martes, 27 de diciembre de 2011

BRUCE. 10 RAZONES PARA AMARLE, 10 MOTIVOS PARA ODIARLE.

1.- Para amarle: Es increíblemente atractivo. No es guapo, no es un tío que digas...madre mía que guapísimo es. No, pero es atractivo y muy sexy. Y además, como los verdaderos tíos atractivos con la edad mantiene e incluso acrecienta ese atractivo. Ha tenido la clase para no despeñarse por la pendiente de la negación del envejecimiento y parecerse cada vez más a una señora mayor como le ha pasado a otros (Elton John, Paul McCartney, Robert Redford). Tiene 62 palos y está tre men do.

Para odiarle: tiene pinta de camionero, de gañanaco americano con un nivel cultural semejante al de un mojón de Cuenca. Algunos de sus estilismos dan mucha dentera…

2.- Para amarle: Lleva 30 años cantando, es un amor a largo plazo. Le descubres a la tierna edad de 15 años y 23 años después sigue ahí. No ha desaparecido como otros amores adolescentes. Sigue ahí, al pié del cañón…enamorándote cada vez más.

Para odiarle: Lleva 30 años dando la murga, con esa voz de camionero y aporreando la guitarra.

3.- Para amarle: sus conciertos. Sabes a lo que vas. Sabes que días antes pensarás que para qué vas, que estás loca, que eres una friki, que menuda pasta te has gastado, que es mejor que rebajes tus expectativas, que lo mismo este año no es igual y que aún así eso no rebajará tu amor incondicional. Vas con esos pensamientos todas las veces…y luego empieza…suena la música, sale él…y ya está...transportada, transformada, feliz. Y lo que es mejor, sabes que esa felicidad durará días después del concierto…

Para odiarle: sus conciertos. Otra vez está aquí. 70 leuros de concierto, tu pareja odiándote por los brincos que das días antes de saberse las fechas oficiales porque has leído en un foro de frikis que hay rumores. Tu pareja mirándote con ojos asesinos porque estás poniendo alarmas por toda la casa para acordarte de sacar las entradas. Tu pareja flipando con tus planes a 7 a 7 meses vista para ir a no un concierto...si no a 2. Tu pareja cabreada cuando le dices que pasas de irte de vacaciones con la familia…que te vas a Valladolid a un concierto y que a la playa llegarás dos días después. Las giras de Bruce enrarecen la relación de pareja… (Si tu pareja no es fan de Bruce)

4.- Para amarle: por esta pinta de empotrador sin igual que tiene en el minuto  3:48
Para odiarle: por esta pinta horrorosa con todo lo que odio en un tio, pelito que ni largo ni corto sino todo lo contrario, perilla, pendiente...por poner mi amor a prueba con esta pinta. Seguro que lleva calcetines artengo.

5.- Para amarle: sus canciones. Los temas de bruce tienen una característica curiosa, una vez que te los aprendes jamás olvidarás la letra…aunque pases años sin cantarlas. Suenan en la radio por sorpresa y de repente te recuerdas a ti mismo, en tu cuarto, con tu vinilo de Tunnel of Love, el disco sonando y tú leyendo las letras y cantando al mismo tiempo…te sientes como con 15 años.

Para odiarle: sus canciones. Jamás se te olvidan, te taladran la cabeza y sus estribillos se graban a fuego en tu cabeza, incluso las malas.

6.- Para amarle: Born to run " I love you with all the madness in my soul" , Spirits in the night  , "And we danced all night to a soul fairy ban and she kissed me just right like only a lonely angel can",  Badlands "I want control right now/talk about a dream/Try to make it real/you wake up in the night/With a fear so real/Spend your life waiting/for a moment that just don't come/Well, don't waste your time waiting", Thunder Road "You ain't a beauty, but hey you're alright Oh and that's alright with me", Fire "'Cause when we kiss, Fire", Bobby Jean "But just to say I miss you baby, good luck goodbye, Bobby Jean", I´m on fire "Only you can cool my desire I'm on fire" , Atlantic City "Well now everything dies baby that's a fact But maybe everything that dies someday comes back" , Loose Ends "We didn't count tomorrows, we took what we could and baby we ran", , It´s hard to be a saint in the city "I could walk like Brando right into the sun" , Outlaw Pete " Can you hear me" …no me caben todas en este post..

Para odiarle: Sad Eyes. ¿Por qué tuvo que escribir esa canción horrorosa y lo que es peor, porqué luego permitió que Enrique Iglesias hiciera una versión aún peor que la original (esto casi es un mérito) que ponen en todas las emisoras de radio fórmula presentadores que dicen cosas horribles como “temazo de El jefe”?? Este es sin duda una razón para odiarle muchísimo.

7.- Para amarle: lleva 20 años con la misma mujer, Patti. Es un tío con principios, encontró el amor verdadero, tuvo 3 churumbeles y ahí está con Patti. No está contigo porque tú no le gustes si no porque llegaste tarde a conocerle...basicamente cuando le conociste era ilegal que se liara contigo (no vamos a meternos en honduras sobre si el hecho de “conocerle” es literal o no)

Para odiarle: lleva 20 años con la pelirroja de las narices que es fea, sosa, transparente de piel, canta mal y cae fatal. ¿Por qué un tío tan increíble tiene que estar con una tipa tan asquerosa? Y bueno, vale que esté con ella...pero ¿es necesario que le dé una guitarrita y la ponga en el escenario a su lado? Y vale, ponla en el escenario...pero ¿por qué tienes que ser cruel y mirarla con amor?

8.- Para amarle: es el tío al que mejor le sientan los vaqueros del planeta. Ese culo...ainssss…

Para odiarle: es el tío al que mejor le sientan los vaqueros del planeta. Tiene el mejor culo y sabe moverlo...y no está a tu alcance.

9.- Para amarle: Bruce permite decir una frase que mola mucho y da muchas satisfacciones: TE LO DIJE. Un concierto de Bruce es una experiencia a compartir con alguien porque sabes que lo disfrutara. Es algo así como ir por primera vez con un niño al zoo, o al cine o al parque de atracciones. Aunque tenga 40 palos no sabe lo que va a ver, cree que si, cree que ya ha ido a más conciertos como ese…que no le sorprenderá, pero no, no tiene ni idea. Y tú te pasas meses diciendo: vas a flipar, ya lo verás. Y ese alguien te mira con incredulidad y dice: anda, anda...no será para tanto. Le das tanto la brasa que incluso se predispone para que no le guste tanto, lo ves en su cara, tiene expresión de “aunque me mole diré que no porque Moli me está dando mucho el coñazo y paso de darle la razón”. Al final, le llevas de la manita, observas su cara cuando empieza el concierto, sonríes cuando notas que ha entrado en “trance”, que por fin...ha visto a Bruce…y te ries cuando se da la vuelta y te dice: Joder…esto es increíble.

Y tú dices: Te lo dije

Y sonríes más cuando al cabo de dos años vuelve Bruce y ese alguien te dice: ¡¡sácame entradas por tu madre!!!

Para odiarle: cuando no puedes ir con quien quieres y por un momento piensas… ¿y si es la última vez que viene y se lo está perdiendo?

10.-Para amarle: siempre es una buena excusa para escribir un post.

Para odiarle: eh...Molinos ha actualizado por fin…¡¡mierda!!! ¿Otra vez Bruce?? Pero ¿será cansina la tía con Bruce? Que aburrimiento y además es que no me mola nada su música, es un camionero horroroso. De verdad que no se qué le ve…Mierda. Habrá que esperar a mañana...a ver que tontería se le ocurre, aunque claro ya me veo que en el 2012 va a dar mogollón la murga con este tema...con eso de que va a dos conciertos. ¿Y yo porqué se que va a dos conciertos? Creo que debería dejar de leer este blog un tiempo, al final a mí que no me gusta Bruce, es más, que le detesto...veo un anuncio en el periódico...y pienso “mira Molinos estará contenta”…Odio a Bruce, coño.

Dedicado a Bich que me dio la idea.

viernes, 23 de diciembre de 2011

FRASES

Hay frases comodín. Frases que todos usamos con el mismo sentido, negamos ese sentido y a las que todos reaccionamos con las mismas sensaciones.

¿Te puedo hacer una pregunta personal?

Lo que quieres decir es: ¿te puedo hacer una pregunta que a mí me da vergüenza formular y que a ti no te va a molar responder? ¿Te puedo hacer una pregunta que va a causarnos incomodidad a los dos pero que espero que tú con tu respuesta hagas desaparecer esa incomodidad? ¿Te puedo hacer esa pregunta que me está quemando por dentro y tengo que sacar para pasarte a ti esa quemazón?

Lo que sientes al escucharla. Empiezas a centrifugar qué pregunta personal es, calibras la incomodidad que te va a suponer escucharla y si serás capaz de soportar ese nivel de incomodidad y por supuesto empiezas a pensar en mentiras para responder en el caso de que sea justo la pregunta personal que ni de coña quieres responder.

Lo que contestas: Claro.

Lo que de verdad quieres contestar: NI DE COÑA.

¿No te lo dije?

Lo que quieres decir es: deberías haber sabido “eso” pero me dio reparo decírtelo en su momento y me acojoné. Así que me estoy haciendo el sorprendido y el memoria de pez...para intentar disimular mi cobardía.

Lo que sientes al escucharla. “Fabuloso, otra vez me ha ocultado algo que debería haber sabido”.

Lo contestas es: No, no me lo dijiste.

Lo que de verdad quieras contestar: No, no me lo dijiste...cobarde de mierda y no te hagas ahora el sorprendido porque sabes de sobra que no me lo dijiste aposta.

No te lo tomes a mal pero…

Lo que quieres decir es: te voy a decir algo que tiene que sentar fatal, pero te pido que hagas como que no, porque a) me das miedo, b) lo vas a pagar conmigo o c) me alegro muchísimo de que te vaya a sentar como el culo pero tengo que hacer como que siento que te vaya a sentar mal.

Lo que sientes al escucharla. Aprietas la mandíbula y piensas en todos los consejos zen que te han dado y has leído por ahí: cuenta hasta 10, nada te perturba, eres bambú….

Lo que contestas: Para nada me lo tomo a mal…

Lo que de verdad quieres decir: ¿Cómo coño no me lo voy a tomar a mal? Joder, ya que me dices esa putada por lo menos déjame que me lo tome a mal y me ponga como un loco, chille o grite.

Tengo algo que contarte.

Lo que quieres decir es: tengo algo que contarte que a) no te va a gustar, b) es una mala noticia c) es algo que realmente no quieres saber pero tengo que decírtelo.

Lo que sientes al oírlo: Pánico. Terror. Miedo.

Lo que contestas: Dime.

Lo que de verdad quieres decir: Noooo...no me lo digas. La ignorancia es maravillosa y reconfortante y soy feliz en mi limbo de desconocimiento.

Tengo un notición.

Lo que quieres decir es: tengo una noticia buenísima. O tengo un cotilleo increíble que a ti no te afecta pero que nos va a dar para un rato de cháchara.

Lo que sientes al oírlo: curiosidad malsana. Ganas de alegrarte.

Lo que contestas: cuéntamelo ya.

Lo que de vedad quieres decir: ¿cómo has sido tan perro de no decírmelo antes y guardarte esa información valiosa? O Perroooo como teniendo esa noticia tan buenísima has sido capaz de no decírmelo....te odiooooo.


Feliz Navidad.

Lo que de verdad quieres decir: Sé qué piensas que te lo digo por compromiso pero si te deseo feliz navidad es porque lo siento de verdad. Ya he llegado a una edad en la que si no lo voy a decir de verdad paso de decirlo.

Lo que sientes al oírlo: un cosquilleo.

Lo que contestas: Feliz Navidad para ti también.

Lo que de verdad quieres decir: La Navidad mola mucho y quiero que lo pases genial y que nieve allá donde estés y encuentres tu comida favorita en la mesa y no te obliguen a escuchar villancicos horrendos. Quiero que te rías, que seas feliz y que lo pases genial. Y espero que si nada de eso te mola te dejen pasar la Navidad a tu rollo...lo que sea que en un par de días te haga feliz.

Eso es lo que de verdad quieres decir…pero claro tienes un prestigio que mantener y eso sería muy de mejillas sonrosadas.

jueves, 22 de diciembre de 2011

LIBROS ENCADENADOS.- Noviembre - Diciembre








Moli, tienes que hacer el post de libros encadenados de noviembre y diciembre.
Lo sé,
Tienes que hacerlo ya...porque la semana que viene tendrás que hacer el resumen anual y dos posts de libros en una semana hacen bola y ahuyentan lectores.
….te digo una cosa...ahuyentar lectores no me parece tan mala idea la verdad…
Al tema.








La broma de Milan Kundera. De este autor sólo había leído “La insoportable levedad del ser” y ni siquiera recuerdo de qué iba así que me enfrenté a “La Broma” casi virgen en Kundera. Me ha gustado mucho y seguro que no se me olvida porque toda la historia me ha parecido tremenda. A partir de unas frases escritas por un joven como una broma en una postal a su novia, Ludvick ve como toda su vida cambia de rumbo sin que él pueda o sepa cambiarlo. La broma y las consecuencias que le acarrean serán una especie de germen del resto de su vida. Todo girará en torno a la superación primero y la venganza después. Los personajes tienen 37, 38 años y sin embargo me han parecido extrañamente mayores, como con sus vidas acabadas. Y he encontrado también un hilo que conecta este libro con “El cero y el infinito” que leí hace poco. Las ideas comunistas, los ideales de la sociedad comunista vueltos del derecho y del revés para al final enfrentarse a la desilusión ante su fracaso. Como Rubachof, Ludvick se ve enfrentado al absurdo de haber perdido años y energía lamentándose por haber sido excluido de unas ideas que ahora le resultan falsas.

Ludvick comienza siendo un personaje con “prestigio” tanto para el lector como los demás personajes y termina siendo patético y digno de lástima por el absurdo de su vida y su incapacidad para ver su vida sin mirar a través del cristal de la broma. Su venganza acaba siendo patética y muy poco satisfactoria...que es lo peor que puede ser una venganza.

El quid de la cuestión estaba en la imposibilidad del retorno. Todas las situaciones básicas de la vida son sin retorno. Para que el hombre sea hombre tiene que atravesar la imposibilidad de retorno con plena conciencia. Beberla hasta el fondo. No puede hacer trampas. No puede poner cara de que no la ve

 
“El pájaro espectador” de Wallace Stegner. De los tres que he leído de Stegner este es el que menos me ha gustado. Es otro autor que siempre escribe lo mismo. Un personaje mayor que desde el presente realiza un ejercicio de memoria con su propia vida y sus propios recuerdos o los de alguien de su familia. El narrador siempre es una persona mayor, con su escepticismo y su sabiduría vital y todas sus manías y prejuicios adquiridos a lo largo de los años.

En este caso Joe, tras la llegada de una postal inesperada, recupera y lee para él y para su esposa el diario que escribió 20 años antes durante un viaje a Dinamarca. Se intercalan los episodios de su vida actual con los recuerdos. Para mí, ambos hilos no acaban de encajar bien y no encuentran el tono para discurrir juntos teniendo sentido. Tampoco he conseguido entender a los personajes que me han parecido desdibujados y poco consistentes y la trama danesa es sencillamente increíble y chirría mogollón. A pesar de estas para mí carencias, se lee fácil y entretiene pero si alguien quiere conocer a Stegner mucho mejor empezar por “En un lugar seguro”.

Por definición, un prejuicio es la declaración del principio de que quien lo sostiene no tiene intención de analizar nada. Lo que no demuestra que esté equivocado. Y qué reconfortantes resultan


“Berlín. Ciudad de Piedras” de Jason Lutes. Un lector anónimo me lo recomendó en algún post y lo saqué de la biblioteca. Trata sobre la vida de Berlín de 1928. El clima social, los nacionalsocialistas empezando a emerger, los comunistas, los judíos, la situación de las mujeres, los obreros, los periodistas. Es un dibujo muy frio, en blanco y negreo y muy sobrio. Me gustó y me falta leer la 2ª parte.


1984 de George Orwell. Un clásico que no había leído. Me ha encantado. Tiene una primera parte en la que describe como es la vida en 1984: los hablaescucha, el Ministerio del Amor, de la Paz, El Partido, el Gran Hermano, los proles, la neolengua, las rutinas de Winston, los minutos del odio, etc. que se me hizo un poco ardua. Ahora cuando repaso la lectura y mis sensaciones al leerlo, supongo que la idea de Orwell era que a través de esa primera parte el lector entrara en el ambiente agobiante, pesado y opresor de 1984. Y lo consigue, para cuando empieza la historia entre Winston y Julia, respiras y te das cuenta de que según has ido leyendo y metiéndote en la historia has terminado por no respirar, por contener el aliento y casi miras por encima del hombro sospechando que te espían.

Su historia, la de Winston y Julia es una especie de oasis. Sabes que no durará, que es imposible que acabe bien, que les pillarán y será horrible pero mientras dura, todo parece ir mejor, ser menos opresivo, parece haber algún tipo de espacio para la libertad individual, para tener libertad de pensamiento y de sentimiento. Piensas, vale es horrible pero siempre queda espacio para ser uno mismo, lo que eres no te lo pueden quitar.

Cuando todo termina de forma abrupta, el rayo de luz que iluminaba la historia se apaga y todo vuelve a ser gris y frio. Y el lector lo siente, frio y opresión. La parte final con los interrogatorios se parece mogollón a “El cero y el infinito” (va a tener razón Judt con que fue una obra de referencia en su momento que ahora ha caído en el olvido).

Un clásico que hay que leer.

El poder no es un medio, sino un fin en sí mismo. No se establece una dictadura para salvaguardar una revolución, se hace la revolución para establecer una dictadura. El objeto de la persecución no es más que la persecución en sí misma. La tortura solo tiene como finalidad la misma tortuta. Y el objeto del poder no es más que el poder. ¿Empiezas a entenderme?”


Alto riego de Richard Russo. Compré esta novela en la Feria del Libro Antiguo de otoño. Es la cuarta novela suya que leo y es la que menos me ha gustado aunque es un autor que siempre resulta agradable.

La historia de Ned atrapado entre sus padres. Vive primero con su madre en un entorno protegido y estable, que se quiebra cuando ella se enamora de quien no debe. Ned pasa entonces a vivir con su padre, San hall, un rufián, borrachín, con una vida caótica en que Ned se sumerge y acaba encajando.

Es una novela lentísima, en la que Russo describe con todo lujo de detalles cualquier acción, consigue a veces ser un poco desesperante. El detallismo en la descripción de la vida cotidiana es una característica de Russo en todas sus obras, pero creo que en esta se excede.

Nunca fui muy dado a la sinceridad...ni siquiera de niño”.


“El libro de los amores ridículos” de Milan Kundera. Me ha gustado menos que “La Broma” y creo que Kundera como Roth, como Russo, o como Auster escribe siempre la misma historia. Puede que sea porque en el fondo escriben sobre ellos mismos, sobre cosas que son, cosas que les gustaría ser o cosas que no es gusta ser pero que son inevitables.

En este caso es una colección de relatos cortos, todos sobre “amores”, algunos más ridículos que otros pero todos con un toque muy machista, y con machista me refiero a muy desde el punto de vista de un tío que no intenta ser políticamente correcto para nada. Kundera escribe siendo muy tío, muy hombre, mira a las mujeres como objetos y sabe cómo le gustan esos objetos: jóvenes, guapas y deseables. Sin embargo, la mayoría de sus hombres acaban con mujeres que no se ajustan a esas características y acaban con ellas no por amor, ni siquiera por atracción física si no por pena, por obligación, porque esas mujeres son un recuerdo de algo, porque creen que otro las encuentra deseables y quieren “mear en esa esquina”…todos motivos ruines y mezquinos.

Ellas resultan más ridículas que patéticas. Cuando acaban con esos hombres tienen siempre una actitud como de agradecimiento y sometimiento personal absurda. Lo peor además es que Kundera las describe como “mayores” y tienen 40 años.

Me ha gustado y se lee fácil. Las mejores historias son las que se alejan más del esquema típico. La mejor para mí, es la del profesor que se ve atrapado en su propia red de mentiras que comienza con una mentira piadosa y tonta.

“Esto responde a una especie de curioso principio – le dije a Martin- la mujer fea espera lograr algo del esplendor de su amiga más guapa: la amiga guapa, a su vez, espera reflejarse con mayor esplendor si la fea le sirve de telón de fondo, de ahí se desprende que nuestra amistad se vea sometida a continuas pruebas”.


84, Charing Cross de Helena Haff. Llevaba años leyendo reseñas sobre este libro, encontrando referencias por todas partes y nunca había conseguido acordarme para sacarlo de la biblioteca o para comprarlo. Gracias a un amable lector que me lo ha regalado he subsanado este vacío lector.

Se lee fácil, entretiene y se termina. No hay más.

Me ha desilusionado probablemente porque me había creado demasiadas expectativas (parezco nueva) y las expectativas las carga el diablo. Sabía que la historia iba sobre una lectora y un librero que empezaban a intercambiar cartas y pensaba que ese carteo avanzaría hacia algo...incluso tenía la idea de una historia de amor.

En realidad es un intercambio de cartas pidiendo y sirviendo libros con un poco de contenido personal y muy poco por tarde de él. Ella me cae mal, es demasiado naif, demasiado…no encuentro la palabra, pero me carga. Además dice una cosa que me saca de quicio y me parece una completa majadería “Solo me interesa lo que de verdad ha pasado y contado por quien lo ha visto”...es decir, es tan guayyy que no lee ficción. Es boba.

Él me mola, es un señor, muy inglés. Pausado y calmado. Con clase. Leyendo lo imaginaba contestado a las cartas de la loca americana y pensando para sus adentros...por dios que no venga nunca a Londres.

Es un libro fácil y entretenido y con las expectativas adecuadas al producto supongo que puede ser una pequeña delicia.

Estoy terminando Freakonomics pero creo que lo dejaré para el post de la semana que viene, o lo mismo me calzo un post sobre él en exclusiva. No lo he decidido aún.

Fin del ladrillo.

miércoles, 21 de diciembre de 2011

DE COACHING...

Tenéis que pensar en las cosas que os hacen felices. No tenéis que pensar en que ojalá llegue el viernes y entonces esperar al viernes para ser felices. Hoy es el primer día del resto de tu vida y hay que disfrutar de las cosas obligatorias y también de las voluntarias...como este curso

¿Voluntario? ¿Voluntario? ¿WTF? ¿Cómo que voluntario? ¿Tengo pinta de estar aquí voluntariamente? Mejo no digo nada…voy a hacerle caso y me voy a poner zen…total tengo que estar aquí “voluntariamente” 7 horas. Veamos las cosas buenas…me han dado un rotulador de esos gordos de profesora que me flipaban, la vida es guay…32 años después puedo poner mi nombre “Moli” en una cartulina con forma de flor y que cuelgue de mi silla.

“Hoy vais a aprender a gestionar vuestro estrés. A ver ¿Qué os genera estrés?

Pues estar aquí mordiéndome la lengua pero supongo que eso no es lo que quieres oír, así que mejor no digo nada.

A ver Moli...a ti ¿que te estresa?

Si me preguntas así...no voy a poder callarme. Tú lo has querido.

Pues mira, me estresa llegar a casa después de hacerme 180 km y encontrarme a mis hijas nada más abrir la puerta saltando y gritando: ¡¡Mamáaa he traído 3 circulares!! ¡¡Lee!! Mamá ¿qué hay de cena? ¿Y de comer mañana? Mamá...tengo que hacer un camello de cosas recicladas. Mamá…he perdido el bañador. Mamá…M me ha pegado. Mamá…C se ha metido conmigo.

Por la cara que ha puesto el coach, claramente no estaba preparado para esta respuesta. Obviamente esperaba algún otro tipo de stress. Eso le pasa por preguntar a quien no debe. Le he descolocado, pero realiza una bonita pirueta, pasa de mi stress y suelta el rollo que tenía preparado que es para gente que trabaja en empresas de mucha actividad….

En la vida se puede tener 3 actitudes. La actitud padre que es normativa, ejemplar, sigue las normas y no se sale del sendero de lo aprendido. Es la actitud con la que se educa y la tienen las personas que en el trabajo son muy partidarios de la jerarquía y un reparto de las tareas bien definido

Ya…y por el tono con el que lo está diciendo no le parece bien. Debe ser una actitud de poco coaching, pero en fin, yo no digo nada, que para qué, voy a pintar otro rato con este rotu tan chulo.

“La siguiente actitud es la actitud niño. Te dejas llevar por las emociones, estás comparándote todo el rato con otro y diciendo cosas como “yo trabajo mejor y él gana más dinero”, y te basas en la experiencia para gestionar los conflictos. Por ejemplo dices...estás siendo niño cuando dices cosas como “este libro de color verde no va a funcionar porque yo lo sé” Ahí estás siendo niño

A tomar por saco la actitud zen...aqui tengo que decir algo.

Perdona…
¿Si, Moli?
No estoy nada de acuerdo con eso que acabas de decir.
¿Por qué?
Pues porque no creo que cuando usas tu experiencia para desechar un producto en los libros de colores estés siendo niño.
Pues si lo eres, porque te estás dejando llevar por tu experiencia.
Si claro, por tu experiencia profesional. Como has analizado 1000 libros verdes y sabes cuales funcionan y cuáles no…tiras de esa experiencia profesional.
Error…
¿Cómo que error? ¿Error de qué?
Porque te basas en una experiencia del pasado….
Si...en una experiencia profesional que aplico a mi actividad laboral.
Pero te dejas llevar por tus emociones.
Que no. Te lo voy a explicar más claro. Yo leo un libro verde que me emociona, me vuelve loca y me fascina y en vez de dejarme llevar por mi emoción…tiro de mis conocimientos y experiencias profesionales y digo: tengo que desecharlo porque no va a funcionar.
¿Ves?
¿Qué es lo que tengo que ver?
Pues que haces que el pasado te condicione, actúas como un niño. El futuro es lo que tú quieres que sea….
Venga pírate….pensé que estábamos discutiendo en serio...si me vas a salir con las flores, las nubes y dibuja tu propia aventura, paso.
¿Ves?
¿Qué veo? (que me estás sacando de quicio…coño...eso es lo que veo)
Te estás retirando…eso es lo que hacen los niños. Yo no quiero discutir con la Moli niño…quiero discutir con la Moli adulta.
¿Qué los niños se retiran?? En fin…debe ser en el mundo de color azul celeste donde vives tú...en el mio son más de jugar a agotarte...pero lo que tu digas.
Voy a esperar a que salga tu Moli adulta.

Me estas recordando a Molimadre mogollón y eso no es nada bueno...ni para ti...ni para mi y…te digo yo donde te va a mandar la Moli adulta….como salga.