miércoles, 22 de septiembre de 2010

MATERNITY (LVIII): Miedos tontos

Cuando tienes churumbeles todo da mucho miedo. No tienes ni idea de qué hay qué hacer, te preguntas mil veces si lo estarás haciendo bien, descubres que jamás lo harás tan bien como tus padres y miras alrededor y ves un millón de peligros de los que sabes que no podrás ( y a veces no querrás) protegerlos. Te da miedo que sufran y no puedes hacer nada.

Eso es una putada pero es así.

Luego están las tonterías que pasan a dar miedo o crear preocupaciones absurdas. Cosas tontísimas que por estadística jamás te habían preocupado pero que sin embargo ahora, con tus propios hijos saltan a tu mente al menor estímulo. “Muere un niño por….”,Un niño sufre….”El descuido de unos padre provoca…..”

El frío.
Siempre has resistido bien el frío, tienes una casa con calefacción y criterio suficiente para saber cuánta ropa tienes que ponerte para salir a la calle sin pasarte y cocerte. No da miedo, lo tienes controlado.
Cuando tienes hijos pierdes esa capacidad. El peligro de la congelación te acecha, ¿El niño no tendrá frío? ¿Has cogido un jersey? Y luego siempre están las opiniones externas que opinan que “esta niña va poco abrigada” o“¿van sin camiseta interior?” o ¿No llevan leotardos? Confieso que a mí el frio me da poco miedo, si tienen frio ya se quejarán, pero reconozco qué de vez en cuando, la realidad estadística me asalta y me levanto por la noche a arroparlas no vaya a ser que “ cojan frío”…lo que es una gilipollez..porque ya se taparán ellas si no están a gusto, pero no puedo evitarlo y me voy a la cama pensando he evitado “dos niñas graves por pulmonía al dormir destapadas”.

Las esquinas y picos.
Tu casa, el parque, la calle, todo tu entorno está lleno de esquinas que hasta hace poco a ti no es que te parecieran inofensivas, es que eran invisibles. Ahora no. Ahora sales de casa con los churumbeles y tu mente es una especie de pantalla de radar que con un breve vistazo identifica todas las esquinas y salientes con los que tus hijos serán capaces de colisionar antes de que te haya dado tiempo a parpadear. Ellos no van a golpearse, tú no lo sabes, pero tienen una capacidad innata (que se pierde con el tiempo) para parar de correr, frenar el patinete o esquivar el peligro justo justo en el momento en que tú estás a punto de sufrir un colapso porque ya has visualizado a tu heredero con una brecha en un ojo, en la frente o una herida horrible en una pierna. Como el miedo siempre va más deprisa que tú…para cuando comprendes por la sonrisa triunfal de tu hijo que no le ha pasado nada y que está orgulloso de su frenada tú ya te habías visualizado a ti mismo corriendo por la calle, llegando a urgencias y confirmando que el niño ha cogido el tétanos. “Muy grave un niño al herirse con clavo oxidado”.

Atragantamientos.
Antes de tener niños, la escena era esta.

Argff..
¿Qué pasa?
Se me ha ido por otro lado.
Plas, plas, plas..( palmaditas en la espalda) y bebe un poco de agua. ¿Ya?
Si, gracias.

Ahora el niño tose ligeramente mientras come cereales y ese leve sonido provoca que el dato estadístico mínimo salte como un relámpago en tu cerebro “muere ahogado un niño de 5 años al atragantarse..”, (por supuesto el resto de la noticia la has olvidado aunque sea “atragantarse al comerse un un salmón vivo"). Saltas del asiento coges al niño, lo pones cabeza abajo, le golpeas, piensas.. ¿Cómo era la maniobra esa de abrazar por detrás?, mierda tenía que haberle machacado los cereales, tenía que haber hecho el curso de primeros auxilios caseros. Estás tan sumido en tus pensamientos catastrofistas que no te das cuenta de que el niño ha vomitado ya los cereales y lo que ha comido en los últimos dos días y se está riendo a carcajadas.

El silencio.
Antes un golpe inesperado era señal de susto. Ahora es al reves, mientras haya ruido hay vida. El silencio es lo que acojona.

Los niños juegan. Tu lees o haces punto de cruz o trasteas con el ordenador, cocinas lo que sea. disfrutas de ese momento de comunión familiar. Un momento. No oigo nada. ¿Cuanto hace que no oigo nada? ¿Mucho? ¿Poco? Mierda, me he ensimismado…¡¡niñassssss! Silencio. Saltas de dónde estés y corres hacia su cuarto visualizando solo cosas buenas y realistas: están calladas porque se han ahorcado con el disfraz de buzz lightyear, se han tragado las construcciones y se han ahogado, se han metido la gran piña desde la litera por jugar a volar. O aquí está otra vez el estímulo estadístico “niño cae desde 4 piso por distracción de madre” ¡¡han conseguido abrir la ventana (obvias que es imposible) y se han caído a la calle!!!!...llegas a punto de vomitar del susto y están sentadas pintando, te miran y dicen: estamos haciendo un dibujo para ti.

Las pelis con niños.
Antes de tener niños veías pelis dónde pasaban cosas a niños y te parecían sentimentaloides y facilonas. Pensabas, que recurso tan fácil, poner niños para dar pena, estoy no hay quien se lo crea. Ahora casi no puedes verlas, se te pone un nudo en el estómago y casi te parecen de terror. Has perdido la capacidad de pensar que son una peli, y ya no crees que sean facilonas. Empieza, ves los niños y se te ponen unos nervios, te sudan las manos y te descubres pensando…que no le pase nada, al niño no..que no le pase nada…
Es un miedo absurdo, es una peli y son actores pero eres incapaz de racionalizarlo. Conozco gente que le pasa con “La vida es bella”. A mí con no, porque no me la creo, pero este trozo de “La decisión de Sophie” hizo que me fuera a dormir con mis hijas del miedo que pasé.

Y ahora voy a llamar a casa a ver si todo va bien.

martes, 21 de septiembre de 2010

VIERNES DE FIESTAS.- Tenemos un plan.

Negación de la evidencia.
¡Qué pereza! No salgo, este año no salgo. Me quedo en casa, con mi libro tan a gusto. Como en el sofá no se está en ningún sitio. Paso de salir. Definitivo. Y además así no bebo y me desintoxico que llevamos una racha fatal.

Planificación obviando la negación de la evidencia.
Mail organizativo del plan: “A las 10 en Santoña para tomar algo antes de bajar a la charanga. El que no llegue a tiempo no come. Corto y cierro”.

Equipación adecuada.
Vaqueros un poco mugrientos y cómodos. Que no importe que se manchen.
Camisetas. Algo que abrigue para cuando se está fuera con la orquesta y que al entrar en un garito sea fácil de quitar y de anudar a la cintura o guardar en cualquier sitio. Se aconseja que no se le tenga mucho aprecio porque es facilísimo perderlo.
80 % de probabilidad de lluvia..se impone chupita medianamente impermeable, por si jarrea y nos da por bailar en plan Singing in the rain y pisar charcos (no sería la primera vez).
Zapatillas cerradas de cordones. Completamente desaconsejado ir con chanclas o sandalias estilosas a unas fiestas de pueblo, a no ser que quieras encontrarte a ti misma en algún momento de la noche diciendo: “eso que hay al final de mis tobillos con manchas de líquidos de varios tipos, mayonesa de las patatas asquerosas que se ha comido el tío de al lado, trozos de vaso de plástico incrustados en las uñas y kleneex pegados a las suelas..¿Son mis pies?”. Tienen que ser con cordones para no perderlas en caso de pisotones o exaltación bailonga dando saltos.
Bolso bandolera pequeño, llaves, kleenex y móvil, éste último sólo por si te pierdes y para las fotos. Jamás hay que mandar sms o mails cuando uno está de copas. JAMÁS.

Avituallamiento.
Beber con el estómago vacío es fatal.
Beber con el estómago lleno también es fatal pero tiene mejor prensa, aunque arruinas la excusa de “Me ha sentado mal porque no había comido nada”.

5 personas: tomates verdes fritos, corazones de alcachofas salteados, sardinas marinadas al ajo blanco, entraña para mil, tarta de cappuccino, tarta de manzana y helado de yogur búlgaro. Unos cuantos tintos de verano. No me dejan empezar con gin tonics..arruino la esencia de “comer antes de beber”.

Copas y risas.
Gin tonics y charla absurda. ¿Cuantos km cuadrados tiene el término municipal de Los Molinos? ¿A qué altura está Los Molinos? ¿Quién cantaba la canción “me estoy volviendo loco”? ¿En qué año? ¿Quién está leyendo Ébano? ¿A qué yogur búlgaro es difícil de decir? Bobur Yulgaro sale más fácil..si..pero parece un personaje de la guerra de las Galaxias…

¿Otra ronda? Tu no moli..que bebes muy despacio..
¿Perdón?

Vale..pero la última que hay que bajar a la charanga.

Plaza y charanga.
Las orquestas de los pueblos son terribles. Las hay mejores y peores, pero lo más divertido sin duda, son los nombres. La de viernes, se llamaba “genuinos” pero el premio gordo de este año se lo ha llevado la que tocó el miércoles “La Nuevo Talismán Orquesta Show” (sic), creo que tenían hasta un montaje en video con luces intermitentes y cabezas de animales saliendo por sorpresa que si se mira fijamente provoca instintos asesinos.

Uno no pone un pie en la plaza del pueblo en todo el año, pero en cuanto asomas la cara el viernes de fiesta aquello es un sinvivir de encontronazos: gente que no va nunca a Los Molinos más que ese día, amigos lejanísimos, amigos cercanos que se mosquean porque no les ha avisado para el avituallamiento, amigos de pobrehermanos…pobrehermano pequeño, exnovio, primos, tíos, antiguos ligues…Hay que estar atento porque el grupo se dispersa y lo mismo te capta alguien que no te apetece y te ves atrapado.

Más copas. Más Charanga.
Todos los grandes hits de la radio fórmula que en el coche me hacen disparar el dedo al cambio de emisora, los bailo como si me fuera la vida en ello. Lo más fascinante es que me sé las canciones enteras aunque las odio y jamás las escucho…debe ser mutación genética de la piscina ahora que lo pienso.

Conocidos detrás de las barras. Uy..mi adorableprima. Me pone una copa y le prometo una cita a ciegas con el tío más estupendo que conozco. No rechaza la oferta, bien por ella.

Despedida.
- Moli..esto está siendo muy largo. Vámonos.
- ¿a la francesa?
- No, hoy lo hacemos bien. Hemos cumplido. Adiós chicos, nos piramos.
- No nos han oído..no se han enterado.
- Eso es lo de menos..nosotros lo hemos hecho bien.

Sorpresas del día siguiente.
Abro el bolso y tengo dentro un pollito amarillo de esos de darles cuerda y que anden. ¿Cómo ha llegado ahí? Y lo que es más intrigante..¿Cómo ha cabido en el microbolso sin que haya perdido ni las llaves ni el movil?


(1). Un ingeniero con un móvil con acceso a internet es muy peligroso. Altura de los molinos 1047 metros. Término municipal: 19 km cuadrados. Él más pequeño de todos los pueblos de alrededor. La leyenda dice que cuando se reunieron a delimitar los términos..los de Los Molinos llegaron tarde y borrachos. Suena real.
Me estoy volviendo loco..Azul y negro. Año 1982 (Diva...flipo con la coincidencia)

viernes, 17 de septiembre de 2010

EN BICI

Mi relación con las bicis empezó a la temprana edad de 5 años. El día de Reyes, pobrehermano B y yo entramos en el salón corriendo excitadísimos a ver los regalos.

Había carbón. Una montaña enorme debajo del zapato de cada uno.

Lloramos muchísimo.

Detrás de un sofá había dos bicis.

Mi padre tenía un sentido del humor muy negro.

El caso es que a mí me tocó una bici roja con ruedines por supuesto y a pobrehermano una azul. Estábamos en éxtasis. Nos las llevamos a Los Molinos y allí dimos el coñazo todo ese invierno y el verano siguiente dando vueltas a la pérgola como locos. No entiendo como nuestra familia no nos asesino tirándonos a la piscina atados a las putas bicis..porque el ruido que hacen los ruedines sobre el pavimento de gravilla es completamente desquiciante. Será que tenían mucha paciencia (que yo no he heredado) o eran duros de oído.

Cuando aprendimos a montar sin ruedines ya podíamos ir en bici a casa de nuestros amigos. Cogíamos la bici y nos íbamos por la mañana a ver a unos y otros y en días especiales incluso hacíamos excursiones. Aclaro por si alguien tiene dudas o se ha creído que lo de la vigorexia actual tiene raíces en un pasado deportivo, que yo era un paquete montando en bici y me cansaba y protestaba mogollón en las cuestas.

En la protoadolescencia, esa etapa tan mala de 12 ó 13 años, tu bici te daba status. Si tenías una bici molona tenías más posibilidades de “gustar” a alguien. Era patético pero así funcionaba. Mi padre con buen criterio pasaba de comprarme otra bici, pero a pobrehermano B le compró una de cross superchula. Un buen día, conseguí que me la dejara a cambio de hacerle la cama, darle dinero, cederle mi ración de canelones y darle el coñazo hasta el infinito. Allí que me fui con su bici de cross, que pesaba un quintal y había que hacer un esfuerzo sobrehumano para moverla…pero merecía la pena si el “menganito” de turno me iba a dirigir la palabra aunque solo fuera para admirar una bici que no era mía. (Nunca hay límite para el patetismo protoadolescente)

Supongo que el menganito de turno algo me dijo que me dejó obnubilada porque olvidé la bici tirada en medio de una calle…donde fue debidamente atropellada por el Land Rover del huevero. Creo que fue la primera vez en mi vida que pensé: por favor..que den marcha atrás al tiempo..necesito que sea hace 2 minutos para intentar salvar mi pescuezo.

La bici estaba completamente destrozada. No había manera de disimular aquello. La arrastré a casa como buenamente pude y mi padre me echó una bronca monumental. Me echó tal bronca que muy digna dije: me voy de casa. Salté la tapia y me instalé en unas rocas que había en el prado de detrás de casa dispuesta a empezar una nueva vida. ¿He comentado ya, que no hay límites para el patetismo protoadolescente?

Creo que después de esa experiencia traumática, la bici pasó totalmente a un segundo plano en mi vida deportiva. Ahora que lo pienso..mi vida deportiva pasó no ya un segundo plano..sino que fue completamente desterrada de mi existencia. El caso es que los vespinos llegaron a nuestras vidas y ya solo había que tener contacto con las bicis como mera espectadora.

Animé a exnovio en las carreras de bicis que participaba, creo que incluso le acompañé a comprarse una superbici de carreras.

Asistí con Juan a la llegada del Tour en París en el año 96. Esto moló mogollón aunque Induráin no ganara.

Hice un breve intento de montar en bici al empezar a salir con el ingeniero. Casi me desmayo a mitad del paseo y creo recordar que hasta vomité. Él no se acuerda, gracias a Dios.

Y hasta este verano mi relación con las bicis era así, distante y agradable. En julio, ya lo conté, me reencontré con el mundo ciclista en Berlín. Me lo pasé en grande y gracias a mi formidable estado de forma ( jamás pensé que diría algo así) se me dio de lujo y no tuve ni agujetas.

Este finde celebro ese reencuentro por todo lo alto:

Hoy me voy a zampar el atasco del siglo para salir de la ciudad imperial porque la vuelta llega aquí hoy. Todo la ciudad y alrededores está cortada…¡¡yupiii!!!...así que calculo que me tiraré 2 horas y media en la carretera.

Mañana me voy a zampar el paso de la vuelta por Los Molinos. No habrá atasco, pero para el que no lo sepa, La Vuelta conlleva un millón de helicópteros haciendo ruido, policía con sirenas, ambulancias con más sirenas, un tío con un megáfono diciendo cosas que nadie entiende y la sintonía de la vuelta a todo volumen. Eso puede parecer inofensivo…pero como mañana estaré para el arrastre después de haber salido hoy porque son las fiestas, La Vuelta será un factor muyyy negativo para mi holgura craneal.

Y el domingo tendremos que sincronizar relojes para no coincidir con la llegada de la vuelta a Madrid, aunque esto me importa menos…me enternecen esos mensajes paternalistas y absolutamente inútiles que hay en las pantallas de la de la M30: “Por evento deportivo, tráfico particular cortado en el centro. Se recomienda el uso del transporte público”. (Me encantaría trabajar poniendo mensajes en esas pantallas, me lo pasaría en grande)

Esta ha sido mi relación con el mundo de las bicis. No voy a decir que a mi edad “ni de coña” me compro una bici, porque visto lo visto, no soy una tía de palabra y lo mismo dentro de poco me compro la bici, las mallas y el resto del equipamiento de tortuga Ninja y me lanzo al mundo del descenso de montaña…

..Nunca se sabe.

jueves, 16 de septiembre de 2010

CRÍTICA PERIODÍSTICA.

He retomado mi actividad piscinera y Laster dejó el otro día esta bonita noticia en un comentario.
Quiero creer que con buena intención.

Nadar en piscinas cubiertas tratadas con cloro puede provocar mutaciones genéticas

Miles de dudas me asaltan.

La primera me surge sobre “piscinas cubiertas”. ¿Por qué solo las cubiertas? ¿Acaso las piscinas al aire libre no se tratan con los mismos productos? No tengo ni idea, pregunto…pero ¿no es un poco sospechoso que esta noticia sobre las piscinas cubiertas surja el mismo día en el que en la mayoría de las ciudades se abren y nadadores con mono de largos vuelven a sus rutinas? ¿No será un complot de los dueños de piscinas al aire libre para presionar a las autoridades locales para prolongar el tiempo de apertura de las susodichas??

Mutaciones genéticas”. Leído así, da miedo. ¿Qué quiere decir exactamente? ¿Me voy a desintegrar? ¿Me van a salir escamas? ¿Me saldrán agallas? …mm..La verdad es que no sé si eso son mutaciones genéticas. Mi relación con la ciencia es compleja y distante, así que le comento el tema a mi científico particular:

- Ingeniero..¿has visto la noticia de que nadar en las piscinas provoca mutaciones genéticas?
- Si...me lo has mandado esta tarde.
- Eso es una chorrada ¿No? No puede ser...
- Moli..claro que puede ser..eso explicaría porque tenemos una hija rubia y con ojos azules.
- ..que gracioso…pero a mí se me ocurre otra explicación…JA.
- Touché…

A lo que iba..que “mutaciones genéticas” acojona. El periodista ha sabido captar mi atención, así que con miedo decido lanzarme a profundizar en los datos del grueso de la noticia que a buen seguro explicarán todo.

Nadar en piscinas cubiertas tratadas con cloro puede provocar mutaciones genéticas del ADN, además de alteraciones respiratorias, según una investigación que ha analizado los efectos genotóxicos en 49 adultos sanos tras practicar natación durante 40 minutos en una piscina de estas características.”

Pero, pero, pero… ¿qué tipo de información es esta? ¿49 adultos? Para empezar es un número raruno..¿Qué paso con el que hacía el nº 50? Porque seguro que era 50. No soy un as de la estadística, pero todo el mundo sabe que 50 es más contundente, así que sospecho que el que falta salió huyendo del experimento.

Me encanta la cursilada de “practicar natación”...aunque “realizar ejercicios natatorios” me hubiera gustado muchísimo más.

Luego ya pasamos a la desinformación directamente. Las dudas me asaltan: 49 adultos nadando 40 minutos. ¿Cuantos días? ¿A qué nadaban? ¿Qué edades tenían? ¿Todos en la misma piscina? Si estaban los 40 nadando por ejemplo en una piscina como la mía del polígono...lo de las mutaciones genéticas iba a ser una menudencia al lado de las lesiones producidas por agresiones entre nadadores de distintas velocidades, los ahogamientos por oleaje y los choques en cadena.

Decido dejar a un lado mi parte crítica y seguir “informándome”.

"La investigación relaciona directamente los subproductos de desinfección utilizados en las piscinas (DBPs) con la mutageneidad --la capacidad de causar mutaciones permanentes en el ADN--"

¿Subproductos de desinfección? ¿Qué es eso? Suena a cloro, amoniaco y jabón largarto comprado al por mayor en el mercado negro y que provenga de una partida robada a un camión en la autopista. Da miedo y si además en la misma frase pones “mutageneidad” consigues que empiece a pensar en dejar de nadar y comprarme una bici.

"La natación tiene impactos positivos para la salud, que serían aún mayores en caso de reducir los niveles de los productos químicos utilizados en la desinfección"

Esto lo sabe cualquiera. Si redujeran el cloro, no saldrías apestando y las posibilidades de ligar en los vestuarios serían mayores y además podrías nadar sin gafas anulando el efecto mofeta y lo que es aún mejor no se desintegrarían los bañadores y no te encontrarías un día con que vas en bolas y no te has enterado (mmm..esto probablemente iría en detrimento de la posibilidad de ligar..para el que quiera ligar en la piscina..que no es mi caso..ni muchísimo menos).

"Los DBPs se forman en las piscinas por las reacciones que surgen entre los desinfectantes del agua y la materia orgánica, que aparece de forma natural o bien es producida por los propios nadadores a través del sudor, las células de la piel y la orina".

¡Ajá!..¿Quién decía que leyendo la prensa no se aprende?Que astuto..ya no son "subproductos"..ahora son DBPs..que tien muchísimo más glamur- Resulta que lo no eran algo del mercado negro sino que son las “cositas” se forman cuando tu materia orgánica entra en contacto con el cloro.

Un momento. ¿Qué materia orgánica? ¿Sudor? Yo no sudo nadando.¿Eso es posible? Yo creo que no. ¿Células de la piel? Vale si, todos hemos visto esos documentales sobre los ácaros donde te sacan una imagen aumentada trillones de veces y ves como de tu brazo caen escamas en cascada...pero ¿orina? ¿La gente mea mientras va nadando? Pero... ¿eso no era una leyenda urbana? Ya sé dónde está el nadador que faltaba…se piró cuando vio que los otros 49 eran unos meones…

Cuando ya estoy pensando en mirar precios de bicis en decathlon esta misma tarde….porque lo de mutar porque mi cuerpo entre en contacto con pis de otro la verdad es que no me mola nada..decido seguir leyendo para ya hacerme a la idea de lo horrible que va a ser mi futuro como mutante natatorio y me encuentro con esto…

Los científicos aseguran que para contrastar estos datos son necesarias más investigaciones sobre los efectos de exposiciones de larga duración, y no solo 40 minutos, así como experimentos en los que participen más nadadores.

No doy crédito. Así que el estudio no vale para nada, los propios científicos lo dicen…pero el astuto periodista ( empiezo a sospechar que pagado por alguien del sector de los subproductos de limpieza que no incluyen cloro) ha obviado el dato y lo ha colocado al final, confiando en que solo esforzados lectores como yo llegarían a leer ese pequeño detalle que echa por tierra su bonito titular.

No hay nada como (des)informarse.