domingo, 3 de abril de 2011

DE VISITA A MI PASADO

Es una sensación muy extraña. No es un sentimiento, ni un pensamiento.

Es una sensación física y es desagradable.

El miércoles fue el cumpleaños de pobrehermano mayor. 37 palos. Molimadre nos convocó a cenar en su casa de Madrid. Y allí que fuimos, y como me ha pasado cada vez que he vuelto a esa casa desde que dejé de vivir allí, hace casi 10 años, volví a tener la sensación de incomodidad, ese malestar.

La sensación empieza según llego y doy vueltas para aparcar. Es un hormigueo. Algo no va bien pero no se qué es. Es mi barrio. Hay cosas que han cambiado, han tirado muchas casas antiguas y han construido un rascacielos enorme justo a la espalda de casa de Molimadre. Si te pones debajo y miras hacia arriba da vértigo.

Era mi barrio pero ya no lo es, me causa tristeza. Es ridículo, porque nunca me gustó y tampoco me gusta ahora.

Esa sensación se intensifica cuando subo las escaleras del portal y tengo que llamar, porque no tengo llaves.¿ Por qué no tengo llaves? Era mi casa pero ya no lo es. Entro y ese hormigueo es ya casi doloroso cuando se abre la puerta y allí esta Molimadre. Pero algo no encaja..esa señora con el pelo blanco no debería abrirme la puerta.. la que tendría que estar al otro lado es la molimadre del pasado. De alguna manera rara y extraña, estoy de visita en mi pasado. Cuando me fui de casa de Molimadre en Madrid, me llevé todas mis cosas. Las cuatro mierdas que intenté dejar con la excusa de “ya me las llevaré más adelante”, estaban perfectamente empaquetadas en la entrada de la casa cuando volví del viaje de fin de novios.

- Moli..eso es tuyo. Si te lo llevas bien y lo que no, lo tiro.

- Bueno..ya iré viendo.

- No, no..hoy.

Viví en esa casa durante 28 años y no queda nada mío.

Hace 10 años que dejé de vivir allí, y en estos años he ido de visita como mucho unas 25 veces y sólo una vez me quedé a dormir.

Todo está más o menos igual que cuando me fui.

Cuando llego allí, de alguna manera rara, es como si no hubiera pasado el tiempo. Mi subconsciente espera que la que esté pululando por la casa, sea la Molimadre de hace 10 años y yo vuelvo a ser la que era con 28 años y mis hermanos igual. Me veo desde fuera, desde mi presente..y me siento como hace 10 años..Es muy raro.

El otro día, nos sentamos a cenar y me parecía que ni el ingeniero, ni laz princezas, ni molicuñado, ni minicuñado ni el nuevo bebepanocho encajaban ahí. ¿Qué hacían esos extraños en medio de mi pasado de hace 10 años? ¿ Quién soy yo ahí? ¿ mi yo del pasado sabe lo que voy a hacer en los 10 años siguientes? ¿ Dónde está lo que he hecho en esos 10 años? ¿ Dónde lo encajo?

Cuando salgo de esa casa y llego al coche…de repente soy yo otra vez en mi presente. Soy yo, con 38 años, casada, con dos hijas y con todas las cosas que he hecho bien y todas las que he hecho mal durante estos diez años.

Esa sensación inexplicable de choque con mi pasado, no se produce en la casa de Los Molinos.

Hoy estoy aquí, en Los Molinos.

Duermo en el mismo cuarto de siempre, veo el mismo paisaje por la ventana al despertar, desayuno en la misma mesa y paseo por el mismo jardín, pero aquí soy yo, mi yo de ahora. De aquí no me he ido nunca, sigo aquí, todo lo que he hecho durante estos 10 años ha dejado una huella en esta casa. Aquí no me produce extrañeza ver a la Molimadre del presente. Aquí, todos hemos envejecido, crecido. Aquí encajan laz princezaz, minicuñado e incluso bebepanocho con sus 3 semanas de vida. En el jardín hay columpios, la piscina está vallada, hemos cambiado los muebles, tengo una cama de matrimonio en mi cuarto. Aquí encajo yo con mi vigorexia mis canas, mis alegrías y las penas, mis desilusiones y mis miedos. Aquí encaja el blog. Aquí he crecido o envejecido, que es lo que se hace en la década que va de los 28 a los 38.

En Madrid, sin embargo, no sé quién soy. Estar allí me provoca una sensación rarísima y me produce una inquietud física y mental. No consigo estar sentada tranquila en el mismo sitio, me levanto y paseo por la casa intentando encontrar algún rastro de lo que yo he sido durante esos 10 años y no hay nada.

Así que allí estoy yo, paseando por mi pasado de hace 10 años sin saber muy bien como he llegado hasta aquí. No quiero decir que el tiempo haya pasado volando ni nada de eso. 10 años que han durado exactamente eso...pero ir a esa casa es como si no hubieran existido. Pero si lo han hecho y lo que pasa es que no encajan en esa casa.

Todo está igual que cuando me fui y no hay ningún rastro de mi vida en estos 10 años…es como volver al pasado…como ser yo otra vez con 28 años, antes de irme, antes de empezar a vivir el resto de mi vida. Incluso la ausencia de mi padre es más presente allí. Es como si solo hubiera hecho 4 años de su muerte, los que hacía cuando me fui.

Me siento como si te acostaras un día soltera y sin hijos y viviendo en casa con tu familia…y al despertar tuvieras tu propia familia que te trata como un adulto que sabe lo que hace.

Y no lo sé.

viernes, 1 de abril de 2011

LIBROS ENCADENADOS.- Marzo

Estoy leyendo muchísimo.

Trato de pensar si es que estoy dejando de hacer algo vital para la humanidad a cambio de leer, pero no se me ocurre nada vital que yo pueda hacer. Tengo el mismo tiempo que siempre, pero debe ser que me está cundiendo más. Lo mismo es que he desarrollado un superpoder para leer muy rápido, así que tengo que hacer un post ya...porque si no serán demasiados a comentar y harán bola.

"Sunset Park" de Paul Auster. Un comienzo de mes nefasto. La parte buena es que es complicado leer algo peor en el mismo mes. Basura, basura, basura, pero ya lo dije todo.

"La historia del amor" de Nicole Kraus. Regalo de M.y J por mi cumpleaños. Gracias chicos pero no me ha entusiasmado mucho. Fiasco total.

Ser Paul Auster y jugar a serlo es malo, pero jugar a ser Paul Auster cuando no lo eres, es horrible. La señorita Kraus ha dicho: a ver que puedo meter en esta historia ahora que ya tengo un título horrible. No me decido, no me decido...asi que lo voy a meter todo, todas las cosas chupis y sensibleras: judíos perseguidos, amores rotos, una niña insufrible por listilla, un hermano autista, una viuda que llora por su amor perdido, un escritor muerto y un viejo que da mucha pena. Lo mezclo todo juntándolo con frases cursis...y alehop: un truño.

Según iba leyendo, esperaba que se arreglara, que de alguna manera rocambolesca se arreglara todo y aunque fuera malo por lo menos fuera redondo. Pero no, el final es tan malo como el resto, no conseguí enterarme de la historia y lo que es mucho peor, ni siquiera me importa. Mal

"Violetas de marzo" de Philip Kerr. Regalo por mi cumpleaños de una bloggera descerebrada amante de los gintonics. Primer caso de Bernie Gunter, un detective, ex policía, en el Berlín de 1936, durante los Juegos Olímpicos. Herman Six contrata a Gunter para investigar la muerte de su hija y su marido y el robo de unas joyas. La Gestapo, las S.S, campos de concentración, matones, actrices fatales van apareciendo. Es una novela negra al viejo estilo y se lee con interés y entretiene. Gracias a la inestimable colaboración del marido de la bloguera, al que también le molan los gintonics, tengo los dos siguientes casos de Gunter esperando para leerlos en la tablet. Muy recomendable si te gusta la novela negra. Alguien comentó el otro día que Gunter era una copia de Marlowe...puede ser, pero Violetas de marzo es una buena novela negra. No te cambia la vida, ni mucho menos, pero es entretenida y está bien construida.

Amor perdurable de Ian McEwan. Con McEwan me pasa que lo leo todo. Algunas cosa me encantaron, como “El Inocente”, “Sábado” o “Chesil Beach” que recomiendo muchísimo...y sin embargo la que es considerada su obra maestra “Expiación” pues bueno, me gustó pero sin alardes.

Éste, en concreto, llevaba en mi lista de pendientes un par de años por lo menos, y por fin, este año estaba al final de mi caminito de chuches, la mañana de mi cumpleaños. Como bien dijo Elena Rius en los comments, el primer capítulo es espectacular, la presentación de los personajes, la situación, el ambiente y de repente el hecho insólito que cambiará todo.

¿Qué es el hecho insólito? La aparición de un globo aerostático. Eso me dio mala espina. Ya leí hace años otro libro en el que aparecía un globo como factor perturbador y fue un puto suplicio, “Las hermanas Zinn” de Joyce Carol Oates. (No lo leaís).

Como un globo es una cosa tan rara, cuando un autor lo mete en la historia, decide que ver un globo tiene que cambiarte la vida, y eso es una majadería. La actitud lógica es: “Ah un globo” y a otra cosa…claro que puede ser por eso, por lo que yo no escribo novelas.

El caso es que la pareja protagonista, Joe y Clarissa, se ven envueltos en una movida con un globo y entonces se arma el gran pifostio en sus vidas. La parte mala es que deja de interesarte enseguida y estás esperando a que pase algo o mueran los dos, o uno o venga el globo otra vez y se los lleve. Me ha recordado a Patricia Highsmith en el planteamiento de la trama, con el personaje de Jed Parry como chalado creíble con universo paralelo, muy al estilo del protagonista de “Ese dulce mal”. Lo que pasa es que los malos de Highsmith molan mucho más.

Vale, acabo de releer lo que he escrito y parece que es un libro horrible y no es así. McEwan es un escritor espectacular y merece la pena leerlo, pero quizás es mejor empezar por El Inocente o sábado. Aún así, siempre encuentras algún fragmento para destacar:

Estar en la cama con la mujer amada es estupendo, pero volver a su lado cuando desprende el calor acumulado durante la noche es algo glorioso”.

Seguíamos nuestra rutina diaria porque lo demás no estaba claro. Sabíamos que estábamos desanimados, habíamos perdido la ilusión. Estábamos sin amor o habíamos perdido la naturalidad de amarnos. Dormíamos en la misma cama, pero no nos abrazábamos. Utilizábamos el mismo cuarto de baño pero nunca nos veíamos desnudos. Nos comportábamos con escrupulosa superficialidad porque sabíamos que cualquier otra cosa, la seca cortesía por ejemplo, sacaría aquella farsa a la luz y nos llevaría a un conflicto que ansiábamos evitar”.


El Holocausto asiático de Laurence Rees. De este ya he hablado también. Ah sí, estaba también al final de mi caminito de chuches.

Un matrimonio feliz de Rafael Yglesias. Momento confesión lectora.

Cuando voy leyendo, sobre todo si el libro es nuevo, voy doblando las esquinas de todas las páginas que tienen una errata (Si, si...soy insoportable). Cuando acabo el libro, me tomo la molestia de mandar un mail a la editorial y con mi habitual tono sutil decirles algo como: ¿ NO creen que por 24 euracos que me ha costado su libro podrían por lo menos no meter el verbo haber sin h en su por otro lado fabuloso lanzamiento literario?

Las editoriales, normalmente, me contestan amablemente y se quedan con mi dirección de correo para sus mailings y mandarme novedades y tal. ¿A qué viene todo esto? Pues porque Libros del Asteroide (a quienes había mandado un par de erratas en “Diario de un ama de casa desquiciada”), me mandó un mail con el asunto: “si contestas entre los 15 primeros te regalamos un libro con la promesa de que lo leas y dejes un comentario.

A mí, los de Libros del Asteroide me parecieron tiernos. Y un poco inocentes, pero sobre tiernos.

El caso es que contesté ipsofácticamente diciendo que por supuesto que lo leería y por supuesto dejaría un comment en su página y en mi blog, que no creo que lo del blog sea importante, pero me molaba ponerlo.

Resultó que fui de los 15 primeros y me mandaron el libro a casa. Bien por Libros del Asteroide.

Cómo soy así de incongruente, no quería que me gustara el libro. Como los de la editorial lo ponían tan estupendamente, lo empecé pensando...no me va a gustar, seguro que es una mierda y puedo despellejarlo y Libros del Asteroide me odiará cuando deje un comentario atroz en su web y bueno, una espiral de pensamientos laterales que terminaba con el apocalipsis editorial y yo en una lista negra.

Pero no, me ha gustado mucho y lo recomiendo mucho. No quiero destriparlo. Es una historia en parte autobiográfica. Cuenta la relación entre Enrique y Margaret. A los 50 años, ella se enfrenta a la muerte por un cáncer terminal y mientras Enrique la ayuda con los preparativos y las despedidas de sus seres queridos, la novela nos cuenta esos últimos momentos y a la vez el inicio de la relación, la primera vez que se vieron, su primera cita...etc. Los capítulos se van intercalando y la relación se va construyendo y destruyendo a la vez. La construcción de una vida en común, las desilusiones, los desencuentros, las dudas, los distanciamientos y las paredes que se van construyendo. Están las relaciones entre ellos y con sus padres y sus hijos, formando todas esas relaciones una amalgama de sentimientos que se perturban unos a otros complicando la visión que tenemos de nosotros mismos y la que proyectamos.

Lo recomiendo en serio...y no porque me lo regalaran los de la editorial...que conste. Srs. de Libros del Asteroide..pueden seguir mandándome libros, siempre que quieran.

Imágenes de Praga” de John Banville, llevaba también mil años en mi lista de pendientes y me lo regaló P. “solo para las mejores” por mi cumpleaños. Es un libro de viajes de los que me gustan a mí, uno que no parece un libro de viajes. Más que una guía o una recopilación de datos, son las experiencias y reflexiones de Banville durante varias de sus estancias en Praga.

A mí, Praga me moló mucho, aunque creo que ha sucumbido al síndrome de ciudad “parque temático”, aún así…cuando yo fui en el 2006, completamente fuera de temporada, se podía pasear sin sentirte en una atracción. Es una ciudad con mucho encanto.

Banville habla de sus cosas típicas, obviamente, Praga tras el telón de acero, el comunismo, Kafka, el Gollem, Rodolfo II, Tycho Brahe y Kepler en un capítulo especialmente interesante, de las inundaciones del año 2002, El Osario de Sedlec ( que por cierto también salía en el último que lei de Connolly con angeles y demonios y una ida de olla espectacular) y hasta de lo horrible que es la comida checa.

Me flipó el capítulo sobre la historia de Brahe y Kepler. Yo por supuesto, no sé nada de astronomía ni nada por el estilo, pero si me explican las cosas bien, con historietas, mi memoria absurda las absorbe todas como una esponja y ahí se quedan, dispuestas a ser utilizadas en cualquier momento. Por supuesto, me quedo en las anécdotas y la parte científica se va disipando en mi memoria, pero siempre queda algo. En cierta manera, en ese capítulo, con su humor irlandés...Banville me recordó a Bryson en su “Breve historia de casi todo”, libro que no me canso de recomendar.

Con este libro además, tuve un momento de esos de casualidades cósmicas que me flipan. Estaba tranquilamente leyendo en mi sofá, cuando empezó el capítulo de “caza nazis” del viernes pasado, deje el libro y me puse a verlo. Aluciné cuando justamente trataba de Praga y de Reinhard Heydrich, pensé “joder, que casualidad que estoy leyendo de Praga y justo veo esto”. Me tragué la recreación del atentado con el que unos partisanos checos le mataron y al acabar el documental, retomo el libro y en el primer párrafo me encuentro con esto “ Zdenek señaló el punto en una curca de una carretera donde el jefe de la Gestapo, Reinhard Heydrich, había sido asesinado por partisanos checos en 1942”...estas cosas me flipan.

Además he descubierto a Josef Sudek ( sí es él en las fotos y sí le falta un brazo que perdió por gangrena en la I Guerra Mundial) y sus fotos.

Y para terminar el mes, otro comic. Fun Home de Alison Bechdel, regalo por mi cumple de otro descerebrado como ya dije. Es la historia autobiográfica de la familia de la autora, centrada principalmente en la figura del padre, un homosexual reprimido. Alison reflexiona después de la muerte de su padre, sobre su infancia, el ambiente gélido de su familia y su problemática posterior. La primera parte hecha de recuerdos de infancia y juventud me ha gustado más que la segunda parte donde se mete en unas honduras sobre el Ulises de Joyce relacionándolo con su propia homosexualidad que me han resultado un poco espesas. El dibujo frio y lineal contribuye mucho al ambiente gélido y tenso que quiere transmitir. Me ha gustado, pero tendré que releerlo. Y me gustó más, Maus.

En resumen, un buen mes.

jueves, 31 de marzo de 2011

DESPELLEJANDO UNA ENTREVISTA.

Yo no quería. Lo juro.

Un día más me levanté pensando en ser buena..en intentarlo. Un poco..intentarlo un poco, por lo menos. Sólo para probar.

Pero no me dejan. Abro el correo y ¿Qué tengo?

Un correo de una descerebrada que me linkaba una entrevista “para que la despellejes”. Cualquiera que me conozca sabe que basta que me digas que algo no me va a gustar para que yo hago esfuerzos para que me guste y viceversa…así que entré a leerlo pensando en que ni de coña haría un despelleje…

…pero la carne es débil, y la mía más…y esto ha sido muchísima tentación……tal cantidad de cosas para despellejar y soltar bilis…demasiado bonito para ser verdad. (1)

Paz Vega.

Esa mujer.

Es andaluza y tonta, que no quiero decir, antes de que me saltéis al cuello, que por ser andaluza haya que ser tonta…pero el destino es caprichoso y le tocó nacer en Andalucía. La parte buena es que sería igual de tonta si hubiera nacido en Sebastopol.

A lo que iba, tuvo unos prometedores comienzos en el cine porque hacía de andaluza y tonta, y claro así es facilísimo ser actriz. Luego le dieron un papel donde salía en bolas haciendo cochinadas y claro...así es facilísimo que les molara a los tíos. Peroooo...Paz no se conformó en hacer de ella misma en bolas. No. Se subió al monte y se creyó el top de la creación y lo más mejor del mundo mundial y además, dio con Orson que la jalea cual palmero y claro, se juntaron el hambre (que pasa Paz) con las ganas de comer (que algo hará Orson) y ahora Paz Vega además de hacer de andaluza y de tonta se ha vuelto sencillamente patética.

¿Podría darme pena? Sí, pero entonces esto no tendría ni la mitad de gracia.

¿Voy a ir al infierno? Sí, pero para eso falta mucho…y sin embargo si me quedo sin decir estas cosas y me muerdo, me enveneno.

Allá vamos. La entrevista completa está aquí, yo solo voy a extractar lo que tiene más enjundia, podéis imaginar el resto.

"Es fuerte pero es así: me resulta mucho más fácil encontrar trabajo en Hollywood que en España", admitió la sevillana, de 35 años. "Es una pena. No trabajo en España no porque no quiera, sino porque no me ofrecen nada. Esa es la realidad", añadió."No sé por qué es. A veces pienso que me tienen muy vista porque he hecho muchas cosas allí; puede ser que no les parezca interesante, que se crean que no tengo nada más que ofrecer o que me he ido".

Paz, princesa, no te estrujes las meninges pensando cosas raras. NO hagas esfuerzos. ¿No sabes por qué no te llaman? ¿Cómo va a ser qué no les interesas? ¿Tú? ¿ Con lo superinteresante que eres? No creo que sea eso, pero bueno, lo mismo no saben apreciar lo interesantísima que eres y no te quieren. De malvados está el mundo lleno. De todos modos, no te lo tomes a mal...ahora mismo hay otros 5 millones de personas como tú…bueno como tú no...no creo que haya ninguna que se pase el día imitando a Dita Von Teese
"Me encantaría al menos rodar una película al año en España, pero no me dan la opción ni siquiera de decir que no porque no tengo la oferta, no tengo el guión".

Serás pájara. Y serás resentida. O sea, que primero te quejas de que no te dan nada, y ahora dices que si te ofrecen algo lo que quieres es tener la opción de decir que no. Eso sería de malísima persona, pero para ser malísimo, hay que ser listo, asi que lo dejaremos en que estás un poquito resentida que es mucho más cutre. Y además es de tontos. No sabes jugar tus cartas. Ahora ya si que no te van a ofrecer nada de nada...solo faltaba ofrecerle un trabajo a alguien como tú ( de interesante, me refiero) para además tener que aguantarte diciendo "pues ahora no" en plan digno con levantamiento de nariz incluído. Ya te estoy viendo: “me encantaría pero ahora mismo estoy tannn ocupada en Hollywood”, dirías poniendo morritos y sacando jaboneras.
"La puerta para trabajar en España está abierta pero tengo que mantener a tres hijos y no puedo hacer una sola película al año. Estar aquí me permite tener más opciones".

Mal, mal y muy mal. Paz, si vas a ser rastrera y ruin…hazlo bien coño. Si vas a sacar a tus hijos como argumento para conseguir trabajo...hazlo bien. Da pena de verdad...”mis hijos, los pobres, muriéndose de hambre porque no tengo de trabajar…y nadie me da oportunidades…y yo lo único que quiero es trabajar y darles un techo y comida...es lo único que pido... ¿es que una madre no tiene derecho a un trabajo para mantener a sus hijos? ¿Tengo que ver como se mueren de hambre?"


Algo así, para dar pena de verdad. Pero claro para eso, primero tendrías que ser actriz, segundo a alguien tendrían que importarle tus hijos y tercero y no menos importante tendríamos que creernos que vendes exclusivas al Hola por nada y anuncias yogures para flacas por amor al arte. Si es que así no hago carrera contigo….

En la película "aparentemente suceden cosas muy fuertes, pero con el humor uno se lo traga estupendamente y encima te ríes". ¿Vas a hacer porno? Mira por donde pero alguien como tú ( de interesante) es posible que tenga futuro en ese mundo.

Vega, que en la cinta habla inglés, español, serbio, ruso e italiano, asegura estar "cómoda al 100%" en los rodajes en Hollywood, y aunque reconoce estar "algo limitada" a la hora de emplear un vocabulario complicado, considera que tener acento juega a su favor.

Jajaja…jajaja...me troncho. ¿Qué Paz Vega habla qué? ¿No será que en la cinta hace el inglés, el español, el serbio, el ruso y el italiano?
¿Algo limitada a la hora de emplear vocabulario complicado? Paz...eres la reina del eufemismo.

Eso si, estoy contigo en lo de que tu acento juega a tu favor. " Soy la enfegggmeggaa calentogga y vengggo a que me clave su inyección" o " ¿Es ustedd mi fontanerrrrro? Desatáscame"

¿Ganas de aumentar la familia? "Que no, no digo. No sé si pasará, pero que no, no digo", afirmó la intérprete, una enamorada de Los Ángeles (California), ciudad que la acogió de la mejor manera posible desde el comienzo.

A ver Paz, coño...que tienes una edad. “Que no, no digo”. ¿Qué es eso? “No sé si pasará”?? Joder, que ya te han hecho 3 bombos…no me dirás que no sabes cómo se hacen…” Que no, no digo”...anda que…. ¿como era eso? Ah sí...debe ser uno de esos momentos en que estás limada a la hora de utilizar vocabulario complicado.
“Tengo una vida muy normal, me levanto a las 6:30 horas y me acuesto a la 20.00 horas. Voy con el ritmo del sol por mis hijos", declaró.

Ains...Paz, lo que me estoy riendo. ¿Una vida normal levantarte a las 6 y media de la mañana y acostarte a las ocho de la tarde? Jajajajaja. ¿Qué sigues el ritmo del sol? Anda pírate. Haber dicho: hago vida de madre, porque como no me llama ni el tato para trabajar, estoy de madre. Así que me levanto a las 6 y media de la mañana cuando el bebe pide su biberón y a las 8 de la tarde cuando consigo terminar con las horas del horror, estoy cansadísima y le digo a Orson: campeón...yo me voy a comer un yogur de flacas y me voy a la piltra...tú hazte un sándwich y sigue haciendo lo que sea que haces todo el día…por cierto Orson... ¿ tú qué haces todo el día? ”….

¿Que tus niños siguen el ritmo del sol? Es que se me caen las lágrimas de la risa… ¿No seguirán también el fluir de las estaciones? ¿Y el devenir de los años? Jajajajajajaja.

Vega es exigente consigo misma y cree que su mejor trabajo como actriz aún está por llegar.


De ilusión también se vive.

"Quiero hacer algo diferente que me quite esa imagen de mujer sexy. Estoy aburridísima de eso. Y si no llega, lo pondré en marcha yo, que tengo cosas en mente. A mí es que me dirigen bien poco, y eso es malo. Los actores somos marionetas y nos tienen que dirigir", comentó.


Paz querida, yo no es por hundirte, pero lo primero que tienes que quitarte de la cabeza es creer que eres una mujer sexy. Según mis encuestas entre personal masculino cercano, en sexicidad estás más o menos al mismo nivel que la Duquesa de Alba y Falete…para que te hagas una idea.

¿Cosas en mente? Que miedo me das.


1.- Anniehall me lanzó el guante del despelleje y yo no sé decir que no..y menos a Annie.

miércoles, 30 de marzo de 2011

MANÍAS, MANÍAS, MANÍAS

Tengo la costumbre de sentarme todos los días en el mismo sitio cuando voy a comer con mis compañeros”. – dices tú.


Fulanito tiene la puta manía de tener que sentarse siempre en la misma silla cuando vamos a comer”.- dicen tus compañeros.


Exacto, tus manías son costumbres. Las costumbres de los demás son manías. Todo muy objetivo.

Yo no soy nada maniática. ( Molaría mucho que vinieran mis conocidos en 3D y desmontaran esta frase, pero como son chusma no lo harán. Ja). A lo que iba, tengo mis cosas como todos, pero llevo días dándole vueltas y no tengo manías rarunas. Cuando he estado a punto de caer en una de esas manías que te hacen rozar el TOC, como soy muy burra...lo que hago es evitarlo de golpe. Por ejemplo, doy mil vueltas para encontrar exactamente el cuaderno que quiero, para apuntar mis lecturas. Lo encuentro y decido que sólo voy a escribir en él con determinada pluma y tinta burdeos. Una gilipollez como otra cualquiera. Empiezo a hacerlo y durante meses sigo esa rutina. De repente un día, digo...esto es una estupidez…y arramplo con cualquier otra pluma y escribo en ese cuaderno. Y no pasa nada y yo me siento mejor y digo...no soy una maniática. No sé, así me veo más lejos de morir sola y rodeada de gatos, cosa harto improbable por otro lado.

Alguna manía tengo por supuesto, pero lo reconozco. Volviendo al ejemplo de antes, el cuaderno de lecturas tiene que ser rayado. NO me vale con cuadritos ni liso. Esa manía la tengo pero la reconozco.

Las manías son una gilipollez. Lo malo es que es chungo quitárselas de encima, porque el que las tiene, cree que sin prescinde de ellas su vida será peor. En todos los aspectos, en los aspectos más absurdos que puedas imaginar. Tengo ejemplos para dar y tomar.

Manías con la ropa.

Adorablecompañera, es monísima, guapa y estilosa, pero tiene varias manías en cuanto a su indumentaria. No lleva zapatos ni botas “de punta”, según ella porque tiene los pies muy largos y le harían efecto “pié de esquí”. Es una gilipollez de manía, porque además se calza unas all star que le hacen un pie “barra de pan”...pero ella se cree su manía y punto. Tiene otra manía sobre llevar algo con lunares, flores y no sé qué otra cosa…dice que no le “pega”, no se lo he puesto nunca pero ha decidido que no le "pega", lo que es imposible, porque ella es adorable como su propio nombre indica, y cualquier cosa le sentaría bien, pero es incapaz de sobreponerse a esa manía.

Ahora que lo pienso, yo tuve una manía de ese estilo. Un par, de hecho. Durante años, jamás me puse sandalias porque pensaba que tenía los pies feos, hasta que un día dije...eso es una manía absurda y me compre unas sandalias que básicamente “no eran”, solo tenían dos tiras asi que se me veían los píes muchísimo…y resultó que los tengo preciosos. Durante otra época no me puse nada sin mangas, porque tenía la manía de creer que tenía los brazos gordos…en fin...otra chorrada y más ahora con el efecto torneador de la piscina. Hala...otra manía fuera.

Manías compulsivas.

Estas son las de “si no hago algo de determinada manera pasará algo malo”. De estas tengo mogollón…ninguna mía, porque yo estoy mucho más equilibrada que todo esto.

Pobrehermano mayor, se levanta por la mañana, arrastra los pies con sus zapatillas de estar por casa (pero los arrastra eh…muchoooo, muchísimoooo), llega a la cocina, se sirve el café y siempre siempre siempre se le sale y deja un cerco en la encimera. El cerco es fundamental...si no lo deja, el café no estará bueno.

Mi amiga M. cuenta compulsivamente las albóndigas cuando las está haciendo, las cuenta mientras las amasa, las cuenta mientras las reboza, las cuenta mientras las fríe y las cuenta mientras las cuece y luego otra vez cuando las pasa a la fuente. Sí, siempre hay el mismo número de albóndigas, es un número fijo, ni se destruyen ni se reproducen durante el proceso...pero no puede dejar de hacerlo. Creo que piensa que si no las cuenta estarán malas.

Mi otra amiga M. es la campeona de las manías compulsivas. La parte buena es que te las cuenta y te ríes y ella más. Cada día, antes de acostarse sigue el mismo ritual: comprueba que las persianas están cerradas en el salón, comprueba que la luz del trastero al final del pasillo esté apagada…( da igual que estuviera apagada la noche anterior y que no haya entrado en todo el día...quién sabe porqué oscuro proceso ha podido encenderse la luz sola), coloca un paragüero delante de la puerta de entrada de su casa ( por algún extraño proceso cree que si un malvado quiere entrar en su casa un paragüero será un parapeto infranqueable) y después, una vez que se ha metido en la cama…coge su cartera, saca las tarjetas de crédito y las comprueba. No sabe porqué lo hace, ni ella tampoco...pero si no hace todo eso, se imagina asesinatos en masa y cosas extrañas.


Manías posicionales.

Son esas de colocarte tú o colocar las cosas siempre de la misma manera. Yo no tengo de esas porque soy un desastre.

Cuando bajo al rancho a comer, voy con Adorablecompañera y otras dos. A Adorablecompañera y a mí nos da igual la mesa en la que nos sentemos y la silla que ocupemos. A las otras dos, no. Tiene que ser siempre la misma mesa y tienen que sentarse siempre de cara a la puerta del comedor. Yo lo entendería si hubiera mesas mejores que otras, pero todas son iguales, en todas dan el mismo rancho y en todas hace el mismo frío. Lo entendería si aparecieran por la puerta maromos espectaculares que fueran a alegrarnos la vista o monstruos del averno a los que conviniera ver primero para evitar que te engulleran…pero no. Por la puerta entran otros mataos como nosotras y que tenemos más vistos que el tebeo. Bueno, pues ellas tienen que sentarse ahí o entran en combustión. Alguna vez que he estado hostilizada y con ganas de tocar las narices me he sentado en sus sitios…y se han cogido un rebote de mil pares. ¿No es absurdo? Joder, sobreponte a esa manía.

El ingeniero haciendo una maleta, es manía situacional total. Para hacer la maleta tiene que coger un cuaderno donde hace una eternidad hizo una lista de todas las cosas necesarias para irte de viaje. Tiene que colocarlo encima de la cama, según miras desde los pies a la izquierda y luego darse 25 paseos al vestidor cogiendo cada vez una cosa de las de la lista: camisetas un paseo, calcetines un paseo, camisas un paseo, zapatos otro paseo. Luego lo coloca todo encima de la cama y luego, una vez que ha repasado que efectivamente no necesita los guantes de esquiar para irnos a Cadiz...lo va metiendo en la maleta comprobando otra vez la lista. Antes de que alguien piense mal, está muy bien ser metódico…pero una vez que has comprobado que hacer esa rutina no garantiza que no se te olvide algo, es más siempre se te olvida algo... ¿no podías pasar de ella y hacerlo todo un poquito más rápido? Pues no.

El ingeniero de éstas tiene más...sufre muchísimo cuando desordeno las latas de la despensa y por ejemplo mezclo las almejas machas con los guisantes. "Qué paciencia tengo...mira que mezclar el pescado con las legumbres"...

Yo no soy maniática porque soy una cobardica. Los maniáticos son gente que vive al límite, bordeando la muerte. Son unos valientes. Ellos no lo saben, pero están todo el día corriendo un riesgo vital.

Para empezar y como ha quedado claro al principio del post, ellos no tienen manías, son costumbres y por supuesto pueden dejarlo cuando quieran. No saben que es probable que si lo dejan, entren en convulsiones, empiecen a echar espumarajos por la boca y puede que mueran. Eso ellos no lo saben, creen que no dejan esas putas manías porque sencillamente no quieren y no hacen daño a nadie.

Pero si hacen daño y ahí está el peligro más mortífero de todos. Las manías tienen un efecto tranquilizador en el ejecutante que es inversamente proporcional al efecto hostilizante que provocan en los congéneres que habitan o se relacionan con el ejecutante. Determinadas manías incluso pueden producir instintos asesinos y sólo gente muy equilibrada (alguien como yo, por ejemplo) es capaz de soportarlos y reconducirlos en algo absurdo como un blog. Pero no todo el mundo es como yo…así que maniáticos del mundo...hacedme caso y pasad de esas manías absurdas y tontas de las que sois esclavos. Sobreponeos, vosotros podéis, dejad de lado vuestras manías y veréis como os sentís más guapos, más altos, más deseables y con mucho más tiempo libre para dedicar algo mejor…

Soy un gurú y un ejemplo y ahora me voy a buscar un nuevo cuaderno rayado.