
Me encanta. He decidido que mis meses preferidos del año son octubre, diciembre y febrero. Los demás me son indiferentes quitando abril, mayo y junio que los odio.
Me gusta el invierno básicamente porque adoro el frío. Tiene muchas ventajas frente al calor. Te abrigas y dejas de pasarlo. No sudas y no hueles mal. La depilación deja de ser una prioridad diaria.
Me favorecen los gorros.
No hay nadie por la calle. Te cruzas con gente que no sabe apreciar la belleza del invierno, van corriendo. Lo bueno es que no hablan a gritos por teléfono porque está ateridos de frío y con los guantes no se puede teclear y llevan los cascos tan enterrados dentro del gorro, la bufanda y el cuello del abrigo que no se oye su música atronadora.
Me encanta la nieve. Me gusta ver como cae y como se pone todo blanco. Andar por ella y escuchar como cruje. El cielo azul y un frío espantoso, de esos que sales a pasear y sientes como se te congelan los mocos y la nariz se pone roja.
Me gusta conducir de noche en invierno. Incluso si hay atasco, lo prefiero al del verano, solo ves luces rojas y oscuridad, no sabes cuanto queda. Mucho mejor que recocerte a 40 grados con el sol pegando de pleno, temiendo que el coche se caliente y viendo la distancia que queda.
Me gusta ponerme un jersey gordísimo y unos calcetines rojos con vacas que tengo y que te mantienen los pies calientes siempre.
Me encanta pisar charcos.
Me mola el viento aunque confieso que mi umbral de tolerancia a él no es excesivo, así que me gusta verlo desde casa.
La niebla no me incomoda, ni siquiera para conducir, me parece hasta romántica (esto debería hacérmelo mirar).
Me encanta levantarme y que haga mucho frío. Desayunar y volverme a meter en la cama a leer muy bien tapada. En verano las sábanas estan arrugadas del sudor y es asqueroso, no apetece.
Me gusta mucho más ir a la piscina con frío que con calor. Nadar en agua calentita mientras fuera llueve o nieva. Me da igual salir a la calle con le pelo mojado, como no puedo ponerme mala….
En el invierno hay silencio y aunque yo no pare de rajar, eso me encanta.