lunes, 19 de septiembre de 2011

EMMYS 2011: Despelleje

Ayer España ganó la Eurocopa de Baloncesto, fueron los Emmys 2011 y yo me pasé la tarde intentando recomponer mi maltrecho ánimo después del fin de semana de fiestas.

Fracasé, asi que sigo teniendo el ánimo maltrecho y la garganta destrozada, pero me alegro por España y por Mad Men y Modern Family que son dos series que me molan. Me alegro también de no tener que estrujarme las meninges para pensar algo sobre lo que escribir porque puedo dedicarme al dulce arte de la crítica más frívola y absurda.

Abro el IMDB y empiezo a ver fotos y mil dudas me asaltan.

Kate Winslet, por favor, alguien puedes explicarme ¿cuando en la historia de la humanidad se decidió que tener el pelo rubio y las cejas morenas era bonito? O ¿es que crees que no nos damos cuenta  cuenta? O peor, creen que alguien puede pensar..” oh..que curioso fenómeno de la naturaleza..tiene el pelo de la cabeza de un color y las cejas de otro”…y puede que alguien vaya más allá..¿ tendrá el pelo de otro lado de un color distinto? ¿ Es kate tricolor? No lo entiendo. ¿ Porqué las morenas quieren ser rubias? Eso si, el vestido me gusta y me mola que Kate esté enmochada pero lo lleve con orgullo, una tia con curvas y sin peligro de caer en la moda piruleta. Me pregunto como consigue que se le mantengan las peras, seguro que tiene truco porque Kate ya tiene una edad y una talla.

Katie es mona. Es la definición de chica “mona”. Me resulta igual de sexy que Dora la Exploradora, supongo que es el atractivo que le encuentra Tom, se sientan y juegan a las tabas o al parchís.  Me mola el color del vestido, a ella le favorece y a mí también. Ah..y lleva el pelo y las cejas del mismo color

Gwymeth, Gwyneth, Gwyneth…alma de cántaro..¿como no sabes que el encaje lo carga el diablo? Es tan fácil parecer una lumis vestida en un chino. Me caes bien pero el modeli es horrible y lo voy a decir: tienes las orejas grandes. A Kelly le ha pasado lo mismo..otro error con el encaje. Además, el encaje avejenta, a no ser que sea en ropa interior negra.

Lena Hedey, me perturba muchísimo ver los distintos modelos de las tipas. No sé si hace 30 grados a la sombra o 12…o alguna se congela u otras se torran. O puede que en LA haya una amplitud térmica espectacular y acierten todas…mmm..dudas.

Heidi, una vez más, me fascina tu ubicuidad en las fiestas. Y lástima, no me gusta el vestido, parece una escarola mustia…esos volantes me recuerdan a un repollo en mi cajón de la nevera..Y Seal, me da miedo…

Heather Morris…¿ qué es eso?? ¿qué te has puesto? ¿ Por qué? ¿ Han secuestrado a tu madre y si no te lo pones no te la devuelven? ¿ es una promesa a una virgen? ¿Crees que si te pones ese vestido él volverá a quererte?  

Padma..un ejemplo perfecto sobre como elegir un tono de vestido que vaya con tu piel y tu estilo. Espectacular.

Julianna, un ejemplo perfecto de cómo elegir de angustia el trapito para ponerte. El vestido es horroroso, el color no favorece a nadie y sobre todo..porqué llevas ese escote donde dan ganas de colgar el bolso, el abrigo o jugar a la rana? Para la próxima vez acepta mi consejo: si estabas más mona vestida de enfermera en Urgencias que con el trapo que has elegido...aborta trapito.

Paz de la Huerta…o como resultar ridícula posando. Me descojono. Y ahora que lo pienso ¿ Paz de la Huerta?? No se parece mucho a Paz Vega? en el nombre y en la pose...me descojono más. 

Me encanta Sofia Vergara, un pedazo de tia increíble y simpre va favorecida. No se hace experimentos raros ni intenta pasar por lo que no es. Va diciendo, estoy jamona, tengo pecho y aquí lo traigo todo. Me gustan hasta los pendientes, mola que se los pueda poner…yo jamás llevo pendientes largos..me siento gitana y me dan ganas de quitarme los zapatos y bailar.

Rachel Taylor..otra rubia desvaída. ¿ De verdad a los tios les molan? Y una duda..cuando te sientas con ese vestido..¿ te pinchas? ¿ Y esas cejas??? Pero es que no tienes amigos?????...¿ ni espejos?? ¿ ni criterios??

Anna Torv..otro despropósito. Me fascina como una afirmación tan evidente como “ El look total black” siempre es un acierto…se descompone en mil pedazos con este tipo de visiones. Y los pendientes…sin comentarios

Jurnee, me gusta el vestido y el color. Me perturba si serás capaz de sujetar la cabeza..el efecto piuruleta está haciendo estragos en ti.

Anna Faris, es la pechitos de esta edición. Siempre hay alguna que lleva un vestido con estampado geómetrico que es como decir: llevas un vestido horroroso y completamente incomprensible. A Claire la han engañado con el mismo gancho.

Elizabeth McGovern…hasta verla hoy, creí que era buenísima actriz y que hacia fenomenal de sosa y meliflua inglesa de 1914. Ahora veo que no, simplemente hace de ella misma. Es verla y pensar…joder..que sosa.

Jessica Pare..querida, no tienes un canalillo tan bonito como para despistar la atención de tu caderamen. Mala idea y el lentejuelismo NO disimula.

Ellie Kemper, otro despropósito. Viendo la cantidad de vestidos de este estilo que ha habido, el lentejuelismo ha triunfado. Empiezo a sospechar que ha habido alguien muy listo que ha ido vendiéndole la idea a todas de: mira este vestido, es superoriginal, y nadie lo llevará porque hay que ser atrevida y orirginal, justo lo que tu eres. Y si, atrevida, original y sin criterio. 

Emily BLunt. Bien, no puedo postergar más este tema. Como poseedora de un buen canalillo, voy a explicar una cosa que a mí me parece obvia pero que veo que no es tan evidente. Para tener un canalillo atractivo y sexy que mole sacar a pasear..no se pueden tener las peras separadas por una autopista de 3 carriles, eso no es sexy y no hay porqué enseñarlo. Otra cosa que no es bonita, son las tetas divergentes…no resultan atractivas..y no me hagáis explicarlo más, que ya tenemos una edad.

Julie, Julie, Julie..me caes bien y eres guapa y no pareces tonta..pero no puedo callarme. Todo es un error: el vestido, el adelgazamiento con efecto piruleta y el escote con tetas que no se llevan bien.

Me gusta Hugh…

A Jessica le pasa lo que a Elizabeth. Al ver Dowton pensé que hacía muy bien de pija inglesa chulita y creída…y resulta que es una chulita creida que tampoco sabe que no tiene tetas para llevar ese escote. Y además ese vestido pica, por lista.

Elizabeth..me identifico tanto contigo. No sabes posar. Y el encaje color carne tampoco es buena idea.

Christina tampoco sabe posar, ni vestirse, ni peinarse, ni ser discreta ni nada. Empiezo a pensar que quiere ser la siguiente Helena Bonham Carter…quiere ser la más horrible siempre, supongo que le mola ser la primera en algo. Y me sirve como ejemplo de que un exceso de convergencia tetil tampoco es sexy.

Vanessa Marano..compitiendo con Cristina por ser la más espantosa. Dan ganas de abofetearte, cursi del demonio.

Jason O´Mara…Dios mio..¿quien es este chulazo??

Algunos conceptos:

- Huir del concepto “estampado geométrico”.
- El rosa palo no es tu amigo.
- Mira hacia abajo, si tus tetas miran una a Cuenca y otra a Orense..NO tienes canalillo para llevar escote en V.
- Si al andar tu cabeza va antes que tu cuerpo..has adelgazado demasiado y pareces un chupachups.

Y para ellos..por favor..la gomina es vuestra amiga. El cardado no.

Y necesito comprarme algo rojo..

viernes, 16 de septiembre de 2011

VIERNES DE FIESTAS: Molirecuerdos


Este fin de semana en la moliconcepción temporal del año se acaba oficialmente el verano. Da igual que siga haciendo este calor asqueroso, infernal y sin sentido, se acaba el verano, por fin.

Viernes de fiestas es una fecha en el molicalendario como mi cumpleaños, los reyes magos, san canelón o el cumpleaños de las princesas.

Las fiestas de Los Molinos no tienen nada especial frente a otras fiestas de otros pueblos. Son como todas, pero puedo recorrer toda mi vida pasando por distintos recuerdos de las fiestas.

Cuando era canija, las fiestas eran unos días raros. Muchas veces ya habíamos empezado el colegio pero seguíamos en Los Molinos, mis padres apuraban el veraneo franquista hasta octubre. De repente...llegaba el fin de semana y la rutina de levantarte, jugar, piscina, comida, siesta, piscina y más juegos se rompía. Había que ir al encierro por la mañana, nada de piscina. Cuando tienes 8 años esto es un drama. Te arrancaban de tu rutina de piscina chupi y te llevaban andando con un calor de mil pares de narices al pueblo a ver el encierro. Yo no le encontraba la gracia claro, hacía mucho calor (¿he dicho alguna vez que el calor saca lo peor de mi?), había mucha gente, y para conseguir ver algo de los toros tenías que pasarte una hora sentada en un palo mirando gente pasar. Tus padres intentaban compensarte o más bien conseguir acallar tus protestas “ me quiero ir a casa”, “ yo me quiero ir a la piscina”, “tengo calor”, “me aburro”, comprándote patatas fritas o un martillo de caramelo. Las patatas funcionaban como solución para callarme. Los martillos de caramelo eran mala idea, eran pegajosos, difíciles de desenvolver y a nada que te descuidaras se te había pegado el pelo al puto martillo. “ Mamaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa….se me ha pegado el pelo”.

Otro gran momento cuando eras cani y ese si molaba, eran los fuegos del sábado por la noche. Era un momento mágico...tus padres te bañanan y después no te ponían el pijama...¡¡te ponían vaqueros, jersey y chupa!! (Es curioso el fenómeno de amplitud térmica en las fiestas…a mediodía mueres deshidratado y por la noche por congelación), cenabas y luego se salía de casa. No dabas crédito…era tannn especial. Bajabas a la plaza del pueblo y asistías con la boca abierta a la exhibición de fuegos y al momentazo en el que de un palo saltaban unos petardos, se desenroscaba una imagen del Cristo de la Buena Muerte y sonaba el himno nacional. Te ibas a dormir sintiéndote tann mayor.

Con 12 o 13 años, las fiestas suponían un momento de libertad, de sentirte mayor. Te dejaban bajar al encierro con tus amigos, y ese sentimiento de “que mayor soy”...conseguía mitigar el calor de mil pares de cojones, el polvo asqueroso de los caminos y perderte la piscina ya no era un drama, casi se agradecia, te libraras de ese momento de vergüenza de dios mio...me ha crecido el pecho…tengo que sacar chepa. Por supuesto, pasarte dos horas subida a un palo para ver pasar los toros, ahora molaba, eran dos horas de cotilleo a ver si pasaba menganito y te miraba ( nunca te miraba) o fulanito o quien fuera. Con esa edad recuerdo perfectamente un encierro en el que por alguna razón, me ofusqué muchísimo y para mostrar convincentemente mi hostilidad hice un corte de mangas... ...sin percatarme de que molimadre me estaba viendo. Obviamente, se acabaron las fiestas para mí.

Cuando el nivel hormonal subía y toda tu existencia giraba en torno al momento “salir”, es decir, con 15 o 16 años, las fiestas eran el mejor momento del verano. Se suponía que los padres abrían la mano, te dejaban salir por la noche “es que son fiestas” y había menos control. Se suponía todo eso…y en molicasa se descartaba por completo.

- ¿salir por la noche? ¿A qué? ¿Con 15 años? Ni lo sueñes. Como mucho el sábado y a la 1 en cuanto acaben los fuegos derechos a casa.

Te sentías tan desdichada por no salir por la noche sabiendo que todos tus amigos estaban por ahí de juerga. Era tan deprimente levantarte por la mañana y bajar al encierro pronto y ver aparecer a tus amigos horas después con cara de “me acosté a las 3”…sentías que te lo estabas perdiendo todo y estabas deseando que acabaran las fiestas para volver al ritmo normal en el que todos hacíamos lo mismo.

Con esa edad recuerdo perfectamente un día que mi padre se apiadó de mi desdicha o estaba hasta el moño de verme con cara de ajo y me dejó salir el jueves de fiestas. Recuerdo estar bailando enfervorecida en un bar subida a un poyete, mirar hacia la puerta y ver aparecer su cara sonriendo, mirar el reloj y hacer un gesto diciendo...” se acabó lo que se daba”. Nos metió en el coche a 2 amigas, el hermano de una de ellas con un pedo de colores y a mí. Arrancó, se giró y dijo

- ¿qué Javier…demasiada agua, no??

Más adelante en mi vida, las fiestas han sido una época de descontrol total. De beber hasta morirme, de no dormir hasta extremos increíbles, de llevar al límite mi resistencia física. Recuerdo perfectamente con 22 años o así, despertarme un miércoles después de llevar sin parar desde el domingo y ponerme a llorar pensando que todavía me quedaban 4 días de juerga sin fin y encontrarme al borde del colapso. NI que decir tiene, que se me pasó el llanto y seguí al mismo ritmo.

En fiestas también fue uno de mis grandes momentos etílicos…me desperté en mi cama sin saber cómo había llegado allí. Me duche como pude, me vestí y bajé a la cocina para encontrarme con unas palabras escritas en la pizarra de la cocina completamente ininteligibles pero con mi letra. Aquello me dio mala espina...pero me deslicé fuera de casa para irme a currar. Lo peor vino, cuando me monté en mi coche y no me llegaban los pies a los pedales. Obviamente alguien más alto que yo, había cogido mi coche y me había traído a casa…15 años después no he conseguido recordar quien fue ese alguien.

En fiestas también y completamente por sorpresa...” no puede ser que este tío de verdad esté queriendo ligar conmigo, me lo estoy imaginando o voy más borracha de lo que me creo”…ligué con uno de los tíos más guapos con los que he estado nunca. (Ahora que lo pienso esto se me pasó en “mi no vida amorosa”)

Desde que tengo a laz princezaz vivo las fiestas de otra manera. Maquino como colocarlas el viernes para poder salir a beber como si no hubiera mañana, me levanto el sábado con una resaca mortal y una holgura craneal de la que creo que no voy a recuperarme nunca. El cuerpo me pide quedarme en la cama agonizando por mi falta de control sobre mi ansiedad etílica...pero ellas no perdonan: ¡¡vamos a los toros!!! ¡¡Vamos a los toros!!!!...y haciendo un ejercicio supremo de amor maternal, me levanto, engullo unos ibuprofenos y bajo andando con la caloreta infernal al “encierro chico” primero y al encierro de mayores después.

Sufro, pero encontrarme con mis amigos de toda la vida...con la misma mala cara que yo, las gafas de sol, el pelo mojado de la ducha, mirando los castillos hinchables donde nuestros churumbeles son felices me reconforta. Entonces Fede dice:

- Moli...estamos fatal pero ayer lo dimos todo en la plaza. Esta caña es para ti…o nos mata o aguantamos hasta la noche.

Ese momento mola mil.

PS: la foto ya la había puesto, pero es que me mola mucho y no se me ocurre nada mejor para ilustrar este post. Y no lo explico más. Ah..y tengo exactamente la misma pinta. Me parto.

jueves, 15 de septiembre de 2011

MALDAD Y ENTUSIASMO

No sé muy bien cómo va a salir esto, pero llevo dos días sin publicar y no puede ser. A ver si por no practicar voy a perder el ritmo. Esto es como todo, no se te olvida, pero pierdes destreza y si lo dejas mucho cuando vuelves a ello tienes hasta agujetas…así que a practicar.

En teoría el entusiasmo y la maldad no tienen mucho que ver a no ser que uno sea un malvado muy entusiasta lo que lamentablemente le hace perder efectividad en su maldad y además digamos que la maldad no está bien vista.

En lo que se parecen el entusiasmo y la maldad es que para sentirlos como se merecen hay que ser conscientes de uno mismo, de lo que está sintiendo. Hay que pararse y decir…eh...estoy entusiasmado y mola mil…o estoy siendo malo y no hay donde esconderse ni justificación, lo estoy siendo.

Primero la maldad.

Hablo de la maldad porque si. Hacer algo que sabes que está mal a propósito. NO hablo de hacer mal a alguien haciendo algo que a ti te satisface de otra manera, o de hacer mal sin darte cuenta, no. Hablo de ejecutar una acción sabiendo que está mal y con la única justificación de causar mal al otro y además de esa acción la única satisfacción que sacas tú es el daño que causas.

Si...claro...ninguno hemos hecho eso jamás en la vida…todos somos buenísimos y tenemos un buen fondo y nunca hemos hecho algo asi. Pues tengo mis dudas. El problema es que no mola ser malo, y para ser malo hay que ser consciente de ello...no mola decir...he sido malo, me he portado mal. No está bien visto, así que lo enmascaramos de mil maneras…la peor de todas es: si, lo que hice estaba mal...pero es que la otra persona había sido mala antes.

Correcto. La otra persona ha sido una completa hija de puta por el motivo que sea. X, pero si tú haces algo que está mal con el único motivo de causarle mal…estás siendo igual de malvado. Admítelo, se coherente, no te justifiques. Decidiste ser malo, hacer algo para putear y lo has hecho.

Ya está. No me vengas ahora con “no es que X se lo merecía porque antes”…me da igual. Me da igual quien fuera X y lo que hiciera. Tú has hecho una maldad y apechuga con ello.

Que conste que no estoy diciendo que no haya que ser malo. Eso lo decide cada uno en sus circunstancias y no vivo en los mundos de Hello Kitty (a pesar de la campaña de C por decorarme la casa con la gata de los cojones) y todos tenemos un fondo de maldad aunque todos hayamos llegado al acuerdo de esconderlo al fondo a la derecha y no enseñarlo.

A lo que voy es que si eres malvado por la simple satisfacción de serlo, por venganza...asúmelo, vive con ello y no lo justifiques. Hay que asumir que no somos perfectos ni la gente esa que sale en los anuncios que no se mancha nunca, quiere a sus vecinos y su máximo problema es quitar una mancha absurda de césped en una rodillera del pantalón.

Y además un malo arrepentido es un completo fiasco..como Dart Vader...molaba mil hasta que salió con lo de Luke soy tu padre..toda mi infancia queriendo ser Darth Vader y respirar como si tuviera mocos y al final descubro que era un fraude. Nada peor que un malo con conciencia.

Ahora la parte amable.

Al entusiasmo le pasa más o menos lo mismo. El entusiasmo es un sentimiento que necesita de la conciencia de sentirlo para desarrollarse plenamente. La tristeza, por ejemplo, llega y te arrasa, no puedes hacer como que no está, una oleada de pena provocada por nada en concreto llega un día, en un momento y puedes optar por bracear para intentar salir de ella o dejarte arrastrar.

Al entusiasmo no le pasa eso. El entusiasmo no llega, el entusiasmo se crea. Para sentirlo hay que querer algo, hay que tener interés por algo, hay que dejar que lo que sea (la fórmula 1, los libros, Bruce, la física cuántica, los peces de colores, la repostería, el futbol, escribir, los gintonics o lo que sea) que te guste, te llegue a apasionar. Hay que construir ese entusiasmo por lo que sea y disfrutar de él...decir...joder…¡¡como me mola este libro!! O ¡¡como me flipa esta canción!! O ¡¡de puta madre que he conseguido hacer una tarta de cumpleaños para mi hija con barritas de Kit Kat!! (1)….y hay que ser consciente de que uno está entusiasmado…nota el cuerpo en tensión, todo su cuerpo en tensión porque hay algo que le llega, que le toca, que le hace sentir más vivo…algo con lo que vibra.

El entusiasmo es además, un sentimiento que hay que mimar. Y es un sentimiento muy muy difícil de compartir precisamente porque aquello que nos lo provoca es extremadamente personal. Estas dos circunstancias hacen que sea un sentimiento frágil...muy frágil y que si te lo rompen te dejará hecho polvo. No hay nada peor que la frase “yo no sé qué interés le ves a esto”…como respuesta a un entusiasmo verdadero… te deja arrasado.

Hay que mimar el entusiasmo propio y tener muchísimo cuidado con el entusiasmo de los demás…a no ser que quieras ser malo a propósito...porque entonces, joderle el entusiasmo a alguien es una manera fácil y muy efectiva de hacer el mal.

Eso sí...cuando consigues transmitir el entusiasmo por algo que te interesa a otro alguien…y no solo ese alguien lo capta si no que se interesa y percibes como se va entusiasmando poco a poco ( aunque nunca llegue a tu nivel )….es un sentimiento que vale millones.

No pasa casi nunca...pero cuando pasa es la leche. Y hay que ser conscientes de que te está pasando…para disfrutarlo como se merece.

Y sé que hay miles de entusiastas de Darth Vader cuando molaba por ahi....

(1) Homenaje a mi amiga Anniehall y su reposterexia.

lunes, 12 de septiembre de 2011

EDITORIALES, CRÍTICAS Y "CONSTRUCTIVIDAD"

En mi humilde opinión al mundo del libro le está pasando un poco como le pasó al de la música, anda como pollo sin cabeza.

El negocio hasta ahora estaba claro: conseguías a un autor consagrado, editabas sus obras, hacías una campaña de publicidad en prensa escrita, en especiales culturales, en algún programa de radio o tele y cruzabas los dedos a ver si sonaba la flauta y las ventas iban bien. Si el autor por el que habías apostado era un completo desconocido, entonces cruzabas los dedos, ponías velas, rezabas todo lo que sabías y esperabas que sonara la flauta

Los especiales culturales, las críticas de libros y las reseñas en los periódicos cumplían su misión: daban noticia de la publicación de novedades, recomendaban libros y criticaban otros.

Todo este esquema de negocio se ha ido resquebrajando y ahora mismo está completamente desarticulado.

Para empezar cada vez se venden menos libros. La gente lee poco, los libros son caros y con la llegada del libro electrónico el sector editorial no ha sabido adaptarse y ha favorecido la piratería, pretender que se paguen 14 euros por un libro electrónico es empujar a la gente a buscarse la vida.

El siguiente problema es que ya no hay hueco en los medios para la promoción literaria. A la prensa escrita no le interesa un artículo sobre libros nuevos, ni la crítica literaria. (De la tele y la radio ni hablamos). Es un tema que ha quedado relegado a los especiales culturales.

Y ahí llegamos al siguiente problema, esos especiales culturales están en manos de empresas editoriales que en una mano controlan el especial encargado de las críticas y en otro la editorial que publica el libro a reseñar. Obviamente la objetividad queda si no fuera de la ecuación, digamos que en un segundo plano. El resultado de esta combinación es que las reseñas literarias han pasado a tener cero credibilidad: si son de mi mismo grupo editorial el libro mola mil...y si es de otro grupo...sencillamente no existe. (1)

En resumen, actualmente se venden pocos libros, no se encuentran canales de promoción con impacto en las ventas y las publicaciones sobre libros digamos que han sufrido bastante descrédito y al lector avezado le resultan poco o nada creíbles en sus opiniones.

Al mismo tiempo en internet hay una enorme cantidad de blogs donde se recomiendan, critican, vapulean o despellejan libros. Son blogs de gente anónima a la que sencillamente le mola leer y decide un buen día dejar su opinión por escrito en la red, tanto para recomendar algo que le ha gustado muchísimo como para avisar a posibles incautos contra lecturas espantosas. Esos blogs tienen mucho público y sus opiniones sirven a muchos lectores a la hora de elegir sus lecturas.

Hasta ahora el mundo editorial había pasado millas de esos blogs, supongo que los grandes gurús editoriales y de marketing, veían aquellas páginas como un club de lectura de biblioteca, y no eran capaces de cuantificar el valor que las críticas de esos blogueros tenían en para otros lectores. Digo “no eran capaces de cuantificar” por ser políticamente correcta porque sinceramente creo que las editoriales directamente menospreciaban o ignoraban esos blogs. Supongo que pensaban algo del tipo: ah sí...hay unos mataos que comentan libros…pues muy bien.

Ahora esos dos factores se han encontrado...y supongo que en las editoriales han tenido un diálogo de este estilo.

- oh vaya...parece que no vendemos un libro ni para atrás y lo que es peor, ni siquiera conseguimos que se hable de ellos en ninguna parte. A ver si al final a resultar que vamos a necesitar a los mataos con blogs porque resulta que tienen tirón y que si recomiendan un libro eso repercute en las ventas.
- Pero...será una repercusión mínima, ¿no? Mucho mejor ir a Ana Rosa a que hable del libro.
- Si, pero Ana Rosa dice que tururú, que si no lo ha escrito Belen Esteban ni de coña. Y solo si el libro es de amoríos, autoayuda o hay misterios pseudoreligiosos con tensión sexual no resuelta.
- Pues de esos no tenemos ninguno...porque publicamos autores nuevos, recuperamos clásicos, recopilaciones de cuentos.
- Ya...somos culturetas.
- Y ¿que hacemos?
- Lo que te digo...los de los blogs…si hablan del libro pues eso será publicidad.
- Bueno, no perdemos nada. Les mandamos el libro gratis, sabemos que se lo leerán porque son mataos con blogs pero tienen pinta de honrados y que hablen del libro.
- Venga.

Los editores buscan blogueros que reseñen sus libros

Leo esta noticia que me llega por el twitter de Alba Editorial y me parece buena idea. Antes de que alguien entre a llamarme listilla y demás, yo no estoy en la categoría de “mataos con blog de libros”...asi que no pensaba en que me tocara a mi este tema, pero por puro espíritu ciéntífico pregunte a Alba Editores.

esto es verdad? Te dejarán reseñar un libro aunque la reseña sea un despelleje?”
Albaeditores contestó:

Publicar un libro es un proceso largo y complejo, debes sentirte orgulloso del trabajo realizado y no supone garantía alguna...

Con todos mis respetos a Albaeditorial… ¿qué tiene que ver el tocino con la velocidad? Por supuesto que publicar un libro es un trabajo de mil pares y hay que dar palmas con las orejas si se consigue...pero... ¿que tiene que ver eso con lo que pregunto? Me está dando a entender que como ha sido mucho trabajo ¿no se puede criticar?

Pregunté otra vez porque no quiero ser malpensada.

Lo que pregunto es si la editorial va a admitir que al reseñar un libro seas crítico o solo aceptará publicidad positiva

Albaeditorial me contesta

La crítica debe ser constructiva, lo importante es el debate y el blog debe estar abierto a opiniones de otros usuarios”.
Vale. Así que lo que quieren es que hagas algo “Constructivo” entendiéndose constructivo como “chupi”.

Tras estas averiguaciones tengo una serie de reflexiones sobre el tema:

Primero, leo varios blogs de listos con gafas que hablan de libros. Unas veces estoy de acuerdo con lo que opinan y otras veces discrepo. Me resultan útiles y creíbles precisamente porque no son “constructivos” por definición. Y desde luego, si alguno de ellos empieza a deslizarse por la pendiente de “constructividad” directamente sale de mi reader. Sencillamente no me creo que todo lo que leas sea estuplendido, y que todo te guste, así que mientes y si mientes no me sirves como referente de lecturas. Si la editorial exige una crítica constructiva, el valor que tiene el criterio del bloguero se esfuma.

Segundo, si tú eres una editorial, apuestas por un libro y lo publicas tienes que confiar en el criterio que tienes como profesional del ramo. Y precisamente por esa profesionalidad tienes que saber que unas veces acertarás y otras no. Y que a veces habrá que lidiar con la frustración de comprobar que te equivocaste o que una obra que tú encuentras valiosa no encuentra el eco que esperabas. Las críticas “no constructivas” no son inútiles, pueden servirte para reafirmarte en tu criterio porque realmente crees en él o para replanteártelo. Si todo es “constructivo” y “chupi”...perderás el criterio que tengas...todo lo que haces mola y ya está.

Tercero, desde un punto de vista puramente mercantilista...cualquiera sabe que cualquier publicidad es buena...incluso la destructiva. Hay mucha gente que encuentra un placer insano en llevar la contraria: ¿qué molinos ha dicho que los ojos de los cocodrilos es una mierda? pues me lo voy a comprar solo para poder decir que a mí me gustó.

Cuarto, basándome en mi experiencia y a pesar de que, repito, yo no tengo un blog literario...si a mí me llamaran de una editorial para que reseñara uno de sus obras señalándome que “la critica debe ser constructiva”, declinaría educadamente el ofrecimiento, así que supongo que con esas premisas no van a encontrar muchos blogueros dispuestos...a no ser que estén dispuestos a pagar las críticas constructivas con una cantidad de pasta suficiente como para compensar la pérdida de prestigio que el “constructivismo” acarreará para esos blogs. Y si, todos tenemos un precio...yo también, pero que te paguen pasta por escribir críticas constructivas no hace esas críticas valiosas.

Quinto, estoy de acuerdo en que debe haber debate y distintas opiniones. Si tienes un blog público en el que admites comentarios, tienes que estar dispuesto a aceptar críticas. Limitándome al tema literario, cuando yo pongo un libro a parir o lo ensalzo hasta la estratosfera, me parece completamente lógico que alguien llegue y diga “Cannery Road me ha parecido soporífero”, “A mí La caja negra me ha parecido un coñazo” o “El último encuentro no es para tanto”. Son opiniones tan valiosas como la mía aunque no las comparta. Eso sí, si alguien viene y me dice que “El amor patético”, “El vestido rojo” o el libro ese horroroso de japos que leí el año pasado es una obra maestra...me preocupo...y pienso...Dios mio... ¿pero quién me lee?

Sexto, no soy tan ingenua como para pensar que la editorial va a dar palmas con las orejas si dices que su libro no te ha gustado o que te ha parecido malo. Entiendo que eso no es lo que buscan, pero reconocer desde el principio que solo podrán ser críticas constructivas, creo que les restaran voluntarios. Sinceramente, como estrategia para conseguir que les lean, era mejor mentir “Oh si, podéis escribir lo que queráis”…y luego si no les gusta pues con tachar al bloguero de su lista lo tenían apañado.

Por último, en este año he tenido trato con tres editoriales que me han enviado sus libros. A las tres les pregunté lo mismo “Si lo leo y no me gusta ¿podré despellejarlo en mi blog? Porque si la respuesta es no, no me lo envíen”. En las tres ocasiones, las editoriales contestaron que confiaban plenamente en que me gustara y que podía decir lo que me apeteciera.

Y si, me ha quedado muy largo...y admitiré todo tipo de críticas.

(1) Como los grandes grupos de comunicación engloban radios, tvs y prensa escrita..el factor “los de mi grupo molan mil y los otros no existen” ocurre igual en radio y tele.