editorial. Si, si..sé que es horrible pero no puedo evitarlo.
Jamás leo la contraportada de un libro. No quiero que me cuenten de qué va. Ya sé que es incongruente con haber leído la crítica pero es que los elogios desmesurados de las contraportadas más que animarme suelen provocarme rechazo..así que no los leo hasta que he terminado el libro.
Tengo alguna más..pero ya otro día.
La foto es de la Biblioteca Nacional de Viena. ¿ A que mola?