jueves, 15 de septiembre de 2011

MALDAD Y ENTUSIASMO

No sé muy bien cómo va a salir esto, pero llevo dos días sin publicar y no puede ser. A ver si por no practicar voy a perder el ritmo. Esto es como todo, no se te olvida, pero pierdes destreza y si lo dejas mucho cuando vuelves a ello tienes hasta agujetas…así que a practicar.

En teoría el entusiasmo y la maldad no tienen mucho que ver a no ser que uno sea un malvado muy entusiasta lo que lamentablemente le hace perder efectividad en su maldad y además digamos que la maldad no está bien vista.

En lo que se parecen el entusiasmo y la maldad es que para sentirlos como se merecen hay que ser conscientes de uno mismo, de lo que está sintiendo. Hay que pararse y decir…eh...estoy entusiasmado y mola mil…o estoy siendo malo y no hay donde esconderse ni justificación, lo estoy siendo.

Primero la maldad.

Hablo de la maldad porque si. Hacer algo que sabes que está mal a propósito. NO hablo de hacer mal a alguien haciendo algo que a ti te satisface de otra manera, o de hacer mal sin darte cuenta, no. Hablo de ejecutar una acción sabiendo que está mal y con la única justificación de causar mal al otro y además de esa acción la única satisfacción que sacas tú es el daño que causas.

Si...claro...ninguno hemos hecho eso jamás en la vida…todos somos buenísimos y tenemos un buen fondo y nunca hemos hecho algo asi. Pues tengo mis dudas. El problema es que no mola ser malo, y para ser malo hay que ser consciente de ello...no mola decir...he sido malo, me he portado mal. No está bien visto, así que lo enmascaramos de mil maneras…la peor de todas es: si, lo que hice estaba mal...pero es que la otra persona había sido mala antes.

Correcto. La otra persona ha sido una completa hija de puta por el motivo que sea. X, pero si tú haces algo que está mal con el único motivo de causarle mal…estás siendo igual de malvado. Admítelo, se coherente, no te justifiques. Decidiste ser malo, hacer algo para putear y lo has hecho.

Ya está. No me vengas ahora con “no es que X se lo merecía porque antes”…me da igual. Me da igual quien fuera X y lo que hiciera. Tú has hecho una maldad y apechuga con ello.

Que conste que no estoy diciendo que no haya que ser malo. Eso lo decide cada uno en sus circunstancias y no vivo en los mundos de Hello Kitty (a pesar de la campaña de C por decorarme la casa con la gata de los cojones) y todos tenemos un fondo de maldad aunque todos hayamos llegado al acuerdo de esconderlo al fondo a la derecha y no enseñarlo.

A lo que voy es que si eres malvado por la simple satisfacción de serlo, por venganza...asúmelo, vive con ello y no lo justifiques. Hay que asumir que no somos perfectos ni la gente esa que sale en los anuncios que no se mancha nunca, quiere a sus vecinos y su máximo problema es quitar una mancha absurda de césped en una rodillera del pantalón.

Y además un malo arrepentido es un completo fiasco..como Dart Vader...molaba mil hasta que salió con lo de Luke soy tu padre..toda mi infancia queriendo ser Darth Vader y respirar como si tuviera mocos y al final descubro que era un fraude. Nada peor que un malo con conciencia.

Ahora la parte amable.

Al entusiasmo le pasa más o menos lo mismo. El entusiasmo es un sentimiento que necesita de la conciencia de sentirlo para desarrollarse plenamente. La tristeza, por ejemplo, llega y te arrasa, no puedes hacer como que no está, una oleada de pena provocada por nada en concreto llega un día, en un momento y puedes optar por bracear para intentar salir de ella o dejarte arrastrar.

Al entusiasmo no le pasa eso. El entusiasmo no llega, el entusiasmo se crea. Para sentirlo hay que querer algo, hay que tener interés por algo, hay que dejar que lo que sea (la fórmula 1, los libros, Bruce, la física cuántica, los peces de colores, la repostería, el futbol, escribir, los gintonics o lo que sea) que te guste, te llegue a apasionar. Hay que construir ese entusiasmo por lo que sea y disfrutar de él...decir...joder…¡¡como me mola este libro!! O ¡¡como me flipa esta canción!! O ¡¡de puta madre que he conseguido hacer una tarta de cumpleaños para mi hija con barritas de Kit Kat!! (1)….y hay que ser consciente de que uno está entusiasmado…nota el cuerpo en tensión, todo su cuerpo en tensión porque hay algo que le llega, que le toca, que le hace sentir más vivo…algo con lo que vibra.

El entusiasmo es además, un sentimiento que hay que mimar. Y es un sentimiento muy muy difícil de compartir precisamente porque aquello que nos lo provoca es extremadamente personal. Estas dos circunstancias hacen que sea un sentimiento frágil...muy frágil y que si te lo rompen te dejará hecho polvo. No hay nada peor que la frase “yo no sé qué interés le ves a esto”…como respuesta a un entusiasmo verdadero… te deja arrasado.

Hay que mimar el entusiasmo propio y tener muchísimo cuidado con el entusiasmo de los demás…a no ser que quieras ser malo a propósito...porque entonces, joderle el entusiasmo a alguien es una manera fácil y muy efectiva de hacer el mal.

Eso sí...cuando consigues transmitir el entusiasmo por algo que te interesa a otro alguien…y no solo ese alguien lo capta si no que se interesa y percibes como se va entusiasmando poco a poco ( aunque nunca llegue a tu nivel )….es un sentimiento que vale millones.

No pasa casi nunca...pero cuando pasa es la leche. Y hay que ser conscientes de que te está pasando…para disfrutarlo como se merece.

Y sé que hay miles de entusiastas de Darth Vader cuando molaba por ahi....

(1) Homenaje a mi amiga Anniehall y su reposterexia.

23 comentarios:

Sprocket314 dijo...

Pero Moli, ¡no me pongas acotación (1) sobre la tarta de kit-kat y luego no lo expliques!

Cattz dijo...

Yo he sido mala de forma plenamente consciente y lo disfruté de mala manera. Y porque luego vino mi mejor amiga y me hizo disculparme(lo hice por ella), pero por mí me habría revolcado en mi hijoputez felizmente el resto de mi vida. De hecho el tener que disculparme hace que el momento ya no sea tan placentero. Y sé que fui ruin y sé que le hice llorar a sabiendas, yendo a por los puntos débiles y destrozándole... y lo volvería hacer ahora y siempre.
Hay veces en que he sido hijadeputa pero porque me sentía mal y reaccioné atacando, de esas cosas me arrepiento. Esto fue frío, meditado y profundamente satisfactorio.

Lo de entusiasmarse también mola. Es una de las cosas que me encantan de Mentiroso, es sencillísimo encontrar algo que le pueda gustar y entusiasmarle con ello.

molinos dijo...

Gracias Sprocket.

MuTrA dijo...

Estoy de acuerdo con Sprocket, explica lo de la tarta de barritas de kit-kat. :P Precisamente porque una vez me fastidiaron el entusiasmo por algo que había logrado he aprendido a ser de lo más comedida. Ya no doy saltos de alegría cuando algo me sale bien o cuando me regalan algo que quiero realmente, prefiero sentir cómo el entusiasmo quiere romperme el pecho por lo feliz que me hace sentir a expresarlo abiertamente. Cosas que pasan con las malas experiencias. Respecto a lo de la maldad... También hay personas que quieren ser malas alegando eso de que "X fue malo primero" cuando no saben que X no ha hecho nada de nada (también va por experiencia, me pasa actualmente y yo soy X).

Besos guapa, ya se extrañaban tus actualizaciones. Y perdona la parrafada.

:*************

Amaranta dijo...

De verdad que no lo entiendo, no entiendo esa mala fama de la venganza. Quiero decir que sin justificar la venganza en sí, lo que no puedo entender es que alguien que habla de maldad, no considera el colmo de la maldad el hacer daño gratuitamente. Porque sí, que el que se venga es malo, no te fastidia, una cosa es ser buena y otra gilipollas y qué quieres que te diga yo soy buenisima pero gilipollas no. Pero si hablamos de maldad, no será más malo el que lo hace gratuitamente, porque se le puso en su santa voluntad sin que hubiera el triste motivo de que antes te fastidiaron a ti¿¿??.

Quiero decir a estos bichejos qué pasa¿¿??!!! porque pegaron primero son miembros de la santísima trinidad¿¿?? y el que responde es "tan malo como el que ha venido a fastidiar"¿¿??.

No sé qué valores os enseñaron a vosotros, pero a mi me parece la hostia de la maldad llegar y fastidiar a alguien por el puro placer de fastidiar sin que me haya movido sentimiento alguno de revancha. El que se venga al fin y al cabo sucumbe a un sentimiento. Pero la maldad la genuina malda surge de la gratuidad, del hecho de disfrutar del hacer daño sin que haya mediado agresión de ningún tipo.

Y esos individuos existen, lo que pasa es que se amparan precisamente porque esta sociedad rechaza el hecho de la defensa propia, de la venganza. Al que se venga encima tiene que escuchar que es tan malo como el que le arreó primero.

Me da a mi la impresión que tú eres de las que arrean primero, por eso desvías la atención a que el que responde es "igual de malo".

Anónimo dijo...

Yo soy absolutamente entusiasta y alegre cuando algo me entusiasma (valga la "rebuznancia"), si algo me alegra me alegra infinito y lo celebro y lo comparto con el que quier escucharme...La gente templada y mas serena me confunde porque no entiendo vivir sin entusiasmo.
Respecto a la maldad, no voy a decir que no la he practicado nunca porque soy humana y arrebatos también me dan pero la maldita educación católica y basada en el hay que ser buenabuena y un poco la cobardía, hacen que siempre me sienta fatal después.


Laaiin.

Tita dijo...

Entonces pasa de Darth Vader, y quedate con Raskolnikov, que tan bueno que era era un pedazo de malvado que de lo unico que se arrepiente es de haber tenido conciencia y haberse entregado.

Ese si que es un malo. De conviccion y luchando contra su conciencia.

Yo al entusiasmo no le veo tampoco esfuerzo, creo que no tengo que alimentarlo, me crece como la mala hierba. Y no te dejes pisar los entusiasmos, que es lo unico que hace que no nos hagamos mayores, y unos tristes!!!

sasha dijo...

¡Moli, estoy en plena oleada de entusiasmo, contangiando a una amiga (ya socia) y montando una empresa desde la cocina... Me has leído el corazón.

También estoy escribiendo notas insultantes para su difusión masiva, en respuesta a varios idiotas. Una vomitona de mala leche que no desplegaba desde hacía décadas. ¡Me has leído la vesícula biliar!

Hermano E. dijo...

"Nadie sabe lo que hace mientras actúa correctamente, pero de lo que está mal uno siempre es consciente".
Johann Wolgang Goethe.

Chirly dijo...

Pues hombre, hombre, hombreeeee... mira, a mi me encantaba andar en bici de montaña. Me volví un entusiasta de eso y estaba todo el día contándole a todo el mundo que había descubierto un camino que te llevaba por aquí y por allá, que había conseguido llegar hasta nosédonde sin pisar asfalto y que resulta que a cinco minutos de la ciudad había un sitio maravilloso que jamás hubiera dicho que pudiera haber... hasta que un día, un vecino se dijo ¿andar en bici de montaña, eeeeeh? ¿y puedo ir contigo? eso ya me jodió un poquito, porque a pesar de mi entusiasmo, una parte grande de lo que me molaba de andar en bici era pasar un rato en soledad: yo, el cielo y la tierra; pararme cuando me diera la gana a investigar una fábrica abandonada, un barrio por el que nunca había andado, o un caserío vacío en medio de un bosque... pero claro, después de ir dando la brasa por ahí no le vas a decir a un tío "pues mira, mejor no", así que salimos alguna vez por ahí. Resultó que el tío, sólo quería machacarse y machacarse, y le daba igual ir entre valles preciosos o andar por el interior de un tunel, para él aquello era andar y andar, cada vez más y más rápido, rollo vigoréxico perdido. Al final yo dejé de andar en bici sólo por no tener que ir con él, y él se ha vuelto loco, sale tres o cuatro días a la semana, se mete tundas de entre ochenta y cien kilómetros, se ha comprado una bici de casi seis mil leuracos y no sólo se ha pasado de "entusiasmo" si no que me quitó el mío. No me moló nada.

Anniehall dijo...

Glups! Gracias mil muy entusiasmadas por el homenaje!!

A mí me encanta la gente que se entusiasma, aunque no entienda muy bien su objeto de entusiasmo. Yo antes era más comedida, me entusiasmaba muuucho pero por dentro. Y, la verdad, lo disfruto mucho más desde que me voy dejando llevar sin importarme el qué dirán.

Y sí, ningunear las ilusiones de alguien es muy ruin.

Sasha, valiente, mucha suerte!!

¿Hay bicis de seis mil euros? Maadre

Lili dijo...

Para mí la maldad puede no ser permanente y tener diferentes grados. No hace falta ser un asesino en serie para ser malo: también lo es el egoista (diferente grado, claro está, pero malo al fin y al cabo), o el envidioso, o el que odia pero no lo exterioriza.
Y en cuanto al entusiasmo, es como la suerte y pienso igual que tú: hay que cultivarlo. Yo siempre decía "que suerte tengo" hasta que un día mi novio me dijo "la suerte es que pienses que tienes suerte, eso hace que todo lo veas desde otra perspectiva".
Ah! Y escribir es un oficio, y cómo decía ..., ahora no recuerdo quién!, es un 1% de inspiración y un 99% de transpiración.
Besos! Y me ha encantado tu entrada.

Anónimo dijo...

Uno no es malo al completo, salvo que estemos hablando de un psicópata, claro está. Todos tenemos nuestros momentos: de los de puta a puta taconazo (y con un par), de los de Campanilla (ains, es que yo estaba celosa, pero Wendy, hija, entiéndelo), y por supuesto, de los de mala malísima. Y yo esta semana, confieso, lo he sido por el puro placer de fastidiar. Y sin remordimientos.
¿Entusiastas? Ahí, mira, no contemplo los matices: es todo o nada. Un año entero haciendo crucigramas y ahora soy incapaz hasta de resolver una sopa de letras. Qué cosas (nos) pasan!!!

JuanRa Diablo dijo...

Qué gran verdad es esa de que es bien fácil chafar a un entusiasta.
Cuando mi mujer me empieza a enseñar la ropa que se ha comprado tengo esforzarme en disimular mi cara de aburrimiento o se me hunde en la miseria.

Pero es que ella fue mala primero, que bosteza cuando le hablo de blogs!!

Amanita Phaloides dijo...

Me has recordado a Flip, el saltamontes de La Abeja Maya y su "¡Estoy entusiasma-do!" Hoy debo de estar en modo "pensamiento profundo".

Y para maldad, Glenn Close: Las amistades peligrosas, Atracción Fatal, 101 y 102 dálmatas. Mala consistente y sin arrepentimiento. De mayor yo quiero ser así, que me salga solo...

Hans dijo...

'estoy entusiasma-do' era Snörre, en Vikie el vikingo. Perdonad la pedantería vintage. Dicho esto, yo soy un hombre entusiasta, y me encanta serlo. Si es bueno, mil veces bueno. Y si es malo, mil también. Y ya.
P. S., gracias por actualizar, empezaba a faltarme la dosis

oriana dijo...

el entusiasmo por lo que sea es bueno y no debemos dejar que nos lo chafen, la venganza es mala pero todos hemos estado en el lado oscuro, eso seguro. Hay un post por ahi sobre la venganza jaja con una grapadora de por medio,,todavia me acuerdo porque se me saltaban las lagrimas de risa, requiere imaginacion y sutileza y no todo el mundo sabe emplearla, no se trata de ser un psicopata. La maldad...bueno, no queda mas remedio que aprenderla, por desgracia "is in the air" muchas veces pienso que no me vendria mal ser un poco mas mala.

Totoro dijo...

Creo que estamos de acuerdo en que todos tenemos nuestro lado oscuro (todos y todos-toditos-todos somos conscientes de ello) otra cosa es que dejemos pasearse a la vestia gratuitamente... pero de vez en cuando soltar la correa... como libera!

Yo soy de entusiasmarse hasta por el vuelo de una mosca... soy asi de sencilla, por cualquier cosita. Lloro y rio y doy saltitos y bailo .... y me importa un pimiento lo que digan/opinen los demas. Si me entusiasmo es MI ENTUSIASMO y el que quiera participar sera bienvenido el que no... sorrys el se lo pierde. Los entusiasmos son lo mejor del mundo

Kobal dijo...

Solo diré dos cosas. Mola ser malvado y mola Darth Vader. ¿Quien quiere ser un puritano meapilas como Luke SkyWalker?

Esther dijo...

Mi abuelo decía, "la gente no es más mala porque no sabe", a lo que yo añado, "no es malo porque no es lo suficientemente inteligente para serlo y por ello, se queda en tonto" ...sino ya verías lo malos que somos tod@s!
Lo de joderle el entusiasmo a alguien como forma de maldad sencilla me lo apunto. jeje

XAquí dijo...

Esto es un mal comentario de mala lectora. De principios, que les den a todos los malos vocacionales por donde ellos dan. Soy de pequeñas revanchas, pero no aguanto a los que se regodean en sus miserias, que los tengo cerca.
Para todo lo demás, a gozar.

Anónimo dijo...

Con los que está plenamente justificado ser malo es con aquellos que te roban el entusiasmo. Creo que es una de las acciones más viles que existen.
Abogo por la venganza sobre todo si se sirve en plato frío y me revienta mi conciencia que casi nunca me permite ejecutarla!

Burbuja dijo...

Estoy con Aliena, maldita conciencia que no me deja regodearme con una buena venganza en plato frío...

¿¿Y ese momento en que tu maldad-venganza-comoqueramosllamarlo es una fuente de entusiasmo?? Eh? Eh?

(También quiero que expliques la tarta de kit-kats)