miércoles, 2 de septiembre de 2015

Soy una chica con suerte

Estar deprimido no es lo mismo que sufrir una depresión. 

Sentirse solo, triste, cansado, agotado, sin ganas de hacer nada y alicaído tampoco es sufrir una depresión. 

Tener el corazón roto por un desamor, creer que nunca jamás volverás a enamorarte, sufrir una decepción personal enorme y sentirte como un idiota tampoco es sufrir una depresión. 

Perder un ser querido, sufrir la ausencia, la nostalgia, tener que rehacer una vida, tampoco es sufrir una depresión. 

Estar arrasado de pena, de tristeza, llorar sin consuelo horas o ahogarte con sollozos que no te dejan respirar, tampoco es sufrir una depresión. 

Tener miedo, terror, ansiedad, angustia, un peso en el pecho que al mismo tiempo es un hueco, tampoco es tener una depresión. 

No dormir, no comer, no hablar, no reír, tampoco es sufrir una depresión. 

Sufrir una depresión es no sentirte tú. No reconocerte en la persona que eres, en la piltrafilla humana que no puede levantarse de la cama sin tener terror de poner un pie en el suelo. 

Sufrir una depresión es como estar parado en arenas movedizas. Vas caminando por tu vida y un buen día el suelo empieza a desmoronarse y todo lo que te sostenía y que sigue estando allí deja de hacerlo. Ta vas hundiendo y aunque al principio tratas de luchar y agarrarte a algo, pronto te das cuenta de que cuanto más intentes escapar, más hondo te hundirás. 

Sufrir una depresión se parece a tener que caminar por unas vías de tren en medio de un páramo. No se ve el final, parecen no ir a ninguna parte. No puedes volver atrás, sólo puedes seguir adelante. Cada vez más despacio, cada vez con menos fuerzas, con menos ganas. Puedes pararte de vez en cuando y sentarte, pero no hay nada que ver, nada que vaya a animarte, ni ayudarte, ni empujarte. No va a venir un tren a arrollarte, ni uno al que puedas subirte y te haga más corto el trayecto. Sólo estás tú y un camino que parece infinito y no terminar nunca. Un pie tras otro, un pie tras otro, un día y una noche, y otro día y otra noche. Todos iguales, todos exactamente igual de duros. 

Sufrir una depresión es como ahogarse y al mismo tiempo sentirse protegido debajo del agua. No puedes respirar pero al mismo tiempo estás a salvo. No pueden verte, no pueden oírte, no tienes que hablar. Tu mundo, tu familia, tus amigos, todo lo que te gustaba hacer, sentir, oler, ver, tocar, mirar...está ahí, al otro lado de la cortina de agua, de la ola que te tapa. Lo ves, lo percibes...pero a distancia. A veces quieres romper esa ola y volver a hacer, sentir, oler, ver, tocar, mirar, escuchar las cosas que te gustaban, que te hacían ser tú, pero la mayoría de las veces quieres quedarte dónde estás. A salvo. 

Sufrir una depresión es estar solo. Solo con alguien que no eres tú mismo pero que puede contigo. Solo aterrado, apenado, sin dormir, sin comer, sin hablar, sin reír. Solo y asustado. Solo aunque tengas una familia maravillosa que te mira y no sabe cómo ayudarte. Solo aunque tengas los mejores amigos del mundo que jamás hayan estado tan preocupados por ti. 

Sufrir una depresión es sentirte fatal contigo mismo porque parece que deberías hacer algo, que deberías luchar contra ello, intentar curarte y sencillamente no puedes. Lo intentas, lo intentas y te sientes fatal por no conseguirlo hasta que alguien (si tienes suerte) te dice: déjalo, déjalo...es como si intentaras curarte tú sola la apendicitis, es imposible. Sufre, llora de dolor, de angustia, de cansancio, de miedo, deja que te castañeteen los dientes de pánico, tiembla, tirita, llora y descansa. No luches más porque te estás agotando y no podrás salir de las arenas movedizas, ni seguir caminando por las vias hasta que veas un final ni impulsarte desde el fondo del mar para poder romper la ola, respirar aire fresco y volver a verlo todo con nitidez. 

Y es entonces, cuando dejas de luchar y de pelear, cuando te dejas ir y descansas. Cuando, por fin, dejas de buscar explicación y dejas de culparte a ti mismo cuando sientes que un nudo, el nudo que te hundía el pecho ha comenzado a deshacerse. Un poco solo, poquísimo. Tan poco que te da miedo moverte por si acaso vuelve a apretarse. 

Sufrir una depresión es sentirse solo aunque no lo estés. Yo no lo he estado. Soy una chica con suerte, con muchísima suerte y tengo los mejores amigos del mundo. No voy a decir que amigos que no me merezco porque no es verdad, pero son los mejores. Han estado conmigo, buscando una liana para sacarme de las arenas, dispuestos a zambullirse como el Pirata Roberts. Me han dado la mano mientras caminaba por las vías y me han mirado desde el otro lado del agua, sonriendo y esperándome. Me han abrazado, me han hecho reír entre lágrimas, han dejado que les empapara la camiseta, que les abrazara sin fuerzas, que me apoyara en su hombro y me durmiera. Me han dejado descansar y estoy segura de que tienen un grupo de wasap en el que no estoy yo. Me han apoyado, alentado y empujado y me han dado fuerzas un montón de días aunque no les llamara porque ni siquiera podía hablar. Jamás me han dicho una obviedad como "anímate" sino "no te preocupes, no hagas nada, descansa". 

Son los mejores y soy una chica con muchísima suerte. Todo esto se lo he dicho a ellos personalmente, pero quería escribir esto, aquí, en Cosas que (me) pasan porque se lo merecen todo. 


44 comentarios:

Ana María dijo...

...

Lo que dices sobre que estar deprimido es como ahogarse y sentirse protegido... Es tal cual. Yo lo veía más como estar en una habitación de cristal y verlo todo pero no poder interactuar. No tener fuerzas ni ganas. Sufrir una depresión es estar solo con la peor versión de ti mismo, alguien que desconocías que pudieras ser.

Ojalá siempre haya alguien que nos coja la mano en la oscuridad.

Un beso enorme, y un gran abrazo.

BeatrizC dijo...

He estado deprimida pero nunca he tenido depresión. Pero he visto a una persona muy querida hundida en una depresión y era terrible verla, no puedo ni imaginar lo que debe ser sufrirla en primera persona.

Me alegra ver que empiezas a salir.

Blanca dijo...

Me alegro en el alma Moli...

La madre del monillo dijo...

La vida sigue y te esta esperando vuelve a retomarla que te la puedes beber entera o a sorbos como tu quieras ;-)

B.B. dijo...

Si que eres una chica con suerte y disfrútala.
Yo he estado deprimida y he sufrido una depresión por la que me sigo medicando. Ahora convivo con ella, sola, todos se han ido o los eche yo, ya da igual, pero estoy, pude no estar, también soy una chica con suerte.

Anusky66 dijo...

Muy bien descrita la nube negra de la depresión,
Cuesta mucho pero se sale de esa situación,te lo digo por experiencia, un bwsazo

Crónicas de una Española en Viena dijo...

He leído tu post con mucho interés porque si bien, no he llegado a caer tan profundamente, sé lo que son los ataques de pánico, y el no poder salir a la calle sola , pensé que nunca me pasaría a mí , pero me pasó. Somos seres frágiles y complejos. Has descrito de una forma muy lúcida lo que se siente, ese hueco en el pecho, yo siempre digo, como un pozo en el plexo solar.
Me alegro de que hayas salido.
Un abrazo

Luisa HD dijo...

Molí, estoy saliendo de esa situación que tu describes tan certera y brillante (ya no quiero ni nombrarla), y también soy una chica afortunada en el mismo sentido que tu. Quiero creer, porque he tenido otras "salidas", que esta será la última y definitiva. Y deseo lo mismo para ti, que tanto bien nos haces con tus "cosas que te pasan". Abrazo.

Sílvia dijo...

Tengo la suerte de no saber que es una depresión y espero no saberlo nunca pero con tu post, me has ayudado bastante a entenderlo. Gracias.

Un beso y enhorabuena! Eres una chica con mucha suerte! :)

ELISA dijo...

Hola! Es una proeza estar llena de actividad si tienes depresión y te felicito por conseguirlo. Cuando tenía 29 años tuve una depresión. Sólo los fármacos me sacaron de ella y la vitamina B12. Fue como nacer de nuevo, fortalecida y nunca más he vuelto a padecerla y han pasado más de 20 años.

Anónimo dijo...

Si, eres una chica con suerte, y lista, porque sabes reconocerla y valorarla.

Anónimo dijo...

Ah! Y estás guapísima

Ana, princesa del guisante dijo...

Dichosa tú.

Anónimo dijo...

La mejor descripción que he visto, no se puede aproximar más porque es tal cual se vive. Un abrazo muy fuerte de una aspirante a chica con suerte.
Niamh

sonia dijo...

Te he entendido perfectamente Moli.Soy una chica con suerte.

Bego (Much More Than I Am) dijo...

Esas cosas que crees que nunca le pasan a ciertas personas, estereotipos absurdos. Me alegro de que estés mejor y de que tengas esos super amigos, sí, es una gran suerte.

Un abrazo

Silvia dijo...

Hola Moli: me alegro un monton de qu estes mejor. lo bueno es saber pedir ayuda. Algo que a mi me resulta muy dificil. Creo que llevo mucho tiempo asi.ánimo . Te lo mereces

sientetebellaybien dijo...

Mejor explicado posible! Qué importante es tener esos amigos ahí y que no digan el típico y odiado para mí "Anímate". Un besito

Pablo dijo...

Pero qué buen rollitoooooooo!!!!!
besos!

Tita dijo...

¿Sabes esos cuentos terroríficos, o esas historias que te tienen en vilo, a la expectativa, en la punta de una aguja por como terminarán?

Así ha sido leerte. Final feliz.
Alivio infinito.

Me alegro en el alma, Ana. A los enfermos de depresión solo hay que pedirles un mínimo esfuerzo: que acudan a "que les curen la apendicitis" Yo siempre había usado el símil de las piernas rotas...¿le diríamos a alguien con ellas rotas, si no te levantas es porque no quieres?

Un abrazo apretao

Unknown dijo...

Moli,
He vivido muy de cerca una depresión y sé lo que es y lo difícil que resulta de comprender. No sé qué opinarás tú pero creo que algo que dificulta que una persona salga de ella o le hace el sufrimiento mayor es esa incomprensión por parte de las personas que tiene alrededor. Posts como este son cruciales.
Desnudarse de esta manera es difícil y valiente, yo no me atrevería a hacerlo, pero es importante, porque ayudas a los demás.
No sabes cuánto me alegro de que estés mejor.
Definitivamente, eres la persona que mejor traduce el alma, los sentimientos más profundos, en palabras.
Gracias por escribir,
Un besazo muy fuerte

Anónimo dijo...

Tener una depresión es sentir en lo más profundo de tu corazón que "No puedes con la vida".
Tener una depresión es hacer "lo justo y necesario para cumplir" porque no te sientes capaz de hacer nada más, ni te sientes valida..., ni valiosa...
Tener una depresion es dejar que el miedo, la culpa y la verguenza dominen tu vida.
Es todo eso y no es nada de eso.
Es una depresión, ponerle adjetivos e intentar definirla solo es limitarla a palabras, porque Moli, tu lo sabes, es otra cosa.

Lidia

Voz en off dijo...

Mil besos Moli! Tú no tienes una depresión, si no, no serías capaz de escribir cosas tan bonitas!!!

Solidamente dijo...

Muchas gracias por compartir tu lucha. Como ya habrás visto, muchos nos hemos sentido acompañados e identificados en tu texto.

Un abrazo y un saludo a quienes pueden sentirse orgullosos de estar a tu lado.

Anónimo dijo...

Joe Moli...que duro!
Yo, lo que tu cuenta no, pero me he sentido muy, muy, muy mal pero después de leerte, tengo suerte de no haber tenido una depresión.
Un abrazo!!! Pilar

Anónimo dijo...

Hola querida Moli.
Ya sabes lo que dijo Marcel Proust sobre sus años de sufrimiento...
Pues eso!
Gracias por no alejarte de nosotros ni en tus peores momentos.
Cris

Hermano E dijo...

Aunque yo no la he sufrido alguien muy próximo a mi si. Tu post me ha hecho comprender mejor lo que sentía esa persona. Afortunadamente ya está bien, igual que tu que se te ve estupenda. Me alegro muchísimo. Un achuchón muy fuerte.

Mar dijo...

Y lo peor es que el miedo a que te vuelva a alcanzar otra vez, nunca se va del todo.

Iraide dijo...

Tienes amigos, tienes palabras y personas que las leemos encantadas. Cuentas con tres tréboles de cuatro hojas, nunca lo olvides. :)

Un abrazo.

Iraide

Lhotse dijo...

Eres una valiente y muy muy fuerte, por hablar así, sin quiebros de ningún tipo.

Me has emocionado. Yo he tenido muchos y largos periodos de mi vida donde me he sentido francamente triste. ¿Dónde está el límite entre la depresión y estar deprimido? La cosa es poder salir de ahí por el propio pie. Y esa batalla es más dura de lo que mucha gente pueda pensar.

Te espera lo mejor, no lo dudes.

un abrazo grandísimo

molinos dijo...

Muchísimas gracias a todos por los comentarios.

NO os preocupéis, estoy bien, y voy a estar mejor a pesar de haber estado tal y como lo cuento en este post.

Soy una chica con suerte por mis amigos y también por los descerebrados. Me habéis sostenido muchos días aunque no lo sepáis.

Anónimo dijo...

Ains, siempre parece que está más verde la hierba en el jardín del vecino...y luego...
Te sigo hace años (como cuatro cálculo), aunque hace años que no comentó nada. Al principio te leía a diario, desde hace tiempo, muy espaciadamente (no leo blogs, sólo ha sobrevivido el tuyo en mi lista ;-) Me gustaban tus post antes y me gustan ahora. Estoy muy contenta con tus merecidos éxitos y al revés de lo otro. Sobre todo desde que nos dijiste que entrabas en el club -es una forma tonta de llamarlo- al que yo también pertenezco, de los divorciados/as. Me estremecí por tí. No quería que vivieras en tus carnes lo que yo había vivido -un mal menor de mierda-.
Siento mucha empatía por lo que cuentas en este post. De principio a fin. Y es que hay ciertos sucesos en la vida post matrimonio que hacen a veces que la saliva se nos vuelva metálica. Es difícil de explicar para quien no ha pasado por este trance. Hay que reinventar tantas cosas de nuevo..., se dan circunstancias tan extrañas, a veces, con la gente que conocemos en el post divorcium... Que a veces se agota una y, aunque, como dices, no sea una depresión, sólo un rato, ese rato disimula tan bien el hecho de que sólo vaya a ser, efectívamente, ese rato, que parece que no puede una con la vida. Afortunadamente, si, uf, sólo era un rato. Gracias a nosotras y a nuestro entorno.
Sólo es un rato...es que tiene que haber de todo ;-)

Felicidades por el blog y pa alante!!!!!!!

Elena de Troya

Anónimo dijo...

Como solias scribir tú: he estado aquí y te he leido...

Abraz fuerte,

Fdo. Aquel viejo.blog.marlei.

Anónimo dijo...

Me alegro mucho de leer por fin este post. Enhorabuena!!

...Y cómo se actúa cuando es tu pareja la que pasa por eso? Cuando te necesita físicamente a su lado día y noche, tumbada, sin hacer nada más que estar ahí? Cómo se le explica que la vida ahí fuera sigue y no para ni pregunta? Es bueno tratar de tirar hacia una situación rutinaria, con comidas, aseo, ocio, ... O hay que dejarle que se vaya despertando a su ritmo de su letargo??? No sé si busco respuestas o solo desahogo. Gracias en cualquier caso.

Bss

molinos dijo...

Anónimo pues simplemente se está. Esa persona ya sabe que la vida sigue... lo sabe perfectamente pero sencillamente no puede. Tiene que ir al médico, le darán medicación y tiene que tener una paciencia infinita y tú también. Sé que desde fuera no se entiende pero el "haz un esfuerzo" no es una ayuda, es una bofetada que te dan como si quisieras estar así a propósito.

mucho ánimo y besos.

MOli

B dijo...

Tienes suerte, estás bien rodeada y eres lista. Es una combinación muy buena para hacer frente a lo que sea.

Me alegro mucho de que ya estés bien.

Anónimo dijo...

Muchas Gracias Guapa. Besos.

Melli Toral dijo...

Los amigos se tienen porque se merecen. Debes de ser una persona estupenda y lo reflejas en tus escritos. Me gustaría conocerte algo dia

abuelanza dijo...


No se porqué, pero sales reforzado cuando termina la pesadilla. Y un profundo respeto y solidaridad con el entorno.

Pienso que es un toque de atención a la vida misma. Aprovecha la oportunidad.

lo+ dijo...

Muchas gracias, muchas veces, mucha suerte, mucho moli, moli mil!!!!

Perri M. dijo...

Debo reconocer que desde que leí este post ayer estoy impresionada. Desde luego mis conocimientos sobre tener una depresión han quedado en...no sé cómo calificarlo. Si de alguna persona tuviera que decir que la depresión está a años luz, esa serías tú, por lo que te leo, por lo que haces, cómo eres, o al menos cómo te muestras. En serio, estoy un poco perpleja, no te conozco en persona, te sigo hace unos años, pero es que llevo desde anoche, que leí este post, contigo en mi mente. He "envidiado" (modo sano) muchas veces tu capacidad de ver la vida, tu ilusión por los nuevos proyectos, tu sentido del humor, tu capacidad crítica...tu actitud como madre, (no soy madre, pero si lo fuera quisiera tener un poco de tí) y me sorprende mucho pensar que estés, o hayas pasado algo así. En serio, nunca jamás lo hubiera imaginado. Supongo que al final el blog, la vida virtual muestra solo una parte muy pequeña de nosotros.
Pues que te puedo decir, que me alegro un montón de que todo vaya mejor y que si con depresión eres Cosas que (me) pasan.....Sin ella...Huracán Moli. Desde mi más profundo cariño de Molifan, un abrazo.

molinos dijo...

Gracias a todos otra vez por los comentarios.

Perri, una depresión le puede pasar a cualquiera. Tendemos a creer que hay gente más predispuesta que otra pero es una enfermedad como la apendicitis o el cancer, le puede pasar a cualquiera.

Y gracias, ya estoy bien. De camino hacia el muy bien.

Besos a todos.

molinos dijo...

Gracias a todos otra vez por los comentarios.

Perri, una depresión le puede pasar a cualquiera. Tendemos a creer que hay gente más predispuesta que otra pero es una enfermedad como la apendicitis o el cancer, le puede pasar a cualquiera.

Y gracias, ya estoy bien. De camino hacia el muy bien.

Besos a todos.

Fontana dijo...

Hoy por suerte he descubierto tu blog. Llevo horas sentada delante del ordenador leyéndote, y sólo puedo darte las gracias. Me has hecho llorar y reir en cuestión de horas y me has dado un toque al corazón que me ha recordado las cosas que me gustaban hacer antes de ser lo que soy ahora. Espero, que algún día pueda escribir con tu fuerta y con tu vida, contando que ya lo he superado, que aquella "yo" se durmió para siempre. Hasta entonces, vendré por aquí a recargar mi energía :)