viernes, 5 de febrero de 2010

AVILA

Ávila mola muchísimo. Es una ciudad a la que le tengo cariño. Es verdad que lo piensas y dices, ¿Qué tiene Ávila? Murallas, yemas de Santa Teresa, monjas y un frío de mil pares de narices.


Mi relación con Ávila empezó mal. De visita con el colegio. Un plan nefasto como todo el mundo sabe. Te llevan allí en un autobús en el que se cantan chorradas y te peleas por ir sentada con fulana o mengana, visitas turísticas que nadie entiende bien, asomarte a un ventanuco a ver un dedo de Santa Teresa y comerte el bocadillo guarrero que te han preparado en medio de un parque.

Con 25 años mi relación con Ávila empezó a cambiar. Allí fue la peor primera cita de la historia. Luego el tema se fue encarrilando y me pasé un año yendo y viniendo a la gran ciudad amurallada para ver al ingeniero. Él vivía en el conocido como “palacete renacentista”, que obviamente respondía a todo lo que se le pide a un piso de soltero.

Estaba en el centro centrísimo de la ciudad, plaza del Mercado Chico. No es que Ávila sea muy grande, o estás en el centro o en Valladolid, enseguida te has salido.

Era un cuchitril con un amplio pasillo, tan amplio que la cocina estaba en medio del pasillo.

El salón era minúsculo con un sofá incomodísimo, en el que solo cabía una persona, “es que no sabía que iba a tener novia” o dos muyyyy bien avenidos y con muuucho amor. Por supuesto había una microtele que casi nunca veíamos y la única ventana de la casa que daba al exterior. La pena era que daba al exterior pero por debajo de los soportales de la plaza con lo cual, la luz que entraba era mínima. Eso sí, nos hacía mucha gracia ver pasar al “murallito” justo enfrente.

Luego tenía un dormitorio minúsculo dónde dormimos la primera vez y una puerta misteriosa al lado del baño que el ingeniero no se había molestado en abrir en 6 meses. Ya conté que era un gran cuarto con cama de matrimonio.

También había un baño donde criábamos pingüinos en agosto del frío que hacía y un vecino que por las noches tosía como si quisiera poner sus órganos vitales encima de la mesa y echarles una ojeada.

Era un rinconcito de amor absoluto.

Con la llegada del invierno, convencí al ingeniero, la verdad es que todavía no sé cómo, supongo que gracias a la abducción amorosa, de buscar otro nidito de amor. Ahora mismo no le convenzo ni de cambiarse de camisa..pero aquellos eran otros tiempos.

Nos mudamos a las afueras, es decir, a 3 minutos andando de dónde estábamos, pero a una casa con ventanas, un sofá decente y calefacción. Eso sí, el baño seguía siendo una nevera.

Conservo de aquella época muy buenos recuerdos. Salíamos por la noche de cena y de copas con S, entrábamos en un garito y cuando salíamos, cocidos como piojos, la nieve nos llegaba a las rodillas. Volvíamos andando a casa, muertos de risa , que es lo bueno que tiene Ávila, que enseguida llegas.

Luego el ingeniero se mudó a León, pero esa es otra historia.

El caso es que una vez al año vuelvo a Ávila con motivo de un nuevo encuentro gastroalcohólico de losdemontes. S, que es oriundo de las murallas, organiza todos los años en esta época invernal la ingesta de un cocido, en un restaurante con una pinta un poco regulera, llamado La colilla pero dónde preparan un cocido de muerte.

Primero intercambiamos unos 400 mails barajando distintas fechas y al final se concreta en día y medio.

Luego nos mandamos unos 200 para intentar no ir en n coches. Aquí se fracasa siempre.

Llegado el día, quedamos a las 2 para tomar el aperitivo donde se ingieren todo tipo de tapas light como callos, oreja, bravas y demás, todo regado con cienes de cañas.

Por fin, a las 16 horas, nos sentamos a tomar el cocido. Siempre hay que encargar para unas 10 personas menos de las que se vayan a juntar, porque las raciones son como para ogros.

Se sale del garito a las 18:30 para por supuesto ir a otro a tomar digestivos.

Se toman copas. Yo bebo muy deprisa para que el ingeniero no me atrape en el truco de: nos tomamos una y luego decidimos quien conduce y cuando llego a preguntar me dice: uy..yo ya me he tomado 3.

Nos echan del bar por comer pipas Calvo (las mejores pipas del mundo si no lo sabéis).

Llegamos a los molinos donde antes hemos depositado a las princesas.
Mi madre me regaña por bolingas.

Me apetece todo. Es mañana.

jueves, 4 de febrero de 2010

EL BUCLE LABORAL INFINITO

Procesos laborales, de la empresa de libros por colores en bucle infinito, con el único propósito de volver a la casilla de partida.

Paso 1.
Reunión en la cumbre de los máximos responsables de los distintos departamentos de libros por colores. Motivo de la reunión: vamos fatal. Apostamos por un modelo basado en la enciclopedia multicolor y los libros reversibles y no funciona.

Dicho encuentro se caracteriza por el escaqueo generalizado combinado con aceptación de todo lo que el JS diga.

Decisiones tomadas: Ninguna. Esto no puede seguir así. A ver qué se nos ocurre.


Paso 2.
Todo el mundo vuelve a su despacho y empieza a conjurar en contra de los demás departamentos de libros de colores. “La culpa es de los verdes que no se enteran de nada”. “Los rojos tienen la culpa, no tienen ni idea de cómo colocarlos, y claro así vamos, nos hunden a los amarillos”. Básicamente se trata de conseguir desviar la atención del departamento propio para conseguir focalizarla en otro. Todo tipo de pactos son susceptibles de ser llevados a cabo. Por supuesto cada uno en su despacho dice: yo ya sabía que la enciclopedia multicolor no funcionaría.

Paso 3.
Pedir audiencia con JS para intentar calzarle la responsabilidad a otros. Molaría si lo hicieran sutilmente, la maldad bien diseñada mola trillones. El problema es que se les ve el plumero.

Paso 4.
Retiros espirituales de los máximos responsables: se trata de encontrar nuevos modelos de libros rojos, verdes y azules. Nuevos modelos sobre cómo colocar esos libros de manera que resulten atractivos y nuevos modelos para vender la moto de nuestros libros de colores. “Comprad, comprad…mis hermosos jabalíes”

Es fundamental que antes de ir a esa reunión todo el mundo tenga opiniones claramente hostiles : es que claro así no vamos a ninguna parte. Le pienso decir que lo que hay que hacer es…; la culpa es del de los libros amarillos que nunca dice nada en contra aunque la idea sea claramente tonta; si en otras empresas no ha funcionado..¿Como va a funcionar aquí?..etc., etc.
Lo que se viene conociendo como hacerse el guay antes de tiempo.

Paso 5.
Vuelven del retiro espiritual. Los curris esperan ansiosos las novedades decididas por los gurús, que les saquen del coñazo de la enciclopedia multicolor y los libros reversibles. ¡¡ Alabado sea el señor!!...¿Qué nos traen? ¿Se les habrá ocurrido apostar por algo realmente novedoso? ¿Algo que rompa y atraiga a multitudes? ¿Algo nuevo?

Paso 6.
Las novedades son el mismo perro con distinto collar. En vez de la enciclopedia multicolor tenemos “libros de colores por temas” y en vez de libros reversibles tenemos “libros que se dan la vuelta”.

Paso 7.
Los curris dicen: ¿pero qué mierda es esta? ¿Así es como vamos a mejorar?

Paso 8.
Los jefes dicen: no entendéis que esto es completamente distinto. Esa es la gracia, en esencia es lo mismo que es lo que nuestros clientes quieren pero modernizado y con alguna cosa nueva.

Paso 9.
El curri piensa: a mí me parece una mierda pero al fin y al cabo yo no compro estos libros de colores, sino que los compro en otra empresa, así que a mi plin.
Y se pone en marcha toda la maquinaria.

Cuchilladas a placer entre jefes de uno y otro departamento. La típica estrategia de me guardo mi información sobre qué día colocamos los verdes para que tú que eres el de los amarillos no lo sepas y así vayas tarde en el plan y quedes mal y yo quede bien.

Los curris intentan sacar su curro adelante con el mínimo de información que proporcionan los jefes.

Finalmente salen adelante con grandes expectativas por parte de los capitostes las supuestas novedades.
Paso 10.
Inexplicablemente para los jefes su genial y novedosa idea no ha funcionado. Seguimos yendo fatal. Resultados catastróficos. Caras de sorpresa, incredulidad, ¿cómo ha podido fallar con lo genial que era la idea? ¿Y si los colocamos al revés?

Vuelta a las cuchilladas: esto ha sido cosa del de los libros verdes, no no..El de los rojos…yo ya sabía que no funcionaría…
Vuelta al paso 1: moli, convoca reunión.

Qué bonito es cuando todo el mundo hace su papel y las cosas salen redonda. No quiero ni pensar qué ocurría si llegara alguien con ideas novedosas y valor para exponerlas y nos rompiera este bonito bucle.
Este modelo es aplicable a cualquier empresa, me temo.

miércoles, 3 de febrero de 2010

CHICAGO CON MOLIMADRE.

Hace 7 años durante un viaje sorpresa ( para el ingeniero) a NY, fuimos a ver “Chicago”. Recordaba vagamente el espectáculo, porque me pasé la mayor parte de la función intentando que los ronquidos del ingeniero ( en fila 3) no se escucharan mucho o por lo menos fueran acompasados con los de su vecino durmiente de Wisconsin.

Todo este preámbulo viene porque molisister, que es encantadora y majísima, me regaló por Reyes una entrada para ir a ver Chicago ayer, con mi madre. Las tres en pandilla feliz.

El espectáculo muy bien. Los americanos son chicos listos y no te dejan que hagas de tu capa un sayo y adaptes su obra como te salga de las narices, así que es copiado al de Broadway y el texto en español. Todo correcto, gran orquesta, grandes cantantes y un cuerpo de baile sencillamente espectacular.
Ellas creo que están bien, pero ellos, ¡madredelamorhermoso! Me sentí un poco vieja verde, ¡Madre mía qué culos!, ¡que movimientos de caderas! Algo espectacular.
Al encenderse las luces, pensé “moli, no digas nada..No le des a tu madre argumentos para la lucha que ya los busca solita”Pero mi hermana sacó el tema:

- Moli..¿has visto esos culos?
- Eh…si.
- Son perfectos..madre mía que apretura.
- Hijas, vosotras creéis que se pueden pellizcar. .- pregunta de molimadre
- Mamá, eso no se pellizca..son como manzanas..son para cogerlos con toda la mano.
- Y ¿llevarán algo debajo?
- Mamá..ahí no cabe nada y no hace falta…

El caso es que me puse a pensar en los culos perfectos y los movimientos de cadera rítmicos y en que a pesar de que algunos lectores me recriminen (y no miro a nadie) mis gustos sobre tíos porque me gustan feos, también me pone un chulazo.
En estos pensamientos estaba entretenida, bajé la guardia y mi madre se aprovechó de ello y se dedicó a revolcarme por el fango.

Round 1
- ¿sabéis que he visto 3 de las pelis más nominadas este año a los Goya? La que menos me gustó fue Ágora.
- Molisister:
a mí me gustó cuando la vi con mamá, pero luego leí tu crítica y creo que sí, que tienes razón.
- eso te pasa por leer nada.
-
Mamá, tú escuchas las tertulias de la radio así que yo leo a mi hermana.
- ¡No me vas a comparar!
Cojonundo. Tengo menos criterio que Carlos Herrera.

Round 2
- Moli, ¿qué tal las niñas?
- Muy bien. M. tan buena como siempre y C. va por la casa diciendo “ Zoy la Virgen, o no..mejor Zoy Diozz que mando máz”
- Esa niña se te está subiendo a las barbas. Le consientes todo, y así no se puede educar a nadie. Lo que tenías que hacer es tener otro para compensar.

No sé educar a mis hijas y tengo que tener otro churumbel.
Round 3
- Mamá, el sábado dejaremos a las princezaz en Los Molinos que nos vamos a comer cocido con los de Montes a Ávila. Las dejamos a la 1 y volveremos a las 8.
- Ya, eso dices siempre..y luego siempre es más.- Molisiter metiendo el dedito.
- Y además...ya sé como vuelves..cocida como un piojo.
- Que no..que tengo que volver conduciendo.
- Ya, ya, que ya te he visto a ti, con los ojos inyectados en sangre y apestando.
Soy una madre borracha.

Round 4 y KO de moli.
- Tu pobrehermano está fatal, pero ya come algo.
- Ah sí…¿ lo de su ex o novia o lo que sea en regresión, no?
- Moli, no seas insensible..lo está pasando fatal. Tus hermanos dicen que es que a ellos esto de las rupturas les afecta mucho, lo pasan fatal.
- Ya..bueno….
- Bueno ¿qué?
- Pues que..(
moli sister me miraba con cara de: no caigas, no caigas)..les afecta mucho porque tú estás en modo polleluelos con ellos.
- ¿Qué dices?

Decidí ignorar las patadas de molisister que es mucho más equilibrada que yo.

- Pues que les mimas en vez de espabilarles. Cuando yo sufría como una perra con “el novio” tú me decías: SI ES QUE ERES TONTA, TE LO MERECES POR BOBA, y a ellos les dices: pobrecitos, pobrecitos…¿qué queréis de comer? Y así claro, en vez de tirar para adelante se regodean en autocompasión.
- Bueno, pero es que a ti podía decirte que “elnovio” era imbécil y un cabrón y a tu “pobrehermano” no se lo puedo decir de su ex.
- ¿Por qué no? Ella está chuscándose a otro ¿no?
- Porque pobrehermano está tan emperrado que lo mismo vuelve con ella.
- ¿Y qué? Yo volví y revolví con elnovio mil veces y te llenaste la boca a decirme de todo.
- Te estás poniendo melodramática como hacías entonces, que decías que no te quería y mandabas a tus amigas a hablar conmigo.
- Mamá..¡¡ESO TE LO ESTÁS INVENTANDO!!
- Oh, y encima me llamas mentirosa, de verdad moli, no se puede hablar contigo.

Si es que parezco nueva.
Muchas gracias E.
Este es el video de los chulazos..también sale una de las protagonistas, pero interesa menos.

martes, 2 de febrero de 2010

QUERIDO PAUL,

Espero que al recibo de la presente te encuentres en perfecto estado de salud y tan interesante como siempre. Has de saber que a pesar de tener los ojos excesivamente saltones y cara de misterioso, siempre me has resultado atractivo.

Nuestra relación había sido perfecta hasta ahora. No teníamos quejas ninguno de los dos. Era tan perfecta que hasta me gustaba tu mujer, con sus aires de reina élfica y cara de no alimentarse más que de brotes de soja y pan integral de 8 cereales. Erais muy monos. Os imaginaba en vuestra casita de Brooklyn, cada uno en su despacho acogedor y lleno de libros escribiendo vuestras novelas y quedando en la cocina a cenar mientras despacháis una copita de vino. Una vida estupenda y totalmente envidiable.


No podías quejarte Paul, me gustabas tú, tu mujer, tu vida y tus libros. ¿Qué más podías pedir? Recuerdo el primero que leí. Me lo recomendaron F. y M.

- ¿No has leído nada de Auster? Tienes que leer “La música del azar”.

Y lo leí, y pasé miedo y angustia vital. Tanta que una noche recuerdo haber despertado al ingeniero.

- Deja de roncar y despierta.
- ¿Qué pasa? ¿Estás mala?
- No, tengo miedo.
- ¿Has escuchado algo? ¿Son los vecinos de la pistola?- Qué vecinos ni vecinos. Es el libro, que me da miedo.
- Jooooderrrr moli.


De ahí pasé a devorarlos todos, sin orden y concierto, uno detrás de otro. Me daba miedo que en algún momento me defraudaras, toparme con un ladrillo, con un despropósito, aburrirme, que te repitieras, no entenderte, toda la gama de catástrofes literarias posibles en la relación autor/lector.

Pero no.

Me sumergí en la Trilogía de Nueva York, sin saber muy bien por donde iba. Avancé poco a poco haciendo como que sabía, para luego llegar al final y descubrir que me había encantado. Me encantó El Palacio de la Luna, conocí a Marc Frogg que según leía los libros que había heredado los vendía y su relación con Kitty Wu. Devoré todas las minihistorias enviadas por los oyentes a un programa de radio y editadas por ti en “Creía que mi padre era Dios”. Me sentí identificada con “La invención de la soledad” y recorrí asustada “El País de las últimas cosas”.

Devoré también “La Noche del oráculo”, “El libro de las ilusiones” y “Brooklyn Follies” y como te tenía en tan alto concepto, decidí obviar unas pequeñas sensaciones muy desagradables que me sacudían de vez en cuando mientras leía cada nueva novela que salía al mercado. Las ignoré por la buena marcha de nuestra relación, pero querido Paul, hasta aquí hemos llegado.

¿Me quieres explicar qué tipo de mierda es Invisible? ¿Has dejado de beber vino con Siri a la hora de la cena y os habéis dado al Sol y sombra desde la hora del desayuno? Estoy indignada por tu falta de vergüenza a la hora de publicar esto. ¿Qué necesidad tenías de escribir algo así? Todos te adoramos, te queremos, nos pareces estupendo, tienes pasta y prestigio, ¿porqué Paul? ¿Por qué?

La historia es completamente idiota. Un niñato de 20 años que conoce a un profesor malvado, R.B, con una supermujer y se hacen amigos. El único personaje interesante es el profesor malvado y lo maltratas hasta convertirlo al final de la novela en alguien patético. A lo que iba, Adam conoce a R.B, quien le ofrece pasta para montar una revista literaria. Adam no se puede creer la suerte que tiene, y aunque mantiene ciertos recelos decidí seguir adelante. Después de una cena absurda, acaba acostándose con la supermujer, Margot, durante 5 noches seguidas y acto seguido ella desaparece. Adam vuelve a coincidir con R. B y tras un paseíto nocturno, contempla aterrorizado como R. B se carga de 12 cuchilladas a un atracador.

Aquí termina la primera parte y pensé: el protagonista es imbécil, pero el malo mola. Me sobra la meliflua asaltacunas pero vamos bien.

Y me equivoqué.
La segunda parte es clavadita a una novela que se leía de adolescentes en los colegios de monjas, a escondidas por supuesto, donde dos hermanos se lo montaban a troche y moche. Flores en el ático se llamaba. Con 14 años tenía su gracia, con 36 directamente me daban bostezos.

Con la separación de los amantes/hermanos termina la segunda parte y pensé que enderezarías la historia, le darías un giro magistral, y me reconciliaría contigo.

Pero tampoco.

Adam se va a Paris, busca a Margot, se la chusca. Se encuentra con el malo, intenta hacerle la vida imposible contándoles a su futura mujer y su hijastra que es malo malísimo. La hijastra se enamora de Adam y el malo que no es tonto, consigue que le echen de Francia.

Ya no había nada que hacer, no había vuelta atrás. Decidí terminar el libro para poder escribirte esta carta con conocimiento de causa. El final es para abofetearte hasta la muerte. La aparición de la hijastra llorosa por el amor de Adam 40 años después, su viaje a las Antillas a ver a R. B convertido en una especie de Marlon Brando de las islas y su huída corriendo es de lo peor que he leído nunca.

Paul, que desilusión.

No me parece bien que juegues así con mis sentimientos y mi confianza. Vale que tuvieras un millón de puntos en mi ranking particular de autores, pero ¿era necesario bajar 25 puestos en mi lista? ¿Con qué cara me enfrento yo a tu próxima novela? ¿Seré capaz? ¿Confiaré en que remontes o no me atreveré para no arruinar los buenos recuerdos que conservo de nuestra relación? ¿Podré seguir presentándote a mis amigos o mejor me avergüenzo de esta relación? ¿Qué les diré a mis lectores de ti?

Paul, me has dejado en un sin vivir. Esto no se hace.

Tuya afectísima.