miércoles, 18 de febrero de 2015

Escalas


Todos tenemos una jerga clasificatoria. Sé que hay gente que va a decir que eso está feísimo, que si es sexismo, machismo, prolongar el patriarcado, defender la apariencia por encima de todo, cosificar a la gente y un millón de cosas más. 

Si esto fuera a ser un post de jerga clasificatoria exclusivamente de mujeres puede que tuvieran razón, pero traigo para todos. Un ranking de expresiones para ellos y ellas que se utilizan en mi entorno y que clarifican cuando hablamos de "desconocidos".  

La de ellos. 

"Tienes algo y eres increíble". Es lo más en la escala. Es como quedarse sin palabras. "Algo" es todo. 

"Estás estupenda". De aplicación a una amiga íntima (sin roce sexual) cuando aparece especialmente arreglada, tiene el guapo subido, lo sabe y se le nota. No se aplica jamás a nadie menor de 35 años. 

"Fresca". Define a una chica guapa y joven. Podría parecer que es un vocablo de viejo verde, pero no; los jóvenes también lo usan. Con el adverbio "muy" delante significa que es guapísima pero sin llegar a asustar. 

"Guapa". Define a una mujer espectacularmente guapa, tanto que asusta. Increíblemente, se puede ser "demasiado" guapa. Algo así como pasarte de frenada. Charlize Theron es un buen ejemplo.

"Estar buenísima". Define a una mujer a la que se imagina embutida en un mono de cuero 3 tallas más pequeño. Normalmente el photoshop produce este tipo de mujeres. Por alguna extraña razón, mientras ser muy guapa puede convertirte en alguien inalcanzable y casi de otro planeta, estar buenísima lleva asociado, en el imaginario colectivo masculino, la ingenua idea de que si se encontraran en un ascensor con esa mujer tendrían alguna posibilidad de intercambiar fluidos y salir por la puerta grande. La idea es ingenua y muy idiota, pero el inconsciente funciona así. 

"Es misteriosa". Buuu buuuu buuuu. Un fraude. 

"Double check". Las rubias. Por lo visto en España son escasas y por eso se tiende a pensar que todas son guapas, de ahí que se necesite una doble comprobación. En visitas a países del norte de Europa este double check ralentiza mucho el turismo. 

"Muy simpática". Define a una mujer que no es especialmente guapa, ni falta que le hace porque es encantadora. 

"Muy simpática y muy culta". Ni con un palo. Es la antipatía con patas. 

“Hermanastra de Cenicienta”. Da miedo.

"Es muy cariñosa". Las abuelas. 

La de ellas. 

"Atractivo". Casi cualquier hombre del planeta dicho por la mujer que le ve con los ojos adecuados. Es una condición inexplicable, como el "tener algo" de ellas, que hace a ese hombre especial. Se puede ser feo pero ser atractivo, esto es así. Las tías lo sabemos pero no podemos explicarlo, como la Iglesia con los dogmas.

Si va asociado a "guapo", se aplica el concepto del punto siguiente. 

"Es interesante". Define a los hombres por los que se siente cierta inclinación, puede que cargada con un poco (o un mucho) de TSNR, pero que se perciben inalcanzables por lo que sea. Raramente son inalcanzables, es casi siempre una cuestión de paciencia. 

"Es guapo". Un hombre es o no es guapo, pero su condición de guapo no le hace inmediatamente atractivo. Puede ser guapo pero resultar completamente indiferente o incluso repulsivo a parte del público femenino. Se me ocurren muchos ejemplos pero sólo diré una palabra; bueno, dos: Casillas y Cristiano. No hay más preguntas. 

"Es encantador". Define a un hombre bueno, simpático, majete, divertido. No está claro qué tipo de relación se puede tener con él. Se aplica en un rango de edad muy amplio y con un, aún más amplio, nivel de contacto. Tu novio puede ser encantador pero también puede serlo el pescadero de tu barrio. Confuso, lo sé. 

"Es un encanto". Define a un hombre al que se le tiene el mismo cariño que a un oso de peluche y todo el contacto físico que se va a tener con él es un abrazo en pijama. Ser un encanto es bueno para ella, malo para él si tenía pensado ir más allá. 

“Es mono” o su variante “Es monísimo”.- define a un hombre que no te gusta, que dan ganas de arropar y a veces incluso de pellizcarle la mejilla. Lamentablemente llega una edad en la que se aplica a los chicos que les gustan a tus hijas. Ser mono parece más inofensivo que “guapo o atractivo”. A los padres “ser mono” les parece equivalente a “es un depredador que va a zamparse a mi princesa”... pero ese es otro tema. 

"Está buenísimo". Tras pasar la epifanía por la que toda mujer pasa, define a los hombres que es casi mejor que no hablen. Para aclarar, "está buenísimo" es el equivalente a las tías imaginadas en monos de cuero. 

"Me pone".- sobre esto ya diserté en su momento. Define a un hombre que te atrae a pesar de no cumplir ni uno solo de los requisitos que en teoría deberían gustarte. Es más, algunos los incumple totalmente. 

"Es blando". Reconozco que esta es bastante personal y la aplico a hombres a los que soy capaz de imaginar con la cola entre las piernas bailando frente al espejo. Walter White, a pesar de su fachada de malote y raparse la cabeza, es un blando. No hay más que ver las escenas en calzoncillos. 


¿Dónde estaré yo? Seguro que con mono de cuero no. 

lunes, 16 de febrero de 2015

El consultorio de Haruki Murakami

En el mundo hay gente cansina, muy cansina, después está  Haruki Murakami y en el top del cansinismo los fans de Haruki Murakami. 

Solo a un ser superior de inteligencia malvada y cruel se le podía ocurrir susurrarle al egocéntrico de Haruki algo como

"Haruki, rey moro, ídolo de occidente, faro de la espiritualidad corredora, eterno aspirante al Premio Nobel que por supuesto injustamente no te conceden, ¿Por qué no abres una página web para que todos tus seguidores / fans / miembros de tu secta puedan acceder a tu excelsa sabiduría, adorarte como te mereces y consultarte sus dudas existenciales?

Haruki, que es un tipo sacrificado hasta extremos insospechados, se encontraba en esos momentos decidiendo si escribía una novela sobre lo valioso que es para uno mismo encontrarle el gusto a arrancarte las uñas o una historia sin pies ni cabeza (otra) con gatos que hablan, locas misteriosas lánguidas y pobres desdichados que se enamoran sin sentido y descubren al final que son un gato.  Como no acababa de decidirse, la idea del Ser Superior le pareció fetén y montó: "Díselo a Haruki", algo así como el consultorio de la Señora Francis pero en más kitch. 

Lamentablemente, el bueno de  Haruki tiene un nivel de entrega a sus seguidores muy limitado y su página está prácticamente entera en japonés. Aún así, buceando en esa piscina de sabiduría zen, egocentrismo y mística se pueden encontrar algunas preguntas en inglés que nos dan a los pobres diablos como nosotros, que no hablamos el idioma del país del Sol Naciente, acceso a los consejos del bueno de Haruki. 

Pero primero disfrutemos de la estética de la página.

¡No vale reírse! Estamos hablando de Haruki Murakami "Ídolo de occidente, faro de la espiritualidad corredora, injustamente alejado del Nobel que deberían darle todos los años". 



¿Qué la página parece una web de una serie de dibujos animados tipo Shin Chan? Por favor, un poco de respeto. Sois malos y seguro que sospecháis que en toda esa caligrafía japonesa en vez de poner "Díselo a Haruki", "Corre y siente tu espíritu volar" o "Danza con la música de tu espíritu libre", pone "Tonto el que lo lea","Cristina la chupa" y cosas de esas soeces y terrenales. 

Yo no sé japonés más allá de la letra original de la sintonía de Heidi, pero sé que Haruki es un tío serio y no pone esas cosas. Analicemos las ilustraciones. 

Un ficus, yo creo que de plástico. Un gato muy serio comiéndose un dónut sin palillos y sin nada, un carnero con un vinilo en la mano y Haruki con pinta de ser de Córdoba tomando café en la taza de Angel Martín en Órbita Laika. 

Todo muy perturbador. Supongamos, y es mucho suponer, que alguien llega a esa página y no sabe quién es Haruki (¡Inconcebible! como diría Vizzini y el propio Haruki), para empezar tendría que creerse que es japonés porque lo digo yo. Y segundo, pensaría que Haruki está un poquito desequilibrado y el tema de las mascotas se le ha ido de las manos completamente. 



Toda la web está llena de ilustraciones maravillosas que sin duda alguna fomentan la confianza en que Haruki sea el guardián de la sabiduría suprema. Si la gente confía en la Bruja Lola, ¿cómo no va a confiar en un tío que se sienta en un horrible sofá marrón a charlar con un macho cabrio y una... una... una nutria, hurón, castor, rata, un amigo imaginario de Haruki, mientras se aferra a su taza? Empiezo a sospechar que en la taza del faro espiritual de los runners hay algo más que té, algo que no comparte con todos esos que se lanzan a correr y acaban vomitando los pulmones. 

Inciso. -Esto ya es maldad personal pero entre el carnero sonriente y Haruki veo un poquito de TSNR, ahí lo dejo-. Fin del inciso. 

Bueno, ya está bien de jolgorio y diversión. Vamos a zambullirnos en lo que de verdad importa, el consultorio propiamente dicho. 


¡Uy!, otra ilustración. El gato del dónut haciendo punto a la hora del té. No consigo encontrarle ninguna explicación lógica a esto y eso que he leído /sufrido /odiado ¡4 libros de Murakami! ¡Soy una mártir!

Vayamos a la pregunta de alguien que firma como "Fan pálida de Murakami"

"Querido Sr. Murakami, usted es sin duda alguna la persona de todo el mundo que más ha influido en mi vida y por eso le estoy eternamente agradecida, a usted y a sus obras. Si pudiera ser uno de sus personajes ¿cuál sería?". 

Haruki salta graciosamente por encima del increíble y patético halago y contesta: "me gustaría ser el carnero, pasarme el día disfrazado de algo o de alguien". Hombre Haruki, ya te has disfrazado de chaval joven de Córdoba en tu página, pillín. 

Supongo que Fan pálida (¿se puede ser fan de Murakami y no ser pálida y lánguida y con horchata en las venas?, me cuesta creerlo) se habrá quedado un poco chof con esta respuesta. 

Sigamos buceando. 

Niall, gestor de riesgos que me deja patidifusa. 
"Querido Sr. Murakami, mi hija tiene 11 años y pronto tendré que escoger instituto para ella. ¿Qué opinión tiene al respecto? ¿Es usted partidario de los colegios mixtos o mejor "solo para niñas" y "solo para niños"? Tiene usted mucha sabiduría sobre la humanidad  que resuenan en mí y me gustaría saber su opinión sobre esta gran decisión que afecta a mi familia. Quiero a mi hija más que a nada en el mundo y me gustaría tomar la mejor decisión posible". 
Haruki contesta que él siempre fue a colegios mixtos y se lo pasó en grande porque conoció a muchas chicas adorables, así que recomienda que la "guapa, preciosa y adorable" hija de Niall vaya a un colegio mixto y a lo mejor ella "encuentra un chico guapo y adorable (como yo)"

Eso dice Haruki. Yo tengo un par de cositas que decirle a Niall. Primero que espero que la gente a la que asesora en riesgos no le lea, segundo que va siendo hora de que le quiten la patria potestad y tercero que no deje acercarse a su hija a nadie que se parezca en lo más mínimo a Haruki. 

Tenemos preguntas de todo tipo. Soy muy fan de Morten de Alemania, que le cuenta al gurú que es un rapero y que está trabajando en su primer álbum con un grupo de productores potentes detrás, pero siente que no está igual de inspirado que antes, sus letras no tienen la misma fuerza creativa. (La razón por la que le pregunta qué puede hacer a un tío que escribe todos los libros exactamente iguales se me escapa). 

Haruki le da un consejo de campeón:
"Ah, eres un rapero rapeando en Alemania. ¡Qué interesante! Lo mejor que puedes hacer es encontrar un buen compañero, como Lennon y McCartney. Colaborar con alguien que te haga ser mejor y que te complemente, porque ningún hombre es una isla".
¡Qué campeón! Se le ha olvidado decir que lo mejor es rodearte de compañeros que no te hagan sombra pero sí compañía, como su carnero, su gato y su nutria/castor/hurón, que le dan esplendor y mística pero no le roban protagonismo. 

Llegamos por fin a una pregunta con enjundia literaria, Susan Shen:
"¿Piensa usted Murakami shan (mucho karate Kid veo yo aquí) en la influencia que sus historias tienen fuera de Japón? ¿Piensa alguna vez en las necesidades de sus lectores?"
Haruki se quita la careta y dice "Sinceramente jamás pienso en mis lectores, ni de Japón ni de ningún sitio. Las historias aparecen y tengo que cazarlas. No tengo tiempo para lectores, estoy ocupado persiguiendo mis historias. Gracias por leer mis libros".

Me quedo muerta. 

Para empezar me descojono imaginando a Haruki bailando en plan "¿Dónde está la mosca (historia), aquí o aquí?" y moviendo los bracitos intenta cazar la inspiración. 

Segundo, ¿cómo que no tienes tiempo para pensar en tus lectores? Haruki, que has montado un consultorio online donde respondes miles de preguntas. Un momento, un segundo... ¿quiere esto decir que por fin se te ha agotado la inspiración? ¿Ya no hay más historias que cazar? ¿No vas a torturarnos más con absurdas historias de carneros que hablan, gatos místicos que piensan y lánguidos japoneses que no comen? 

Demasiado bonito para ser verdad. 

Le preguntaré al gato tejedor o mejor llamaré a la nutria/castor. O al carnero sexy. 

PS: la primera ilustración del post con el lobo con gafas y el pingüino examinando detalladamente lel título CCC de Haruki que le habilita para tener un consultorio es mi favorita. 


jueves, 12 de febrero de 2015

martes, 10 de febrero de 2015

Cositas que he visto: recomendaciones y otros

He encadenado un montón de buenas experiencias televisivas y cinéfilas y voy a compartirlas por si acaso alguna noche estáis haciendo el tonto con el mando de la televisión y no sabéis que hacer con vuestro tiempo.

Cosas que SÍ hay que ver. 

Lo primero que tenéis que ver es Borgen, serie danesa sobre política. Es un estilo "El ala oeste de la Casa Blanca" pero más real y a la europea. Birgitte Nyborg es la líder del partido de los "Moderados" que por una extraña carambola de pactos y negociaciones políticas llega a Primera Ministra de Dinamarca. La serie retrata la política y la vida periodística danesa de una manera bastante realista y cotidiana. Sin heroicidades, sin falsos idealismos y con bastante de la miseria que es necesaria tragar para conseguir algo. Por supuesto la miseria con la que tratan tanto los políticos como los periodistas daneses al espectador español le parecen ciencia ficción. Basta decir que en el primer capítulo el primer ministro dimite por un error en un pago con la tarjeta de crédito, en un montón de capítulos la Presidenta da todo tipo de explicaciones y la prensa no se mete con su vida privada. Igualito que aquí. 

Por si el guión, la historia, la ambientación y la interpretación no fueran suficientes para convenceros os animo, sobre todo a ellas, a echarle un vistazo al marido de Birgitte. ¡Ah si! y para acabar de deprimirse si eres español, la Primera Ministra concilia y su marido renuncia a su carrera para que su mujer pueda dedicarse a la política. 

La sal de la tierra. Todos hemos visto alguna foto de Sebastiao Salgado aunque no lo sepamos. Hace 20 años Wim Wenders se quedó atrapado por esta foto de una mujer en Mali, la compró y la ha tenido desde entonces colgada en su despacho. En el 2013 emprendió la realización de este documental contando la vida de Salgado, compartiendo sus recuerdos, los de sus hijos, sus sus proyectos fotográficos y muchas historias sobre esas fotografías que te dejan con el cuerpo del revés y al borde del más absoluto desconsuelo pensando ¿Qué tipo de planeta tenemos? ¿Qué nos hacemos unos a otros? ¿Cómo es posible tanta desesperación? 

Sebastiao Salgado es un personaje increíble, con una vida que le ha cundido muchísimo y con un proyecto en Brasil que te hace volver a creer en la humanidad. 

Cosas que hay que ver si no eres un alma cándida o te lo haces. 

Otra serie buena para ver pero no para almas cándidas y frágiles es The Affair de Showtime. No hay que ser una lumbrera para saber de qué va la historia. Podemos creer que la historia de una infidelidad ya ha sido contada mil veces, pero no como en The Affair (Javier Meléndez lo cuenta muy bien). Ni es una infidelidad cualquiera ni está contada como estamos acostumbrados. Repito que no es para almas cándidas ni para gente que vive en los mundos de Hello Kitty, ni para todo aquel incapaz de enfrentarse y aceptar sus propios sentimientos por muy jodidos que estos sean. 

El actor principal es Dominic West, el agente McNulty en The Wire,  y la protagonista Ruth Wilson, una actriz que yo no conocía y que está estupenda en el papel. La serie va mejorando según avanza, por ahora sólo se ha emitido la primera temporada. 

Si Fiona Apple cantando Container en los títulos de crédito no os pone los pelos de punta es que no tenéis sangre en las venas. 

Para una tarde con merienda cena y tiempo suficiente recomiendo Boyhood. Son tres horas de película, de ver la vida pasar por delante de tus ojos sin que pase nada más espectacular ni menos que ver crecer a un niño y a sus padres. Todo el mundo sabe la historia, Richard Lintaker se ha pasado 12 años rodando para ver realmente la transformación de un niño en hombre tanto física como emocionalmente. Los cambios de los padres, interpretados por Patricia Arquette y Ethan Hawke, a mi me conmovieron más, creo que porque no tengo tanta consciencia de mis cambios de infancia y sin embargo me veo más reflejada en ese paso de veinteañeros a cuarentones. 

Ethan Hawke mejora con los años, cada día me gusta más, de hecho no me gustaba nada de joven. A mi yo joven no le gustaba Ethan, a mi yo de 41 años le encanta Hawke ahora. Tiene una extraña mezcla de fragilidad y fortaleza que me pone. No sé, es algo visceral. 

Cosas para ver con niños que no son precisamente infantiles

La boda de mi mejor amigo. Esta es una película muy tonta con un reparto mal elegido y que salva Ruperet Everett haciendo de él mismo de una manera magistral. El argumento es absurdo y nadie en su sano juicio puede creer que Julia Roberts pierda la cabeza por un tío tan soso como Dermot Mulroney, pero si tienes 10 años todo eso te da igual, te ríes con el personaje de Cameron Diaz y todo es de colorines y divertido. 

Eso si, si tienes 40 años te atragantas cuando el personaje de Julia Roberts dice "si a los 28 años no nos habíamos casado..." y casi te ahogas cuando tu hija de 9 años dice: 

- ¿28 años? ¿casarse a los 28? Pero si eso es jovencísima. ¿Con cuantos te casaste tú?
- Con 28

Malcom in the middle. Es una serie para ver con tus hijos si tiene sentido del humor y confías en tus hijos lo suficiente como para que sean capaces de diferenciar la ficción de la realidad. La familia de Malcom es un desastre, sus padres son unos pobres infelices que se matan en trabajos, son incultos y políticamente incorrectos y la serie tiene un sentido del humor que oscila entre el absurdo y el cinismo más cruel. A las tres nos encanta y nos reímos mucho. 

Y  los muy fans de Breaking Bad podéis ver a Bryan Cranston antes de que le idolatrarais por ser un supermalvado. 

Cosas que son una pérdida de tiempo

House of cards es una serie multipremiada con Kevin Spacey haciendo de malo malísimo y Robin Wright luciendo un corte de pelo maravilloso y unos vestidos alucinantes haciendo también de tía más mala que la peste negra. ¿De qué va la serie? De política. ¿Como Borgen? Sí pero en versión americana y sin alma. La primera temporada empieza bien, intrigas, enredos, Kevin Spacey siendo más listo que nadie... pero luego empiezan a desbarrar y para cuando terminas con la segunda temporada piensas: se les ha ido tanto la pinza que la única manera de que esto mejore es que aterricen unos marcianos o todo sea un sueño de Antonio Resines. 

Perdida, la ¿película? basada en el best seller. A pesar de que era muy complicado hacer algo peor que el libro que ya era una bazofia espectacular, David Fincher ha puesto todo su empeño y  lo ha conseguido con matrícula de honor. Un espanto aburrido, cansino, increíble y más largo que un día sin pan. 

Fincher consigue además con su maestría que los actores, el guión, la realización, la dirección y hasta la fotografía de la película transmitan la sensación de que absolutamente nadie de los que estaban implicados en su rodaje tenían un funcionamiento neuronal correcto. Si me dicen que la han hecho dormidos, me lo creo.

Volviendo al principio, todos a ver Borgen y La sal de la tierra, me lo agradeceréis. 


La fotografía del post es por supuesto de Sebastiao Salgado, de su proyecto Génesis.