lunes, 2 de marzo de 2015

Lecturas encadenadas. Febrero


Ocho libros han caído este mes. Como son muchos, intentaré no aburrir con lo que no me ha gustado y ser entusiásticamente breve con lo que me ha gustado mucho y he disfrutado. 

La historia secreta del Día D,  de Ben Macintyre, préstamo de Juan. Hablamos mucho de la II Guerra Mundial, de espías y de sexo, pero sólo intercambiamos libros sobre los dos primeros temas. 

Este libro aborda una parte de la II Guerra Mundial que no conocía, el papel de los dobles espías captados primero por los alemanes pero que desde el principio trabajaron para Gran Bretaña y los aliados. Ellos fueron los responsables de tramar y tejer la red de desinformación que hizo creer a los alemanes que el desembarco del día D se produciría en Calais y Noruega y no en Normandía. Macintyre cuenta la historia personal de los espías entre los que está la del español, Juan Puyol “Garbo”, que empezó como criador de pollos y acabó de superespía gracias a una imaginación desbordante.

Es un texto muy ameno que se lee casi como una película en blanco y negro de espionaje, con muchos personajes e historietas y también muchísima información. Hay un par de historias sobre las palomas mensajeras espías y los murciélagos bombas que no sé como no han sido contados por Tarantino en una película. 

El nadador en el Mar Secreto , deWilliam Kotzwinkle. Enviado por la editorial Navona en una edición sencilla pero muy chula. Es un libro que se lee y también se siente porque tiene la cubierta de tela rugosa. Es una sensación que ya asociaré a esa historia para siempre. 

Es una novela muy breve, escrita en 1975 y con una parte autobiográfica. Tres días en la vida de una pareja contados desde el momento en que ella rompe aguas. Es una escalada trágica y esforzada, en la que ambos, ella y él tienen que ayudarse mutuamente para alcanzar una cima que no esperan y cuya bajada resulta mucho más dura y difícil de enfrentar. Es una historia con nieve, nieve silenciosa que parece amortiguar la historia de Lasky y Diane, que da la sensación de hacerlos de corcho, de aislarlos del mundo, del lector y al mismo tiempo ese mismo silencio, esa blancura hace destacar trágicamente cada pensamiento y sentimiento que tienen. 

Me ha gustado muchísimo y me recordó a “Una cuestión personal” de Kenzaburo Oé aunque sin ese tono egoísta del japonés. Es una historia preciosa e increíblemente íntima. 

Y la mejor descripción de un parto que he leído jamás está en esta historia. 
“Laski bajo la mirada y en la grieta rasurada y sudorosa vio algo rosado y extraño, un pequeño fragmento de carne que no alcanzó a asimilar. Él sólo reconocía las olas que volvían a llevárselos a un lugar en el que estaban solos en un amor y una tristeza que nadie más podía compartir, solos y cada uno aferrado al otro en aquella realidad para la que tanto se habían preparado y para la que ninguna preparación era suficiente.” 

Una Asombrosa Aventura De Jules, de Emile Bravo. Volumen 2. Comic que le trajeron los Reyes a M que ya había leído el año pasado la primera parte. A ella le encantan las historias de Jules y a mí también. Si tenéis hijos a partir de 8 años, este tebeo es muy buena opción para que lean algo distinto, entretenido, divertido, con historia, personajes chulos y mucho humor. Además, en este volumen, en las tres historietas que lo comppnene se habla del cambio climático, de navegación, de genética e incluso de sectas. No estoy diciendo que un buen tebeo o un buen libro tenga que enseñar algo para ser mejor, pero que esas ideas estén en un tebeo es una buena manera de que los niños vayan conociendo más cosas. Pero que conste que el principal valor de las historietas de Jules es que molan mucho. Ya estáis tardando. 

La Tejonera de Cynan Jones, enviado en este caso por la editorial Turner dentro de su colección “El cuarto de las maravillas”. A pesar, o precisamente por eso, de las grandes frases de su portada (creo que haré un post sobre estas frases) “Un nuevo clásico”, “Absolutamente  magnética”, “Brillante, tensa, dura, inolvidable”, no me ha gustado nada. 

Es una historia que en cierta manera se parece a la de El nadador en el Mar Secreto pero en vez de ser una novela breve muy brillante y conmovedora, ésta es un desastre. Dos historias sin mucho que ver que se supone suceden paralelamente en la campiña galesa. Una de ellas, la de David, tiene sentido e identidad en sí misma y consigue transmitir emoción aunque no sea nada original ni del otro mundo. La otra, la del “hombre corpulento” no aporta nada más que confusión y bastantes datos sobre la caza del tejón, un tema que lamentablemente me interesa cero. El estilo narrativo fluye bastante bien con la historia de David y es una carrera de obstáculos con los tejones. 
“¿Cuántos recordatorios habría?, preguntó. ¿Cuántas veces me pasará esto? Es tan palpable su presencia aquí. Estaba al borde de la ira, pero de pronto lo asaltó un sentimiento triste y desesperado de cálido afecto por ella. Puedo aferrarme a ella, pensó. Dentro de mí puedo aferrarme a ella.” 
El puente de Brooklyn de Henry Miller, enviado también por Navona Editorial. Recoge una serie de relatos, todos con material autobiográfico como casi siempre en Miller, algunos mejores y otros peores pero todos muy reconocibles como suyos. Hacía muchísimo que no leía nada de él pero si lo pienso una serie de casualidades cósmicas hacían inevitable que llegara este libro a mis manos. Me fijé en la correspondencia entre Miller y Durrell que tenía en la estantería y escribí un post, decidí releer El Cuarteto de Alejandría que me encantó… y ahora reencontrarme con Miller. 

Algunos de los relatos, especialmente el primero que es una especie de torrente narrativo de desgracias descritas por un personaje trágico, debieron ser una clara influencia en David Foster Wallace. La misma visión trágica y ácida de la vida, el mismo punto de vista desde arriba y la misma erudición apabullante que no te deja casi respirar. En el relato “Fricandó Astrológico” me he reído a carcajadas y no podía dejar de pensar en “El guateque” de Peter Sellers. 

Miller no es para todo el mundo y creo que los Trópicos hay que leerlos de joven para que causen el efecto que deben, son una especie de pasarela a la vida adulta. Su correspondencia con Durrell, sin embargo, es una maravillosa manera de contemplar la vida de un escritor, entender su madurez, comprender la amistad y asombrarse por una vejez lúcida y plena. 
“Resulta mucho más fácil suicidarse que matar el alma. Queda la duda - con la que ni siquiera el más decidido destructor puede acabar - de que eso sea posible. Si se pudiera llevar a cabo mediante un acto de voluntad no sería necesario invocar el destino, pero precisamente por la voluntad ha dejado de funcionar es po lo que el individuo desesperanzado se rinde a los poderes existentes.” 
Cadáveres en la playa de Ramiro Pinilla. ¡Qué pena me dio su muerte hace unos meses! Este nuevo caso de Samuel Esparza me lo regalaron por mi cumpleaños. Otra vez Getxo, volver a los escenarios que conozco desde que hace cuatro años comencé a leer a Pinilla, otra vez la playa, el Mar Cantábrico y la lluvia. Una lectura agradable, entretenida y que para mi es “casa”. 
“Las playas como simple paisaje, pueden admirarse desde arriba, pero solo se sienten desde abajo”. 
Del Color De La Leche, de Nell Leyshan. Regalo de Nan por mi cumpleaños y comprado y dedicado en Tipos Infames

Tercer libro en el mes con una  historia trágica en un entorno rural. Mary, una jovencita con el pelo “del color de la leche” y una malformación en una pierna, cuenta su vida en una granja paupérrima en Inglaterra en la que vive con sus tres hermanas a las órdenes de un padre despótico que las obliga a trabajar de sol a sol.

No voy a descubrir nada más de la historia. A Nán le deslumbró y a mi me ha parecido normalita sin más. Contada con la candidez de una niña que ahora mismo estaría diagnosticada como Asperger resulta chocante y sorprendente en el estilo y la forma. Todo en minúsculas, en frases cortas, tal  y como escribiría alguien que acaba de aprender a hacerlo. A mí esa forma de escribir me parece en sí misma un artificio para hacer la historia más dramática, intentar hacerla más real. No es una mala novela pero no me ha parecido nada del otro mundo. 

Terminé el mes con El asesino de policías regalo de las princezaz y El Ingeniero por mi cumpleaños. Un nuevo caso del inspector Martin Beck ambientado en esta ocasión en Escania, en Malmo, escenario dónde muchos años después Mankell desarrolla todas las historias de inspector Wallander. Una novela policiaca entretenida aunque me ha parecido más floja que las anteriores. 
“Tampoco le gustaba la idea de la mujer como objeto sexual en una sociedad donde ni siquiera el principio de igual remuneración por igual trabajo se cumplía”. 

¿España 2015? No, Suecia 1973. Y seguimos igual. 

En resumen, corred a leer El nadador de medianoche, conseguid Jules para vuestros churumbeles y vosotros y aprended algo de espías con Ben Mcyntire. 

Con esto y un bizcocho hasta los encadenados de marzo. 

20 comentarios:

Albert dijo...

Muy fan de Garbo y las historias de espías en general. Si tienes curiosidad, hay una peli documental sobre él titulada (obviamente) "Garbo, el espía". Aquí explican, por ejemplo, que Garbo inspiró a Graham Greene para "Nuestro hombre en La Habana". Y otra que es una maravilla es "Operación Ciceron", de Mankiewicz, con James Mason.
Me apunto Jules para los "churumbeles".

NáN dijo...

Tú y yo, Molinos, nos moriremos (bueno, uno antes que la otra) discutiendo del estilo. Del color de la leche, la novela más brutal que he leído en el último año, no tiene un estilo artificioso: es un esfuerzo supremo para escribir (y pensar) como lo hace una granjera que ha aprendido a leer prácticamente sola. La emoción de cómo lo hace es casi tan fuerte como la que produce “Stoner” cuando, escuchando un soneto de Shakespeare, abandona las ciencias agrónomas y se pasa a las “letras”. ¡Por fin estoy leyendo “Stoner”!

De la misma manera que en la pintura, durante siglos, lo que más importaba era el tema y ciertos efectos (después) del aire y la luz, hasta que de pronto unos pintores se pusieron como “tema” el efecto de la luz, y el arte cambió para siempre, en la literatura, desde principios del siglo XX, algunos escritores se enfrentaron al problema del efecto del lenguaje: y han cambiado la literatura para siempre: el planteamiento, nudo y desenlace se desdibujan frente al lenguaje. Están por encima del “tema”.

Defendida mi posición, esta vez solo coincidimos en ese libro. Ni siquiera había leído el de Miller (del que me leí casi todo en el tiempo en el que, como dices, había que leerlo).

Sé que te he fallado con el “Cuarteto de Alejandría”. Pero tengo justificación. Hace ya más de un año que el retinólogo que me trataba una enfermedad del ojo derecho me dijo que la graduación de mis gafas era inadecuada, pero me prohibió arreglarlo hasta que él me diera el alta. ¡Ya estoy esperando las nuevas lentes! Tenían que haber estado el jueves pasado, pero no llegaron. Ando pendiente del teléfono para ver si me llaman hoy, diciéndome que están.

Cuando las tenga, recuperaré el tiempo perdido y releeré “”El cuarteto”... Además de ese libro pequeño de Pinilla que llevabas el otro día.

Los de la IIGM, ni sueñes con que vaya a leerlos.

Amaya Ascunce dijo...

Por dios... Todo lo que lees en un mes. A parte de las recomendaciones de títulos, me vendría bien tus trucos para sacar tiempo leer!

Dani Torregrosa dijo...

A ver si cada mes haces el esfuerzo y te lees uno de divulgación científica. Adoraremos tu reseña ;-)

Besos

Chelo dijo...

Comparto la sugerencia de Amaya Ascunce, porque a mí tampoco me da para tanto. Sólo puedo leer en vacaciones, ¿cómo lo haces?
Cuéntanos.

Anónimo dijo...

A ver si consigo terminar de leer una novela policíaca que tengo a medias desde hace un mes.Yo voy lenta,no como tú que te has leído al menos ocho!El de Garbo mola.
Sonia

molinos dijo...

Albert, el documental lo tengo en la lista de pendientes para verlo. JUles les encantará a tus hijos y también a ti.

Nán, no te permito que me compares la maravilla que es Stoner con el de la leche. Ni por asomo me los compares. Te perdono lo del cuarteto porque sino hubiera sido por nuestro reto fallido (por tu parte) no lo hubiera releído y no me hubiera reencontrado con él. Ya lo harás tú y ya hablaremos de él. De Pinilla tienes que empezar por la trilogía. YA.

Amaya, no sé como lo hago. Leo deprisa pero es que además no se estar sin leer. NO me planteo si leo mucho o poco, sencillamente leo, leo y leo y de repente al final de mes veo que he leído 8 libros y alucino.

Dani, lo estoy intentando. Ahora mismo estoy con el que te recomendé a ti y estoy maravillada. Ya hablaremos de él.

Chelo, como le he dicho a Amaya simplemente lo hago, no sé como. :)

Sonia, el de los espías es super entretenido.

Gracias a todos por comentar.

Galiana dijo...

Yo acabo de leer Stoner gracias a uno de tus encadenados. Y me ha flipado. Aun permanece en mi cabeza. Estoy ahora con "Mil otoños" de David Mitchell (nadaaaa que ver con Stoner...jeje) pero también me esta enganchando. ¿Habéis leído algo de él?. Tus recomendaciones son estupendas. Mil gracias

Tita dijo...

Estoy con Ramiro Pinilla y Aquella edad inolvidable, qué alegría tener tanto de él por leer, y qué pena que ya no vaya a escribir más...y tienes razon, es "casa" siempre se le lee agusto.

Miraré Jules para mi niña grande.
El de la leche me ha recordado a El curioso incidente del perro a media noche, que te recomiendo mucho. Escrito desde la mentalidad de un chico autista, me pareció redondo.

Besos

Pd. no sé si has oido que hoy murió el padre de Enric González, Francisco Gonzalez Ledesma. Me acordé de ti.

molinos dijo...

Gailana, Stoner es maravilloso. Y que sepas que te he confundido con otra Galiana que conozco :)

Tita, Ramiro Pinilla es un placer absoluto. La trilogía es maravillosa pero estos libritos también me están encantando. ¡Justo! El de la leche se parece al Curioso incidente que leí en su momento y que me pareció curioso pero nada del otro mundo tampoco.

Sí, he visto lo del padre de Enric y he leído un artículo maravilloso que Enric escribió sobre él en la Revista Flux y que me ha hecho llegar Nán y te recomiendo mucho.

Voz en off dijo...

Qué mal concepto tienes de nosotros tus lectores, piensas que sólo nos va el marujeo!!!

Anónimo dijo...

ocho libros al mes? ja jajaaaa

Anónimo dijo...

Igual te interesa este libro, When Books Went to War: The Stories that Helped Us Win World War II. Es la historia de la Armed Services Editions, una editorial creada por el Gobierno americano en 1943 para proporcionar libros a sus soldados mientras combatían en la IIGM. Se suministraron 120 millones de libros gratis. Aquí tienes una reseña y más información: http://clionauta.hypotheses.org/15213.
Saludos y gracias por los libros encadenados.

Anónimo dijo...

yo sí leo.


un saludo.

Anónimo dijo...

... yo también he leido Stonner por tus encadenados, yo lo he disfrutado mucho.
Pinilla lo tengo pero aún no me atrevo, necesito estar menos dispersa.
Mi hijo (17)es fan de Jules y todavía los relee de vez en cuando.
Tendré que echarles un ojo!
Nati

Anónimo dijo...

Yo también leo pero no tanto, pierdo mucho tiempo entrando en los blogs y comentando, por ejemplo ahora que podría estar leyendo y mira tú.

molinos dijo...

Voz en off, claro que no. Además el marujeo y la lectura son perfectamente compatibles. :)

Anónimo, la risa ¿a qué viene? ¿Te parecen muchos? ¿pocos? ¿Mentira?

Anónimo de clionauta. Gracias por la recomendación del libro. Conocía la historia y escribí un post sobre ello en Pisando Charcos, una historia alucinante. Gracias por el enlace.

Anónimo lector. Gracias.

Nati, échale un ojo a Jules que te gustará. Es muy entretenido. Y Pinilla cuando tengas ganas para cogerlo con gusto.

Palomamzs, gracias por perder el tiempo comentando aquí. Yo también leería más si no escribiera aquí, ni leyera otros blogs,ni comentara pero hay tiempo para todo.

Gracias

B dijo...

Me apunto los espías. Creo que es el único que puede gustarme. Este año me he embarcado en muchas movidas lectoras y eso me deja menos huecos para libros que elija yo. La balda está petada.

Aprovecho para hablar de mi libro: llevo un tercio de Dorothy. Y muy bien. Teniendo en cuenta que los relatos cortos no suelen gustarme, estoy muy contenta con estos. Los voy intercalando con otros libros, preventivamente, para que no se me haga pesado. Pero muy bien. Podría estar escrito hoy. Muchas gracias.

Aloe dijo...

Yo me estoy acercando a Pinilla, con la trilogía no me he atrevido (todavía), siento que requiere su momento...
Me gustan tus Lecturas encadenadas, a veces no leo el post inmediatamente, lo reservo para cuando tengo tiempo y cojo papel para anotar -alguna- de tus recomendaciones.

saludos y gracias!!

Carmen dijo...

Muchas gracias. He regalado a mi mayor los dos Jules por su cumpleaños (12) y ahí anda, partido de la risa, con la linterna, leyendo sin parar. Pensaba que le iban a gustar más a mediano, que está esperando turno pero, en todo caso, un gran éxito.

Carmen