sábado, 21 de junio de 2014

La gran partida.

“La creatividad no es un talento, es una manera de trabajar”

Esta frase del genio de los Monty Python expresa a la perfección una idea que hemos olvidado en nuestros días.

Vivimos en una época en que las jóvenes promesas, en cualquier campo, son cada vez más jóvenes. Valoramos el éxito, la originalidad, la idea genial como si fuera una chispa de suerte, un don innato y algo que hay que conseguir rápido.  La rapidez en la consecución de un éxito se considera un valor añadido.

Cada vez creemos menos en el trabajo como el camino que hay que recorrer para conseguir ser bueno en cualquier disciplina. Hemos dejado de valorar la perseverancia, la paciencia y la constancia como virtudes necesarias para lograr cualquier meta.

No siempre fue así. No siempre es así aunque no nos hayamos parado a pensarlo.

Si pensamos en Leonardo da Vinci, decimos que fue un genio. Alguien dotado de una creatividad apabullante, capaz de dibujar, crear, inventar y escribir sobre una variedad de temas increíble y poseedor de un talento innato sólo al alcance de unos poco. Leonardo, un hombre del Renacimiento es una frase típica.

Pocos saben sin embargo que Leonardo da Vinci no consiguió “triunfar” hasta los 46 años, una edad que ahora mismo se nos antoja tardía.

El camino para llegar a ser bueno en algo está lleno de años en los cuales uno no es bueno en ese algo que está intentando conseguir. Se tardan años en conseguir dominar un instrumento, años en entender la física cuántica y ser capaz de ir más allá de lo aprendido, años en aprender a escribir y quién sabe si publicar un libro o triunfar con un blog.

Esos años de aprendizaje, de lenta espera, de acumular experiencias, ideas y conocimiento y de crecer son los que forman el grueso de “La gran partida” y en ellos reside la clave para triunfar (y no hablo de dinero ni popularidad).

A través de las historias de Leonardo da Vinci, John Coltrane, Marie Curie, Stephen King, Tiger Woods, Michael Faraday y muchos otros, Adam Westbrook ha realizado dos estupendos videoensayos en los que explica este concepto y nos hace reflexionar sobre cómo hemos perdido la capacidad de valorar el camino que lleva hacia la maestría en cualquier faceta de la actividad humana.


Tienen subtítulos en castellano pinchando en la pestaña inferior.

Publicado en Pisandocharcos.

17 comentarios:

Michelle Grey dijo...

Triunfar no es sinónimo de ser bueno en algo. Puedes ser bueno y no triunfar. Qué es triunfar? Que reconozcan tu trabajo? Tanto importan los demás? Leonardo da Vinci ya era un genio antes de los 46 años.
También hay que tener en cuenta la superioridad intelectual. Hay personas talentosas que crean su talento, es decir, lo trabajan, como tú bien dices. Otros sí tienen una facilidad innata. No nacen con el talento pero les es más fácil desarrollarlo. Así como otra persona puede trabajárselo muchísimo y no lograr ser bueno.

Noly dijo...

Llevo casi 8 años siendo atodidacta en un campo que nunca imagine que tocaría. Es ahora cuando empiezo a sentir que estoy haciendo bien las cosas, pero siempre digo lo mismo. Esto es un iceberg y yo solo conozco la mitad de lo que flota. No se si llegare tarde o temprano pero disfrutarlo lo estoy disfrutando mucho.

Nisi dijo...

Me encanta la frase y el post, lo comparto totalmente.

NáN dijo...

Quitando las consecuencias de ese brillante apunte sobre los Mad Men, que han distorsionado lo que sucedía hasta ahora, los trabajos que requieren "talento" exigen una preparación rigurosa y mucha perseverancia.

Los científicos, por ejemplo, es habitual que consigan una estabilidad poco antes o poco después de los 40 años. Las tesis de ciencias suelen ser largas, entre 5 y 8 años a tiempo completo, así que se doctoran muy cerca de los 30 años. Luego vienen uno o dos años de balbuceos, una imprescindible estancia en el extranjero, de donde vuelven en dos años o se quedan mucho más.

Son perseverantes y consideran que triunfar es llegar al punto en el que sus directores de investigación confíen en ellos y les permitan seguir la línea de investigación que ellos quieren.

Pero no solo son persevarantes, sino que cuidan la memoria, la comunicación inter pares y otras capacidades cerebrales.

Ya hemos llegado a los 40 años, cuando sus capacidades funcionan ya a ritmo de crucero.

Esto lo sé porque en la página web en la que colaboro he conocido a muchos de ellos, desde que tenían 25 años, hasta ahora que están cerca de los 40. Y podría decir lo mismo de los escritores, por mis lecturas. Solo en la poesía se dan los milagros de que los jóvenes, como Rimabud o Cernuda, "triunfen.

Luxindex dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Unknown dijo...

Totalmente de acuerdo! Por eso me ponen bastante nerviosa las pelis para nignos donde basta querer algo mucho para conseguirlo, superando incluso a los profesionales en la materia (véase Planes, o la del caracol que quiere correr carreras) Yo creo que puedes conseguir lo que te propongas, por supuesto! pero a base de mucho trabajo y constancia (y no dejándote desanimar por los fracasos acumulados por el camino intentandolo)

Ire dijo...

No commets, Lux. O sea, que no lo veo así. Pienso que todos tenemos creatividad aunque no lo creamos. Pero sí hay gente más original que otra, y la verdad, a veces la originalidad va en su contra porque no se les entiende, cuando ellos estan simplemente siendo ellos mismos, sin imposturas. Luego, los tics de genio incomprendido vienen después, pero Dalí ya les puso fácil impostar un personaje.
Nán, de acuerdo. Más de 15 años para hacer al científico, y los políticos no entienden un futuro más allá de los 4 años. Aunque me escama, de verdad, que tengas que entrar en el recorrido de las unis anglosajonas para ser alguien en temas relacionados con ciencias naturales. Y si no, busca en el curriculum de los que publican en las grandes revistas a uno, uno sólo, que no haya pasado por una uni anglo. Me escama mucho.
Me ha encantado el post, la frase, los videos y las traducciones. Mil gracias, Mo. Últimamente se oye mucho esta última frase, a que sí?. En fin, a ver si me lo tatúo para recordarlo en las horas bajas (lo de que hacer algo de interés requiere mucho trabajo).

Luxindex dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Ire dijo...

Lux, eso no me lo dices en una calle oscura.
A ver, que sí, artistazos hay pocos. Vale, y vale lo del ni son todos los que están ni están todos los que son. Pero los que lo son no tienen que ser ese ego- todo que describes. Y creativos, que no hace faltan que sean del supernivel, los hay muchos un poco fastidiados porque no les han entendido demasiado bien en sus primeras etapas. Amiguito eso sin ser especialmente creativa lo he conocido muy cerca, con mi informito en que me explicaban lo tonta que soy, y sí chico, duele y te pasas muchos años lamiéndote las heridas, así que por qué ellos no tienen el mismo derecho que yo a curarse las penas. A eso me refería. Los escandinavos que me lean, que me inviten a una caña, bebo poquito y adorno mucho.

Tita dijo...

Donde no hay mata, no hay patata.

Lo que la naturaleza no da, Salamanca no presta.

La creatividad correlaciona con la inteligencia, no así la inteligencia con la creatividad. Esto quiere decir que alguien inteligente no tiene por qué necesariamente ser creativo pero lo contrario sí es imprescindible: alguien muy creativo sí posee una alta inteligencia.

Por supuesto sin trabajo, esfuerzo y perfeccionamiento nada se desarrolla al 100%. Pero como dije al principio: donde no hay mata, no hay patata.

eu93 dijo...

Gracias, muchas veces pienso que ya es tarde, pero no, es el tiempo para tener paciencia, perseverancia y dedicar tiempo al estudio.

Un beso enorme y un fuerte abrazo,

C. Albers dijo...

La física cuántica no parece muy difícil de entender, de hecho algunos gurús la entienden perfectamente y se permiten aplicarla a cualquier cosa: energía cuántica, medicina cuántica, modifica tu realidad con la física cuántica, etc.

Eso si que es creatividad.

Anónimo dijo...

Hola!!
Sé que puede parecer un poco acosador, pero acabo de leer tu post sobre tu separación y sólo quería decirte una cosa: me encanta la forma que tienes de escribirlo (y por tanto de verlo). Has sido clara, sin rodeos ni palabras para ocultar o suavizar la situación pero sin embargo, con un cariño y respeto que se entrelee en todo el texto.
Mucho animo de corazón.

HombreRevenido dijo...

Fantástica la introducción y, por supuesto, fantásticos los vídeos.
Muy inspiradores.
Gracias por compartirlo.

Dolors dijo...

Gracias por la traducción. Un post magnífico


Sobrevolando los 40 dijo...

Me ha gustado mucho este post. Y me da esperanza pensar que todavía me quedan tres años para triunfar como Leonardo. Besotes y gracias.

Dani Torregrosa dijo...

Interesante material :-)