Porque estaba en mi primera fiesta de fin de año y me acuerdo de él mientras le perseguían con un destornillador por haberse enrollado con la novia de otro. ¿Tenías 15?
Porque me regaló una cinta de varios, con una cara Live y una cara Studio, por mi cumpleaños y todavía la conservo. ¿Tenía 16?
Porque salíamos por Madrid, quedábamos a las 5, nos matábamos a botellines en un bar en Castelló y cuando ya no podíamos más nos puteábamos para perder el autobús y llegar a casa tarde. ¿Teníamos 17?
Porque cuando salíamos de El Casino a las 7 de la mañana después de haber bailado So Lonely como si fuera lo último que íbamos a hacer en nuestra vida, me dejaba bajar conduciendo su Citroen AX. “ Yo voy muy pedo y total, tú no tiene carnet”.
Porque encontró a su chica y me gustó. Nos gustamos, y después de mil batallas ahora nos gustamos más. ¿Teníamos 19?
Porque por nuestros santos, en el mes de julio nos regalábamos una tortilla de patata decorada con kétchup. ¿Teníamos 20?
Porque se descojonó conmigo cuando me propusieron ir a la frontera del placer en un viaje fabuloso a Formigal. ¿Tenía 22?
Porque me llamó llorando desde el Santiago Bernabéu cuando murió mi padre y no sabía que decirme. Tenía 24.
Porque me llamó un día y me dijo: nos vamos a esquiar una semana. No tengo dinero, Fede. No te he preguntado eso, mañana te recojo. Fue un viaje genial. Tenía 24.
Porque me dijo: estás guapísima. Hoy ligas seguro. Tenía 25.
Porque un día apareció con su chica en casa, churros, porras y el periódico y me dijeron que iban a ser papás. Tenía 28.
Porque vino a verme a casa cuando nació M. Me abrazó y me dijo: ¿a que no era así como te lo imaginabas? Luego se atizó con el ingeniero y su chica una botella de champán y ninguno de los 3 volvió a trabajar por la tarde. Tenía 30.
Porque le llamé cuando lo estaba pasando mal y le dije: ¿voy a verte? No, no hace falta. Colgué y me fui a su casa. No hay más que decir. Tenía 37
Porque el último concierto de Bruce que fui, fue mejor porque por fin vino conmigo y le encantó. Tenía 38.
Porque me lee siempre y me comenta por mail.
Porque siempre se le saltan las lágrimas de la risa cuando le cuento mis chorradas.
Porque cuando estamos de copas, siempre apoya el codo en mi hombro. “Moli..¿Otro gintonic?
Porque nunca me llama por mi nombre. Siempre por el apellido.
Porque no todo lo que hago le parece bien.
Porque odia el chorizo, las aceitunas y el queso.
Porque por mi cumpleaños me dijo que escribiría algo para el blog. Todavía estoy esperando, pero SÉ que lo hará.
Porque cuando le veo venir por el retrovisor en la M50, siempre sé que no reconoce mi Ibiza mugriento y cuando por fin se fija en mis aspavientos, siempre sonrío y me alegra el día.
Porque es tan descerebrado que me pide a mi consejo para comprarse un mp3.
Porque me descubrió esta canción...y siempre que la oigo me acuerdo de él.
Porque hoy es su cumple.
Esto es lo más parecido a un caminito de chuches que puedo hacerte….¡¡FELIZ CUMPLEAÑOS FEDE!! Tienes 39.