jueves, 1 de diciembre de 2011

1984, WINSTON Y RATAS


He leído 1984 por recomendación y regalo de un amigo. Si no me lo hubiera recomendado y regalado, probablemente no lo habría leído. Era uno de esos clásicos que tenía pendientes y que me daba pereza, no encontraba el momento para leerlo pero me lo regaló y lo he leído y me ha encantado.


Una de las cosas que me hacen saber si un libro me ha gustado mucho, es si días después de cerrarlo y estar ya metida en otra lectura, sigo dándole vueltas en la cabeza. Vueltas a lo que sea, a la historia, a los personajes, a lo que se cuenta, a lo que no se cuenta, a como se cuenta o sencillamente a lo que me ha hecho pensar.

A lo que iba.

En la habitación 101 hay lo que más miedo te da, lo que más horror te provoca, aquello que no quieres ver, ni saber, ni tocar. El pánico absoluto que te saca de ti mismo, que acaba con tu autocontrol, tu racionalidad. El miedo que te anula.

Para Winston, el protagonista del libro, lo que hay en la habitación 101 son ratas. Grandes, asquerosas y agresivas. Dispuestas a comerle. Las protagonistas de sus pesadillas allí, en la habitación 101 con él. No puede soportarlas, no puede aguantarlas. Para él, son el horror más absoluto.

Si lo dejamos ahí, para cada uno habrá una habitación 101 con su horror personal y particularizado. Para uno habrá serpientes, para otro arañas, para otro agujas de hospital, para otro un plato enorme de ojos de cordero que tendrá que comerse, para otro un 8º piso al que tiene que asomarse, para otro volar en helicóptero, cualquier cosa que nos cause horror, nos haga temblar, nos dé terror y ganas de salir corriendo, llorar y llamar a nuestra madre.

¿Qué habría para mí? ¿Qué es lo que más pánico me provoca?

Llevo 5 dias pensándolo. No lo sé. No me molan las ratas, ni las serpientes, ni las arañas, ni los gatos…me dan miedo, me dan asco, me dan repelús, .pero no sé si me darían tantísimo miedo como para paralizarme completamente. Por supuesto, pensando en frio me pongo en plan chulita y pienso, a pesar del miedo que me dieran creo que sería capaz de racionalizar algo del tipo: son solo bichos. O a lo mejor no y me pondría a gritar como una loca y a manosear ( mmm..en 1984 creo que Winston está inmovilizado pero tampoco hay que llevarlo a esos extremos) y a correr como un pollo sin cabeza.

Lo sigo pensando y sé que me da miedo el fondo del mar. Ahora todo el mundo bucea y lo encuentra relajante, divertido, didáctico y maravilloso. Yo no puedo ni hacer snorkle en la orilla con las princezaz. Sé que el mar es enorme, sé que es increíblemente grande y que ahí abajo hay todo un mundo con sirenas, tritones y bichos molones…sé que está ahí..pero no quiero verlo. Me da angustia, me crea ansiedad.

Me pasa lo mismo con el espacio, es otra cosa que me da pánico., pero claro es poco realista pensar que en una habitación pudieran meter la inmensidad del espacio para acojonarme. Si eso fuera posible sería sin duda una cosa que me daría muchísimo miedo.

Para mí sin embargo lo que hay en la habitación 101 es igual para todos. Y da muchísimo miedo. Lo espantoso de la habitación 101 no es la amenaza, que es distinta para cada uno, el verdadero horror no es es ese estímulo..es lo que descubres cuando te enfrentan a él.

¿ Y qué es? ¿ Qué descubres enfrentado a tu horror particular en la habitación 101?

Descubres lo que no quieres saber de ti.

Descubres que eres un cobarde. Descubres que te falta valor. Descubres que tienes un precio. Descubres que eres corrompible. Descubres que lo único que te importa realmente eres tú y tu supervivencia, y que aunque pienses que hay algo que jamás en tu vida harías ni siquiera presionado por algo…llevado al extremo de tu aguante físico y mental lo harías.

Lo peor de ese descubrimiento es que no hay retorno.

Antes de entrar en la habitación 101, sabes que es lo que te da miedo. Winston ya sabía antes que las ratas le daban pánico, probablemente no creía que tanto, pero ya lo sabía. Y también sabía que las ratas están pero en algún momento dejarán de estar, podrá olvidarlas, dejarlas atrás. Las ratas no son eternas.

Lo que se descubre sin embargo es eterno, dura mientras vives. Y jamás podrás olvidarlo, ni obviarlo. Es enfrentarte a lo peor de ti mismo. Todos sabemos que tenemos una parte mala o malvada o menos buena…pero una cosa es saberlo en abstracto y otra muy distinta verte frente a frente con esa parte tuya, palpar tu lado más oscuro. Una vez que sale a la luz ya nunca jamás podrás esconderlo. Tendrás que aprender a vivir con ello o a sobrevivir.

Si uno tiene hijos cree (porque realmente lo cree) que aunque en esa habitación hubiera el mayor de los horrores que pudiera imaginar jamás traicionaría a sus hijos, jamás pensaría en decir “ No, a mi no..que se lo hagan a mi hijo”. Uno cree que será lo suficientemente valiente como para hacer eso, que su amor a sus hijos está por encima de todo.

No lo sé. Cuando he leído sobre Stalin y las hambrunas que provocó en Ucrania siempre me quedo paralizada con las historias de madres que les robaban la comida a sus hijos…e incluso practicaban canabalismo con sus propios hijos. Seguro que ellas jamás pensaron que llegarían a ese extremo. Nunca pensaron que fueran capaces de algo así, y sin embargo enfrentadas al horror absoluto de la extrema inanición…fueron capaces. A mi, al observador externo le causa incredulidad y horror…pero mucho peor tuvo que ser para ellas vivir el resto de su vida enfrentadas a ese hecho.

Uno nunca entra en el cuarto 101 por su propio pie. Sabe que está ahí pero a nadie se le ocurre asomarse a ver qué ve o entrar en plan expedición. La puerta está ahí y se ve la luz por la rendija..pero nunca se entra por voluntad propia. Alguien o algo te lleva allí y te empuja a entrar. Y entonces estás jodido..no porque no haya salida, qué si la hay..si no porque saldrás de allí con algo de lo que jamás podrás librarte.

Le doy vueltas a que es lo que no me gustaría saber de mí misma, a que es lo que no me gustaría encontrarme en esa habitación 101 y creo que lo sé pero es una de esas cosas que (me) pasan y no cuento.

43 comentarios:

Efe dijo...

Bah, si juntamos todas las cosas que me dan pánico-terror no caben en la habitación 101 ni tampoco en ninguna otra.

Yo tranquilo, soy tan gallina que no podrían asustarme.

Ángela Marcos dijo...

Esta entrada es de lo mejorcito que has escrito en este blog. Me gusta mucho el análisis que haces y cómo lo haces. Gracias.

Anónimo dijo...

En mi habitación 101 habría, seguro, oscuridad y ruidos raros... Me volvería loca. Sí, lo sé, soy una caguetas!

Anniehall dijo...

Puff

javi dijo...

Amo a Mol... digooo al Gran Hermano.

Alina dijo...

He intentado leer ese libro tres veces, y las tres lo he tenido que dejar antes de la página 20. Es el único libro que no he terminado, no puedo con el, me deprime taaanto, que no lo puedo soportar.

Seren dijo...

Para mi la habitación 101 tiene exactamente lo que tiene ratas.
Tengo fobia a las ratas desde niña.
No hay nada en el mundo que me más panico que las ratas. Por más que lo pienso no hay nada que me de mas miedo.

Anónimo dijo...

De acuerdo con Ángela Marcos, excelente tu post. Gracias.
A.

José Antonio Peñas dijo...

Lo más terrible, empero, es descubrir que no todos se hunden en la 101. Primo Levi relata en "Si esto es un hombre" que un día se enteraron de que alguien había volado uno de los hornos. Todo el mundo se quedó anonadado, porque ahí, en auschwizt, nadie pensaba en nada que no fuera sobrevivir, y de pronto descubrían que aún así, había alguien que seguía luchando. Los nazis le descubrieron y le ahorcaron ante todos los presos. Según Levi, esa noche se durmieron sintiéndose más miserables que nunca, sabiendo que entre ellos, pese a todo, quedaba un hombre, y ahora estaba muerto.

Sheldon dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Sheldon dijo...

¡Qué gran post!

Di Vagando dijo...

Por partes: alucino con que, con todo lo que has leído, no hubieras leído "1984".

Luego, me sorprende tu texto. El libro toca tantos temas, q me choca que te hayas quedado en este. El tema de la 101 es tan sencillo como q Winston sufre una común y vulgar "Fobia simple". El objeto de su fobia son las ratas. La manera cómo se desarrollan las fobias simples está muy bien estudiada, su tratamiento está muy claro. LO q no sabe el fobico es q el tratamiento pasa por la exposición. La ansiedad es uan curva q sube, y acaba bajando: nadie ha muerto de un ataque de pánico, eso si, siempre piensa q va a morir, q pierde el control. Pero no pasa. Creo q te has pasado de intensa (con carinio, como siempre) con este análisis del miedo. No hay rollo sicoanalítico tras el miedo de Winston: mírate como desarrollaron una fobia a una conejito en Little ALbert en la wiki, en aquella época en la q los sicologos no conocían los comites de ética.

Desde q leí el libro, algo tengo muy claro: nunca desveles, si la tienes, tu fobia. O te puede pasar como a Winston. Que en una situacion de tortura te expongan a tu fobia (algo q te puede pasar un día sí, otro tb). Pero eso es un pequenio apunte, Orwell usa esto, igual q podria haber usado pinzas calientes, para hablar de la tortura. Es un libro enorme, como todo Orwell.

di

molinos dijo...

Di..con cariño...dime que estoy desequilibrada no que soy una intensa..XD.

De todos modos no sé de qué te asombras sobre mis elucubraciones mentales..si pensando en manzanas soy capaz de llegar a que Adán era gay..imagina lo que puedo hacer con una historia como 1984.

Ah..y tengo más cosas sobre este libro pero aquí no lo cuento todo.

besos....

A los demás..graciassssss

Di Vagando dijo...

:) es que sabía q no te iba a gustar lo de intensa y estás pagando aún por lo del feminismo.. Por mail me cuentas tu fobia y veré si puedo hacerte un reflejo condicionado, auqne no prometo nada: lo veo severo y tal vez necesites medicación.

Más carinios y hugs

di, dinamizadora

valpertuna dijo...

hace falta mucha valentía para ceder sólo cuando nos enfrentamos a situaciones límite.

cuando lo normal es que demos por quebrados los recios y presuntamente inconmovibles principios morales que rigen nuestra vida a la menor de las influencias externas sin que lleguen a poner en peligro familia o lo que mas queramos sino tan siquiera amenazar nuestra plaza de parking o el despacho con ventana a la calle en el curro.

a eso le llamamos ahora flexibilidad, adaptación, practicidad y un montón de eufemismos mas.

Burbuja dijo...

Yo soy una cobardica, un síncope me daría, directamente.

Dana dijo...

Este libro junto con la Granja y El fin de la eternidad, son tres clásico maravillosos, porque tal y como dices, en el momento que cerramos el libro nuestra cabeza comienza a bullir intensamente y sin darnos cuenta, mucho tiempo después seguimos pensando en aquello que nos marcó, en aquello que sabemos pero que no queremos reconocer que se encuentra en nuestra habitación 101 particular
Un beso helado desde Dublín

Pikifiore dijo...

Vaya...esto me está haciendo pensar en qué es lo que habría en la habitación 101, hay tantas cosas que me aterran...muchas...

Sílvia dijo...

Vuelvo a estar de acuerdo con Di, este libro es mucho más y me extraña que aún no lo hubieras leído y/o que te diera pereza. Podrías seguir con "Rebelión en la Granja"... también está muy bien.

Hans dijo...

Fantástico análisis. Y si, hay muchos más ámbitos de reflexión en naintineitifor, pero me parece sensato seleccionar sólo uno.
Está bien pensar en el horror de los espejos.
Y gracias a Dios en estos tiempos, en general, podemos llegar a vivir una vida entera y plena sin asomarnos a ello.

molinos dijo...

A ver...panda de listillos descerebrados...no sé por que os sorprende que no lo hubiera leído. No lo he leido todo...y lo he leido en el momento que le correspondía.

Y claro que hay mucha mas cosas, pero ésta es la que se me ha ocurrido hoy...cualquier otro dia se me ocurrira otra...o no.

Gonzalo Viveiró Ruiz dijo...

La habitación 101 no creo que te enfrente con tus fobias. Ni con tus miedos.
Yo creo que te enfrenta contigo, como tu has dicho, con tu pura miseria. Manifestandola a traves de cualquier gilipollez que te desenmascare ante tu propia conciencia.
¿En serio tienes una fobia? ¿cual?

Gonzalo Viveiró Ruiz dijo...

Ah! este y el de la caja negra, son los mejores comentarios de libro que has hecho

The Doll dijo...

Orwel maravilloso, tu "Querida" igualmente fantástica, grata sorpresa encontrar tu blog.
saludos

XAquí dijo...

Lo tengo muy presente, tenemos la suerte de no saber a donde seríamos capaces de llegar.

XEIA2410 dijo...

Ostrassss, 1984..... Creo que toca relectura, pues lo leí de adolescente y precisamente lo que comentas no es con lo principal que me quedé.
Genial post, de los que me encantan, para elucubrar y darle vueltas al tarro sin fin y plentearte cosas y....muy interesante, Moli

Portarosa dijo...

A mí lo que más me impresionó es precisamente que uno de los personajes (creo que uno con el que se cruzaba el protagonista mientras esperaba para entrar en la habitación) suplicase que le hiciesen lo que quisieran a sus hijos y a su mujer, pero que a él lo dejasen.

Un beso.

Anónimo dijo...

yo creo que si juntara todo lo que me da miedo harían falta ochocientas habitaciones por lo menos, tengo pánico a todo bicho que se arastre o que tenga más de cuatro patas y no sea un perro.
Muchas veces he tenido verdadero pánico cuando por ejemplo he soñado algo que me da muchísimo miedo, y es caerme dentro de como una especie de alberca con agua sucia, o negra, me da terror, por no poder ver el fondo y no saber qué hay abajo.

A mi el mar me da miedo, soy de las que entra y desde la orilla ya mira concienzudamente qué estoy pisando o qué hay debajo.

Una vez vi una peli que se llamaba 'arrecife' o algo así donde un grupo de gente va en un barquito y de repente se hunde y tienen que ir a nado hasta la isla más cercana en una playa atestada de tiburones.
No pude terminar de ver la pelicula, y mira que era cutre, pero sé que si la seguía viendo iba a tener pesadillas dos meses seguidos...uffff

No sé cómo reaccionaria si me encontrara en una situación así y no quiero ni imaginármelo, y si te cuento lo mal que lo pasa una amiga que tengo que tiene 'parálisis del sueño' donde ve gente que ni conoce que se acerca a ella, yo creo que directamente me da un infarto!

En fin, si no se tuviera miedo a nada, vaya rollo no? no habría misterio!

saludos!!!

Heunice dijo...

Guauuuuuuuuuuuuu... pues yo ni escribo lo que habría en mi habitación 101, porque si lo escribo pienso en ello y si pienso en ello me da un algo...

Vaya post... Me encanta/s ;)

NáN dijo...

El único remedio al miedo es la locura. Por eso estamos como estamos.

tarambana dijo...

La pregunta es: ¿Qué cosas harías si no tuvieras miedo?
Yo....creo que sería famosa

:P

Ana María dijo...

Pues yo la verdad es que no sé qué habría en mi habitación 101. No sé racionalmente qué me pone tan al límite para dejarme pinchada al suelo y bloquearme.

Yo también lo tengo pendiente, pero este hecho va a ser solucionado pronto :)

Un besazo, feliz viernes!!

_Xisca_ dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Tita dijo...

Creo que solo tengo miedo de verdad desde que fui madre...

Pero si te digo la verdad, no me apetece mucho ahora averiguar más sobre mí. No en este momento.

Meryone dijo...

Yo llevo quince años dándole vueltas.

Sigue siendo una de las cosas más terribles que he leído en mi vida.

Por cierto, por motivos académicos, ando leyendo un libro sobre Auschwitz y como cambiaba a la gente y ayer estuve llorando mientras leía.

Besos

Violeta dijo...

1984 es una burda copia de "Anthem", de Ayn Rand ("Vivir", en su versión española). Fue publicada unos 10 años antes que la de Orwell.
Te recomiendo que la leas, no deja indiferente a nadie.
Saludos,
V

Amaranta dijo...

En Archipielago Gulag contaban como los torturadores eran sus propios vecinos y conocidos, gente "buena" con la que había convivido en armonia durante años. ¿ que lleva a gente con una vida normal a transformarse en un torturador? ¿ como vuelven a la vida normal con eso a sus espaldas?
De este libro que leí hace muchos años siempre me queda como después de haberlo contado absolutamente todo de su relación con ella, aún piensa que a ella no la ha traicionado poequé la sigue amando. Bueno a lo mejor no era así y es lo que quedo en mi cabeza adolescente.

Anónimo dijo...

Podrias decirme en qué libro has leido lo de las hambrunas de Ucrania? Ando buscando literatura al respecto y no consigo encontrar nada...

Gracias!

Illa dijo...

Yo me leí el libro de adolescente o pre-adolescente y me impactó mucho. Ahora me lo estoy volviendo a leer en inglés por obligación y creo que me está gustando más que entonces, aunque es muy duro, diría que terrorífico. El viernes el profe de inglés nos puso la peli protagonizada por John Hurt y salí tan tocada que me fui directa al Corte Inglés a llenarme de luces y buenos rollos, aunque sean artificiales! Comparto la opinión que provoca mil reflexiones y la de las fobias es una más. Y también comparto lo de que las fobias de cada uno, mejor guardárselas para uno mismo!

Anónimo dijo...

Desde que vi que lo estabas leyendo, esperaba que le dedicases un post. Lo considero un buen libro, pero a mí quizás me pilló con el ánimo bajo. Anteriormente me leí "Rebelión en la granja", "Firmin"... vamos que ya estaba deprimidilla, y "1984" lo remató del todo, lo siguiente que leí fue un libro de gatos, para suavizar la situación. No sé si hay algo peor en esa habitación que el mismo tema del libro.
Izas.

JC dijo...

Hola,

101 es el nombre de los cursos de iniciación en las universidades americanas y aparece en muchos otros sitios, como por ejemplo en Matrix (por otras razones).

Más información sobre el simbolismo
http://matrix.wikia.com/wiki/Room_101

Saludos,
Juan Carlos

Tocaweb dijo...

Todos somos capaces de todo, de lo mejor y de lo peor. Lo que sucede en este tipo de situaciones críticas y que nos lleva a sacar lo peor de nosotros es lo mismo que nos lleva a entrar en las llamas y salvar a una persona en un incendio, simplemente varía el detonante, la situación de contorno, el como te sientes hoy...

Esas cargas a perpetuidad son las que nos hacen ser seres humanos. Unas gustan y otras no.

monica dijo...

A mi ese libro tambien me encantó, pero lo que mas me asustó no fue la habitación 101 en si, sino el hecho de que cuando hay alguien en contra del sistema lo que deciden no es eliminarle, sino torturarle psicologicamente hasta que vuelve a ser sumiso al gran hermano. Es desolador cuando al final Winston se encuentra con la chica pero ya a ninguno de los dos les queda voluntad ni siquiera para saludarse...