sábado, 18 de febrero de 2012

ABCinema.- Otro video chulo

Hay gente que usa internet para escribir chorradas.
Hay gente que usa internet para hacer videos superchulos.

Lo bueno, es que los que escribimos chorradas encontramos los videos superchulos y podemos colgarlos para entretener una tarde de sábado.

Es un video superchulo.
Solo dura 58 segundos.
Es el alfabeto. Cada letra, una película.
Mola sacarlas todas...a mí me falta alguna.


ABCinema from Evan Seitz on Vimeo.

jueves, 16 de febrero de 2012

LA CRISIS ES...

La crisis es sentirte permanentemente en una montaña rusa de sentimientos que van del cabreo, al acojone, pasando por el pasotismo y la tristeza para llegar en algún momento a la actitud zen y volver a subir luego la cuesta del cabreo y deslizarte una vez más hacia abajo por el acojone y la incertidumbre.

La crisis es encontrarte pensando “¿será verdad qué he vivido por encima de mis posibilidades?” y entonces mirar a tu alrededor y ver tu coche de 415 mil km, tu tele de tubo, tu ropa de los chinos, tus zapatos de antes de casarte y tu nevera llena de marcas blancas y tupers para hacer un día comida de “restos”. Piensas que no recuerdas la última vez que saliste a cenar y mierda...te sientes culpable por ir a la peluquería...no puede ser tan difícil cortarse el pelo a uno mismo, ¿no? Cómo mucho estarás horrible y perderás algún dedo, pero ahorrarás algo.

La crisis es encontrarte repasando tus últimos 10 años de vida por si habrás hecho algo mal. ¿Podría haber escogido otra carrera? ¿Estudié poco? ¿Debería haber hecho una oposición? ¿Debería haberme cambiado de curro? Y entonces te paras y piensas…PERO ¡¡QUÉ MIERDA ES ESTA!! Estudié lo que me gustaba, curre mientras estudiaba de cualquier cosa. Acabé y cogí el primer curro que me salió porque había que trabajar, trabajé por un sueldo de mierda. Cogí un curro a 100 km de mi ciudad y eche miles de horas en la carretera y en el trabajo….para tener un buen curro y un sueldo decente.

La crisis es encontrarte pensando...”joder...será que no tenía que haberme comprado la casa” para luego recordar todo lo que ahorraste y las miles de cuentas que hiciste para saber que efectivamente podías pagarlo y no estaba por encima de tus posibilidades.

La crisis es despertarte por la noche y ver un puto Excel en el techo de tu cuarto y pasarte horas intentando conseguir que la cifra que hay al final de la columna de gastos sea menor.

La crisis es que el eufemismo “moderación salarial” en boca de alguien que se atufa como mínimo 60 mil euros al año haga que te hierva la sangre.

La crisis es que el titular “De Guindos renuncia a ganar 300.000 euros para solo ganar 80.000 euros” haga que te den ganas de matar. ¿Sólo 80 mil euros? ¿Sólo 80 mil euros? Pero... ¿de qué cojones hablamos? Además, precisamente porque se ha estado atufando 300 mil euros puedes pasar a ganar 80 mil. Yo incluso lo haría mejor…si me pagas un año 300 mil euros…al año siguiente trabajo gratis. Con dos cojones. Que les den a todos esos un sueldo de 18 mil al año y que se lo reduzcan al año siguiente a 15 mil al siguiente…

La crisis es que el titular “los banqueros solo podrán ganar 600.000 euros” te de ganas de vomitar. Pero ¿es que estamos locos?

La crisis es que tengas que apretar los puños y los dientes para no gritar cada vez que sale un político a regañarte porque claro, has vivido por encima de mis posibilidades, has despilfarrado… ¿Quién coño se creen que son para regañarte? A ti solo te regaña tu madre…

La crisis es que el eufemismo “hay que hacer sacrificios” en vez de “os vamos a dar pero bien por culo y lo vais a pasar de puta pena” te den ganas de matar.

La crisis es incertidumbre. Es no saber qué coño va a ser de tu vida hoy, mañana o dentro de un mes.

La crisis es ver a tus amigos haciendo equilibrios en la cuerda floja después de llevar 20 años currando como cabrones.

La crisis es ver como todo lo que tú creías que habías construido sólidamente, de repente tiene la misma consistencia que un castillo de cartas de Bob Esponja.

La crisis es estar pensando en reinventarte a ti mismo con 40 palos.

La crisis es tomarte cada plan divertido que te surge como si fuera la última cena del corredor de la muerte…” Venga, que lo mismo el mes que viene ya no puedo hacerlo”.

La crisis es redescubrir el efecto terapeútico del  humor negro. Es llegar al curro y preguntar ¿ A quién han quemado hoy? A X. ¿ Por bruja? Si, porque flotaba….Es encontrarte pensando que “crucifixión no es para tanto”

La crisis es agobiarte porque sabes que en el fondo tienes suerte, así que no quieres ni pensar en cómo está la gente que no la tiene, porque al contrario que los políticos tú no hablas como si supieras lo que es vivir con 800 euros al mes...por que no lo sabes.

La crisis es mirar el precio de la mortadela, lo mismo con aceitunas no está tan mala.

La crisis es estar agotado de vivir acojonado...y llegar a la conclusión de que a tomar por culo con todo…lo mismo de toda esta mierda sale algo bueno.

miércoles, 15 de febrero de 2012

LIBROS DE COLORES: The Fantastic Flying Books of Mr. Morris Lessmore (2011)

Iba a colgar este video el dia de mi cumple..pero me lié con los números.
Iba a colgarlo ayer, pero me lié con los plurales y además Di me robó la idea de "amor a los libros".

Hoy lo cuelgo porque si. Porque me flipa. Porque a lo mejor alguno no lo ha visto y porque son libros de colores....


LLAMADAS

Las de curro.

Una proporción mínima de llamadas en el curro son buenas, interesantes, divertidas, enriquecedoras y dignas de ser recordadas. Sólo un número muy reducido de ellas apetece hacerlas, bien porque vas a solucionar algo, bien porque vas a hablar con alguien molón o bien porque te van a servir para vengarte, la típica llamada de “yo tenía razón”. Al colgar, uno se queda con sensación de satisfacción y deseando que todas fueran así.

La mayoría, sin embargo, son cansinas, dan pereza, cabrean, son un diálogo de besugos y una pérdida de tiempo en el mejor de los casos y en el peor tiran por tierra horas de tu curro. Hay que pensar que por lo menos te pagan por ello.

Las de “De hoy no pasa”.

De hoy no pasa que llame a pedir hora al médico, de hoy no pasa que llame a pedir hora al taller, de hoy no pasa que llame a apuntarme al gimnasio, de hoy no pase que llame para pedir cita al DNI…etc.

Son cosas que no se quieren hacer, pero que hay que hacer, pero que vas postergando y postergando. Toman impulso por la mañana “de hoy no pasa” y se van desinflando durante el día, cuando llega la noche vuelven a remontar “Mierda, se me ha vuelto a pasar…de mañana no pasa”.

Las de ¿Qué tal? ¿Qué haces?

¿Qué tal? ¿Qué haces?
Nada…aquí… ¿y tú?
Pues igual.
Pues luego hablamos.
Vale.

No aportan nada, pero son rutina y se hacen. Si no las haces y sin que nadie sepa por qué te acusan de pasar. “Claro, como hoy no hemos hablado”…Y tú piensas...¡¡pero si eso no es hablar!!!

Las que no quieres que te cojan.

Llamas, dejas sonar 3 veces y cuelgas pensando “debe de ser mal momento. Yo ya he cumplido, si quiere algo, verá mi llamada perdida y me devolverá la llamada” Lo que de verdad esperas, es que no te llamen.

Las interminables.

Hola.
Hola...mmm... ¿quién eres?
Soy C. Nunca me reconoces.
Perdona cariño, ¿qué tal? ¿Qué has comido?
Lo que tú habías preparado. .- pero qué listilla es...coño.
Y ¿estaba bueno?
Sí, pero yo quiero macarrones. ¿Qué vamos a cenar?
Son las 2 de la tarde, ya lo pensaré luego.
¿Macarrones?
No te aguanto…Bueno...hasta luego.
No, ¿qué haces?
Trabajar.
¿En qué?
Estoy leyendo un libro verde.
¿Y cómo se llama?
Jóvenes salvajes.
Pero... ¿son salvajes ellos o hay leones?
No hay leones...
Ellos son salvajes…
Voy a colgar…
¿Qué has comido?
No he comido...
¿Vas a comer macarrones?
Adiossssssss

Llamadas a tu madre.

Hay gente de llamada diaria a su madre. En este caso, la llamada se parece mucho a la “Querido diario”. "Hola Mamá, me he levantado, he desayunado, hoy me he puesto el vestido negro porque tengo una reunión y lugo como con una compañera y esta tarde tengo y haré de cena..blablablabla"

Hay gente, como yo, que es más de…”de hoy no pasa que llame a mi madre”…combinado con...” mierda...llevo una semana sin llamar”. Una vez que decides llamar, suena, aguantas la respiración y esperas a ver cuál será la reacción. Hay dos posibilidades:

- Hola cariño… ¿cómo estás? Y entonces te arrepientes de ser tan mala hija y no haber llamado antes.

O

- Hombre, la niña perdida y hallada en el tempo. Ya iba siendo horita de que te dignaras, que no sé nada de tu vida. Es que ni te preocupas por mí, ni por tus hermanos, sólo vas a lo tuyo. Seguro que ahora me llamas para pedirme algo…

Y entonces se transforma en una llamada de de las “no quería que me cogieran”.

Por último están las llamadas que estas deseando hacer. Cuando quieres hablar con alguien sin distraerte. No vale llamar desde cualquier sitio, ni en cualquier lugar. Se busca el momento adecuado y luego se llama. Puede ser para contar algo, para que te consuelen o al revés...para que te cuenten y para consolar. Estas son las que pasan volando, cuelgas y te quedas repasando la conversación y dándole vueltas.

Oh, casi olvido las mejores de todas, las de “solo tengo un minuto y llamo para decirte que te quiero. Hasta luego”.