jueves, 19 de agosto de 2021

Dieciséis años a distancia


«Eso es un problema de Clara del futuro. Clara del presente no tiene porqué pensar en ello» Esta ha sido tu filosofía de vida este año y, con ella, has conseguido algo impensable, que yo deje de preocuparme con anticipación. He aprendido de ti a pensar «este es un problema de Ana del futuro, ahora mismo no tengo que pensarlo». 

Tus quince años han sido una espera muy larga, un paréntesis entre el confinamiento y la gran aventura de tu vida que empieza el próximo martes. «He preparado un power point para convenceros de mandarme a Estados Unidos» Se me cayó la mandíbula al suelo. Me sorprende el difícil equilibrio que mantienes entre dormir trece horas y una siesta y tu constancia y dedicación a las cosas que te interesan: el baile, la guitarra, los anime, los manga, las curiosidades históricas, las películas de "girar la cabeza" y tu próximo curso en Puyallup.

«¿Estás escribiendo mi post?» No sé muy bien que escribir este año. Si pienso en estos doce meses la imagen que me viene a la cabeza eres tú, con tu camiseta negra enorme en la que pone RE, paseando por casa y lamentándote porque «mamá, ¿te das cuenta de que porque hace veinte años papá y tú os enamorasteis, yo ahora tengo que ir al colegio? No me parece justo». Algunas veces tienes unos argumentos que, pueden ser estúpidos, pero son tan inesperados, tan oblicuos, tan tú que me dejan fuera de juego. Otras veces haces preguntas para las que no tengo respuesta «Mamá, ¿cual es tu mayor virtud?» y trato de ganar tiempo devolviéndotelas. «¿Y la tuya?». «No sé, tengo quince años, no tengo todavía ninguna destacada». Pelota, set y partido. 

Dentro de cinco días te vas a Puyallup y vamos a pasar tus dieciséis años separadas por ocho mil quinientos treinta y cinco kilómetros. La Ana de hace unos meses estaría preocupada por cómo lo vamos (voy) a llevar, por si te pasa algo, por si estarás bien, Ana de hace cinco meses estaría agonizando pensando en todo lo que te va a echar de menos, pensando en si tú la vas a echar de menos... pero la Ana del presente está nerviosa y deseando que llegues allí y empieces tu gran sueño. Ya me preocuparé de todo lo demás cuando llegue, si es que llega. 

Tengo ganas de saber qué nos contarán nuestros yos  del futuro, de 2022, sobre tus dieciséis años en la tierra de Kurt Kobain, de Pearl Jam y de la montaña más alta de Estados Unidos (quitando Alaska). 

Feliz cumpleaños, mi princesa pequeña. Empieza tu gran año. 

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Muchas felicidades a la princesa pequeña y enhorabuena por esa aventura. (Siempre se me olvida lo ceba que cumple de C, que hizo 15 el sábado.)

Anijol

Mdemariaes dijo...

Ya os lo he comentado en IG, pero qué estupendo! Desde el 89 al 92, todos los veranos, pasaba un mes en EEUU: LA, Seattle (Olympia), Boston, y el último año, fueron 3 meses, dos en Chicago (Oak Park) y uno en Atlanta.
Las primeras estancias en "dorms", y ya después en "homestay". Eso sí, era algo mayor que Clara, y pudimos, incluso, alquilar coche.
Mi acento es americano, y cuando veo series, y esto no todo el mundo lo entiende, el acento americano pienso que es mucho más sencillo.
Cómo me esforzaba cada curso de Universidad, para poder tener esos veranos en USA!!
Como siempre les digo a mis sobrinos y alumnos, creo que el mejor regalo que mis padres les han hecho, a sus 7 hijos, es el inglés, el darnos esa oportunidad.
Disfruta mucho! Que vaya, si puede, a Canadá, que parecen "hermanos", pero son más bien, "primos lejanos"...

Pablo dijo...

¡Felicidades Claritis!
¡y qué guapa estás!

Recomenzar dijo...

Un blog interesante que he encontrado de casualidad
te dejo mis huellas en caso que quieras
conocer mis letras
Un abrazo desde el silencio del mar en Miami

Eva Mª. Serra dijo...

Qué bonitas las dos!!! Mucha luz y energía para este nuevo trayecto (que conste que no soy de Unión Fenosa jajajaja)

Lo+ dijo...

que guay!!!! muchas felicidades!!! mucha suerte en la aventura!!