¿Quién me lee?
Saber que te leen, es una sensación muy rara. No lo piensas. Escribes lo que te apetece, con unos filtros que decidiste poner cuando empezaste la tontería esta del blog y que continúas teniendo porque te parecen lo correcto.
Al principio escribes sabiendo que no te lee ni el tato.
Sigues escribiendo a pesar de que no te lee ni el tato.
Sigues escribiendo y la verdad es que te da igual que te lea el tato o quien sea. Le has cogido el gusto.
Pero de repente un día...tienes constancia de que alguien te lee y además te comenta y te quedas de piedra.
Y sigues escribiendo sabiendo que te lee el tato.
Y sigues cuando sabes que son el tato y 200 más.
Y sigues con el tato y 400 más...
Y dejas de contar...porque el tato son muchízimoz y además te leen todos los días.
Y sigues con tus chorradas y pensando “lo mismo un día puedo decir esa cosa tan snob de la angustia del folio en blanco"
Y te das cuenta de que tú no tienes angustia porque escribes cuando te apetece y además siempre hay alguna majadería que escribir en el folio en blanco.
Y un día le pones nombre a los miles de tatos que te leen: descerebrados. Y les gusta.
Y otro día dices...” no se me ocurre nada"...y un descerebrado anónimo que jamás te ha escrito te dice " ¿Porqué no escribes sobre como imaginas a los descerebrados?"
Y le robas la idea, con dos cojones.
¿Qué sé de los descerebrados?
Para empezar, sé que sois una legión de desconocidos. Es más, este post es para todos los descerebrados que no conozco y que no comentan jamás o lo hacen muy de vez en cuando. Sólo pasáis y me leéis...y sois mogollón y estáis tarados.
Segundo y esto no saldrá de aquí, sé que la mayoría me leéis en horas de curro, en un ratito de desbloqueo laboral. Lo sé porque en fin de semana las visitas bajan mucho. Me parece bien, hay miles de cosas que hacer con vuestro tiempo libre mejores que leerme...
Tercero...creo que hay pocos jovenzuelos. Diría que el espectro de descerebrados debe ir desde los veintipocos hasta los 60 y muchos…el límite final lo sé...porque molimadre me lee y su pandilla me leen y tienen esa edad…aunque claro no son desconocidos, pero bueno..creo que esa horquilla de edades está bien. Digamos que si lo tuviera que indicar como en los juegos de mesa pondría algo como 22-70.
¿Por qué me leéis? No tengo ni la más remota idea. La verdad es que no lo pienso mucho, porque si me paro a pensarlo me entra una especie de vértigo parecido al que me da cuando en las pelis del espacio al austronauta tonto se le suelta el cable ( que tú ya lo sabes porque ha habido una toma de lo mal que se amarrado el tio) y se va por el espacio volando sin remedio. Exacto, un vértigo absurdo.
Superando el vértigo, la verdad es que imagino que me leéis porque soy entretenida, no me casco posts misteriosos y con un poco de suerte a veces incluso tengo gracia.
Si me imagino al descerebrado estándar la verdad es que es algo así como un alguien que llega al curro, abre el ordenador, mira los papeles que tiene encima de la mesa, contesta el teléfono, y cuando lleva un rato currando dice...” estoy hasta los huevos..Voy a brujulear un rato por internet”. Y entonces abre google pone “cosas que me pasan molinos” y llega aquí. Y piensa: “Los descerebrados”…a ver qué chorrada se le ha ocurrido a esta tía. Y va leyendo y sonriendo y cuando llega al final dice: No me jodas que esta tía podría ser perfectamente la que está sentada en el ordenador de enfrente. Y sonríe y vuelve a sus papeles importantes y piensa... ¿Y yo porqué leo este blog? Me da igual, el caso es que me gusta. Mañana más.
En resumen, que no tengo ni idea de quienes sois, ni de por qué me leéis, ni de por qué alguno además de descerebrado está taradísimo y ha echado un montón de horas leyendo todas mis tonterías...no tengo ni idea, pero os imagino a (casi) todos más majos que las pesetas y más listos que los ratones coloraos.
Y hasta mañana.
Saber que te leen, es una sensación muy rara. No lo piensas. Escribes lo que te apetece, con unos filtros que decidiste poner cuando empezaste la tontería esta del blog y que continúas teniendo porque te parecen lo correcto.
Al principio escribes sabiendo que no te lee ni el tato.
Sigues escribiendo a pesar de que no te lee ni el tato.
Sigues escribiendo y la verdad es que te da igual que te lea el tato o quien sea. Le has cogido el gusto.
Pero de repente un día...tienes constancia de que alguien te lee y además te comenta y te quedas de piedra.
Y sigues escribiendo sabiendo que te lee el tato.
Y sigues cuando sabes que son el tato y 200 más.
Y sigues con el tato y 400 más...
Y dejas de contar...porque el tato son muchízimoz y además te leen todos los días.
Y sigues con tus chorradas y pensando “lo mismo un día puedo decir esa cosa tan snob de la angustia del folio en blanco"
Y te das cuenta de que tú no tienes angustia porque escribes cuando te apetece y además siempre hay alguna majadería que escribir en el folio en blanco.
Y un día le pones nombre a los miles de tatos que te leen: descerebrados. Y les gusta.
Y otro día dices...” no se me ocurre nada"...y un descerebrado anónimo que jamás te ha escrito te dice " ¿Porqué no escribes sobre como imaginas a los descerebrados?"
Y le robas la idea, con dos cojones.
¿Qué sé de los descerebrados?
Para empezar, sé que sois una legión de desconocidos. Es más, este post es para todos los descerebrados que no conozco y que no comentan jamás o lo hacen muy de vez en cuando. Sólo pasáis y me leéis...y sois mogollón y estáis tarados.
Segundo y esto no saldrá de aquí, sé que la mayoría me leéis en horas de curro, en un ratito de desbloqueo laboral. Lo sé porque en fin de semana las visitas bajan mucho. Me parece bien, hay miles de cosas que hacer con vuestro tiempo libre mejores que leerme...
Tercero...creo que hay pocos jovenzuelos. Diría que el espectro de descerebrados debe ir desde los veintipocos hasta los 60 y muchos…el límite final lo sé...porque molimadre me lee y su pandilla me leen y tienen esa edad…aunque claro no son desconocidos, pero bueno..creo que esa horquilla de edades está bien. Digamos que si lo tuviera que indicar como en los juegos de mesa pondría algo como 22-70.
¿Por qué me leéis? No tengo ni la más remota idea. La verdad es que no lo pienso mucho, porque si me paro a pensarlo me entra una especie de vértigo parecido al que me da cuando en las pelis del espacio al austronauta tonto se le suelta el cable ( que tú ya lo sabes porque ha habido una toma de lo mal que se amarrado el tio) y se va por el espacio volando sin remedio. Exacto, un vértigo absurdo.
Superando el vértigo, la verdad es que imagino que me leéis porque soy entretenida, no me casco posts misteriosos y con un poco de suerte a veces incluso tengo gracia.
Si me imagino al descerebrado estándar la verdad es que es algo así como un alguien que llega al curro, abre el ordenador, mira los papeles que tiene encima de la mesa, contesta el teléfono, y cuando lleva un rato currando dice...” estoy hasta los huevos..Voy a brujulear un rato por internet”. Y entonces abre google pone “cosas que me pasan molinos” y llega aquí. Y piensa: “Los descerebrados”…a ver qué chorrada se le ha ocurrido a esta tía. Y va leyendo y sonriendo y cuando llega al final dice: No me jodas que esta tía podría ser perfectamente la que está sentada en el ordenador de enfrente. Y sonríe y vuelve a sus papeles importantes y piensa... ¿Y yo porqué leo este blog? Me da igual, el caso es que me gusta. Mañana más.
En resumen, que no tengo ni idea de quienes sois, ni de por qué me leéis, ni de por qué alguno además de descerebrado está taradísimo y ha echado un montón de horas leyendo todas mis tonterías...no tengo ni idea, pero os imagino a (casi) todos más majos que las pesetas y más listos que los ratones coloraos.
Y hasta mañana.