
Aunque me cueste reconocerlo, debo decir que Efe tiene razón en sus apreciaciones y aunque esto me vaya a costar seguir siendo el farolillo rojo en el ranking de hijos de molimadre...debo decir que Molimadre es un caso típico de modelo de madre según Efe.
Pasemos brevemente por la primera de las condiciones: vigilar a los golfos de sus maridos. Bien...molimadre se marchó a enseñar a adolescentes en Valls en los años 70 porque mi padre se había ido a Barcelona a “estudiar la carrera porque allí era más fácil”. El hecho de que conviviera con otros 4 solteros en un piso, en una ciudad llena de turistas europeas,...creo que hizo que molimadre decidiera ir a ver qué se cocía por allí. Vale que no estaban casados y que mi padre nunca fue un golfo porque lo digo yo y punto...pero se cumple el punto 1 de la definición de Efe.
Torturar a sus hijas primogénitas.
Bueno, bueno, bueno, no sé ni por dónde empezar. Molimadre tiene matrícula de honor en este apartado. Y cum laude…y es doctor honoris causa. Y Master del Universo. Y…todo.
Para empezar voy a reproducir la contestación de molimadre a una pregunta estúpida que le hice en su momento. Estúpida porque ya sabía que la respuesta no me iba a gustar:
- Mamá, cuando nací yo... ¿querías niño o niña?
Inciso...la respuesta más correcta a esta pregunta es siempre: Me daba igual.
Inciso2 ...la segunda respuesta más correcta si la que te lo pregunta es tu hija primogénita es: niña.
La respuesta de molimadre fue
- Pues yo quería niño.
- Siesqueparezconuevaparaquécoñopregunto. Pero como no aprendo… ¿y eso porqué?
- Pues porque yo fui la segunda. El primero es tu tío J. y claro, a mi me gustaba mucho tener un hermano mayor que me cuidara, podía salir con sus amigos y él siempre era el responsable y sabía que eso era lo mejor, además así él era el favorito de tu abuela y yo la favorita de tu abuelo.
- Estupendo y entonces nací yo...que obviamente no soy un niño…
- Si y bueno...muy bien… (molimadre miente fatal) pero luego nació pobrehermano mayor y como os lleváis tan poco, pues es casi lo mismo.
- ¿casi lo mismo? Pero... ¿qué dices?
- Si hija si...
- ¿Cuándo me ha cuidado a mí pobrehermano mayor? ¿Cuando he salido con sus amigos? ¿Cuando ha sido responsable... de algo??
- Si te vas a poner melodramática no hablamos más.
- Pues va a ser lo mejor.
Vale, pues ya sabiendo que nada más nacer frustraste las expectativas de tu madre, te enfrentas a tu relación con ella. Genéticamente creo que ya sabes que será un desastre pero genéticamente vienes programado para querer a tu madre...asi que lo que te espera es tortura. Hay que ser fuerte para aguantar.
Ya expliqué por ahí, que los hijos mayores somos un experimento. Naces y tus padres no tienen ni puta idea y entonces se dedican a experimentar. Si además de hijo mayor eres chica…directamente te ha mirado un tuerto. Si además tienes la desgracia de que 13 meses después nazca un hermano varón que es el top 10 de la creación y que haga lo que haga en su vida será siempre lo másmejordelmundomundial..date por jodida. Y si luego tienes una hermana que es todo lo que tú no eres, a saber, guapa, mona, dulce, cariñosa y miente de puta madre…vas directa al ostracismo…y si además no contenta con todo eso...nace un pobrehermano descolgado que sufre enfermedades varias y muy graves durante su niñez…¡¡han cantado bingo!!..vas directa al abismo.
Las madres torturan a las primogénitas. Quiero pensar que al principio sin querer y luego ya les sale solo. Cómo no saben cómo quitarse ese feo vicio, hacen de él un arte.
Para empezar y como eres niña tu madre quiere que seas monísima, dulce y ponerte lazos. Y tú no quieres y además eres un cardo borriquero, pero no es tu culpa..venía en tus genes. Pero a ella le da igual...eres su “muñequita” y por cojones vas a ponerte lo que quiere...asi que ahí vas...hecha un figurín, con lazo, calcetines calados y vestidos de nido de abeja..llorando y enfurruñada todo el día. Creo que en mis fotos infantiles salgo sonriendo en 2...y salgo con mi padre. (El reportaje fotográfico de mi comunión es un homenaje al drama...salgo en todas llorando...pero coño...que me había peinado que parecía un caracono)
Luego vas creciendo y te das cuenta de que no hay nada que hacer. Hagas lo que hagas...será poco. Te esfuerces lo que te esfuerces o bien no será suficiente o no habrá sido para tanto, porque es que a ti no te cuesta.
Luego te echas un ligue…y por supuesto es el tío más erróneo del planeta. Y por supuesto cuando de verdad resulta ser el tío más erróneo del planeta, el consuelo que encuentras es: si es que eres tonta, ya te lo había dicho…y tu ahí erre que erre. Cuando estabas con él, él era idiota...pero cuando te destrozan el corazón y necesitarías que alguien te dijera que él era idiota…resulta que la mema eres tú. Una tortura.
Luego tienes hijos…y todo lo que haces “está bien...perooo”. ¿Les vas a dar de comer eso? “Están monas si...y ya si fueran peinadas...pero bueno...van como tú”….
Y le recomiendas libros, y le gustan...pero antes se convierte en estatua de sal que mostrar entusiasmo: “Está bien Moli, pero no me ha parecido ninguna maravilla”.
Y luego viene la peor de las torturas…porque ahora que lo pienso no creo que sea una tercera característica de las madres sino una sublimación de la tortura a las primogénitas, el mimo a los hijos varones.
Allí estás tú...sufriendo lo que crees que es una crianza normal y de repente llega un ser con cola…y empieza a tener una crianza molona.
Le dejan ponerse la ropa que quiere, todos los días. Él no lleva uniforme al cole, vale...pero es que el fin de semana también le dejan. Y no le peinan. E incluso, cuando monta un pifostio a las 9 de la mañana porque los puños de la camisa no sobresalen iguales de los puños del jersey, tu madre se arrodilla y se lo coloca como él quiere.
Y pronto descubres la palabra mágica...”pobre”. Esa palabra da poder. Esa palabra abre puertas.
-Es que tu pobre hermano...le tienen manía en el colegio
- joder.pues mucha manía le tendrán cuando ha suspendido 7…
- de verdad moli...haz el favor de no ser cruel.
Y tú sales y tienes hora: “A las 10 y media en casa”. Y llegas 5 minutos tarde y te montan un pollo como si fueras la culpable de la última crisis petrolífera. Pero pobrehermano llega tarde y aquí no ha pasado nada.
Y sales y llegas bolinga, un poco bolinga…y “desde luego, eres una borracha”.
Y pobrehermano, sale….no llega…llega de día…vomita por las escaleras y “algo le ha sentado mal”.
Y tú no fumas. Nada. Y pobrehermano le da al fumeque y llega con ojos enrojecidos y no de fumar tabaco y dicen “hijo...ten cuidado donde vas porque esos sitios con tanto humo te hacen mal a la vista”….y tu dices…” no coño, que ha fumado porros!!!!!” y entonces sabes que las miradas...de verdad de la buena pueden fulminarte.
Y a tu hermano le deja la novia. Y el planeta se para. Él no había elegido mal, ella era divina mientras estaba con él y ahora es una bruja interplanetaria y hay que hablar bajito y no molestar…y comer la comida favorita de pobrehermano que tiene el estómago cerrado del disgusto…y nada de chistes ni humor negro.
Y Luego viene cuando te rindes y dices: ¡me rindo! Aceptamos pobrehermano como favorito para todo. Entonces te retiras a un segundo plano…y decides que eres más feliz así y que no vas a hacer un drama de todo, esto ni vas a ir a psicoanalizarte. Descubres que puedes sacarle partido a todo esto en un blog. Y cuando llamas a tu madre para que venga a cenar un día y te contesta: “No puedo, tengo que ir a cenar a casa de pobrehermano mayor porque le gusta ver Águila Roja conmigo”…directamente te descojonas y piensas como meterlo en un post.
Y luego llega lo peor de todo. Te embarazas y te encuentras deseando que tu primer hijo tenga cola…para que no tenga que sufrir lo que has sufrido tú, no vaya a ser que finalmente te parezcas a tu madre.
Pero la naturaleza, que es muy cabrona, te manda una princesa y tú intentas por todos los medios no torturarla, pero sabes que no lo estás consiguiendo. Es tu experimento y estás haciendo pruebas con ellas, y algunas están saliendo reguleras.
Y te quedas embarazada otra vez…y esta vez, quieres una niña. Por favor que sea, niña...ya que vas a torturar a tu primogénita…que por lo menos no tenga que competir con un pobrehermano.
Y pufff...esta vez tienes suerte.
Así que si, confieso que a veces torturo a mi primogénita, pero en mi descargo diré:
- Es un experimento.
- Intento no hacerlo.
- Intento torturar igual a la segunda.