Cuando te dejan se pasa de puta angustia. Hasta que no lo pasas no sabes lo que es, ves a gente agonizando de desamor y piensas "
que exagerados, yo creo que no es para tanto". Cuando te pegan a ti la cuchillada, la perspectiva cambia y te encuentras a ti mismo diciendo: "
es la peor ruptura de la historia y no hay nadie en el planeta más desgraciado que yo".
Como tu primera gran ruptura ( chispas) no hay otra.
Llegas un día y te encuentras con que te dicen dos frases que siempre habías considerado inaceptables:
- "pero te aprecio mucho como amigo"
- " no te merezco, eres tan buena tía"
Tachán...estás jodido..dos premios de consolación como dos soles. Y ahí estás tú...han pasado de ser inaceptables a ser el clavo ardiendo al que te vas a agarrar hasta que decidas asumirlo.
Lo primero que se siente es incredulidad. ¿Cómo coño me ha pasado a mi? ¿Cómo no lo he visto venir? Uno nunca se da cuenta de esas cosas o no quiere verlas, " estará raro", " será el curro", " seguro que me lo estoy imaginando"...el caso es que unas veces porque no ves las señales y otras veces porqué no quieres verlas la mayoría de las veces te pilla de sopetón.
Si la ruptura es de las buenas de verdad, no de las de " Yoli, me ha dejado el Isra después de 2 meses de follar en el coche", te encuentras hasta mal físicamente, con el estómago del revés, ansiedad, taquicardia y mucha pena.
Una vez superado el momento en el que te mandan a tomar por culo, está el análisis de la situación. A mi modo de ver esta es la parte más patética de todo el asunto, uno empieza a analizar lo que el otro le dijo tres días antes de dejarle, como se lo dijo...y qué contestó a lo que yo le dije, y me miró no se como y yo le miré y entonces él..un ejercicio de autoflagelamiento, retorcimiento de la realidad y autoengaño que le deja a uno completamente machacado y en un limbo de desconocimiento.
Una vez que uno concluye ese momento análisis de la situación, suele llegar a dos conclusiones completamente erróneas en la mayoría de los casos:
- seguro que se arrepiente y al final se da cuenta de que soy el amor de su vida y lo que tenía conmigo no lo va a tener con nadie más. Esto es crearse expectativas para postergar el momento de asumir que se acabó lo que se daba. Es normal y nos pasa a todos, pero normalmente la luz no ilumina al cretino que te deja, prefiere seguir sin ti el resto del camino, con mucha suerte se dará cuenta cuando tú te hayas dado cuenta de que a pesar de todo lo que creíste ese tío no era el amor de tu vida. De todos modos en esta fase del proceso eso no consuela nada.
- pobre, seguro que también lo está pasando fatal. Mal. El que deja puede pasarlo mal pero ni la mitad de mal que lo pasa el que se encuentra el pastel. Al fin y al cabo el que decide dejarlo, toma la decisión y puede asumirla y conoce sus razones. El que se encuentra con la decisión bajo el felpudo no le queda otra que tragársela.
Todo esto es un camino muy desagradable en el que además y sin que sirva de precedente hay que hacer uso de lo poco que tengamos de Fuerza de Voluntad. Un día se pasa mal, el otro también y el otro también..luego se va pasando porque te acostumbras a estar solo. El problema está en que si caes en la tentación de: "uy...ponen nuestra canción..le voy a mandar un sms porque seguro que se acuerda y así le enternezco", te creas una expectativa de respuesta en el otro. Ese otro está escuchando Radio Marca y cuando le llega el sms pasa de todo...pero allí estás tú, al otro lado, con 4 días de agonía tirados a la basura por un arrebato de impulsividad completamente contraproducente.
Para no cometer este tipo de equivocaciones mola mucho tener amigos que te escuchen 4 horas, entren en bucle contigo una y otra vez sobre el tema y además te digan lo que quieres oír y lo que no quieres oír pero alguien tiene que decirte. Es duro pero con copas y amigos se lleva mejor.
Tengo una resaca de muerte.
Para S.