
Waxman no es ningún prodigio literario, se repite más que el ajo y a la hora de contar una historia, el orden no es una prioridad para ella, pero a pesar de todos estos inconvenientes ha conseguido hacerme reflexionar sobre la cuestión que encabeza el post ¿ De quién es el arte?
La cuestión sobre la propiedad del arte es complicada. Waxman repasa ejemplos de famosas obras de arte de la antigüedad que se encuentran en grandes museos occidentales: el Louvre, el British, el Met, el Getty, etc y que son reclamadas recientemente por los países de origen de esas obras, sobre todo Italia, Grecia, Egipto y Turquía.
Waxman a pesar de ser un caos estructurando el libro, hace un esfuerzo por hablar con unos y con otros, por cotejar opiniones y por entender las razones de uno y otro lado y como yo, no llega a ninguna conclusión definitiva. Bien por Waxman, porque la cuestión es chunga.
Algunas de mis reflexiones de garrafón sobre el tema.
Primero, los países que reclaman la vuelta de esas obras de arte a sus territorios, aducen varias razones:
"
Pertenecen a nuestra cultura. Forman parte de nuestra idiosincrasia, de quienes somos".
Esto es palabrería. Pongamos un ejemplo, la
Piedra de Rosetta, estela egipcia encontrada por las tropas de Napoleón y que sirvió para descifrar la escritura jeroglífica, se encuentra en el British Museum. Los egipcios quieren su piedra Roseta y aducen esas cosas..•es nuestra cultura, es lo que somos..blablablabla. Seamos serios, un egipcio de la época faraónica se parece a un egipcio actual como un huevo a una castaña. Los antiguos egipcios tenían una relación politeísta y un arte figurativo con multitud de personajes humanos o semihumanos representados, los egipcios actuales son musulmanes y por tanto su arte no acepta figuras humanas. Por supuesto, no creo que haya en Egipto mucha gente que entienda los jeroglíficos más allá de los tíos que te graban la chapa con el nombre de tu tía para regalarle cuando vuelves del crucero. ¿Quiero decir con todo esto que los egipcios no tienen derecho a reclamar la Piedra de Rosetta? No, para nada., pero la razón de "vínculo cultural" no es verdad. Se trata más bien de crear un sentimiento de nacionalismo, un nacionalismo que está más vinculado a la animadversión hacia el país que posee la antigüedad que a la propia obra de arte en sí misma.
“Fue obra del saqueo de las potencias occidentales que se aprovecharon de su posición de fuerza"
Los griegos aducen que
Lord Elgin, aristócrata inglés que arrancó los
frisos y estatuas de los frontones del Partenón que tan amablemente exhibe ahora el British Museum, se aprovechó de su posición y su dinero para llevárselas. Cierto, los europeos iban por el mundo con la pose de conquistador colonizador "porque yo lo valgo" y lo que es más importante...tenían pasta para sobornar a los que gobernaban esos países y que resultó que no tenían aprecio por esas obras de arte. Los griegos por tanto tienen en cierta parte razón en que los ingleses les tangaron para llevarse los mármoles, pero reclamar con efecto retroactivo es muy peligroso...porque ningún país ni civilización está libre de culpa.
Por otro lado, en el momento en que Elgin se llevó los mármoles..los griegos eran más bien turcos y utilizaban el Partenon como polvorín. Probablemente si Elgin no se los hubiera llevado, ahora no los tendríamos. Con esto no estoy diciendo que Elgin fuera un superhéroe con visión de futuro y que hicieran un favor a la humanidad, que es lo que dicen los ingleses. Elgin se los llevó porque le molaron, tenía la pasta y en Inglaterra estaba muy de moda tener antigüedades.Que los salvara de una posible destrucción fue pura casualidad...
¿Qué dicen los grandes museos occidentales poseedores de esas antigüedades?
Lo primero que hacen es hacerse los suecos. Al fin y al cabo son el British, son el Louvre, son el Met y los otros son una panda de mataos de países lejanos. Es así, las grandes cabezas de los museos son muy gafapastas, muy élite intelectual. Luego empiezan a dar argumentos para justificar su posesión.
"Nosotros sabemos cómo cuidar estas antigüedades. Esos países no están preparados".
Lo malo de este argumento es que es fácil de refutar. Los mármoles de Elgin por ejemplo fueron sometidos a una limpieza con un abrasivo que les quitó todo el color que les quedaba (si, las estatuas griegas eran de colores y no de ese elegante tono marmóreo que asociamos a ellos) y quitaron la pátina al mármol. El Zodiaco de Déndera, una obra maestra del arte egipcio fue arrancado por los franceses del templo de Hathor dinamitándolo y ahora está expuesto en una esquina del Museo en un sitio anodino después de haber sido reconstruido...etc. Así que sí, saben cuidar las otras de arte o no.
Los países no están preparados, mmmm en cierta manera tienen razón. Muchos de los países que reclaman, no han empezado hasta hace poco a prestar atención a ese tema y por supuesto no cuentan ni de lejos con el presupuesto que esos grandes museos manejan. Waxman cuenta por ejemplo una historia espeluznante sobre el
Tesoro Lidio que Turquía reclamó al Met hasta que éste lo devolvió. Se creó un museo específico para acoger este tesoro, se hicieron fiestas, carteles, catálogos...para descubrir unos años después...que la principal pieza había sido sustituida por una copia...y el original había desparecido. El principal sospechoso del robo..es ¡¡ el director del Museo que acogía la pieza!!! Por supuesto, esta historia es esgrimida por los partidarios de la no restitución..pero como bien apunta Waxman quizás una solución sería restituir las obras y proporcionar a esos países medios para conservar las obras de arte.
Otro argumento de los museos es su supuesto papel educativo y proporcionador de conocimientos para sus visitantes. Veamos. Contra este argumento tengo muchos peros. Primero, el supuesto papel educativo de los museos es una cosita que nos hemos inventado en el siglo XX para hacernos los guays, los modernos y los educativos. La mayoría de los museos se crearon con un afán de coleccionismo privado, con un acceso limitadísimo y para ser meramente admirados. Su labor educativa nos la inventamos después cuando el "elitismo cultural" estaba mal visto y se desarrollo la idea de que los museos eran sitios divertidos y entretenidos donde masas de visitantes corrían entusiasmados a aprender mogollón de cosas. Le concedo este papel durante digamos los últimos 50 años del siglo XX pero sin el componente de diversión, es verdad que los museos se abrieron más al público que acudía a admirar más que para aprender. En cualquier caso, el valor educativo de los museos y de acercamiento de culturas lejanas al público en general, ha muerto con el acceso universal a internet. Seamos sinceros, se aprende más de la piedra Rosetta buscando en internet..que admirándola in situ en el British mientras se lee una cartela mínima con una información que al visitante medio no le dice absolutamente nada.
¿Estoy diciendo entonces que se vacíen los museos occidentales para devolver todo a sus sitios de origen?
No. Es verdad que muchas de las cosas que hoy consideramos "obras de arte", realmente en su día eran algo de uso cotidiano para la vida normal: monedas, joyas, cántaros, utensilios de cocina, pequeñas estatuas, vasijas, columnas, etc. Estás obras, saqueadas o compradas legalmente son arrancadas de su contexto histórico y pierden todo o parte de su significado. Son obras incompletas para el estudio, aportan mucho menos conocimiento de la civilización que las creo que las que son encontradas y mantenidas en su entorno. Por supuesto, esto no es así siempre, probablemente si los franceses no hubieran encontrado la Piedra Rosetta, jamás se habrían descifrado los jeroglíficos.
¿Cual es el argumento verdadero que hay en el fondo de las peticiones de las restituciones y las negativas a esas restituciones?
Pues lamentablemente, el dinero. Suena materialista y horroroso pero los países que las reclaman ahora, lo hacen porque se han dado cuenta de que las obras de arte reportan beneficios, atraen turistas, derechos de imagen, se puede crear un museo espectacular que las acoja y de prestigio, etc y por eso las quieren.
Los museos que las poseen las quieren mantener por lo mismo. ¿Cómo va a devolver el Louvre
La Victoria de Samotracia? ¿Qué pasaría si no tuviera
la Venus de Milo? ¿O el museo de Berlín con su
busto de Nefertiti? No se niegan a devolverlas por un afán de culturizar al mundo, porque sinceramente yo creo que pasan los mismos turistas por Berlín que por las pirámides de Egipto. Se niegan a devolverlas porque reporta beneficios económicos.
Hay unas palabras de un periodista griego en el libro que lo explican mucho mejor que yo, hablando de la restitución de los mármoles del Partenón dice " No quiero los Marmoles de Elgin porque sean griegos. No estoy seguro de que sean griegos en el sentido en que yo soy griego. El pueblo que los hizo vivió aquí hade dos mil quinientos años. Ellos no se llamaban a sí mismos griegos. No se llamaban a sí mismos helenos. Se llamaban atenienses. Esta idea de la continuidad de las naciones es para mi otra ficción. Pero desde un punto de vista estético pertenecen al edificio. No está bien verlos separados como están."
Y aquí sí que creo que tiene toda la razón del mundo.
Esta lectura ha coincido con la vuelta a casa, repatriación, devolución o como queramos llamarlo del
tesoro de "Las Mercedes", barco español hundido en aguas de Portugal hace 200 años y encontrado por una empresa americana, Odissey, hace unos años. Todos estamos muy contentos porque vuelvan las monedas a España, nos damos golpes en el pecho de patriotismo y decimos " tenemos derecho. Son nuestras". Si, estupendo, pero también eran nuestras cuando estaban en el fondo del mar, sabíamos dónde estaban y sencillamente pasamos del tema. El fervor patriótico y posesivo nos ha entrado cuando estaban limpias, fuera del agua y en Tampa. Cuando otro se ha gastado la pasta en rescatarlas...¡¡
pero lo ha hecho por interés suyo!!
Sí, vale, pero es que nosotros no hemos tenido ningún interés...hasta que eran de otro.