
- Moli es guay. Mal. Moli es una pringada que trabaja el día de Nochebuena. He venido desde mi casa conduciendo por una piscina de agua. Lo bueno es que no hay muchos pringados como yo, así que venía sola por la carretera.
- La empresa de libros de colores una gilipollez. Esta impresión la comparten mis descerebrados con el ingeniero, mi madre, y la mayor parte de los que me conocen. Mal. La empresa de libros de colores no descansa, funciona 24 horas al día, todos los días del año y por eso trabajo hoy. La Nasa, donde curra el ingeniero cierra. No digo más.
Así que cómo tengo que echar aquí la mañana para controlar que los libros no se desmadren y todo quede cuadrado, voy a aprovechar para contar lo guay que es para mi la Nochebuena.
Los 36 años de mi vida he cenado con las mismas personas. Puede parecer todo un record, pero mi madre tiene uno mejor: lleva 65 años cenando con sus hermanos. Si, señores, hoy cenamos con los mundialmente famosos “churumbeles”. Contrariamente a lo que hayáis podido pensar, son todos majísimos, divertidos, y gente maravillosa con la que puedes gritarte por cualquier estupidez para a los 10 minutos estar de buen rollo total. Ya lo conté por ahí, una gran familia de las que molan muchísimo.
Hoy cenamos en Los Molinos en casa de mi madre. Desde que murieron mis abuelos, hacen un turno riguroso y cada año le toca a uno preparar la cena. A mi madre le flipa que le toque, porque entre sus múltiples superpoderes, tiene el de ser capaz de organizar una cena para 31 personas sin despeinarse. Lo que más mola es que siempre dice lo mismo: este año no me complico, algo sencillito. Ayer hablo con ella:
- Hola Mamá, ¿cómo va lo de la cena?
- Hola hija, bien. ¿ vas a venir hoy?
- No, mañana trabajo. Llegaremos a comer
- ¿ trabajas? ¿ Y porqué? .- mi madre cree que vengo al trabajo a pasar el día y que puedo hacer lo que me de la gana.
- Porque sí. Llegaré a la hora de comer. ¿Cuál es el menú? Espero que este año de verdad sea algo sencillo, que siempre te pasas.
- Si, muy sencillo. Lo clásico. De entrantes sushi, mil hojas de pollo y foie y tartar de atún que por cierto tienes que preparar tú cuando vengas.
- ¿ Yo?
- Hombre, algo tendrás que hacer ¿no? No querrás que lo haga yo todo, que me tenéis como una esclava.
- Vale, vale. Yo lo preparo. ¿ Y de postre?
- ¿Cómo qué de postre? Después hay consomé, lombarda que ya sabes que a tu tío M. le encanta y luego chuletón de ternera con cebollitas francesas.
- Pero..¿ cuanta gente viene a cenar?
- Pues los de siempre, 30.
- Pero si has preparado comida como para un albergue.
- ¿ Tu crees? Yo creo que va a faltar, estaba pensando…
- Mamá..sobrará muchísimo.
- De postre hay esencia de café con fresón. Y turrón y mazapán que quiero que traigas de la ciudad imperial.
- ¿ Y me lo dices ahora?
- Hija, te escapas un rato.
- Vale, vale…mazapán.
Cuando acabemos como boas de zamparnos todo este menú degustación viene la parte lúdica de la Nochebuena: las copas.
- Moli..¿ qué estás bebiendo?
- Mamá, un gintonic a ver si consigo que algo de lo que he comido no anide en mi estómago hasta mi cumpleaños.
- Hija..de verdad..lo tuyo con el alcohol...
- lomioconelalcoholhayquejoderse....
- Moli, no te pongas ordinaria..que te oigo.
Yo miraré a mi alrededor y veré que los 24 adultos están tomando copas, pero ella está solo preocupada por mi hígado. ¡ Que mona!
Durante las copas hay que cantar villancicos. Todo el mundo canta, menos mi hermano B, que durante 35 años ha conseguido no cantar absolutamente nada. Este año me temo que M y C monopolizarán el cotarro porque les flipa el rollo canto y bailo y me dan monedaz como dice C. o “ el águila” como dice M. ( Aguinaldo).
Después de media hora de cánticos viene la parte más divertida: los juegos. Si, si, organizamos juegos de ingenio ( pierdo siempre) o de memoria ( gano siempre y ya no me dejan participar). Repartimos grandes premios y hay unos piques fabulosos.
Este año el ingeniero y yo hemos organizado un password. Veo ya los cuchillos entre los churumbeles: ¡¡yo no quiero ir contigo…no tienes ni idea!!!! ¡ tú si que no tiene ni idea!!! . El año pasado organizamos un “pasalacabra” y hubo un equipo nefasto. Yo hacía de azafata.
- Con w. “ deporte. Polo de agua”
- ¿ Polo de agua? ¿polo de agua?
- Si
- No vale, no vale, no vale…es difícilisima. NO vale, no es justo, los del otro equipo son más fáciles.
- Sois unos memos. Es waterpolo.
- Moli, si te vas a poner chulita el año que viene no jugamos.
- Mentira, qué se que os pegáis por los relojes de propaganda de los libros de colores.
Así que nada, pasaré la Nochebuena entre manjares ilimitados, copas a escondidas, villancicos versionados y peleas por premios promocionales. Un planazo.
Yo miraré a mi alrededor y veré que los 24 adultos están tomando copas, pero ella está solo preocupada por mi hígado. ¡ Que mona!
Durante las copas hay que cantar villancicos. Todo el mundo canta, menos mi hermano B, que durante 35 años ha conseguido no cantar absolutamente nada. Este año me temo que M y C monopolizarán el cotarro porque les flipa el rollo canto y bailo y me dan monedaz como dice C. o “ el águila” como dice M. ( Aguinaldo).
Después de media hora de cánticos viene la parte más divertida: los juegos. Si, si, organizamos juegos de ingenio ( pierdo siempre) o de memoria ( gano siempre y ya no me dejan participar). Repartimos grandes premios y hay unos piques fabulosos.
Este año el ingeniero y yo hemos organizado un password. Veo ya los cuchillos entre los churumbeles: ¡¡yo no quiero ir contigo…no tienes ni idea!!!! ¡ tú si que no tiene ni idea!!! . El año pasado organizamos un “pasalacabra” y hubo un equipo nefasto. Yo hacía de azafata.
- Con w. “ deporte. Polo de agua”
- ¿ Polo de agua? ¿polo de agua?
- Si
- No vale, no vale, no vale…es difícilisima. NO vale, no es justo, los del otro equipo son más fáciles.
- Sois unos memos. Es waterpolo.
- Moli, si te vas a poner chulita el año que viene no jugamos.
- Mentira, qué se que os pegáis por los relojes de propaganda de los libros de colores.
Así que nada, pasaré la Nochebuena entre manjares ilimitados, copas a escondidas, villancicos versionados y peleas por premios promocionales. Un planazo.
Además hace un tiempo maravilloso y probablemente mañana cuando me levante estará todo nevado. Y ¡tengo chimenea!
Dios mío, vivo en una peli americana de Navidad.
¡ Feliz Navidad!
¡ Feliz Navidad!