
He observado que hay por Internet una gran preocupación por el orden, desconozco si esos preocupados son de los desordenados o de los ordenados que sufren el desorden de otros. Hay búsquedas para todos los gustos:
“en mi desorden tengo mi orden”, claramente un adolescente con habitación llena de mierda, cama sin hacer, restos de pizza, raspas de sardina y calcetines malolientes que intenta encontrar en Internet una justificación que haga entrar en razón a su pobre madre. Querido petagranos, no te va a servir de nada, tu cuarto es una pocilga y tendrás que ordenarlo.
“justo medio entre orden y desorden”, aquí veo a la típica maníatica del orden que ha visto fracasar su enésima relación al darse cuenta una vez más de que el tío de sus sueños no ordena los calcetines por colores, las revistas por orden alfabético y las latas por tamaños. Querida, tu no estás en el justo medio..tienes trastorno obsesivo compulsivo.
Mi favorita en esta categoría esta semana es “ coaching para ordenar la casa”. Tengo una mala noticia, la palabra “coaching” se ha instalado en el vocabulario diario. Sospecho que la mayoría de la gente que la utiliza no sabe lo que significa pero le dan una especie de connotación mágica. La cree que si pone “ método para ordenar la casa” le saldrán cosas aburridas como: tire la mierda que tenga por medio, deje la ropa interior en el cajón, los zapatos en el armario, guarde los juguetes en las cajas, y tire los periódicos viejos. Sin embargo esa misma gente piensa que si pone “coaching” van a encontrar una solución divertida para ordenar. Algo tipo Mary Poppins cuando ordena con los niños chasqueando los dedos…con un poco de azucar..esa píldora que os dan…la píldora que os dan….( otro día hablaré de las traducciones de la canciones). Vale, pues el coaching no es magia…es también un timo pero no es tan divertido.
En la sección varios de esta semana, tengo algunos curiosos. Lo son por la búsqueda que hacen y porque no entiendo como busca Google.
Sé que hay unos tíos en California en unas oficinas superchulas, en vaqueros guarreros y calzando zapatillas gualtrapas que se relajan en sofás delante de peceras y que tienen pizarras en las paredes para poder escribir las ideas geniales que se les ocurren mientras juegan al ping pong. Ahora qué lo pienso no sé porque les damos credibilidad.
El caso es que si por ejemplo tienes una inquietud grave por saber algo como “ el bicho como autobús en centro américa” el primer resultado que sale es mi blog. Me temo que es un resultado frustrante. Chicos de las oficinas chulas..poneos a currar.
La consulta que sin embargo me llena de satisfacción esta semana es esta: “disfraces disney de boqueron de pez”. La pregunta era complicada, no se entiende bien, ¿ quieres disfrazarte de Disney? ¿ de pez pequeño?. Yo creo que mezclas conceptos. Creo que quieres ir de Nemo pero no te acordabas del nombre ni, me temo, de la especie porque no era un boquerón, era un pez payaso. Esto te lo disculpo, a lo mejor no tienes hijos y no la has visto 15 veces. Lo gracioso es que San Google ante esa pregunta tan complicada ¿ a donde te llevó? . Como primer resultado te llevó aquí…y lo que es mejor..lo leiste 33 segundos.
A lo mejor no has aprendido como hacerte un disfraz de boquerón o de pez payaso..pero espero haber evitado que vayas a ver el musical de Nacho Cano.
Que bonito es hacer el bien a la humanidad.