miércoles, 12 de marzo de 2008

MI NUEVA PISCINA

Por razones monetarias he cambiado de piscina y la nueva se merece un post.

Es un edificio enorme escondido entre unos bloques de viviendas. Entras y todo es muy grande y el ambiente es muy soviético, como si te metieras en la peli de “La vida de los otros”…todo grande, sobrio, aséptico. Bajas las escaleras y llegas a una gran sala, que tiene en el cuerpo central los vestuarios y a los dos lados dos grandes pasillos.

Avanzo por el de la derecha, buscando la puerta del vestuario femenino…y a los dos pasos no puedo andar de la risa. A alguna mente pensante se le ocurrió que dado que los nadadores son atletas..medirían 2 metros como poco..asi que los secadores de pared que la gente utiliza para secarse el pelo están colocados a lo largo de ese pasillo a una altura de 2.50 metros. Claro, luego resulto que no todo el que nada mide 2 metros, así que a otra mente pensante se le ocurrió colgar de la pared atados con una cuerdecita trozos de manguera para que el aire del secador llegue a la gente que no mide 2 metros…¿consecuencia de todo esto?..Avanzo por un pasillo donde hay un montón de gente al borde del ahorcamiento con las cuerdas y las mangueras…inenarrable.

Consigo llegar a la puerta del vestuario femenino y empujo la puerta y de repente soy una rata de laboratorio. Estoy en una especie de laberinto con una sala central y puertas batientes que empujo y me llevan a cuchitriles sin salida…me paro y digo…” Tía, que eres licenciada y tienes 35 años…no entres en pánico”…así que muy digna, me desvisto, cojo mis cosas e intento salir del laberinto y encontrar la piscina. Miro alrededor y las otras “ratas de laboratorio”…no miran, es el momento de empujar una puerta…lo hago y estoy en un cuchitril de dos por dos sin salida…vuelvo a salir a la sala central..empujo otra puerta..y ahí están otra vez los ahorcados del secador…otra vez a la sala central..miro al techo y veo que esas salas no tienen techo son abiertas…entro en tal estado de paranoia que ya espero ver en cualquier momento el ojo de un científico mirando mi comportamiento como rata de laboratorio, bastante insatisfactorio porque no consigo salir del laberinto.

De repente “MOCCCCCCCCCC” una sirena…y la gente sale por una puerta que yo no había probado….les sigo y me encuentro en otro pasillo gigante lleno de taquillas. Abro una, dejo mis cosas e intento cerrarla…pero imposible…miro con desesperación alrededor y una especie de enfermero vestido de blanco me informa que sin la “tarjeta que dan arriba” no puedo usar taquilla. Da igual…me voy con mis bártulos….sigo a la masa y llego a la superpiscina…OHHHHHH…eso si que merece la pena…una piscina olímpica….Una sala enorme llena de gente nadando…o haciendo lo que se puede.

La clase transcurre más o menos igual que en el otro sitio. Pero yo no puedo dejar de pensar si seré capaz de salir del complejo cuando acabe mi clase…MOCCCCCCCCCCCCCCCCCCCCCCCCCCC…otra sirena y todos en estampida nuevamente hacia los vestuarios….cojo mis cosas…y busco las duchas…y ohh..sorpresa!!!...En un edificio donde todo es enorme…de repente me encuentro lo más cerca de una cámara de gas que he estado en mi vida…las duchas son una sala enana, con el techo superbajo, alicatada hasta el techo en un tono mustio que da mucho repelús y con unos grifos distribuidos por la pared de los que sale agua continuamente, sin posibilidad de graduar ni el caudal ni la temperatura. La sala está llena a rebosar de tías, de todas las condiciones y edades, jóvenes, maduras, mayores, muy mayores y gordas, flacas, muy gordas, muy flacas, embarazadas, muy embarazadas….es decir nada que ver con la típica fantasía de los tíos de dos mujeres estupendas embadurnándose con gel en una ducha…más bien resulta deprimente.

Me ducho cuando consigo acercarme lo suficiente a uno de esos grifos continuos…y vuelvo al laberinto de las ratas a vestirme…y como no quiero perderme..espero a que salga alguien para saber qué puerta tengo que empujar….y llego otra vez al pasillo de los secadores donde es increíble pero ¡¡sigue habiendo gente colgando de las mangueras de los secadores!!!...con esta visión consigo salir del edificio.

¿Qué tal la piscina nueva??.

Bien pero agotadora.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Jajaajaja, al tercer intento de la quinta puerta ya no me he podido aguantar.. se me caian las lágrimas, y más comparandolo con "mi piscina"... Ays, solo por estos posts, ya me alegro que te cambiaras.

Susu.

camaca dijo...

jajaja rubia, miedito, mucho miedito, no te va para nada…

Anónimo dijo...

Buenisimo este post, tienes toda la razon.
Me encanta tu b,og. Ah! Y no me critiques como al anonimo petardo de hoy por leerte a esta horas! Estoy en mi cuarto esperando a que se duerman mis enanos, tienen miedo los pobres, y yo sentimiento de culpa por ser madre trabajadora! Me encanta tu blog!