viernes, 12 de junio de 2015

El primer recuerdo de un final



Llevo tres horas buscando una fotografía y no la encuentro. Sé que te la hicimos, sé que la he visto un millón de veces y siempre comentamos lo mismo: ¿te acuerdas qué pequeña era y qué asustados estábamos?

No la encuentro pero la tengo en la cabeza. Recuerdo el momento exacto, la situación y hasta la luz que entraba por las ventanas de la casa dónde vivíamos cuando naciste. Luz de diciembre, luz fría, gris pero quée nos invitaba a intentar salir de casa contigo. Queríamos dar un paseo, ver si éramos capaces de hacer de padres por la calle. 

En la foto estás pequeña, pequeña, tenías 4 días y eras minúscula. Llevas una pequeña trenca blanca y un gorro blanco de enanito con punta, las piernas enfundadas en un mono azul. Con los brazos y las piernas estiradaos parecías una estrella de mar y nos entró la risa de pura histeria y puros nervios. Pequeña, azul y blanca sobre la colcha amarilla de nuestra cama. ¿Quién eras? 

Recuerdo pensar, y te lo he dicho un millón de veces, "quiero que seas mayor, quiero que hagas algo, que hagas cosas, que seas tú, que seas alguien, que camines, que hables, quiero saber quién vas a ser"

Han pasado once años y medio desde entonces. Antes de ayer, en los 45 minutos que duermo cada noche, soñé que iba por la carretera hacia Los Molinos y, pasada la rotonda de la piedra, veía una oveja  cruzando la carretera y abandonando en medio del asfalto a sus corderitos recién nacidos. Luego había un derrumbamiento y un montón de cosas absurdas más, pero al despertar me acordé de los corderitos. 

"Ese sueño es porque tu subconsciente siente que tu hija está desamparada y te preocupas",.- dijo mi médico al contárselo. 

Yo creo que mi subconsciente estaba un poco mediatizado por el maratón de "veterinario al rescate" que me había tragado con tu hermana por la tarde. Además no es mi subconsciente el que se preocupa por ti. Es mi parte más consciente la que permanece permanentemente alerta contigo, siempre, desde que eras esa cosa diminuta y te miraba sin saber qué hacer contigo. 

Estás de viaje de fin de curso, desaparecida en combate y pasándotelo genial desde hace 4 días. No me preocupa el viaje, ni lo que comas o dejes de comer, ni que te canses, tengas asma o te quedes afónica. No me preocupa que te acuerdes de tomarte las medicinas. No me preocupa saber que probablemente hayas pasado de lavarte el pelo, no te hayas peinado más de una vez y que cuando vuelvas te habrás dejado la mitad de la ropa en el hotel. Ni siquiera me preocupa que en cuanto te bajes del autobús feliz y entusiasmada, y pongas un pie en casa empezará a dolerte algo, empezarás a quejarte o a protestar. 

Me preocupa, y no sé si es la palabra, que este viaje  marca la primera vez en la que eres consciente de terminar con una etapa de tu vida. Te acordarás siempre de este viaje que hiciste cuando terminaste primaria y por eso es un momento importante. Hasta ahora, habías ido completando etapas de tu vida pero, o eras demasiado pequeña o demasiado inconsciente para recordarlo. 

Ahora sabes y sientes que terminas algo, que vas a empezar algo nuevo. Algo que te da miedo, te atrae, te asusta. A veces corres hacia ello convencida y otras reculas para intentar no llegar nunca. Se llama hacerse mayor y es una putada. 

Sé cómo te sientes porque yo recuerdo perfectamente mis casi 12 años y todo lo que sentía. No vas a leerme y, no me crees cuando te lo digo, pero todo va a ir bien. 

Estás asustada. Yo también, y tu padre ni te cuento, pero no te preocupes. Los tres hemos sido capaces de llegar hasta aquí. Ya no eres un enanito sobre una colcha amarilla. Eres tú, eres María y eres increíblemente especial, aunque a veces (muchas) nos saques de quicio. 

No nos lo tengas en cuenta, para nosotros también es nuevo. 

Guarda este recuerdo,: tu viaje, terminar primaria y tus pantalones de piñas. Y, por favor, no me dejes volver a ver más al veterinario al rescate. 


22 comentarios:

Anónimo dijo...

Que bonito.
Estoy superidentificada con la situación.
Me alegro de que sepas dedicar estas bonitas palabras a tu hija.

Anónimo dijo...

ahora ya no habrá celos.

"once upon", lo que te decía; un diario que no se perderá nunca.

Sobrevolando los 40 dijo...

Te entiendo perfectamente. Es una etapa difícil para ellos y para nosotros. Pero con mucho cariño (y paciencia) la pasaremos como pasamos las otras etapas. La pena es que pase todo tan rápido. Que sin darnos cuenta, ya no sean esos bebés y ahora sean unas niñas más responsables, maduras e inteligentes que nosotras y por supuesto, mucho más altas y guapas.
Ánimo. Todo lo nuevo da miedo al principio pero luego, todo es mucho más facil de lo que parece. Besos.

HombreRevenido dijo...

Jo, qué bonito.
Hacerse mayor es algo tan especial... ella entrando en la adolescencia y todos nosotros a puntito de salir.

Unknown dijo...

Hola. unas palabras preciosas dedicada a tu hija María con las que me siento totalmente identificada. Nuestros hijos se nos hacen mayores y nosotros somos testigos de sus miedos y emociones porque, en cierta medida, nos acordamos de nuestra infancia... No hay duda que cada etapa de la vida de nuestros hijos nos hace sentirnos orgullosos... seguimos en contacto y regresará feliz de esta primera excursión.

Alicia dijo...

Que bonito, lo recordará siempre, su viaje, su paso a la casi adolescencia..y las palabras tan bonitas de su padre...
que mezcla de sentimientos verlos crecer, es como si una parte de nosotros se fuera con ellos..
precioso!

sonia dijo...

Ay Moli,por lo menos sabes que en cuanto acabe su viaje la tienes otra vez en casa,cuánto los echamos de menos...

Marthabaz dijo...

Hola, Moli... me encantó tu entrada de hoy... me recordó a una que yo escribí una vez en un blog sobre la sensación de ver que mi hijo era más alto que yo... Qué vértigo y qué emoción. Por si te interesa, lo comparto. Era un blog de foto+texto semanal junto con otras amigas fotógrafas. La entrada que te decía está en esta página, hacia el final, "Mi hijo crece" (yo soy Marta :)
gracias por remover mis emociones

Juliet dijo...

Siempre me han gustado los maternitys, porque pones en palabras, emociones inmensas y complicadas.
Qué bien escribes, jodía! M es preciosa, y ésta es la primera etapa consciente de muchas… Ánimo.
Un abrazo

Anónimo dijo...

un beso

Anónimo dijo...

Hola, te sigo desde hace un tiempo, te soy sincera, a veces me gusta lo que cuentas y otras no tanto, pero eso es lo de menos, lo único que quería hacerte es una pregunta: "¿Crees conveniente escribir/exponer tan detalladamente tu vida diaria y la de los que te rodean de forma tan detallada?" No quiero que te lo tomes a mal, pero tus hijas son menores y se les debería guardar el derecho a su intimidad (por ejemplo escribiendo un diario personal y no público). Es una apreciación personal que espero que no te moleste sino que te pueda hacer reflexionar un poquitín.
Un saludo.
María.

Anónimo dijo...

El corderito eres tú. Es mucho más lógico. Piénsalo, ya veras cómo encaja todo mejor...

Muy emotivo.

Muchas gracias.

Un saludo,
Enja.

NáN dijo...

Comme c'est mignon!

Anónimo dijo...

De verdad crees que es bueno para un menor que publiques su foto y cuentes su vida?
Sinceramente, nunca te has planteado que cuando sean mayores te lo van a reprochar?

Shelly dijo...

No estoy de acuerdo para nada con la persona que dijo (María me parece) que escribes muy detallada tu vida diaria, de hecho en ocasiones pienso que eres muy misteriosa y aunque hablas de sentimientos profundos y otras situaciones, no cuentas a detalle todo lo que e pasa.
Por otro lado, estoy segura que algún día tus hijas verán este blog como un gran regalo, incluso con los comentarios y sentimientos que provocas con tus anécdotas, experiencias, sentimientos, etc. hacia otras personas. Muchos saludos :)

B.B. dijo...

Yo no quiero que crezcan. Soy muy egoísta.

Rataflau dijo...

Precioso… cuánto amor!
Para ese anónimo doble: mejor que escriba estas cosas tan bonitas y sus hijas tomen ejemplo del uso controlado de las redes sociales, que no lo que te puedes encontrar en el perfil de la mayoría de adolescentes sin control parental. Porque me juego lo que sea a que Molinos enseñará a sus princezaz cómo utilizar éstas…

Alehop!
Rataflau

Yo misma dijo...

Precioso! Me encanta! Gracias por compartir de esta manera tan bonita!

Tita dijo...

Ponerle cara a la princesa élfica es un regalo, gracias. Y poner palabras a lo que siento por mi princesa de 11 años, también.

Sara M. dijo...

Siempre flipo con los posts que les dedicas directamente a las niñas. Crecerán, los leerán, y querrán más si cabe a su madre, porque te entenderán "un poquito" mejor.
Dices que da miedo. Pues a mí con la mayor me daba vértigo y miedo. Miedo a saber si iba a ser capaz de adaptarse, si iba a ser lo suficientemente madura (jaja), responsable... Mi peque tiene la edad de María, y con él, que acaba los ciclos infantiles en mi casa, te digo que no da miedo ni vértigo, sino pánico. Quiero que crezca, sé que tiene que hacerlo; pero es que es taaaaaan peque...

Unknown dijo...

Pues a mi me habría encantado que mi madre me hubiera dejado escritas cosas tan bonitas! ahora que ya no la tengo conmigo me encantaría poder leer que pasaba por su cabeza a medida que yo crecía. La foto es preciosa, el texto más, y los sentimientos que transmite... increíbles. Creo que no hay nada mejor que usar las redes de forma racional para que los más pequeños aprendan a ser responsables en su uso.

Oswaldo dijo...

A mí me da la impresión, por absoluta primera vez desde que te leo, que te falten palabras.
Me parece que quisieras decir no mil, sino millones de cosas más. Que tratas de hacer síntesis de algo tan grande que no eres capaz sino de asomar la pequeñísima punta de un gigantesco iceberg.
Percibo una alta dosis de cautela, en un escrito cargado de amor sin querer hablar de más.

Creo, por lo que se lee en las líneas y entre las líneas de varios años de tus escritos que tienes maneras más cercanas, personales, de hacerles saber a tus hijas cuánto las quieres, las piensas y comandan a tus propios actos. Sin embargo, este blog es tan gran pedazo de tu ser que aquí TIENEN NECESARIAMENTE que quedar expresados escogidos hitos de tu relación con ellas. Sobre todo, para que nadie pueda olvidarlos.

Gracias por compartir tanto con nosotros.