miércoles, 16 de mayo de 2012

UNA DOCENA DE COSAS QUE NO MOLAN DE TU SMARTPHONE



Todos tenemos un Smartphone o teléfono inteligente. Un nombre ridículo, cursi y completamente idiota y que además no se corresponde con lo que nuestro teléfono es para nosotros.


Seamos sinceros, amamos nuestros móviles. No seríamos nadie sin ellos ahora mismo. Sales de casa y te palpas los bolsillos, o rebuscas en el bolso compulsivamente pensando..¡¡el móvil!!..¿ Me he dejado el móvil? Es prácticamente imposible, pero aún así hiperventilas hasta que lo notas en el bolsillo o en el fondo del bolso. A estas alturas del 2012 hay más posibilidades de que salgas de casa sin ropa interior que sin tu móvil.

Nuestros móviles son estupendos, fabulosos, hacen cosas que jamás pensamos que podría hacer un teléfono y otras muchas cosas que ni siquiera sabemos que pueden hacer. Somos la generación de la cabina y del teléfono de rosca. Recordemos que el teléfono de góndola en casa de nuestro amigo Pérez nos parecía sofisticado…y míranos ahora..tenemos un iphone, un Samsung o un megateléfono chupi. Somos los más.

Molan mucho y permiten por ejemplo leer este post absurdo en cualquier sitio, así que solo por eso merecerían la pena, pero también tienen un montón de cosas que no molan nada y además nos complican la vida.


1.La batería “coitus interruptus”


Tu antiguo microteléfono Nokia, que no olvidemos, hace 5 años te parecía guay porque no ocupaba nada en el bolsillo, tenía una batería que duraba tanto como la del gato que mueve el brazo en el chino de tu barrio. Tenía tanta batería que hasta te olvidabas de dónde habías guardado el cargador. Tu supersmartphone lamentablemente no te sigue el ritmo como tu viejo Nokia, se agota enseguida, casi siempre en el momento más inoportuno..”un poco más..un poco más….ohhhh”. Te deja a medias.


2. El “frustrante” teclado táctil


El teclado táctil es posiblemente el peor invento que ha habido nunca. Teníamos teclados pequeños y molones y nos los han quitado por unos bonitos, molones, chulos pero que no sirven para lo que se supone que tienen que servir: Escribir. No solo es que no sirvan, es que es una tortura atroz el mero hecho de intentarlo. Son un coñazo y además te obligan a ir releyendo lo que escribes porque ponen lo que le sale de los huevos. Al final optas por no escribir o por encomendarte a que la capacidad interpretativa del “tactilismo” de tu interlocutor sea comparable a la tuya.


3. La pérdida de conexión


Esto es tan espantoso como cuando vas al baño con un apretón espectacular, te sientas, triunfas y después descubres que no hay papel higiénico. ¿Qué te queda? Hacer algo ridículo, cómo salir con los pantalones sin subir, gritar para que alguien te lo tire por encima de la puerta o mirar alrededor buscando un sustituto. Con la conexión es igual..escribes algo..le das a enviar y no hay conexión 3G..empiezas a hacer un baile de chamán agitando el móvil, apagas enciendes, sacas la batería, la tarjeta…y te desesperas.


4. La capacidad para conectarse cuando no quieres


Estas de excursión por Pirineos, bonito paisaje, bonitas montañas. Tu móvil en el bolsillo. Al mes siguiente descubres que lo que creías que había sido un día de campo, natural y barato te ha salido por un pico porque casualmente cruzaste la frontera y tu móvil inteligente entró en conexión 3G en Francia.


5. Las 1001 aplicaciones.


Por fin tienes un Smartphone. Lo quieres todo, el Instagram, el Evernote, el dropbox, las catorce aplicaciones para ir a correr, la de las recetas, el apalabrados, facebook, twitter, la que te controla la regla, todas. Acumulas en pleno ataque de Diogenismo, para descubrir que organizar las aplicaciones da la misma pereza o más que colocar fotos en un álbum. De vez en cuando te da un ataque y optas por borrar sin criterio, para al cabo de unos días decir: me voy a instalar algunas, pero controlando. Ja. Es la espiral del Diogenismo aplicativo.


6. Inseguridad en la elección.


Elegir el modelo de móvil es más complicado que elegir casa. No se trata de me gusta o no me gusta. Es más allá ¿Cual es el mejor? Hordas de adictos al iphone braman sobre ti…¡¡¡ si te vas a comprar un móvil nuevo..cómprate un iphoneeee!!!...hordas de enemigos de Apple gritan..¡¡mucho mejor un Samsung!! O un Htc!!!.. No sabes que hacer..todos parecen iguales..todos los que los tienen dicen que los suyos son mejores. Al final, te tapas la nariz, saltas y esperas acertar.


7. Crean frustración


Oh que bien..estoy en la sala de espera de algún sitio absurdo y puedo leer mi blog favorito. Como mola mi teléfono, voy a comentar algo en esta entrada tan chula. Escribes con el puto teclado táctil, le das a enviar….y sale algo como “ la aplicación ha causado error”. Ahora estás aburrido y frustrado porque sin duda ese comentario era el mejor que habías escrito nunca. Lo mismo si quieres usar google maps porque estás perdido en medio de un polígono. Metes la dirección y te quedas mirando la barra de navegación, hasta que te das cuenta de que se te ha hecho de noche y hubiera encontrado más rápido el camino echando miguitas.


8. Los nombres


¿ Por qué no le ponen nombres chulos a los teléfonos? Iphone, Galaxy, HTC…son feos..y además suelen llevar una ristra de números que perturban muchísimo. ¿ tienes un iphone? ¡ Cual? ¿ El 3 o el 4 con G? ¿ EL galaxy 3000 o el I1204? No lo seeeeeee…es mi teléfono y lo quiero igual.


9. Hay que aprender jerga.


Tu viejo nokia tenia números y letritas y un botón de llamar y otro de colgar. Te costó tela saber que para que saliera la c, había que darle 3 veces al botón, pero al final tenías una velocidad de tecleo de mecanógrafa de Mad Men. Eso, con tu nuevo teléfono no sirve de nada..ahora tienes que aprender cosas como “Modo de red” “3G”, “Modo vuelo” “ Itinerancia de datos” “ Almacenamiento masivo” “ Samsug Kies”….todo muy del espacio y todo muy de “mírame y no me toques que me jodo”.

10. El ridículo gesto de acariciar la pantalla.


Nos hemos acostumbrado, pero pensado fríamente parecemos monos amaestrados cuando miramos una pantalla y la acariciamos con dulzura o cuando hacemos una grácil pinza con el índice y el pulgar para ampliar algo. ¿Dónde ha quedado el atractivo del vigoroso tecleo? Hombres del mundo..acariciar vuestros smartphones..no es sexy..

11. Son adictivos.


Para superar un problema, lo primero es verbalizarlo. “ Me llamo Molinos y soy adicta a mi móvil”. Lo siguiente es pensar en cómo solucionarlo….pero eso ya para otro día. Vayamos poco a poco.

12. ¿He comentado lo de la batería?


Tienes un Smartphone última generación. Miras tu bolso y ves el cargador de corriente, el cargador de coche y el cable para cargarlo conectado al pcny piensas “ Creo que si llevara el teléfono fijo de casa, llevaría menos cable”.

Todas estas cosas hacen que nuestros móviles no sean perfectos…pero seamos sinceros, ¿ A quién le importa? Los queremos así.


Publicado originalmente en Unadocenade

20 comentarios:

Maria dijo...

Yo sigo con mi viejo nokia. Es más, hace poco he comprado un nuevo viejo nokia. Y...¡tan feliz!

Unknown dijo...

Vale, lo reconozco...Mi nombre es estanjana y soy adicta a mi movil, por muchos fallos que tenga, si hasta estando en mi cama, puedo ver qué tiempo hará mañana, ver algun blog de moda para inspirarme, comprarme un vestido acorde a ello, unos complementos, programarme qué voy a hacer y solo faltaría que pudiera trabajar desde la cama con el móvil, tiempo al tiempo, serermos robots?

Boti dijo...

Coincido contigo en que el teclado táctil es un invento del demonio, pero claro, es que los que llevan teclado físico no son molones...
Y ahora, aunque no viene a cuento, pero si no lo digo voy a reventar: el domingo estuve en Sevilla viendo a Bruce por primera vez!!!! Por cierto, que he leído en otro post los comentarios sobre su mujer, y no, no se la ha traído, se la ha dejado con los niños, o al menos eso dijo, así que estad tranquilos.

Hablo lo que siento... dijo...

Cuanta razón amigo... cuanta razón!! Si es que los Smatfhone son el futuro... pero un futuro que va a durar menos de 24 horas, que es lo que dura las baterías de estos teléfonos!!

tengo yo algo escrito al respecto! jeje

Un abrazo
destroy114

ro dijo...

Soy adicta a mi móvil. Lo reconozco, aún con todos sus defectos.

Besos.

Ana María dijo...

Yo tengo viejo móvil. El próximo creo que será el smartphone, aunque no me haga muy feliz.

Besos!

Sol Elarien dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Hans dijo...

En mi nuevo estado de jodienda laboral se empeñaron en que llevase una blackberry, que no sé si es suficientemente smart, pero es muy ineficientemente phone, dado que pedí una de esas supuestamente guays con teclado táctil y físico y nada es demasiado cómodo.
Mi opinión en tanto terminales: son una puta mierda abyecta, creación del hijo de una perra sarnosa que muerto haría de este mundo un lugar mejor.
Y como teléfono son una braga con tirantes.
Echo en falta mi nokia, con su sonido de r2d2 para los sms's y la melodía de 'el inspector' para las llamadas.
Odio el permanente bombardeo de 'blinks', 'bips' y 'chundachundachuún'.
Basura.

Sol Elarien dijo...

No tengo un smartphone y odio los móviles. Eso de que todo el mundo esté más pendiente de su dichoso telefonito que de la conversación con la persona que tiene delante, me enciende. A los que contestan una llamada en la consulta, les indico amablemente que se salgan a la sala de espera a hablar. Tengo un móvil, en caso de emergencia, porque tengo que conducir a diario una pechá de kilómetros y mi coche tiene 15 añitos. Eso sí, el aparato tiene más de 10 años y va siempre apagado, dentro del bolso. El día de guardia, el hospital, amablemente, se encarga de proporcionarme uno que se convierte en parte integrante de mi anatomía durante esas horas (y que me extirpo feliz al día siguiente).
http://anoldgrumpandabeautifulperson.blogspot.com.es/2011/12/telefono.html

AROAMD dijo...

A mí, sin duda, la visión de la 10 en el metro (todos acariciando como lelos unos cachos de plástico) me perturba muchíiiiisimo.
Besos. PD: Caramelo de comino. Empacho.

Bettie-Page dijo...

Totalmente de acuerdo con Niagara.

No me ha gustado el inicio del post..no todo el mundo tiene un smartphone y muchos nos negamos a usarlos. Odio los moviles y solo lo tengo para caso de emergencia, me parece absurda la gente que esta todo el dia con el telefonito de marras, con sus 50 mil aplicaciones que parece que no pueden vivir sin ellas...en fin, con decirte que hace poco estuve en Nueva York y conforme llegue,apague el movil y no salio del cajon en una semana jejejejeje

Noly dijo...

me hablas en chino ... sigo con mi viejo movil. Y miedo me da el dia que me haga con uno de esos.

Raquel G. dijo...

jajaja cuanta razon!

Gonzalo Viveiró Ruiz dijo...

El smart phone una mierda, la Blackberry otra y el iPad ni te cuento.

Meryone dijo...

Yo tengo uno de esos que solo llaman y mandan mensajes y tan contenta pero tengo un iPod Touch desde hace tres años que, salvo cuando lo acababa de comprar, uso fundamentalmente para escuchar música y ni puto caso que le hago a lo de que sea un iPhone sin Phone. Y tan contenta.

También es verdad que paso millones de horas en casa sentada en una mesa.

Anónimo dijo...

Yo no tengo móvil. Con el tefónolo fijo de casa me basta.

Don Mendo

Pajarín dijo...

Acerca del nº 10, piense en lo que dijo cierto poeta, que ahora somos gente que pellizca cristales...

Cristina dijo...

Pues a mí me hablas en chino, porque no tengo ninguno de los doce problemas. Mi móvil es un apartito que sirve sólo para dos cosas: llamar y enviar sms. La segunda cosa casi nunca la hago. Y llamar poco.

Si no tuviera hijos, creo que me quedaría con el fijo y ya, como Don Mendo.
Tu blog lo leo siempre en el ordenador, no sería capaz de leer en un móvil.

Viejuna que es una...

JP dijo...

los queremos por sus virtudes pero los amamos por sus defectos. hacen la vida mas interesante.

Sonia dijo...

Me hace gracia leer este post ahora, precisamente un día después de haberme comprado el Nexus 4, y después de que un compañero de trabajo me llamara "perroflauta" por no poder comprarme un iPhone... (no todo el mundo tiene 700 pavos para hacerlo...)