martes, 18 de octubre de 2011

MOLIDOCUMENTALES: Grandes verdades de la regla.

Mamá ¿qué son compresas?- inocente pregunta provocada por la aparición de un anuncio televisivo de los años 80 dónde una joven actriz ponía el culo en pompa con unos vaqueros ajustados y de tiro alto (eran los 80) y repetía como si fuera un mantra: no se mueve, no se nota y no traspasa.

Pues verás hija, las mujeres una vez al mes...sangran unas gotitas y las compresas sirven para no mancharse.

La dulce niña no lo sabía, pero esa frase de su madre era un monumento al eufemismo.

¿Unas gotitas?? ¿Unas gotitas??? ¿UNAS GOTITAS???

¿Sirven para no mancharse?? ¿PARA NO MANCHARSE?

Ja.
Todo esto, claro, se aprende luego. Y se aprende con sangre (un mogollón y no 3 gotitas), sudor y lágrimas (éstas a gusto de la sufridora).

Tener la regla es como si Alien se apoderara de tu cuerpo, como si Quato viviera dentro de ti, quisiera salir y se hubiera perdido por tus entrañas. Hasta que encuentra el camino de salida se dedica a putearte y no puedes hacer nada. Sencillamente has perdido el control sobre tu cuerpo. No mola nada y no mejora con el tiempo, cada mes, es la misma pesadilla, el Día de la marmota. Quato sigue sin aprender el camino, ni aunque le dejes miguitas.

Alien y Quato son capaces de provocar un dolor inhumano. En su búsqueda absurda de la salida de tu cuerpo, son capaces de alcanzar casi cualquier parte de tu anatomía y provocarte un dolor supremo: te estalla la cabeza, las tetas quieren salirse de la piel que las contiene, tus ovarios botan y chocan entre ellos como pelotas de billar, tus riñones deciden que no les mola estar siempre a la espalda y pugnan por salir por tu vientre, las piernas te pesan como si fueran de cemento…

Cuando eres joven y no tienes ni idea, no sabes muy bien qué hacer, así que optas por intentar obviar los síntomas. Piensas erróneamente cosas del estilo “ si a todas las mujeres les pasa y van por la calle tan campantes, porque seguro que alguna de las que me cruzo por la calle están como yo…yo puedo hacer lo mismo, puedo con esto”.

Error. Lo que no sabes es que esas mujeres son sabias y van drogadas. O se han pegado la llantina de su vida en el coche y por eso parecen más relajadas, o van directas a su casa, a su sofá, su manta, su peli de llorar y su cubo de helado de strawberry chesee cake. O lo que es más probable…todo a la vez. Ellas no obvian los síntomas, los padecen, pero han aprendido a llevarlos de la mejor manera posible.

La regla es como la resaca. No merece la pena luchar contra ella, no vas a ganar jamás. Es mejor hacerse su amiga y darle lo que quiere.

Para empezar quiere drogas (como la resaca). El ibuprofeno suele funcionar (como con la resaca) pero normalmente un cocktail fabuloso de analgésicos que a poder ser te dejen en estado vegetal (como la resaca) es muchísimo mejor. El espidifen es amiguísimo de la regla.

Al tomar drogas con la resaca quieres sentirte bien. Cuando te drogas con la regla simplemente quieres caer en un estado de catatonia que te funda con el sofá sin dolor y que haga que el llanto fluya mansamente por tu cara. No quieres correr, ni saltar, ni hablar, ni hacer nada…quieres a tu mantita.

Y quieres llorar. Realmente no es que quieras llorar pero Alien y Quato son unos sentimentales así que es más fácil dejarse llevar por el impulso incontrolable de llorar por cualquier gilipollez, que intentar poner buena cara y sonreír. No funciona...asi que es mejor regodearse en el llanto y encontrarle el gusto.

Quato tiene hambre. Mucha hambre y una gula que te cagas. No sirve de nada hacer como que no, y negarte a comerte una palmera de chocolate, un Big Mac, comida china o una tortilla de patata entera…Quato se vengará y te hará llorar más. Mejor dejarse llevar.

Llanto, irritabilidad, gula suprema, mala hostia elevada al cuadrado y dolor físico extremo son solo algunos de los síntomas que  la posesión diábolica de tu cuerpo puede provocar. La convivencia con Quato con cada mujer es un misterio y los síntomas por tanto infinitos, a algunas se les pone el pelo como a un pelocho, otras se hinchan y tienen que desechar todas sus faldas tubo esos días, otras sufren ataques de actividad marujil incontrolables, a muchas les dan ataques de lujuria...en fin...todo es divertidísimo...la posesión diábolica es una juerga.

Cada mujer tiene su cocktail de drogas que le funciona y cada mujer tiene su combinación sabia de compresas, tampones, copas de no sé qué para intentar sobrellevar la infraestructura de esos días. Por supuesto, se llega a esa combinación después de un proceso científico basado en acierto-error, acierto-error y cuando se alcanza la perfección, no se puede alterar ninguno de los elementos. Por eso nunca es conveniente enviar a alguien (tu pareja por ejemplo) a comprar pertrechos sin las adecuadas instrucciones, si hace falta, en Excel. “Tampax súper compact con aplicador megapearl. Compresas súper sin alas con aroma a café con leche. Salva slip extra especial fino que te cagas”.

Cuando algún desalmado pasa por alto esas instrucciones o se le envía sin las adecuadas instrucciones, es muy posible que venga con algo del tipo compresas marca blanca para todo, balbucee una excusa del tipo: " es que había muchísimas y no me aclaraba". Probablemente también, acabe con ellas pegadas en la frente.

Con esas cosas no se juega.

Cuando por lo que sea la mujer no encuentra un entorno adecuado para poder sobrellevar con dignidad sus síntomas, a poder ser un entorno lleno de gente empática que no la saque de quicio…Quato se cabrea y la mujer se encuentra entonces poseída por una mala leche espectacular que es incapaz de controlar. Y realmente tampoco quiere, estar superhostil y mostrarlo da una extraña sensación de poder sobre Quato...el cabreo es como más tuyo que el llanto incontrolable.

Con el paso de los años y los meses se aprende a convivir con ello y se lleva mejor….a veces se lleva tan bien que de repente te encuentras pensando: ¿qué día es hoy? ¿17? ¿De octubre? …mmm...vale...y ¿cuando fue la última vez? ¿Me toca ya? ¿Me ha tocado ya? ¿CUANDO ME TOCA? A ver...la última vez que me encontré de angustia, me acuerdo que iba llorando por la calle y llevaba un jersey rojo y el dia que me puse ese jersey fue el día que fui a no se donde que justo el día anterior había ido a la peluquería a teñirme...y solo voy a la peluqueria los viernes y el mes pasado viaje 3 viernes...asi que debió ser el día tal…vale, contemos…1, 2, 3, 4….ahhh...vale...no me toca hasta dentro de 4 días, ¿ 4 dias solo? ¿Y no tengo síntomas? Joder…no puede ser…no, no puede ser...es imposible…COÑO...no te pongas paranoica.

En fin…que mola muchísimo ser mujer.

lunes, 17 de octubre de 2011

MATERNITY ( LXXXIV): Durmiendo con su enemigo.

 
Los niños durmiendo son tan monos.


Tan monos. Tan tiernos.

Las caritas relajadas, la piel tersa, los pelos revueltos, el chupete en la boca, tumbados en poses como si se hubieran caído desde un quinto piso, abrazados a gatos, muñecas, Buddys, Buzz Light Years, Hello Kitty, un castillo de Lego, un cuento…un diploma de la policía. Con esos pijamas tan monos, de superhéroes o de princesas…

Y ese olor,a ternura, a amor total…

Para cualquiera, tenga o no tenga hijos, no hay mejor momento para superar amor maternal o deseos de reproducirse que cuando se entra en el cuarto de unos niños que llevan un rato durmiendo, es todo idílico.

Si ya te has reproducido los miras y piensas: que ogro soy…los gritos que les pego y la de veces que querría apagarlos…y sin embargo son tan monos…creo que si abro la boca me va a salir una cascada muy rosa de babeo de amor.

Si no te has reproducido, los ves y piensas: qué exagerada es la gente, con lo monos que son, seguro que no es tan horroroso tener hijos y compensa todo.

Y todos hacemos lo mismo, nos acercamos y les arropamos.

Lo cual es una completa gilipollez y un acto reflejo provocado por la contemplación de pelis americanas donde madres y padres entran en cuartos infantiles, apagan una lamparita con forma de seta, estrella o cohete espacial, arropan a dulces niños, cierran la puerta como si fuera una bomba a punto de estallar y se van por un pasillo blanco a su cuarto a echar un polvo de amor.

Ja.

Los niños durmiendo en su cama son ideales, angelitos tiernos y dulces. Los niños durmiendo en tu cama son tu peor pesadilla. En su cama durmiendo te mueven a querer reproducirte en serie, a repoblar el planeta y durmiendo en la tuya mueven a ligarte las trompas.

Cuando son bebés, hay gente muy partidaria de meterlos en la propia cama...”es que es un coñazo meterlo en la cunita, total le doy de mamar o el biberón y ya se queda conmigo” “es que tiene mocos y así vigilo que no se ahogue” “es que ya me he levantado 10 veces y así lo tengo cerca”.

Estupendo, una opción (mala) como otra cualquiera. Quiero decir que la opción de levantarte 25 veces, pasearte por tu casa, acercarte a su cuna/cama, gatear bajo la cuna para buscar el puto chupete, calmarles y luego intentar abandonar la habitación sin que se despierten es horrible, es cansada y deteriora mucho la relación de pareja,  aparte de crear lesiones de codo muy serias: “Quieres levantarte de una puta vez que yo ya me he levantado 15”.

Pero la opción de meterles en tu cama para pasarte el resto de la noche durmiendo en el borde por temor a aplastarles mientras con un ojo vigilas que tu pareja en su famoso doble giro con tirabuzón no clave a tu hijo contra el colchón...tampoco te garantiza el descanso.

Cuando son más mayores y hay que meterlos en tu cama por un caso de fuerza mayor que hace imposible que sigan durmiendo en su cama, podría parecer que es más fácil, pero tampoco. Los niños tienen una capacidad increíble de pegarse a ti mientras duermen, convirtiéndose en estufitas humanas que hacen que la temperatura de la cama alcance niveles incompatibles con el sueño. Además son como pequeñas lapas y se te incrustan en los riñones, te meten los pelos en la nariz o se duermen encima de tu brazo cortando el riego sanguíneo.  Tras varios infructuosos intentos de alejarlos de ti por lo menos 30 cm…y así poder dormir algo decides que esto es absurdo.

La opción menos mala es intentar devolver al churumbel a su cama. Dependiendo del churumbel, se dejará o no se dejará, pero optando porque se deje o esté tan cuajado que no vaya a despertarse, el cargar con un peso muerto de 20 kilos a oscuras, tratando de evitar que se abra la cabeza contra los quicios de la puerta, la pared del pasillo y la litera (que conste que a mí no me ha pasado) probablemente te despejará tanto que no consigas conciliar el sueño de vuelta a tu cama.

Si por el contrario tu churumbel es de los cabrones que una vez que han conseguido llegar a la cama paterna, se sienten califa en lugar de califa y dicen que ni de coña vuelven a su cama...la opción es irte a dormir a su cama. Es decir, te rindes, te rilas..el niño gana, pero tu tienes que dormir algo. Y oh sorpresa…descubres que la cama dónde tú has dormido durante un montón de años (y hecho otras cosas) es incomodísima.

Entras en un bucle de pensamientos muy raros, porque son las 5 de la mañana, no has pegado ojo y estás metida en una cama de 80 cm con un edredón de princesas. Piensas, madre mía...yo he dormido en esta cama con otro y ahora soy incapaz. ¿De verdad que yo dormía en aquel entonces? A lo mejor es que no dormía y ahora me lo imagino…pero da igual...yo lo que quiero es volver a mi cama.

Y entonces comprendes que has alcanzado la sabiduría suprema, cuanto más grande la cama mejor.

La putada es que tu hija pequeña parece que lo ha descubierto antes que tú.

sábado, 15 de octubre de 2011

UN CORTO Y UNA CANCIÓN PARA UN SÁBADO

No tienen nada que ver y la única razón para que los suba en una misma entrada es que me apetece. Bueno, eso y que sé que los sábados por aqui pasan la mitad de descerebrados pero los que pasan tienen más tiempo...asi que si a alguien le apetece que los disfrute.

El corto

LOGORAMA, es un corto de animación francés de 2009 dirigido por  François Alaux, Hervé de Crecy y Ludovic Houplain. A mi me pareció sencillamente genial...Gracias a P. que me lo descubrió.

Logorama from Marc Altshuler - Human Music on Vimeo.


La canción

El año pasado por estas fechas fui al concierto de The Swell Season en Madrid. Salí completamente flipada y creo que todavía me dura el efecto. Marketa ha sacado esta semana un disco nuevo y me flipa esta canción. Ella es meliflua y tiene aspecto de frágil...pero no es ni tan meliflua ni tan frágil como para que le pegue cantar en bolas con una guitarrita.  Canta de puta madre, no susurra ni hace monerías con la voz...tiene una voz de cristal..no sé explicarlo mejor.

viernes, 14 de octubre de 2011

MOLIDOCUMENTALES: ECOSISTEMAS LABORALES

En el mundo laboral hay distintos ecosistemas. En mi mundo laboral, por supuesto, que no es ni una fábrica, ni una tienda, ni un restaurante, ni la carretera, ni el monte, ni un laboratorio, es un mundo de oficina, mesas, ordenadores y libros de colores.

Puedes ser fauna de pradera, de pecera o de despacho.

La fauna de pradera comparte un espacio más o menos diáfano con las mesas colocadas normalmente en posiciones sin ningún sentido pero qué a algún jefe se le ocurrió que sería lo más correcto para la implementación y mejora de los flujos de información y trabajo. Esto se traduce en que si llegas el primero a la pradera escoges la mesa más lejos del despacho del jefe, más lejos del pasillo, más cerca de la ventana y a ser posible con una pared detrás que impida que nadie vea lo que estás haciendo en el ordenador. Si se da una mudanza en bloque a una nueva pradera, las luchas por conseguir la mejor posición pueden llegar a ser muy sangrientas y cualquier maniobra por ruin que sea se considera legítima.

Según se va llenando la pradera, van quedando los peores sitios y es curioso comprobar cómo la gente inventa todo tipo de prototipos de tapaderas para tener un mínimo de intimidad laboral. Si en una pradera conviven varios departamentos, otra vez porque a algún gurú se le ha ocurrido la gilipollez de los flujos...normalmente las mesas se agrupan, dando la espalda a los otros grupos y creando un mal rollo muy chulo. Es el hábitat adecuado para que proliferen los cartelitos con nombre. “Esta grapadora es de los libros verdes”. “Encuadernadora de los libros rojos”. El acopio y ocultación del material de oficina está a la orden del día.

- ¿Tenéis archivadores?
- ¿Archivadores? ¿Nosotros??...mmmmm… ¿qué te hace pensar que tenemos archivadores?

Es algo así como el santo grial…tenemos uno pero ni de coña os lo damos y lo defenderemos con nuestra vida.

En la pradera, lo único que tienes tuyo es tu mesa y la defenderás con tu vida. Tu mesa y tu silla es tu espacio y nunca jamás hay que tolerar una ocupación de ese espacio. ¿Quién ha dejado este papel QUE NO ES MÍO encima de mi mesa? Cualquier movimiento por mínimo que sea de movimiento de mobiliario es considerado un ataque hostil: ¿quien ha movido mi mesa 3 cm hacia la columna?

Es un ecosistema muy frágil…como un banco de coral y por eso los rumores son constantes, inquietantes amenazas se ciernen siempre sobre su complejo equilibrio. A veces son amenazas por adición:

- Me han contado que quieren meter más mesas.
- ¿Más mesas? ¿Dónde? ¿Dónde piensan ponerlas? ¿a nuestra chepa?
- No sé...pero lo que es a mi...no me mueven de aquí.

O por sustracción:

- Me han contado que van a hacer peceras para repartirnos por departamentos.
- ¿Peceras? ¿de cuantos? ¿y con ventanas o sin ventanas?
- Pues yo si me ponen en una pecera sin ventanas paso…prefiero estar aquí.

Por supuesto, la baja permanente de cualquier miembro de la fauna de pradera provoca unos movimientos de acoplamiento de los supervivientes con luchas armadas por conseguir un sitio mejor. Estos movimientos de recolocación pueden llegar a ser casi tan divertidos como jugar a las sillas musicales.

La fauna de pecera está un paso por encima...o eso se creen ellos. Pon a alguien detrás de un cristal con unas persianitas venecianas regulables y crecerá 5 cm en su paseo diario a su sitio mientras siente que su trabajo está un paso más cerca de darle al On del Sol todos los días.

La fauna de pecera para empezar cuando atraviesa la pradera mira por encima del hombro a los pobres de las mesas en racimo, él está a otro nivel, tiene despacho, compartido...pero despacho.

Las peceras pueden ser más o menos grandes, pero normalmente las mesas se agrupan de dos en dos y se forman extrañas parejas. Si todos llegan a la vez a la pecera, se acoplan en pares por afinidad...pero como nada es permanente en el mundo laboral, más adelante los emparejamientos van cambiando y es perfectamente posible y muy probable que dos tios que trabajan a exactamente metro y medio se odien profundamente.

En las peceras quien controla el aire acondicionado y las persianitas venecianas, es el amo. Se sabe cuando el amo está de vacaciones o de baja porque los demás peces se comportan como si no tuvieran padres: el aire acondicionado a todo palo si el amo es caluroso y viceversa y las persianitas abiertas de par en par si el amo opta siempre por tenerlas chapadas o chapadas si el amo es de los de “dejar que entre la luz”.

En la pecera además de mesas, la fauna tiene asignadas estanterías con armaritos que siempre se cierran con llave porque se da el síndrome de “mi tesoroooooo”...aunque guarden sobres acolchados reciclados.

Si alguien es expulsado de la pecera...automáticamente pasará a ocupar el peor sitio en la pradera y lo que es peor, llegará allí desnudo de material de oficina y tendrá que mendigarlo a sus nuevos compañeros que lo mirarán con suspicacia. Durante un tiempo no tendrá amigos...los de la pradera le harán el vacio y los de la pecera ya no le ajuntarán…

La fauna de despacho está en el top de la escala laboral. Hay gente que se lo toma bien, ha llegado allí por sus méritos y se merece tener su espacio para concentrarse en su curro y organizarse. Es esa gente que tiene un despacho en el que sabes que siempre serás bienvenido, en el que si te llaman para ir no se te hace nudo en el estómago y que suele tener la puerta abierta. Los ocupantes merecedores de despacho además, siempre están localizables…están haciendo su curro y están en su sitio.

Luego está la gente que tiene despacho por una extraña y completamente injusta carambola laboral en la que suele estar muy presente el peloterismo, el tener un primo con influencias y el trepadismo. Es un despacho al que nunca quieres ir porque sabes que saldrás cabreado, y en el que nunca apetece entrar porque se respira soberbia y estupidez. Siempre tienen la puerta cerrada…ellos dicen que para tener intimidad, los demás sabemos que es para que no se note lo incompetentes que son. Estos farsantes inútiles pasan además mucho tiempo pululando por la empresa oteando otros despachos y valorando si son mejores o peores que el suyo…además de soberbios son envidiosos.

La evolución normal y que se considera exitosa es pasar de pradera a pecera y de pecera a despacho…pero a veces, donde más tranquilo se está y más se disfruta de la naturaleza es una pradera con vistas.

Y estás más cerca de la salida.

jueves, 13 de octubre de 2011

J y J

En mi más tierna infancia, mis primos J y J eran seres maravillosos, lejanos y misteriosos. No tenían casa en Los Molinos, vivían a las afueras de Madrid cuando Madrid tenía afueras y los veíamos mucho menos que a los demás. Por eso cuando aparecían su presencia siempre nos parecía una visita de los dioses. Siempre tenían cosas molonas, juguetes con los que nosotros ni siquiera podíamos soñar y sobre todo eran savia fresca para nuestros juegos. Además, siempre sabían jugar a cosas supermolonas y que a nosotros nos parecían de mayores.

Para empezar nos parecían mayores. Esto es un misterio sensorial, porque uno de ellos me saca exactamente año y 3 meses y el otro es 6 meses más pequeño que yo, pero de alguna manera misteriosa siempre parecían mayores, con más mundo y por supuesto muchísimo más interesantes que nosotros.

Como no tenían casa en Los Molinos casi nunca aparecían por allí...pero esto no era motivo sufienciente para nosotros para sentirnos más guays...porque ellos vivian en una urbanización con piscina y pistas de tenis y tenían allí pandilla con la que podían jugar a miles de cosas. Molaban muchísimo...nos molaban hasta sus amigos que no conocíamos.

Otro misterio fascinante era que se llevaban increíblemente bien entre ellos. Para pobrehermano mayor, molihermana y para mí...eso era un hecho digno de aparecer en los anales de la historia. Nosotros nos pasábamos el día literalmente a leches y gritándonos todo tipo de improperios, mientras que ellos dos jugaban juntos y parecían pasárselo estupendamente bien. Sí, claro...discutían de vez en cuando pero no era la lucha fraticida que manteníamos nosotros desde que nos levantábamos hasta que nos acostábamos.

Nunca se aburrían. Ahora que lo pienso creo que debían venir de casa con una lista de juegos con la que epatar a sus primos canijos…siempre se les ocurrían cosas chulas para hacer y además tenían la colección de juegos de mesa más increíble que he visto nunca. Ellos me descubrieron el Stratego, La Fuga de Colditz, Hundir la flota, el Risk…y a hacer cosas increíbles con los clicks…Fueron los primeros niños que yo conocí que tenían una maquinita de esas de juegos, la del gorila que tenía que saltar o coger los barriles...el Donkey...no se qué.

Recuerdo perfectamente un verano, el primer verano de pobrehermano pequeño, en el que no sé porqué extraña razón mi madre decidió enviarnos a la playa con mis tíos y mis primos. La primera noche la pasamos en su casa de Madrid. Pobrehermano mayor y yo compartíamos un sofá cama en el despacho de mi tío...dormíamos contrapeados...y por supuesto no paramos de darnos patadas toda la noche. Al día siguiente salimos de viaje y mis primos sabían mil cosas chulas para jugar en el coche, mil chistes para contar y mil historias de miedo para acojonarnos. En aquella semana en la playa, pasé más miedo que en toda mi vida. Vimos “El muñeco diabólico” un día que mis tíos salieron a cenar...creo que nunca he pasado más miedo en toda mi vida. Jamás he vuelto a ver esa película…

En ese viaje también pasé miedo cuando uno de mis primos dejó caer su maquinita de Donkey por el hueco de la escalera…desde un quinto piso. Ver a mi tío, que yo tenía por un señor pausado y calmo pasar del verde al morado antes de ponerse a gritar como una fiera todo tipo de improperios…fue de muchísimo pánico. Todavía cuando nos juntamos siempre nos preguntamos ¿qué te hizo tirar la maquinita desde un quinto piso? “No sé...pensé… ¿qué pasara si la tiro?”….

Luego nos hicimos mayores…y cada vez nos veíamos menos. A ellos ya no les mandaban a pasar alguna temporada a los molinos, no coincidíamos en la casa de la playa y en Madrid hacíamos planes distintos. Con mi primo J fui a mi primer concierto de Springsteen en julio del 88, yo lo recuerdo y él también…desde entonces nos volvimos superfans.

Ahora nos vemos poco...muy poco...un par de veces al año, pero siempre nos lo pasamos bien. Nos saludamos y sencillamente empezamos a hablar y a reírnos tanto que casi no podemos ni respirar, ni por supuesto comer…cuantas veces la cena de Nochebuena ha terminado en el mantel entre ataques de risa incontrolables. Recuperamos los chascarrillos que tenemos desde canis e inventamos algunos nuevos que vamos incorporando…los primos pequeños ya no son pequeños y todos hacemos una buena pandilla.

Cuando murió mi padre fui de corcho hasta que al llegar a la iglesia para el entierro, de toda la gente que había en la puerta…se acercó mi primo J y me abrazó…y de repente me encontré llorando todo lo que no había llorado en las 24 horas anteriores…me abrazó, me consoló y me acompañó dentro de la iglesia hasta que conseguí recuperar el aliento. Puedo recordar hasta como olía...y la sensación de su abrazo.

Ayer, después de una agonía absurda de mes y medio, murió mi tía, la madre de J y J. Se como se sienten, pero estoy aquí, atrapada en los libros de colores, a 800 km y sin poder acompañarles y darles ese abrazo.

Ni siquiera saben que tengo un blog…
Lo siento en el alma.

martes, 11 de octubre de 2011

PEDRO

Hay tíos grandes, muy grandes y luego está Pedro.

Pedro, Pit, Peter, Juan Pedro, "Pedro El Grande" para laz princezaz.

Es una especie de combinación fabulosa entre un Papa Noel cálido y acogedor, el Gigante Verde con su sonrisa y Obelix.

Cuando nos vemos siempre hace lo mismo. Sonríe con una sonrisa que de verdad quiere decir “Coño, como me alegro de verte”. Luego abre los brazos y me abraza mientras dice: ¿Qué tal Perrrra? U otro mote que solo me llama él.

Es tan grande, tan cálido y tan entrañable que cuando nos encontramos me dan ganas de correr como cuando era pequeña y corría a que mi padre me cogiera en brazos.

Te abraza y es como entrar en una cueva de lo grande que es. Una cueva donde es imposible que te pase nada malo.

Tiene la carcajada más sincera del planeta. Se ríe con ganas, se ríe feliz. Cuando le oyes no quieres que pare nunca.

Como es ingeniero tiene cosas rarunas propias del gremio. Si nos vamos de fin de semana alcohólico con toda la pandilla, él siempre se encarga de la comida. Es un gran cocinero así que nunca hace “comida fácil” y siempre se lleva sus cacharros, aparece con 3 peroles como para dar de comer un regimiento y su colección de cuchillos asesinos. Y de verdad son asesinos…yo casi me rebané un dedo con uno de porcelana especial para cortar tomates. Tiene uno tan peligroso que ni siquiera me deja acercarme a él: “Moli ni lo toques….ni te acerques”, probablemente tengo dos manos con todos sus dedos gracias a él.

Nunca tiene frio. Jamás le he visto con jersey, ni en Guadalajara a 10 grados bajo cero. “Pedro, eso es porque tienes reservas de sobra”…” pero que perrrra eres Moli”.

Que yo sepa no necesita dormir. Da igual a la hora que nos hayamos acostado de juerga…él siempre está de pie, duchado, peinado y con su sonrisa permanente a las 9 de la mañana. Da igual lo pronto que llegues al curro, siempre hay un correo suyo a una hora completamente absurda como las 6:45 de la mañana.

Abrió un blog…consiguió escribir un post sencillamente genial…y con la satisfacción del deber cumplido y de saber que jamás escribiría nada mejor, paso del blog. Fue uno de los primeros en saber que yo tenía este blog.

Tienes que leer a Bill Bryson, “Breve historia de casi todo”, hasta tú lo entenderás”…le estaré eternamente agradecida por ese consejo tan en su línea de cariño.

Es ingeniero de montes pero que yo sepa no distingue un abedul de un chopo...tampoco le hace falta.

A pesar de ser increíblemente grande, es ágil. Se mueve como si desplazar todo ese tamaño no costara esfuerzo…incluso baila con gracia...con su famoso paso de la gamba. Creo que nunca he visto nada tan divertido…

Puedes hablar con él de cualquier cosa…de las serias que siempre mola y de completas gilipolleces surrealistas, dudas existenciales complejas:

 ¿Porqué creéis que se dice como puta por rastrojo? ¿Quien se lleva a la puta a las pajas? ¿O es que como puta por rastrojo es un eufemismo para decir que te matas a pajas?... ¿tú qué opinas moli?

O hacer una versión argentina de Troya…” pero cheeee… ¿cómo qué en el caballo hay gente? " " la concha de tu madre...Aquiles...que te has hecho en el pie pive"

Es un tío genial.

Es un tío feliz.

Hoy cumple 40 palos y ha organizado una fiesta superchula con comida de verdad y bebida de verdad. Conociendo su completa incapacidad para calcular cantidades, probablemente habrá comida y bebida para surtir a todos los descerebrados…pero me temo que los de Montes haremos un esfuerzo y con grave riesgo para nuestra salud daremos cuenta de todo.

Mañana voy a morir, pero por Pedroooooo lo que haga falta.

Feliz cumpleaños.

viernes, 7 de octubre de 2011

MATERNITY (LXXXIII): LA ROPA INFANTIL.

La ropa infantil, ESE mundo.

Para empezar hay que explicar, que la ropa infantil es un tema que a los padres les es completamente ajeno.

Es un universo creado más allá de su entendimiento: tallas en meses, tallas en cm, unas cosas se abrochan por delante, otras por detrás, la diferencia de tejidos ese gran misterio místico ¿esto es pana? ¿Esto es algodón?, la combinación cromática, diferenciar las zapatillas de estar por casa de las que no lo son, la conveniencia de usar las botas de agua en días de lluvia y no en días de caloreta so pena de que a tu churumbel se le cuezan los pies, son incapaces de recordar el numero de pie que calzan sus hijos…en fin…un mundo complejísimo.

La ropa infantil a los padres les hace bola, pero confesad malditos, lo hacéis aposta para no tener que ocuparos. Venís con un gen malvado que os impulsa a vestir a vuestra hija de morado y verde con zuecos de piscina y camiseta de dora la exploradora para llevarla al trabajo de su madre, solo para conseguir esta frase: “cariño, me voy pero te he dejado la ropa preparada de los niños”.

A la hora de vestir a tu descendencia hay 3 opciones:

- Decidir llevar a tu niño hecho un repollo absoluto. Para ellas siempre vestidos de nido de abeja con mangas farol, chaqueta a juego, leotardos y zapatitos de princesa y para ellos pantaloncitos cortos con pinzas o largos con raya con camisa a juego, tirantes, leotardos sin son pequeños y calcetines si son más mayores y mocasines. Son lo que viene siendo niños de catálogo. La ventaja de esta opción es que la ropa es la misma año tras año, es un estilo que se lleva desde que yo tenía 3 años.

- Decidir llevar a tu niño independientemente de la edad que tenga como si fuera un adolescente carpetero petagranos adicto a la sección de moda del Cosmopolitan. Para ellas camisetas de lentejuelas si se llevan, pantalones piratas estrechos si es lo que toca esa temporada, botas de mosquetero aunque la niña mida 70 cm, camiseta ombliguera aunque sea diciembre…y para ellos pantalones cagaos, gorra de rapero y zapatillas de deporte fosforito. Son esos niños que los ves y dan como grimilla: ¿tendrá 3 años o 13 y está un poco canijo?

- La tercera opción es la que queda en medio...y consiste en rebuscar en tiendas y sortear el cursilismo supremo y la moda absurda buscando ropa bonita, barata y PRÁCTICA.

La practicidad es fundamental a la hora de vestir un niño...pero como todo no hay que llevarla a los extremos a la que son capaces de llevarla alguna gente. NO se puede llevar al niño en pijama todo el día aunque sea un bebe o aunque el pijama de spiderman parezca un chándal. No se puede.

Los niños normales corren, saltan, se pelean, trepan, se manchan con pinturas, con plastilina, se enganchan en picaportes, esquinas, ramas, armarios, con sus propios amigos o hermanos…y aunque los plastifiques completamente siempre consiguen dejar un rastro en su ropa de lo que sea que hayan comido. Por todo eso no merece la pena sufrir por la ropa ni gastarse una pasta indecente en un jersey ideal de la marca pitipín. A tu hijo le va a dar igual lo que te haya costado y aunque te pongas superserio, le amenaces con el dedo o le prometas la luna: Por Dios…no te manches ese jersey. Se le olvidará a los 3 nanosegundos y se destrozará el jersey sin compasión. Lo peor es que ya lo sabías….y te sentirás imbécil.

Por supuesto es inevitable la tentación de comprarles algo “de bonito” para usar en “ocasiones especiales”. Esta tentación es más fuerte cuanto más novato eres. Llega una nueva temporada y corres rauda a comprar lo que les hace falta para el día a día y luego “algo para las ocasiones especiales”. Con el tiempo aprendes a que esas “ocasiones especiales” son poquísimas y que realmente adornando un poco algo de diario van que se matan…y aprendes también a base de ver esa ropa colgando el armario sin ningún tipo de utilidad.

El tema del tallaje es también curioso. Los fabricantes de ropa infantil son unos seres malvados que se sientan en sillones y acarician gatitos mientras ven en una bola de cristal a madres ir y venir con ropa para cambiar a las tiendas y maquinan estrategias diabólicas:  : tu haz una talla 6-7 que realmente sea para niños de 3…y yo haré una talla de 3 para niños de 10.

Alguien que no tenga hijos dirá: pues te llevas al niño de compras y  vas probandole la ropa. Lo dicho, alguien que no tenga hijos. 

Si tienes más de un descendiente, pasado el momento absurdo de “quiero que el segundo también estrene todo porque pobrecito”…que es una completa gilipollez se llega al momento “heredar”. Parece buena idea, claro que si...pero conlleva un follón logístico cada cambio de temporada que te hace desear vivir en una isla desierta donde tus hijas puedan ir todo el día en bolas.

Llega octubre y empiezas a guardar la ropa de verano y sacar la de invierno.

Parece fácil pero no.

Primero hay que hacer una montaña con la ropa que ya no le vale a ninguno de tus hijas, para hacer esto por supuesto hay que probárselo todo y ellos jamás están dispuestos. Se pueden pasar el día jugando a disfrazarse pero el día que les dices que hay que probarse la ropa primero se aferran a su ropa como si fuera una segunda piel y luego encuentran absurdamente hilarante correr en bragas por la casa mientras tú les persigues para probarles un jersey de cuello vuelto.

Luego otra montaña con la ropa que ahora les vale y que crees calculando muy optimisticamente les valdrá el verano que viene.

Otra montaña con la ropa que el año pasado calculaste optimisticamente que les valdría este invierno y que no les entra ni de canto, ni metiendo tripa ni aunque decidas que se llevan las mangas tres cuartos y los piratas.

Otra montaña con la ropa que no le vale a tu hijo mayor pero que crees que le valdrá al pequeño el verano que viene.

Parece que ya está. Pero no.

Con la montaña de ropa que ya no le vale a ninguno…se abre otro mundo de posibilidades. ¿La tiras? ¿La das? ¿La guardas porque le tienes cariño? ¿La guardas porque a lo mejor te reproduces más? No, mejor se la das a alguien que conozcas. No, mejor a dos álguienes que conozcas…uno con niña y otro con niño.

Has elegido la peor opción…incluso peor que la de guardarla por si te reproduces de nuevo. Ahora hay que separar la ropa que puede ser para niño de la que solo puede ser para niño. Y haces otros dos montones.

Te pones de pie, los brazos en jarras. Estás satisfecha de ser tan organizada, ésta vez lo has hecho bien. Todo bajo control.

Miras a tu alrededor y te pones a llorar.

Tienes dos niñas en bragas corriendo por la casa y 6 montones de ropa.

- Cariño, ya estoy en casa ¿Que te pasa?
- Nada...que estoy haciendo el cambio de armarios
- ¿el cambio de qué?

Lo dicho…se hacen los tontos.

jueves, 6 de octubre de 2011

TERAPIA DE LA HOSTILIDAD..ENÉSIMA VERSIÓN.

Este blog se llama Cosas que (me) pasan.

No se llama Todas las cosas que (me) pasan.

Por leer este blog nadie va a conocerme. Se puede hacer una idea, acertada o equivocada de cómo soy o como me tomo lo que me pasa o me deja de pasar, pero ni de lejos sabrá como es mi vida.

Este blog lo escribo porque me sale de los cojones y escribo lo que me apetece. Normalmente me salen cosas divertidas porque soy una tía divertida y porque aunque me esté cayendo mierda encima a mansalva por algún tipo de mecanismo extraño consigo casi siempre sacar el humor negro y tirar para delante. Alguien que me conoce dice que a veces soy un puto coñazo de “buenrrollismo”. Otras veces escribo cosas tristes o profundas de garrafón porque soy una tía que le da mil vueltas a la cabeza y lo pienso todo mucho y alguna vez llego a alguna conclusión medianamente interesante.

NI mi vida es un puto descojone permanente ni es un valle de lágrimas. Es como la de todos y aquí cuento lo que me apetece.

El blog me sirve de terapia, si escribo cosas divertidas o me fijo con mi mirada bloguera en las cosas que molan por lo menos por un rato dejo de ver las cosas que no molan tanto y de las que últimamente tengo una colección acojonante.

NI es el sitio, ni me apetece contar las movidas que (me) pueden pasar…y desde luego no me apetece que venga algún listillo de los cojones a leerme en diagonal y tocarme las narices con lo que puedo o no puedo frivolizar.

Acepto todas las críticas. No voy a decir que de palmas con las orejas porque por supuesto me encantaría que no las hubiera, pero no tengo problema cuando alguien me dice: no me ha gustado tu post, no me ha parecido gracioso o creo que te ha quedado lioso y podrías haberlo hecho mejor.

Lo que me jode es la crítica sin tener ni puta idea. Mmmm...ni siquiera es crítica...es un comentario idiota y fuera de lugar...lleno de demagogia y sabihondez.

¿No puedo escribir un post sobre escotes porque hay gente con complejos? ¿Y eso por qué? Es más… ¿acaso tú sabes si yo tengo o he tenido complejos? ¿Tú que sabes de mi vida? Si hay algo que me jode en la vida es un listillo prepotente.

¿Qué coño tiene que ver el cáncer de mama con mi post? ¿Tampoco puedo frivolizar sobre la maternidad porque hay gente que lamentablemente no puede tener hijos? Y déjame adivinar... ¿puedo frivolizar sobre shocks anafilácticos porque mi hija los ha tenido? ¿Y puedo tener humor negro sobre la muerte de un padre porque a mí me ha pasado? ¿Me vas a decir sobre qué o no puedo frivolizar? Basándote ¿en qué? en lo que me conoces….

Y tú ¿qué coño sabes?

Y no es que no aguante las críticas, fliparías con las cosas que aguanto. Si entras y dices: tu post me ha parecido una tontería y sin nada de gracia...diría...pues mira, voy a releerlo porque a lo mejor es verdad. Pero gilipollleces no.

Si solo vas a leer cosas que a ti te parecen políticamente correctas…cómprate el Telva y déjame en paz…que bastantes gililpollas tengo ahora en mi vida como para tener que aguantar soplapolleces demagógicas.

Y sí, estoy hasta los cojones.

Y sí, elegí un mal día para dejar de esnifar pegamento.

Y sí, está muy feo entrar al trapo…pero es que lo que (me) pasa hoy es que estoy muy hasta los cojones…de todo.

miércoles, 5 de octubre de 2011

ESCOTES

Hace más de un año hablé del maravilloso proceso por el que se llega a ser Melones o Fresas.

Cuando las tías descubrimos que tenemos pechos realmente no sabemos muy bien qué hacer con ellos. Para empezar no son nuestros pechos, sino que son pechos sin más. Queremos creer que son como los de las demás y que por tanto hay que usarlos igual.

Error, esas tetas son tuyas, para siempre jamás y por suerte o por desgracia no son como las de las demás.

Lo primero que hay que hacer es conocer lo que te ha tocado. Después hay que saber qué quieres hacer con eso.

¿Quieres hacer lo que todas?

¿Quieres que lo más importante cuando alguien te vea sean tus tetas?

¿Quieres que pasen desapercibidas? O su contrario ¿quieres algo más evidente?

¿Quieres integrarlas con el todo y usarlas solo para sorprender?

Normalmente todas las tías pasan por las tres etapas. Primero quieres hacer lo que hacen todas, luego dices “parece que esto les mola a los tíos y lo mismo son importantes para ligar”, luego querrías poder prescindir de ellas o que fueran más importantes y luego alcanzas la sabiduría suprema y aprendes a integrarlas y utilizarlas sacando el máximo provecho.

Para llegar a la sabiduría suprema el camino es largo y tortuoso, para unas más largo que para otras y hay algunas que se quedan encalladas en cualquier etapa previa y no las sacas de ahí jamás.

En esta categoría de tías encalladas en posiciones digamos poco cómodas, están las que no han aprendido a valorar el tamaño. No todo es tamaño pero es bastante fundamental. Esto es tan obvio que da vergüenza, pero todos los días veo con asombro e incredulidad a tías que desconocen el volumen de lo que tienen delante debajo de sus narices.

Si la naturaleza te ha dotado de dos fabulosos melones, no puedes pretender meterlos en una camiseta/vestido/blusa pensada para acomodar fresas. No digo que sea técnicamente imposible, pero es terriblemente desasosegante ver toda esa masa comprimida en un espacio tan pequeño. Perturba pensar en tanto músculo innecesariamente apretado. Y es inevitable imaginar que si tiene ese volumen apretado...como será cuando lo liberes…una marea de masa córporea un poco desagradable.

Si por el contrario tienes fresitas, querida, no te pongas un escote palabra de honor. Es mono, es estiloso, puede ser elegante...pero no con tus tetas. Con tus tetas lo que uno piensa es: ¿tendrá escarpias en vez de pezones? Porque si no no me explico cómo sujeta eso...mmm… ¿quizás con masilla reparadora?

Siguiendo con el tamaño, el escote mesonera es solo apto para medidas estándar. Una talla excesiva con escote mesonera dan ganas de dejar la cerveza encima…y una talla digamos escurrida dan ganas de jugar a la rana.

Es importante también valorar la separación entre tetas. No es estándar. Hay gente que tiene una autopista de 3 carriles y hay gente que tiene la separación justa para que quepa lo que tiene que caber. Según sea tu canalillo tendrás unas cosas a favor y otras en contra. Con una autopista será una idea atroz ponerte un escote en V pero no tendrás sudor de canalillo. Si por el contrario tus tetas convergen formando un escote molón y con el que probablemente podrías quitarle los huesos a las aceitunas, el escote en v es tu amigo, pero te pasaras de mayo a septiembre notando el sudor corriendo entre ellas. No se puede tener todo.

Otra cuestión fundamental es saber desde donde te salen, ¿son sobaquiles o de costilla? Fundamental que no te asome teta por la sisa de la camiseta...es horrible y completamente innecesario. Si tiene que asomar por alguna parte...que sea por el escote...jamás por el sobaco.

Todos tenemos un escote ideal. Todos sabemos cómo nos molan las tetas. Pero es como todo, te pasas la vida pensando que Gerard es tu hombre ideal y de repente te encuentras suspirando por uno bajito y con poco pelo.

La naturaleza es sabia.

Hay que aprender a jugar con lo que tienes.

Al final mola.

martes, 4 de octubre de 2011

LECTORES SILENCIOSOS

Hay muchísimos blogs y hay muchísimos lectores. Muchísimos.

Leer blogs es una actividad curiosa. No es prensa, no son noticias, no son libros, no son cine, no son música, no son enciclopedias, no son un consultorio, no son comics, no son diarios, no son estudios exhaustivos sobre un tema, no son un álbum de fotos y son todas esas cosas a la vez.

Se llega a leer un blog por caminos inescrutables: porque un amigo ha abierto uno, porque alguien te ha recomendado otro, porque haces una búsqueda en google y te sale como una de las primeras opciones, porque lees un comentario que te llama la atención en algún otro blog y quieres saber quién hay detrás de esa opinión, porque te obsesionas con un tema y rebuscas en la red para saber que se ha escrito sobre ese tema…y se llega saltando de uno a otro en una espiral en la que como no hayas dejado miguitas ( en este caso lo metas en favoritos o en el Reader) está complicado que seas capaz de volver a llegar.

Leer un blog puede provocar muchos efectos: puede hacerte aprender, puede cabrearte hasta el infinito, puedo hacerte reír a carcajadas, puede hacerte sacar tu lista de libros pendientes y apuntar recomendaciones, puede hacerte aprender alguna cosa, puede hacerte pensar y puede provocarte muchísima curiosidad sobre la persona que hay detrás de ese blog.

Se empieza a leer un blog por carambola y se sigue leyendo por curiosidad, interés o por afinidad. Uno empieza con precaución, algo como “Vale si, este post mola...pero a ver el próximo”, por supuesto uno quiere que esa primera impresión que ha tenido con el blog, sea la que sea…sea por que ha aprendido, reido, pensado o lo que sea…sea cierta. A nadie le mola darse cuenta de que se ha equivocado, nos mola confiar en nuestro instinto y nuestras primeras impresiones.

Si la primera impresión se confirma con el tiempo, se establece una especie de vínculo con el blog. Es como cuando te mola una serie y esperas el siguiente capítulo con ansiedad. Eso pasa con los blogs, esperas la siguiente actualización con impaciencia y si no llega lo echas de menos. En casos extremos hay gente que desarrolla un poquito de ansiedad y se desliza por pensamientos del tipo: ¿y si ya no escriben más? ¿Y si lo cierra? ¿Y si le ha pasado algo?

La mayoría de los lectores de blogs jamás comentan. Llegan leen lo que les interesa y se van. O llegan, leen un post y otro y otro y otro, y se suscriben y siguen leyendo durante años y jamás dicen nada.

¿Por qué no se comenta?

Por pereza.

Por que lees desde el Reader y no entras al blog propiamente dicho.

Porque has aprendido mucho leyendo un post sobre pongamos por ejemplo, cáncer, neutrinos o comida para celiacos pero te parece una simpleza total decir: gracias, he aprendido mucho.

Porque ese blog tiene un corral de comentaristas que parecen conocerse todos y te da como corte meterte en medio. Te sientes como si fueras andando por la calle, vieras una fiesta en una casa y decidieras entrar a sumarte al guateque. Da como cosilla y te quedas mirando desde fuera.

Por vergüenza.

Porque esperas que te contesten pero no sabes si te contestaran y prefieres seguir pensando que la posibilidad de que te contesten está ahí, a hacer que se esfume si resulta que el autor del blog te ignora.

Por indecisión..querría decir algo, pero no, mejor no digo nada..total..qué más da, si eso ya mañana. 

Porque no quieres desilusionarte. A lo mejor el autor es genial escribiendo, preparando sus argumentos, hilando un post de lo que sea y sin embargo contestando los comments se revela como un auténtico patán. Volviendo a lo de antes...prefieres confiar en tu instinto y no ponerlo a prueba demasiado.

Porque eres amigo del autor del blog...asi que no comentas. Le mandas un mail.

Porque crees que el autor no lee los comentarios. A nadie le gusta pensar que sus palabras van a ser ignoradas.

Lo bueno de los lectores silenciosos es que en cualquier momento pueden dejar de serlo si de repente encuentran algo que les hace “clic”.

Esta mañana me he levantado con uno de esos “clics" en twitter:
@ REMOCpi : “Llevo AÑOS leyendo tu blog y no sabes que ilusión me ha hecho encontrarte por aquí”

Estas cosas me dejan sin palabras.

Y sí, esto es para dar las gracias a todos los lectores silenciosos que pasan por aqui. 

lunes, 3 de octubre de 2011

PIROPOS

En mi más tierna y muy desagradable adolescencia desarrollé un síndrome de patito feo muy chulo, que como todo el mundo sabe repele cualquier tipo de aproximación piropeadora. Iba por el mundo pensando que mi hermana era la guapa, mi amiga era la mona, fulanita era la exitosa y yo simplemente intentaba mimetizarme con el medio ambiente.

Me ponía ropa grande, llevaba los hombros echados hacia delante, sacaba chepa, me daba vergüenza tener pecho, no me atrevía a llevar sandalias, ni bikini ni camisetas sin mangas. Básicamente quería ser invisible. Lo conseguía regular y a lo más que llegaba era a algo como: Moli coño, pero que borde eres, porque era incapaz de estarme calladita.

El piropo no era para mí.

Un día, sin embargo, con 16 años, salía del colegio e iba caminando por la calle hacia la parada del autobús
- FELPUDÍNNNNNN…ven aquí…

Con mi educación de colegio de monjas y mi pose de patito feo, seguí caminando tan digna como si no hubiera oído nada, mientras mi cabeza procesaba la información a una velocidad vertiginosa: ¿Felpudín? ¿Felpudín? ¿Yo? ¿Por qué? ¿Qué coño quiere decir felpudín?
Flash…la luz se hizo en mi dulce cabecita.

¿ FELPUDÍN?

Madre mía…que fuerte…Eh espera...felpudín...es horrible pero...¡¡ese tio me ha visto!!! ¡¡Me ha visto!! …mmm...a lo mejor no es tan malo...

 
Ahí desperté al misterio del piropo.
El piropo mola. Sé que hay una corriente de pensamiento que lo considera machista o degradante para la mujer o cualquier chorrada por el estilo. En mi opinión eso es ser una completa cretina y tener una visión muy reduccionista de lo que es un piropo.

El piropo lo puede decir un hombre o una mujer y puede ser para un hombre o para una mujer.

Cuando alguien te dice un piropo lo primero que hay que agradecerle es que te haya VISTO. Esto parece una obviedad, pero para apreciar si alguien está guapo, atractivo o sencillamente ha dicho algo interesante que merece un halago hay que haberle visto antes, hay que haberse fijado. Que alguien te VEA es siempre de agradecer.

Segundo, ese alguien se toma la molestia de decirte que le parece que estás guapo, atractivo, elegante, estupendo, sexy o que has estado ocurrente. Es decir, no solo te ve, te percibe y se da cuenta de cómo estas o lo que has hecho...si no que hace el esfuerzo de decírtelo.

No todos los piropos son iguales.

El piropo que hace reír.
Vas por la calle y te llaman felpudín. O unas jovenzuelas te gritan que estás estupendo. Te sorprendes, sonríes y sigues andando pensando que cuando lo cuentes la gente se va a descojonar.

 
El piropo cumplido.
Se dice por compromiso y se percibe como tal. Lo hacemos todos y se hace como reconocimiento al trabajo que te has tomado disfrazándote para bodas, bautizos, comuniones, saraos de empresa que requieran tiros largos y demás fastos. “Qué guapa estás”Qué elegante”, " Qué bien estás con traje y corbata" .Todo el mundo dice lo mismo, todo el mundo miente y todo el mundo se queda encantado. Este piropo resbala...se olvida según se escucha.

 
El piropo “tururú”.
Como tú eres tan listo/ ocurrente/ simpático/ inteligente… ¿podías ayudarme/hacerme/conseguirme?

Tururú.

 
El piropo que cabrea.
Cariño... ¿con qué vestido estoy mejor?
Con los dos estás guapísima.

Obviamente estas guapísima con los dos, por eso te los compraste y por eso te los estás probando. Quieres saber con cual estás mejor y para eso tienen que mirarte...y no vale de reojo. Hay que mirarte y verte.


El piropo inesperado de un conocido.
Este mola mil. Es el que no te esperas, vas con camiseta mugrienta o con el pelo como un gremlin o llegas sudado de correr, o llegas al comedor con la marca de gafas de nadar y un tomate en el calcetín y alguien llega y te dice: Estás guapísima hoy…o Estas estupendo…

Notas tu ego esponjarse...pero antes de dejar que se descontrole...te frenas y dices...eh...que estoy sudado y acalorado, o...pero si tengo el pelo de punta...y entonces miras al otro y se lo ves en la cara...lo dice completamente en serio...y entonces dejas que tu ego se esponje aún más y te quedás más feliz que una perdiz.


El piropo inesperado de un amigo.
Un amigo muy amigo, gente de total confianza, llega un día por sorpresa y te suelta un piropo nada más verte. “Estas todavía más estupenda que la última vez que nos vimos” o “me encanto lo que escribiste” o “me flipó lo que explicaste el otro día”. Estos piropos molan porque ni siquiera tienes que ponerlos en duda...sencillamente sabes que son de verdad y entonces no es que tu ego se esponje que es un efecto de corta duración, es que tu ego crece y crecerá cada vez que lo recuerdes. 

De estos, uno que me hizo mucha ilusión, fue NáN..hace poco..me llamo " chica asterisco"...

El piropo hacia atrás.
“No me atreví a decírtelo el otro día...pero estabas guapísima
No sabía cómo decirte esto pero que sepas que eres el tío más increíble con el que he estado

Este mola mil….porque lo une todo...es inesperado, suena sincero (¿Que sentido tiene decirlo pasada la oportunidad de conseguir algo o habiéndolo conseguido ya? ) y además hace reír…
Eres tonto/a..¿porqué no lo dijiste en su momento?

viernes, 30 de septiembre de 2011

MOLIDOCUMENTALES: EL TREPA

Tengo otro momento didáctico y voy a enseñar las características de un buen trepa.

Los trepas son hienas.

Son la hez en el universo laboral. Son mala gente y además suelen ser idiotas. Lo peor de todo es que nacen y se reproducen porque el resto de la fauna laboral en vez de acabar con ellos según son detectados, los dejan vivir y para cuando quieren acabar con ellos, es demasiado tarde. La única solución es esperar a que se devoren entre ellos.

1.- Los trepas viven en un universo paralelo completamente desconectado de la verdadera realidad profesional en la que se mueven. En ese universo paralelo de luz y color, ellos se ven como unos fuera de serie y a los demás como seres inferiores que no tienen ni puta idea. En la realidad, son unos incompetentes absolutos y los demás sufren por su falta de profesionalidad y lo que es peor por su falta de conocimientos.

2.- Los trepas no aprenden. Jamás. Ni siquiera lo intenta. En ese universo paralelo en el que se mueven, son los poseedores de todos los conocimientos así que ni se plantean que tengan que aprender algo.

3.-Los trepas son unos campeones de la negación. Nunca jamás admitirán que la han cagado. Jamás. Son también unos fuera de serie soltando culpas, si algo sale mal siempre será culpa de los demás, nunca suya. Los seres perfectos e infravalorados jamás tienen la culpa de nada.

4.- Los buenos trepas, pasan una cantidad de tiempo increíble espiando lo que creen que los otros no hacen o hacen mal. Cantidad de tiempo que no dedican a su curro. Por supuesto los buenos trepas escaquean horas del curro a mansalva y creen que nadie se da cuenta, pero eso sí...llevan un control estricto de los horarios de los demás.

5.- Los buenos trepas fingen que saben inglés. Si son trepas fuera de serie lo fingen tan bien que llegan a creérselo y es capaz de los mayores atropellos al idioma de Shakespeare. Esto tiene su parte buena, el resto de la gente puede hacer un Excel con sus cagadas.

6.- Este punto va a crear polémica. La mayoría de los jefes son tíos. Si el trepa es hombre intentará acercarse a él con tácticas de amistad, camaradería, gustos afines por futbol, tías, bebidas alcohólicas, revistas porno o cualquier otra debilidad que perciba en el jefe. Si el trepa es tía, seamos sinceros…la trepa usará el canalillo, el tanga, los morritos y demás malas artes para intentar ascender en la escala profesional. Podría intentar lo del futbol, las cañas y otras cosas comunes...pero volvamos a ser sinceros...la aproximación sexual suele funcionar más rápido y digamos que crea un vínculo más “estrecho”.

7.- Un buen trepa no tiene ningún tipo de respeto por la jerarquía profesional. Por la de los demás, quiero decir. Le parece fabuloso saltarse por encima de su jefe que por supuesto es un inútil mientras que él es una lumbrera, y dar empujones a los puestos de los demás. Un buen trepa sin embargo tiene una conciencia exacerbada sobre la importancia de su puesto. Él es la A, es el número 1, es el punto sobre el que bascula el universo, es el astro rey, el salvador de la humanidad y por supuesto si él no sacara adelante el trabajo la empresa se hundiría.

8.- Un buen trepa quiere teléfono de empresa y un despacho para él solo. Eso es lo que le dará la categoría que él considera que merece. Un buen trepa es un patán.

9.- Un buen trepa sonríe mientras te habla y te pondrá a parir a tu espalda. Jamás hará esto al revés. Un trepa no lo olvidemos es una hiena...y por tanto es cobarde. Por esta misma razón si un trepa da con alguien que le frena en el minuto 1, pondrá mucho cuidado en no intentar pasarle por encima, usará la táctica de rodearle.

10.- Los trepas tienen un radar para detectar a los de su especie. Un buen trepa cuando consigue llegar a donde quiere se convierte digamos en Tita Cervera, esto es sabe cómo ha llegado ahí, sabe con qué malas artes ha conseguido llegar a ser baronesa. Si ve llegar a alguien de su misma especie...lo detectará a la legua. Si son tíos habrá lucha de poder...si son tias...la disputa podrá ser en modo verdulera o lucha de barro. Este punto de batalla entre iguales es contemplado por el resto de la plantilla con agrado...siempre está bien ver como se destruyen las hienas.

Y por último y no por obvio voy a dejar de decirlo, la culpa de que un buen trepa consiga triunfar es del jefe, pero eso es otro tema y va en otro molidocumental.

jueves, 29 de septiembre de 2011

MATERNITY (LXXXII): REUNIÓN DE PADRES (II)

Reunión de padres de la clase de M. Los que no tenéis hijos a lo mejor creéis que “los otros padres” es un conjunto homogéneo de gente y que todos son igual de horrorosos. Pues no, los hay horrorosos, los hay muy horrorosos y luego están los de la clase de M. Observo con espanto que cada año que pasa es peor…no quiero ni pensar cómo vamos a acabar cuando lleguen a bachillerato nuestros churumbeles.

Para empezar, cuando llegas a la clase y te vas a sentar en cualquiera de los minúsculos pupitres, llega una madre y dice: No te sientes ahí que es el sitio de mi hijo.

¿Y qué? ¿Qué más da donde te sientes? ¿Tienes algún tipo de vínculo místico con la silla donde tiene el culo tu hijo 8 horas al día? ¿También duermes en su cama y usas su cuchara?

Yo debo ser la rara, porque todos iban como pollos sin cabeza sacando los libros de los pupitres para ver donde se sentaba su descendencia.

Me quedé de pié, no sé donde se sienta M y además me da igual.

La profesora que por supuesto sabe chino, ha calado a la masa desde el principio. Sabe qué tipo de grupo formamos (Dios mío...escribo formamos y me dan escalofríos...estoy atrapada entre ellos) asi que empieza metiendo caña desde el minuto 1.

- Ya sé porque vuestros hijos hablan tanto y tan alto, son como vosotros.

¿PERDONA???? Me entra un poco de risa…lo ha dicho con tono de la de fama...” La fama cuesta y vais a tener que sudar”

Me giro pensando que alguien más se indignará con el tono y la forma y el contenido del comentario... ¿y que me encuentro?

Risitas. Risitas infantiles...estoy en el instituto...y todos tienen pavo.

Dios mío, esto va a ser un infierno.

- Quería deciros que vuestros hijos hablan mucho, muy alto, no trabajan, se distraen y claro yo así no puedo dar clase así que por favor a ver si habláis con ellos en casa para que se acostumbren a hablar en susurros, se porten bien en clase y dejen trabajar.

¿PERDONA?

¿No eres tú la profesora? ¿Vengo yo a decirte: Dile a M que deje de hacerme sufrir con la comida y que por favor no tarde 45 minutos en comerse un filete y una pera?

Espero que la gente se indigne, pero no. Todos agachan la cabeza y miran por la ventana o a la pared o descubren algo fundamental que mirar en su bolso, o se retuercen el pelo. Exactamente lo que hacen los niños de 8 años o no..los adolescentes carpeteros petagranos.  

Cuando la profesora ya ha cogido el poder y comprueba que su tono amenazante funciona mucho mejor con tíos y tías de 40 palos que con sus descendientes, comenzamos a deslizarnos por una pendiente de infantilismo que solo puede llevar al más espantoso de los ridículos.

- Pero...Mercedes…entonces ¿tienen que traer el estuche o no lo traen?

¿Qué parte de “los niños tienen que traer el estuche todos los días” no has entendido? ¿Qué parte de este mensaje te ha parecido confuso? Y sobre todo...llevan 3 putos años trayendo el estuche de las narices. Me fascina que tu hijo sea capaz de llegar todos los días al colegio viniendo contigo, aunque supongo que es él el que se sabe el camino.

- Pero entonces... ¿van a tener controles?
- Si
- ¿Y tendrán que estudiar?
- Pues sí.
- ¿mucho?
- Pues depende de lo atentos que estén en clase…
- Y ¿como sabemos si se lo saben?

Dios mío...quiero morirme...pienso si M me seguirá queriendo igual si hablo con dirección para que la cambien de letra. Lo valoro y pienso que no puedo pedirle eso a mi primogénita, así que opto por abstraerme del absurdo que me rodea y me pongo a pintar en un panfleto que nos han dado con absurdeces variadas y que por supuesto no necesito que la profesora lea en alto para comprender.

- Entonces el día de gimnasia ¿cuál es?
- Lunes y martes.
- ¿Y vienen de chándal?

No, de lagarterana, no te jode. Necesito concentrarme muchísimo en la isla desierta con palmeras que estoy dibujando porque como no me concentre voy a terminar estallando y soltando por esta boquita que Dios me ha dado todo tipo de exabruptos.

La profesora obviamente nos ha dado por perdidos y entonces empieza a repartir caña: está diciéndonos que tenemos que poner normas en casa, que los niños tienen que acostarse siempre a la misma hora, que tienen que ser responsables, que tienen que comer de todo, que no les dejemos hacer lo que les de la gana….

Me jode hasta el infinito ir a una reunión de padres y que me traten como si tuviera no ya 8 años (eso es un insulto para los niños de 8 años) sino como si tuviera el cerebro de adorno…y además hubiera conseguido que mi hija llegara a los 8 años sin ser una delincuente por un misterio de la naturaleza.

Me noto hervir la sangre...sujeto el lápiz más fuerte y respiro hondo…La profesora me está sacando de quicio…pero creo que lo tengo controlado. Puedo con ello, respiro hondo…que se termine, que se termine…

Los demás padres agachan la cabeza…dicen que sí, que si…

La profesora da por finalizada la reunión.

¿Alguna pregunta?

Cojo el bolso...no quiero oírlo, no quiero oírlo….voy hacia la puerta…

Mercedes…es que a ver si puedes hacer algo porque a mi niño no le gustan los canelones de espinacas del comedor.

Salgo corriendo al pasillo…

O les pega la profesora o les pego yo.

miércoles, 28 de septiembre de 2011

ESCÉPTICOS: EL PROGRAMA.

Hoy voy a probar un nuevo estilo, la crítica constructiva. Si, sé que no os lo creéis pero lo voy a intentar en serio. Y que conste que me arriesgo mucho porque probablemente me linchen por esta crítica.

¿Qué es “Escépticos”?

Escépticos son, según el DRAE aquellos “que no creen o afectan no creer”.

Escépticos es también un programa de Etb que se preestreno en mayo y que se estrenó con gran fanfarria mediática e internetera el lunes pasado.

¿Por qué lo he visto?

Twitter estaba lleno de referencias a este programa. Algunos de los blogs que sigo,  hacían grandes alabanzas del programa y animaban a verlo. Lo presentaban como un formato novedoso de televisión, un programa divulgativo nuevo y rompedor.

La curiosidad me pudo, brujulee por la red, llegue al blog del programa y me encontré con unos posters superchulos y con esta presentación del programa.

“Nuestro objetivo es analizar (y desmontar) las grandes falacias acientíficas de nuestro tiempo. Buscamos aunar ciencia y entretenimiento, siempre desde el rigor, con una forma moderna y arriesgada. Pretendemos hacer un programa de televisión para toda la familia que fomente el pensamiento crítico desde la convicción de que la cultura hace más libre a la sociedad

Parecía buena idea, así que busqué un hueco y lo vi. El primer capítulo se titulaba “ ¿ a ti te funciona?” y trataba sobre las llamadas terapias alternativas rarunas que están poniéndose de moda enfrentándose a la medicina tradicional, cosas como la aromaterapia, el reiki, la acupuntura, las flores de Bach, la limpieza de colón como proceso para eliminar toxinas en tu organismo que te envenenan y ese tipo de cosas.

¿Por qué no me ha gustado? O mejor...mi crítica constructiva.

Para empezar a nivel de audiencia fue un desastre para ETB2.

Teleberri, el programa anterior en parrilla hizo un 14,2 % y tuvo 99.000 espectadores.

Escépticos, hizo un 5,0 % y 44.000 espectadores. Una caída espectacular. A pesar de la campaña de marketing que ha tenido a todos los niveles y de ir sin publicidad y de llegar con el colchón de audiencia que tiene el informativo, no fue capaz de mantenerlo y lo que es peor, perdió 9 puntos que es muchísimo para esa hora, el prime time, que es la hora de mayor consumo televisivo. Quiero decir que perder 9 puntos a las 12 de la noche cuando hay poca gente viendo la tele no es “mucha gente” cuantitativamente hablando. 9 puntos y 55.000 espectadores es muchísimo.

Aconcagua, que es el programa que le siguió en parrilla hizo un 7,9 %. Subió la audiencia casi 3 puntos, a pesar de empezar desde el 5 % que le había dejado Escépticos. Probablemente Aconcagua a continuación del informativo hubiera aguantado mejor el tirón. Estos tuvieron 54.000 espectadores. Eso es gente que al empezar Escépticos se piró y volvió luego...casi 10.000 personas...muchisimas también.

El mayor problema que le veo, sin embargo, no es la pérdida de audiencia. Eso es solo anecdótico aunque supongo que a los directivos de Etb no les parecerá tan anecdótico. Han perdido publicidad por apostar por un producto que no ha funcionado, pero en fin, .a mí eso me da igual, dejo este dato de audiencia porque tiene su importancia en mi crítica constructiva.

Todos sabemos que la audiencia suele tener un criterio raruno pero eso no quiere decir que el programa no tenga varios problemas a mi modo de ver.

La principal razón para que no me haya convencido es que no es lo que decía en la presentación. A lo mejor la culpa es mía por sentarme a ver la tele con grandes expectativas, (parezco nueva). Esperaba ver un programa de divulgación científica medianamente entretenido, esperaba ver algo que al terminar me hubiera hecho aprender algo. Quiero decir que por ejemplo, yo no creo en las flores de Bach ni en el reiki, veo el programa... ¿y qué he aprendido o que impresión me llevo? Ah sí, vale...esto no parece funcionar, suena a cuento chino y no hay estudios que prueben su eficacia. ¿Y? ¿He aprendido algo? No, no he aprendido nada. A lo mejor es que yo no era el público objetivo del programa, pero entonces, tengo una duda.

¿A quién se dirige? ¿Es para listos? ¿Listos científicos que ya vienen con la lección aprendida?

Si es para listos que ya son escépticos... ¿qué lleva a esa gente a ver este programa? ¿Lo vas a ver para reafirmarte en lo que ya sabes? ¿Para burlarte de la gente que si cree en esas cosas? Sinceramente me ha parecido un ejercicio fácil de burla, sacas a una tía que dice que una bañera no hay gravedad y que el agua en las flores tiene poderes y ya lo tienes todo hecho: humor a cascoporro. Los listos se descojonan, mandan tuits burlándose y ya está.

¿Es tu público la gente que cree en esos remedios? No creo, porque te has dedicado a burlarte, y no les has dado ni un solo dato científico. Esa gente ha apagado la tele y no va a volver a verte.

¿Es tu público la audiencia en general? Eso es lo que dicen los creadores del programa, “un programa para toda la familia”. Vale, pues entonces has fracasado, 55.000 personas se han pirado, no les has interesado.

Decidimos entonces que el público objetivo son los listos escépticos con twitter y blogs, muy bien. Es una opción. El problema es que esos son (somos) muy pocos. Creemos que somos muchos porque twitter es una caja de resonancia que crea una burbuja a tu alrededor y se nos olvida que hay una masa muchísimo más grande de gente aparte, gente que no es tonta y que probablemente si te dedicaras a enseñarles algo en vez de a burlarte podrían aprender algo.

Le veo un problema de contenido. Seamos serios, divulgar divulgar no divulga nada. Sacar a unos cuantos iluminados diciendo que creen en los chakras, en las flores, en que si te ponen las manos de no sé qué manera reactivan la energía de tus células o que dicen que tienes cáncer de hígado porque eres colérico y cáncer de garganta porque te callas mucho (estoy a salvo de ese cáncer…) no es divulgar ciencia, ni conocimiento ni nada. Es hacer burla fácil. Y tampoco es novedoso, en “Salvados” d Jordi Évole hacen algo parecido.

Ser entretenido cuando se va “contra” algo es muy fácil. Es un recurso que funciona siempre, y lo digo yo que tiro mucho de él, pero sinceramente esperaba más del programa.

Lo difícil es hacer este mismo programa sin sacar a la chalada de las flores de bach, ni al de la acupuntura, ni al de la limpieza de colón, sino sacando a médicos, terapeutas y demás contando como la medicina “cura”, como no es una cosa de magia, Enseña como la medicina no es una estrategia maligna de las farmacéuticas para hacerse con el control del mundo. Muestra como la medicina es una ciencia estudiada, comprobada y una suma de trabajos y esfuerzos a lo largo del tiempo. Cuenta como “cura” la medicina, eso es lo que tienes que hacer para transmitir ciencia e información. Y cuéntalo bien, de manera entretenida, dinámica y didáctica. Eso es muy difícil.

A nivel de contenido es un batiburrillo de conceptos que no aporta nada. Y me parece mal que se mezclen cosas que no tiene nada que ver. ” El cura, cura culito de rana” que se les dice a los niños no es un remedio alternativo, no se puede poner al nivel de oler romero para equilibrar mis chakras. Si tú te das un golpe en el codo y te haces daño, instintivamente te lo frotas y eso te alivia porque el estímulo “bueno” anula en parte el “daño”… ¿a qué viene meterlo en las terapias alternativas? No tiene nada que ver, es puro instinto...te haces daño en alguna parte o te duele algo y te llevas la mano, te tocas…. ¿qué coño tiene que ver con lo que están hablando?

No todo son pegas, desde un punto de vista constructivo le veo algunas cosas buenas. Cosas buenas que podrían haber sido cojonudas pero que lamentablemente por exceso o defecto se han quedado solo en buenas ideas.

Formalmente el grafismo es cojonudo aunque creo que un exceso de conciencia de lo bueno que es, ha hecho que se abuse de él. Más que un complemento del contenido se acaba convirtiendo en parte del contenido molestando al final de los 37 minutos, acabas saturado. La cabecera mola mucho y tiene gancho, eso me ha gustado.

Televisivamente hablando el producto es caro. La producción les ha debido salir por una pasta. La gente cree que un programa de televisión es ir con tu camarita, grabar, montar y listo…y sí, eso puede ser un programa de televisión pero entonces no se ve como “Escépticos”. Escépticos es un producto que cuesta pasta, un producto con mucha calidad formal. El recurso a meter imágenes de películas está muy bien, es ameno y original, pero una vez más creo que se abusa de él y además se hace un uso tendencioso de las imágenes...mmm...más que tendencioso que hasta cierto punto me puede parecer bien, un uso facilón. ¿Sacar a Groucho Marx haciendo de médico mientras hablas de la eficacia de las terapias no es demasiado fácil?

El presentador, es tremendamente tendencioso, y lo que es peor es tendencioso intentando no parecerlo, que es lo peor que se puede ser. Preguntar a alguien...” ¿crees que son peligrosas las medicinas alternativas? es como preguntarle a tu hijo ¿a que tú quieres más a mamá? Siempre queda más imparcial preguntar ¿a quién quieres más? O en este caso ¿qué opinas de?..Pero claro…con estas preguntas te arriesgas con la respuesta, “quiero más a papá” o “puede que tengan una función…”

La música mola mucho y está muy bien escogida pero es completamente innecesaria en este tipo de producto si pretendes hacer algo serio. Cuando eres más consciente de la música que de lo que te quieren contar, algo falla.

El monólogo en inglés sobre medicina alternativa, es buenísimo, yo lo había visto ya…pero ¿no te pones al mismo nivel de lo que criticas si pones un monólogo de humor?

Conclusiones constructivas.

Escépticos es una muy buena idea de partida con un desarrollo decepcionante. A mí, sinceramente me hubiera molado más ver algo en lo que al terminar hubiera dicho, “oh...mira…he aprendido porqué cuando me tomo un ibuprofeno porque tengo una holgura craneal de mil pares de narices y además me duele una mano, el medicamento sabe que prefiero que me cure la resaca y funciona”…eso hubiera molado muchísimo más que descubrir que hay gente que cree que en una bañera no hay gravedad.

Aún así, no pierdo las esperanzas…veré el de la semana que viene, a ver si consigo aprender algo.

En este enlace se puede ver el programa entero.

Y si, me ha quedado muy largo, pero es que le he cogido el gusto.